Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
794 Oncología ginecológica SECCIÓ N 4 labiocrurales (fi g. 38-25, pág. 941). El cáncer vulvar puede abarcar cualquiera de las estructuras externas mencionadas. La porción interna de la vulva se divide en triángulos uroge- nitales superfi cial y profundo. El espacio superfi cial del triángulo urogenital es el compartimiento circunscrito que está en la aponeu- rosis perineal superfi cial o de Colles, y la aponeurosis perineal pro- funda o membrana perineal. Dentro del espacio mencionado están en cada lado los músculos isquiocavernosos, en sentido interno, los músculos bulbocavernosos, y en sentido inferior el transverso del perineo. En sentido profundo a cada músculo bulbocavernoso está un bulbo vestibular y las raíces del clítoris están en plano profundo en relación con los músculos isquiocavernosos, como se ilustra en la fi gura 38-26 (pág. 942). Durante la vulvectomía radical se prolonga la disección hasta el plano profundo de la membrana perineal; como consecuencia, durante la extirpación tumoral se extrae el contenido del triángulo urogenital superfi cial que está por debajo de la masa anormal. ■ Linfáticos vulvares De forma típica, los linfáticos de la vulva y el tercio distal de la vagina transportan linfa al grupo de ganglios inguinales superfi - ciales (fi g. 38-29 pág. 945). De ese sitio, cursan a través de los linfáticos inguinales (femorales) profundos y el ganglio de Cloquet a grupos de ganglios pélvicos. El ganglio recién mencionado es la estructura linfática femoral profunda más superior. Como dato importante, el drenaje linfático directo a ganglios femorales pro- fundos también se hace desde el clítoris y la mitad superior de los labios (Way, 1948). Los linfáticos vulvares muestran decusación a nivel del monte de Venus y la zona posterior de la horquilla. La distribución linfática de la vulva demostró que los linfáticos no cruzan los pliegues labiocrurales (Morley, 1976), y como resultado, son raras las metástasis a ganglios contralaterales, si no hay este tipo de masas cancerosas en la ingle ipsolateral. También en contadas ocasiones el tumor linfático se distribuye dentro de los linfáticos de la piel antes de llegar a los ganglios inguinales superfi ciales, razón por la cual se le denomina metástasis en tránsito. Los ganglios inguinales superfi ciales están dentro del triángulo femoral formado por el ligamento inguinal, el borde interno del sartorio y el borde lateral del músculo aductor largo (fi g. 38-29, pág. 945). Los ganglios profundos se localizan en la cara interna de la vena femoral debajo de los bordes del orifi cio de la vena safena interna (fosa oval). De manera típica, la linfadenectomía inguino- crural denota la extracción de los ganglios linfáticos inguinales superfi ciales y profundos (Levenback, 1996). ■ Riego sanguíneo de la vulva La circulación de la vulva se hace más bien a través de la arte- ria pudenda interna que es una rama de la arteria iliaca interna y que acompaña al nervio pudendo (fi g. 38-28, pág. 944). La vena pudenda interna recibe tributarias que corresponden a las ramas de la arteria de igual nombre. Los conocimientos de la anatomía de los vasos permiten la realización de técnicas más hemostásicas y una mejor visibilidad. B A * * FIGURA 31-1. Carcinoma epidermoide de la vulva. A. Imagen con poca amplificación. El epitelio superficial presenta la displasia epi- dermoide de alto grado. También se identifican nidos de carcinoma invasor epidermoide (flecha). Se detecta infiltrado inflamatorio crónico “intenso” como suele ocurrir con el carcinoma epidermoide invasor. Segmentos del epitelio superficial se extienden en plano profundo y son seccionados tangencialmente (asterisco) y da la impresión falsa de invasión tumoral en tales sitios. B. El tumor presenta los clásicos signos diagnósticos de carcinoma epidermoide invasor que incluyen un aspecto escamoide, puentes intercelulares y perlas de queratina eosi- nófila brillante (flechas). Los nidos de tumor invasor están rodeados de inflamación crónica. (Fotografías por cortesía del Dr. Kelley Carrick.) CUADRO 31-1. Subtipos histológicos del cáncer de la vulva Carcinomas vulvares Carcinoma epidermoide Adenocarcinoma Carcinoma de la glándula de Bartholin Adenocarcinoma Carcinoma pavimentoso Carcinoma transicional Enfermedad de Paget de la vulva Tumores de células de Merkel Carcinoma verrugoso Carcinoma basocelular Melanoma maligno vulvar Sarcoma vulvar Leiomiosarcoma Histiocitoma fibroso maligno Sarcoma epitelial Tumor rabdoide maligno Metástasis de cánceres en la vulva Schwannoma maligno Tumores del saco alantoideo 31_Chapter_31_Hoffman_4R.indd 79431_Chapter_31_Hoffman_4R.indd 794 06/09/13 21:5506/09/13 21:55
Compartir