Logo Studenta

GINECOLOGIA (903)

¡Estudia con miles de materiales!

Vista previa del material en texto

882 Oncología ginecológica
SECCIÓ
N
 4
Histogénesis
Las células germinales primitivas migran de la pared del saco vite-
lino a la cresta gonadal (fi g. 18-1, pág. 482). Como resultado, la 
mayor parte de los tumores de células germinales se origina en la 
gónada. En casos raros, dichas tumoraciones se desarrollan en sitios 
ajenos a las gónadas, como el sistema nervioso central, el medias-
tino o la región retroperitoneal (Hsu, 2002).
Los tumores ováricos de células germinales tienen un patrón 
de diferenciación variable (fig. 36-3). Los disgerminomas son 
neoplasias primitivas que no tienen potencial para diferenciación 
adicional. Los carcinomas embrionarios están formados por células 
multipotenciales capaces de diferenciarse aún más. Dichas lesiones 
son precursoras de varios tipos adicionales de tumores de células 
germinales extraembrionarios (neoplasias del saco vitelino y corio-
carcinomas) o embrionarios (teratomas). El proceso de diferen-
ciación es dinámico y las tumoraciones resultantes pueden estar 
formadas por distintos elementos en varias etapas de desarrollo 
(Teilum, 1965).
Disgerminoma
Debido a que su incidencia ha disminuido en casi 30% en las últi-
mas décadas, hoy en día los disgerminomas sólo representan cerca 
de un tercio de todos los tumores ováricos malignos de células 
germinales (Chan, 2008; Smith, 2006). De las neoplasias de esta 
categoría, los disgerminomas son los que se detectan con mayor 
frecuencia durante el embarazo. Se cree que es una coincidencia 
relacionada con la edad y no alguna característica particular de la 
gestación.
Cinco por ciento de los disgerminomas se descubre en pacientes 
con fenotipo femenino y con anomalías cariotípicas en las góna-
das, en particular con la presencia de un cromosoma Y normal 
o anormal (Morimura, 1998). A menudo, este grupo incluye a 
pacientes con mosaicismo del síndrome de Turner (45,X/46,XY), 
y síndrome de Swyer (46,XY, disgenesia gonadal pura) (cap. 16, 
pág. 444). Las gónadas disgenésicas de estas personas a menudo 
contienen gonadoblastomas, que son neoplasias benignas de célu-
las germinales. Dichos tumores pueden degenerarse o sufrir trans-
formación maligna, casi siempre a disgerminomas. Como cerca de 
40% de los gonadoblastomas en dichas pacientes sufre transforma-
ción maligna, deben extirparse ambos ovarios (Hoepff ner, 2005; 
Pena-Alonso, 2005).
Los disgerminomas son los únicos tumores malignos de células 
germinales con un índice signifi cativo de compromiso ovárico bila-
teral, de 15 a 20%. La mitad de las pacientes con lesiones en ambos 
lados tiene compromiso macroscópico, mientras que en el otro 
50% sólo se detecta el cáncer mediante microscopia. El 5% de las 
mujeres tiene concentraciones altas de hCG a causa de la presencia 
de sincitiotrofoblastos intercalados. De igual manera, la deshidro-
genasa láctica (LDH, lactate dehydrogenase) sérica y las isoenzimas 
LDH-1 y LDH-2 también son útiles para la vigilancia de pacientes 
y detectar casos de recurrencia (Pressley, 1992; Schwartz, 1988).
Los disgerminomas tienen una apariencia macroscópica varia-
ble, pero en general son tumoraciones sólidas, lobuladas y de color 
rosa, bronceado o crema (fig. 36-4). En el nivel microscópico 
se observa una proliferación monótona de grandes células claras, 
redondeadas, poliédricas, ricas en glucógeno citoplásmico y que 
contienen núcleos centrales con uno o pocos nucléolos prominen-
tes (fig. 36-5). Las células tumorales se parecen mucho a las células 
germinales primordiales embrionarias y en el estudio histológico 
son idénticas a las de los seminomas testiculares.
El tratamiento estándar de los disgerminomas casi siempre 
incluye un procedimiento quirúrgico que conserva la fertilidad 
con salpingooforectomía unilateral (USO, unilateral salpingo-oofo-
rectomy). En algunas circunstancias atenuantes puede considerarse 
la cistectomía ovárica (Vicus, 2010). La estadifi cación quirúrgica 
casi siempre se extrapola del cáncer ovárico epitelial (cap. 35, 
pág. 870), pero la linfadenectomía tiene gran importancia. De los 
tumores malignos de células germinales, el disgerminoma tiene 
la tasa más alta de metástasis ganglionares, cercana al 25 a 30% 
(Kumar, 2008). Aunque las desviaciones de la estadifi cación no 
afectan la supervivencia, determinar de manera precisa la fase de 
la enfermedad permite aplicar una estrategia de observación segura 
para los tumores en etapa IA (Billmire, 2004; Palenzuela, 2008).
La conservación del ovario contralateral da lugar a un “dis-
germinoma recurrente” en 5 a 10% de las gónadas conservadas 
durante los dos años siguientes. En muchos casos, este hallazgo 
se considera refl ejo de la tasa elevada de enfermedad oculta en el 
ovario remanente, más que una recurrencia verdadera. En realidad, 
al menos 75% de las recurrencias se desarrolla en el primer año del 
diagnóstico (Vicus, 2010). Otros sitios frecuentes de reincidencia 
Célula germinal
Disgerminoma Carcinoma
embrionario
Estructuras
embrionarias
Coriocarcinoma
no gestacional
Tumor del saco vitelino
Estructuras
extraembrionarias
Teratoma
FIGURA 36-3. Vía de diferenciación de los tumores de células ger-
minales.
FIGURA 36-4. Fotografía transoperatoria de un disgerminoma.
36_Chapter_36_Hoffman_4R.indd 88236_Chapter_36_Hoffman_4R.indd 882 06/09/13 22:0206/09/13 22:02

Continuar navegando

Materiales relacionados