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Cuestiones ambientales que se perciben como problemas

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Medio Ambiente y Comportamiento Humano 
2006, 7(2), 1-19. 
ISSN 1576-6462 
©Editorial Resma, 2006 
 
Medio Ambient. Comport. Hum.,2006 1 
 
 
Cuestiones ambientales que se perciben como problem as1 
Juan Ignac io Aragonés 2* , Verónica Sevillano * , Be atriz Co rté s * * , María 
Amérigo * * 
* Universidad Complutense de Madrid. 
* * Universidad de Castilla-La Mancha. 
Resum en 
Los estudios sobre preocupac ión ambiental asumen como 
supuesto que las personas perc iben problemas ambientale s, y 
tratan de conocer las variables intermedias que modulan e l 
comportamiento proambie ntal, s in ate nde r a las dife re nte s 
e valuac io ne s que se hace n so bre una gama tan variada de 
problemas de e sta índo le . En la presente investigac ión se propone 
e l conce pto de proble ma ambie ntal como palabra inducto ra para 
identificar lo s temas sustantivos que las pe rso nas aso c ian a dicha 
cuestión, e s de c ir, se trata de ave riguar cuále s so n lo s pro ble mas 
ambie ntale s que las pe rso nas pe rc ibe n, ate ndie ndo a la 
sensibilidad que diversas variables soc iodemográficas tales como 
e dad, gé ne ro , ide o logía po lítica e inte nc ió n de c o nduc ta 
proambiental tienen sobre la percepc ión de los problemas. Para 
e llo se ha trabajado co n do s mue stras, una de 2 3 9 e studiante s y 
o tra de 2 0 6 adulto s urbano s, y co mo té cnica se dise ñó un 
cue stio nario auto administrado . El anális is de co nte nido de las 
respuestas ha permitido e stable cer una lista de 3 0 problemas 
ambie ntale s que se han o rganizado e n lo s do minio s bió tico , 
abió tico y de ac tividad humana. 
Palabras clave: cuestiones ambientales, problemas ambientales, 
preocupac ion ambiental. 
The perception of environmental issues as problems 
Abstract 
One common implic it assumption in environmental concern 
studie s is that pe o ple pe rce ive e nvironme ntal proble ms and so 
re searches try to understand se condary variable s that affe c t 
proenvironmental behavio ur, witho ut atte nding to po ssible 
 
1 Este trabajo se encuentra vinculado al proyecto BS02002 -0 3 4 5 9 financiado por la 
DGI del MCyT. 
2 Facultad de Psicología. Universidad Complutense de Madrid. 28223 Madrid. E-mail: 
jiaragones@ psi.ucm.es 
 
Cuestiones ambientales que se perciben como problemas 
2 Medio Ambient. Comport. Hum.,2006 
 
diffe re nt e valuations about such a kind o f proble ms. This study 
explores the assoc iations that individuals re call when asked to 
think abo ut “e nviro nme ntal pro ble ms” in ge ne ral and co nside rs 
the re lationship o f diffe rent substantive issues with soc io -
de mo graphic variable s. The re we re two sample s, 2 3 9 
undergraduate students and 2 0 6 c itizens general population. 
Partic ipants have to fill in an autoadministered. Content analysis o f 
the responses outlines a list o f 3 0 environmental problems which 
have been categorized in 3 main fie lds: Bio tics, Non bio tics and 
human activity. 
Keywords : environmental questions, environmental problems 
concern. 
Introducción 
Gran parte de la inve stigac ión re lac ionada con e l e studio de la 
preocupación ambiental se ha realizado re curriendo a métodos e scalares 
que tratan de e stable ce r me didas de una gran varie dad de variable s 
mediadoras de l comportamiento proambiental, entre e llas destacan: las 
actitudes proambientales (Aragonés y Amérigo , 1 9 9 1 ), las cre e nc ias 
acerca de cómo se conc ibe e l desarro llo soc ioeconómico (Dunlap y Van 
Lie re , 1 9 7 8 ), lo s valo res que justifican lo s comportamientos (Ste rn y 
Die tz, 1 9 9 4 )y las fo rmas de entender la re lac ión de l ser humano con la 
naturale za (Tho mpso n y Barto n, 1 9 9 4 ). 
La mayo ría de lo s re curso s me to do ló gico s usado s po r e stas 
aproximac ione s se han dise ñado partie ndo de un discurso a prio ri de 
c ó mo se e ntie nde la pro ble mática ambie ntal; e n é l se inc luye n 
dime nsio ne s co nte xtuale s de l aquí y e l aho ra, co mo pue de n se r las 
fo rmas mayoritarias o minoritarias de entender e l desarro llo de la 
soc iedad (Dunlap, Van Lier, Mertig y Jones 2 0 0 0 ) o visiones más 
trascendentes como son los modos en que las re ligiones entienden la 
re lac ió n e ntre e l se r humano y la Naturale za (White , 1 9 6 7 y Weaver 
2 0 0 2 ). En o tros casos, se ha re currido a la e strategia de pedir que las 
personas evalúen las consecuenc ias de lo s problemas ambientale s que 
le s pre ocupan más tras induc ir distintos e stados e moc ionale s (Shultz, 
2 0 0 0 ) ante dife rentes situac iones ambie ntale s pre se ntadas o suge ridas. 
En todos los casos se pide a las personas que evalúen algo sobre un 
obje to (bien una e tique ta, un paisaje , una situac ión so c ial o un re curso 
natural) que , supuestamente , e l re spondiente tiene que entender como 
Juan Ignacio Aragonés, Verónica Sevillano, Beatriz Cortés, María Amérigo 
Medio Ambient. Comport. Hum.,2006 3 
 
problema ambie ntal, s in co no ce rse e l pe so que e sa re pre se ntac ió n 
co gnitiva tie ne para la pe rso na ni qué e valuac ió n le me re ce e n sí misma 
la re pre se ntac ió n, más allá de la cue stió n que se le fo rmula so bre e lla. 
En muchas o casio ne s, lo s o bje to s a lo s que se ha re currido para que 
e l re spondie nte e mita su re spue sta han sido proble mas ambie ntale s 
genéricos – conservac ión, contaminac ión, poblac ión, e tc . – que so n 
fác ile s de e nco ntrar e n lo s info rme s publicado s po r las age nc ias 
nac ionale s e inte rnac ionale s sobre e l me dio ambie nte . Sin e mbargo , 
e studio s ya c lásico s, co mo e l de Van Lie re y Dunlap (1 9 8 1 ), po ne n de 
manifie sto la dificultad de que las personas se muestren preocupadas en 
igual intensidad por varios dominios, e inc luso advie rten de que e l 
análisis de variable s so c iodemo gráficas pue de insinuar hac ia do nde se 
produce n lo s se sgos de e valuac ión de lo s dife re nte s te mas pre se ntados. 
En e l mismo trabajo , y al sugerir líneas futuras de investigac ión, e stos 
autores re comiendan considerar e l discurrir de l tiempo como fac to r 
condic ionante de la e me rge nc ia de nue vas dime nsione s sustantivas de 
preocupac ión ambiental. A lo que cabría añadir las implicac iones de l 
avance de l propio conoc imiento c ientífico y lo s comple jo s procesos que 
se movilizan en su comunicac ión al público (Horlick-Jo ne s, Sime y 
Pidge o n, 2 0 0 3 ). 
Lo s pro ble mas ambie ntale s instituido s sue le n apare ce n e n listado s de 
libros o te xtos e n lo s que e l ce ntro de inte ré s e s la conse rvac ión de l 
me dio ambie nte (vé anse , co mo e je mplo s, de Castro , 1 9 9 3 y Co rral-
Ve rdugo , 2 0 0 1 ). Por lo ge ne ral, tale s e nume rac io ne s so n re sultado de l 
discurso so c ial consensuado por lo s po lítico s y por lo s té cnicos que 
ge stio nan e l me dio ambie nte ; po r tanto , se pro duce una gran 
co inc idenc ia entre unos y o tros, y sue len corresponderse con los de las 
organizac io ne s que ge stio nan e l me dio ambie nte . 
En o tras o casiones, lo s propios o rganismos inte rnac ionales, ante las 
dificultade s de de finir o pe rativame nte qué e s un pro ble ma ambie ntal, 
tratan de e stable ce r listado s co nse nsuado s po r e xpe rto s [vé anse lo s 
c as o s de AEMA (Age nc ia Europe a de Me dio Ambie nte , 1 9 9 5 ) con e l 
informe Dobríš - Stanne rs y Bourde au (1 9 9 8 )- y de PNUMA (Pro grama de 
Nac io ne s Unidas para e l Me dio Ambie nte , 1 9 9 9 ] que re sultan se r muy 
parec idos a lo s o fre c idos en lo s repertorios anterio res. Pero , en to do s lo s 
casos, e s difíc il encontrar una lógica que cobije la to talidad de l listado ; 
algunas veces aparecen causas de l de terio ro como problema y o tras, sus 
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e fe c to s. Así, e s fác il e ncontrar junto a proble mas ambie ntale s muy 
genéricos, o tros muy espec íficos; a veces se habla de l antecedente (Usos 
de CFC), o tras de l daño (deterioro de la capa de Ozono), o inc luso de la 
so luc ió n (Pro hibic ió n de mo no fluro carbo no s). 
Un pano rama co mo é ste ha impe dido e stable ce r c rite rio s e stable s 
que pe rmitan de finir qué se e ntie nde po r pro ble ma ambie ntal y fijar, po r 
tanto , una taxo no mía riguro sa que inc luya cualquie r e ve nto que se a 
de finido como tal. El propio info rme sobre medio ambiente en Europa 
(Stanne rs y Bo urde au, 1 9 9 8 ) hace no tar que e l pro ble ma ambie ntal e s 
una construcc ión soc ial en e l que tienen algo que dec ir lo po lítico , los 
valo res é ticos y soc iales, y lo s múltiples intereses personales y co le c tivos 
de cada contexto . 
A mo do de s ínte sis de lo c o me ntado hasta e ste mo me nto , se apre c ian 
dos cuestiones de naturaleza difere nte pe ro que conve rge n e n e l e studio 
de l comportamiento proambiental. Por un lado , la problemática 
ambiental fo rma parte de los contenidos de los pro toco los con los que se 
inve stigan las variable s inte rvinie nte s de l co mpo rtamie nto pro ambie ntal. 
Y, por otro , lo s pro ble mas ambie ntale s e stán so me tido s a c rite rio s de 
carác te r co nte xtual que hace n que , e n c ie rtas situac io ne s, se pe rc iban 
como tale s, mientras que , en o tras, e l mismo evento no alcanza e sta 
cate go ría (Co rté s, Arago né s, Amé rigo y Se villano , 2 0 0 2 ). 
Teniendo en cuenta dichas considerac iones, la presente investigac ión 
es un primer paso en una propuesta de carácter psicosoc ial cuyo obje tivo 
e s analizar e l co nce pto de pro ble ma ambie ntal que las pe rso nas 
mane jan en su vida diaria; se distanc ia, así, de l discurso acadé mico -
c ientífico tradic ional que o frece una lista de problemas ambientales 
o rde nado s e n func ió n de su magnitud e irre ve rsibilidad, tal y c o mo 
señalan Gardner y Stern (1 9 9 6 ). 
En este caso , se trata de obtener una lista de los problemas 
ambientales de no tados por dife re nte s grupos de la poblac ión urbana. 
Una vez establec ido un listado único – que se supone compartido en 
grados diversos - po r lo s dife re nte s grupo s se tratará de e stable ce r 
categorías empíricas que permitan conocer los ámbitos o dominios en los 
que se pueden c lasifican lo s problemas ambientales perc ibidos. Así 
mismo , se e studiará en qué medida c ie rtas variables de carácte r 
so c iode mográfico y las re lac ionadas con la inte nc ión de conducta 
pro ambie ntal influye n a la ho ra de e nume rar pro ble mas ambie ntale s . 
Juan Ignacio Aragonés, Verónica Sevillano, Beatriz Cortés, María Amérigo 
Medio Ambient. Comport. Hum.,2006 5 
 
Para alcanzar estos obje tivos se hace necesario re currir a dife rentes 
co le c tivos soc iale s, en distintos contextos urbanos, para captar sus 
respectivas homogene idades y dife renc ias y posibilitar, asimismo , c ie rta 
generalizac ión de los resultado s que pe rmita asumir las cate go rizac io ne s 
en investigac iones poste rio res. 
Método 
Participantes 
En e l conjunto de la investigac ión se re currió a dos grupos dife rentes: 
uno de e llo s e staba fo rmado por estudiantes universitarios y, e l segundo , 
por una mue stra inc ide ntal de po blac ió n urbana. Ambo s co le c tivo s so n 
lo s más habituale s e n las inve stigac io ne s so bre pre o cupac ió n ambie ntal. 
El primer grupo quedó integrado por 2 3 9 estudiantes con una edad M 
= 2 0 ,2 1 y DT = 1 ,5 4 9 , de lo s cuale s 1 0 3 pe rte ne c ían a la Unive rs idad 
Complutense y residían en Madrid. El resto e studiaba en la Universidad 
de Castilla-La Mancha; de e llo s 8 7 vivían en Talavera de la Re ina y 4 9 en 
la c iudad de To ledo . La distribuc ión de la variable género en la muestra 
es muy desigual, tal y como se re fle ja en la tabla 1 . Se observan 
dife re nc ias significativas e ntre lo s tre s grupos conside rados (χ2=1 6 ,2 0 8 , 
gl=2 ; p<0 ,0 1 ); s in e mbargo , no e xiste n dife re nc ias significativas co n 
respecto a las variables edad e ideo logía po lítica autoatribuida. Por tanto , 
pue de conside rarse que las tre s submue stras son similare s e n las 
variables soc iodemográficas – nive l de instrucc ión, edad e ideo logía 
po lítica- re lac ionadas en la lite ratura con la preocupac ión ambiental, a 
pe sar de las dife re nc ias e n la variable gé ne ro . 
 
Tabla 1. Distribución en porcentajes de estudiantes según la procedencia y el género 
 
 
Toledo 
(n=49) 
Talavera de la 
Reina 
(n=87) 
Madrid 
(n=103) 
Total 
N=239 
 
38,8 
 
10,3 
 
18,4 
 
19,7 
Género 
Varones 
Mujeres 61,2 89,7 81,6 80,3 
 
 
Los partic ipantes co rrespo ndie nte s a la po blac ió n ge ne ral urbana –
segundo grupo - fueron 2 0 6 personas, distribuidos según la variable 
Cuestiones ambientales que se perciben como problemas 
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género en un 5 0 ,5 % de varones y 4 9 ,5 de mujeres; las edades estaban 
c o mpre ndidas e ntre 1 9 y 6 5 año s (M= 3 9 ,7 año s y DT= 1 2 ,5 2 ), y to do s 
e llos eran habitante s de la c iudad de Madrid. 
Procedimiento 
To do s lo s partic ipante s de bían cumplime ntar un cue stio nario de 
fo rma autoadministrada en e l que , junto con las variables 
soc iodemográficas de residenc ia, edad, género e ideo logía po lítica, se le s 
pe día que e nume raran aque llo s pro ble mas ambie ntale s que se le s 
venían a la mente ; siendo 1 2 e l número máximo de cuestiones que 
podían menc ionar. Además, se le s so lic itaba que fac ilitaran e l número de 
te lé fo no pe rso nal, s i que rían partic ipar e n una futura campaña so bre 
ac titude s proambie ntale s y comportamie nto e co lógico que se iba a 
emprender en la universidad. 
En e l caso de la muestra de e studiantes, e l cuestionario se 
administraba de fo rma co le c tiva, en e l aula. Los partic ipantes de l 
segundo grupo lo cumplimentaban de mo do individualizado . En e ste 
último caso , un e ntre vistador e ntre nado de bía abordar a un po te nc ial 
partic ipante en cualquier situac ión que le permitie ra obtener una buena 
disposic ión para cumplimentar e l instrumento (sentado en una te rraza 
con amigos, e tc .). Con e l fin de conseguir una muestra lo más 
he te ro gé ne a po sible , se re currió a do s e ntre vistado re s e xtraño s e ntre sí, 
y se e stable c ie ro n, e n e l dise ño de l trabajo de campo , unas cuo tas de 
edad y género . 
Resultados 
La ideo logía po lítica autoatribuida, conside rada co mo un co ntinuo (1 
izquie rda y 5 de re cha) se distribuía e n ambas mue stras de fo rma 
dife rente . En e l caso de lo s e studiantes, se de te c ta un sesgo favorable 
hac ia las po sic io ne s de izquie rda, mie ntras que lo s partic ipante s de la 
muestra de la poblac ión ge ne ral se distribuye n más homogé ne ame nte 
(lige rame nte supe rio r al 2 0 % e n cada punto , e xce pto e n po sic ió n de re cha 
e n la que se ide ntificaba un 6 ,3 %). Un re sultado , cuando me no s curio so , 
e s que e l 2 1 ,3 % de los estudiantes no respondió al ítem correspon die nte 
a la ideo logía po lítica, siendo todos menos uno pertenec ientes a las 
muestras de los estudiantes de Castilla– La Mancha; sin embargo , en la 
muestrade la poblac ión general só lo 3 partic ipantes de jaron de 
Juan Ignacio Aragonés, Verónica Sevillano, Beatriz Cortés, María Amérigo 
Medio Ambient. Comport. Hum.,2006 7 
 
contestar. Finalme nte , cabe se ñalar que un 2 2 ,6 % de lo s e studiante s 
mo stró su inte ré s e n partic ipar e n una campaña so bre ac titude s 
proambientales, señalando así su intenc ión de realizar una conducta 
eco lógica, mientras que só lo lo hizo e l 1 4 % de la muestra de la poblac ión 
ge ne ral. 
Con respecto a la enumeración de cuestiones que a juic io de los 
suje tos constituyen problemas ambientale s se obtuvie ron 2 7 8 8 
respuestas. Tras una le ctura de tenida de las mismas, una investigadora 
de l equipo redujo su número , realizando una agrupac ión con aque llo s 
problemas que tenían un significado idéntico pero dife rían en cuanto a la 
utilizac ió n de artículo s, núme ro o e rro re s al sustantivar dife re nte s 
fenómenos. 
Tras e sta prime ra de purac ió n, se plante ó una e strate gia de 
agrupac ión de e lementos basada en lo s crite rios siguientes: a) Las 
e tique tas se le cc ionadas para designar lo s dife rentes problemas 
ambie ntale s fue ron aque llas que , pe rte ne c ie ndo al mismo campo 
semántico , e ran menc ionadas por lo s partic ipantes con mayor 
fre cue nc ia; b) Cuando un pro ble ma ambie ntal me nc io nado se re fe ría a 
do s aspe c to s dife re nte s se re co gía e l c itado e n prime r lugar; c ) Se 
distinguió e ntre tipo s de co ntaminac ió n y e l c o nce pto ge né rico 
”co ntaminac ió n”, dada su alta fre cue nc ia de aparic ió n. Para de limitar 
qué problemas correspondían a qué tipo de contaminac ión se tuvo en 
cuenta qué e lementos (pac iente o agente de contaminac ión) señalaban 
los suje tos. Así, por e jemplo , “contaminac ión de l agua” abarcaba además 
de s í misma “agua co ntaminada”, “agua tó xica ve rtida e n lo s río s” , 
“co ntaminac ió n de lo s río s”,” co ntaminac ió n de lo s río s y lo s 
pantanos” ,”contaminac ión de mares y o céanos por parte de productos 
tóxico s” , e tc . d) Se ge ne ró una cate goría “o tros” con aque llo s proble mas 
que fueron menc ionados por un 5 % de lo s partic ipantes de las dos 
mue stras conside rado s co njuntame nte . Co mo re sultado de e ste pro ce so 
se e stable c ie ron 3 0 cate gorías de proble mas ambie ntale s, más la 
categoría “o tros”. 
Una vez realizada la categorizac ión de todos los problemas, se analizó 
si lo s partic ipantes habían menc ionado varios problemas de la misma 
cate go ría a lo largo de sus dife re nte s re spue stas. Es de c ir, se o bse rvó si 
un partic ipante había me nc io nado , po r e je mplo : “co ntaminac ió n de l 
agua” y “co ntaminac ió n de lo s río s” , dado que ambo s pro ble mas habían 
Cuestiones ambientales que se perciben como problemas 
8 Medio Ambient. Comport. Hum.,2006 
 
s ido inc luidos e n la misma cate go ría, e sto e s , “co ntaminac ió n de l agua”. 
Los re sultados de e ste análisis muestran que e l 1 9 ,3 2 % repe tía alguna 
cate go ría y, e n la mayo ría de lo s caso s, só lo apare c ía e sta re pe tic ió n e n 
una o casió n a lo largo de las re spue stas que daba e l partic ipante . 
Se constató que , cuando la re pe tic ión apare c ía, é sta se produc ía 
e spec ialmente en las categorías re lac ionadas con la contaminac ión de l 
agua, contaminac ión atmosfé rica y la categoría genérica de 
contaminac ión. De tal fo rma, que si se obviaban estas menciones e l 
po rce ntaje de partic ipante s que re pe tía alguna cate goría e ra de l 1 1 ,4 6 %. 
Estos resultados permitie ron valorar a las categorías como sufic ientes 
para re co no ce r lo s ámbito s so bre lo s que se de fine n lo s pro ble mas 
ambientales. Los porcentajes de repe tic iones son muy similares cuando 
se observan por separado las dos muestras; para lo s e studiantes e l 
primer porcentaje e s de 1 9 ,6 9 % y e l segundo 1 1 ,6 9 % y, para la segunda 
mue stra, lo s porce ntaje s son 1 8 ,9 3 % y 1 1 ,1 6 %, re spe c tivame nte . Por 
tanto , la lista original de 2 7 8 8 re spue stas que dó re duc ida a 2 5 2 9 , al 
considerar só lo una vez lo s problemas que habían sido atribuidos en una 
misma cate go ría, po r cada partic ipante . 
El núme ro to tal de re spue stas re gistradas para la mue stra de 
e studiante s fue de 1 6 1 6 , lo que supuso una M = 6 ,7 pro ble mas po r 
partic ipante y una DT = 2 ,5 8 ; no o bse rvándo se tras e l ANOVA 
co rre spo ndie nte dife re nc ias s ignificativas e n las distribuc io ne s o riginadas 
por las variables procedenc ia, género ni por su inte racc ión. Sin embargo , 
sí se producen dife re nc ias significativas e n e l núme ro de pro ble mas 
mencionados (t=2 ,9 4 ; gl=2 3 7 , p<0 ,0 1 ) e ntre lo s que de jan su te lé fo no 
para partic ipar e n la campaña so bre la pro te c c ió n de l me dio ambie nte 
(n=5 4 , M=7 ,2 2 ; DT=2 ,3 0 ) y lo s que no lo de jan (n=1 8 5 , M=6 ,0 8 ; 
DT=2 ,5 5 ). 
Por o tra parte , e l número de respuestas registradas para la muestra 
de la poblac ión general fue de 1 1 7 2 , lo que supuso una M = 5 ,6 9 
pro ble mas po r partic ipante y una DS = 2 ,7 4 ; no o bse rvándo se dife re nc ias 
significativas e ntre hombre s y muje re s. Para ve r e n qué me dida las 
variable s de e dad (1 9 -3 2 , 3 3 -4 5 y más de 4 5 año s), ide o lo gía po lític a e 
inte nc ió n de re alizar una co nducta e co ló gica (de jar e l te lé fo no ) influían 
en la enumerac ión de lo s problemas ambientales, se realizó un análisis 
de varianza 2 x3 x2 , cuyos resultados muestran que la variable intenc ión 
de conducta e s la que da o rige n a dife re nc ias significativas e n la 
Juan Ignacio Aragonés, Verónica Sevillano, Beatriz Cortés, María Amérigo 
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producc ión de respuestas (F=1 2 ,8 9 4 , gl=1 p<0 ,0 0 1 ) y la inte racc ión 
ide o lo gía po lítica e inte nc ió n de co nducta (F=6 ,3 9 ,gl=1 , p<0 ,0 5 ). 
Cuando se comparan las producc iones medias de ambas muestras se 
observa que hay dife renc ias significativas (t=4 ,2 3 9 gl=4 4 3 p<0 ,0 0 1 ), 
re sultando mayor la de e studiantes que la de poblac ión general, en un 
punto aproximadame nte . 
Distribución de la enumeración de pr oblemas ambientales en las 
muestras estudiadas 
La distribuc ión de los 3 0 tipos de problemas ambientales en las dos 
mue stras e studiadas apare ce e n la tabla 2 ; e n e lla se pue de o bse rvar 
que los estudiantes no só lo han mencionado con mayor frecuenc ia 2 2 de 
lo s pro ble mas, s ino que e n 1 0 de e llo s las dife re nc ias han re sultado 
significativas tras la aplicac ión de χ2. No obstante , la co rre lac ión de 
Pearson entre las distribuc iones de lo s porcentajes de ambas muestras 
e s alta (r=0 ,7 3 2 ; p<=.0 0 0 1 ) lo que indica que la se c ue nc ia de l disc urso 
e s ape nas alte rada e n ambas mue stras. 
En la muestra de estudiantes se o bse rva que más de un 2 5 % 
menc ionan sie te problemas ambientale s, de lo s cuales alcanzan 
porcentajes superio res al 4 0 % los re lac ionados con las distintas fo rmas 
de co ntaminac ió n y e l aguje ro de la capa de o zo no . En se ntido 
de cre c ie nte apare ce la de fo re stac ió n co n un 3 4 ,7 %, se guida de la 
pé rdida de biodive rsidad con e l 2 9 ,7 % y la catástro fe de l Pre stige con e l 
2 6 ,4 %. Este último porcentaje habría que explicarlo , en parte , por la 
proximidad temporal entre la catástro fe y la propia realizac ión de l trabajo 
de campo . 
En e l caso de l grupo de la poblac ión general, lo s problemas 
ambie ntale s que alcanzan al me no s e l 2 5 % de me nc ió n so n lo s 
siguientes: contaminación atmosférica y contaminac ión acústica con más 
de l 4 0 %, se guido s de capa de o zo no co n e l 2 9 ,6 %, la c o ntaminac ió n e n 
general con e l 2 2 ,3 % y, e n último lugar, la de fo re stac ió n co n un 2 5 ,8 %. 
La categoría “o tros” re fle ja un porcentaje de partic ipantes muy 
amplio , ce rca de l 5 0 % para ambas mue stras ; no o bstante , hay que 
co nside rar que e n e lla se inc luye n nume ro so s y variado s pro ble mas que 
tienen escaso reconoc imiento por parte de l conjunto de lo s 
e ntre vistado s. 
 
Cuestiones ambientales que se perciben como problemas 
10 Medio Ambient. Comport. Hum.,2006 
 
Tabla 2. Porcentaje de participantes estudiantes y de la población general que indicaron 
los problemas ambientales listados. 
Problemas ambientales 
Estudiantes 
(N=239) 
Población general 
(N=206) 
Contaminación del Agua 47,7 26,7 
Contaminación acústica 42,7 45,1 
Contaminación 41,8* * 22,3 
Capa de Ozono 40,6* 29,6 
Deforestación 34,7* 25,7 
Biodiversidad 29,7* * 15,0 
Prestige 26,4* 18,0 
Incendios 24,7 18,0 
Tala de bosques 22,6 19,4 
Contaminación Atmosférica 22,2 49,0 
No Reciclaje 22,2* * 9,2 
Residuos urbanos 19,7 23,8 
Gases y humos 18,8 19,9 
Tráfico y vehículos 16,7 12,1 
Efecto Invernadero 14,6 10,7 
Lluvia ácida. 14,2* * 5,3 
Industria 11,7 14,6 
Caza 11,3* 5,8 
Explotación recursos Naturales 11,3 8,3 
Residuos no urbanos 10,9* 2,9 
Energía nuclear 10,9 14,1 
Escasez de Agua 10,5 8,7 
Desertización 10,0 11,2 
Deterioro medio ambiente 9,2 5,8 
Urbanismo 8,8 5,3 
Calentamiento global 7,9 8,3 
Conciencia ambiental 7,1 9,2 
Problemas sociales 7,1* 2,9 
Maltrato seres vivos 5,9 3,4 
Pesticidas-Fertilizantes 5,0 8,3 
Otros 53,6 48,5 
Tasa de respuestas 
M 
DT 
 
6,70 
2,58 
 
5,69 
2,74 
* * p<0.01, * p<0.05 tras la aplicación de ?2. 
 
Las variables procedencia de los estudiantes y género no o frecen 
discurso s c larame nte dife re nc iado s, a pe sar de apare ce r algunas 
dife re nc ias s ignificativas e n alguno s pro ble mas, tal y co mo se re co ge e n 
la tabla 3 . 
 
Juan Ignacio Aragonés, Verónica Sevillano, Beatriz Cortés, María Amérigo 
Medio Ambient. Comport. Hum.,2006 11 
 
Tabla 3 . Porcentaje de estudiantes que indicaron los problemas ambientales listados según 
las variables procedencia y género. 
 Procedencia Género 
Problemas ambientales 
To ledo 
(N=49) 
Talavera 
Re ina 
(N=87) 
Madrid 
(N=103) 
 
Varones 
(n=47) 
Mujeres 
(n=192) 
Contaminación del Agua 4 4 ,9 5 1 ,7 4 5 ,6 5 3 ,2 4 6 ,4 
Contaminación acústica 4 9 ,0 4 7 ,1 3 5 ,9 5 1 ,1 4 0 ,6 
Contaminación 3 8 ,8 3 9 ,1 4 5 ,6 3 4 ,0 4 3 ,8 
Capa de Ozono 30,6* 5 1 ,7 3 5 ,9 2 5 ,5 44,3* 
Deforestación 3 0 ,6 3 2 ,2 3 8 ,8 3 8 ,3 3 3 ,9 
Biodiversidad 2 0 ,4 3 1 ,0 33,0 2 1 ,3 3 1 ,8 
Prestige 2 0 ,4 3 3 ,3 2 3 ,3 2 5 ,5 2 6 ,6 
Incendios 12,2* * 3 5 ,6 2 1 ,4 1 2 ,8 27,6* 
Tala de bosques 1 6 ,3 2 5 ,3 2 3 ,3 2 7 ,7 2 1 ,4 
Contaminación Atmosf. 2 2 ,4 1 4 ,9 2 8 ,2 2 9 ,8 2 0 ,3 
No Reciclaje 28,6* 2 7 ,6 1 4 ,6 1 2 ,8 2 4 ,5 
Residuos urbanos 3 0 ,6 1 8 ,4 1 6 ,5 3 6 ,2 15,6* * 
Gases y humos 2 6 ,5 1 4 ,9 1 8 ,4 2 3 ,4 1 7 ,7 
Tráfico y vehículos 2 0 ,4 1 9 ,5 1 2 ,6 1 9 ,1 1 6 ,1 
Efecto Invernadero 1 0 ,2 1 3 ,8 1 7 ,5 1 4 ,9 1 4 ,6 
Lluvia ácida 8 ,2 1 6 ,1 1 5 ,5 1 0 ,6 1 5 ,1 
Industria 14,3* 1 7 ,2 5 ,8 1 0 ,6 1 2 ,0 
Caza 8 ,2 1 0 ,3 1 3 ,6 1 2 ,8 1 0 ,9 
Explotación recur. Nat. 1 0 ,2 5 ,7 1 6 ,5 1 2 ,8 1 0 ,9 
Residuos no urbanos 1 2 ,2 1 3 ,8 7 ,8 1 4 ,9 9 ,9 
Energía nuclear 6 ,1 1 7 ,2 7 ,8 2 1 ,3 8 ,3* 
Escasez de Agua 4 ,1* 6 ,9 1 6 ,5 1 0 ,6 1 0 ,4 
Desertización 1 2 ,2 6 ,9 1 1 ,7 1 7 ,0 8 ,3 
Deterioro medio amb. 20,4* 3 ,4 8 ,7 2 3 ,4 5 ,7* * 
Urbanismo 6 ,1 5 ,7 1 2 ,6 1 9 ,1 6 ,3* 
Calentamiento global 2 ,0 8 ,0 1 0 ,7 6 ,4 8 ,3 
Conciencia ambiental 1 4 ,3 4 ,6 5 ,8 4 ,3 7 ,8 
Problemas sociales 8 ,2 5 ,7 7 ,8 2 ,1 8 ,3 
Maltrato seres vivos 4 ,1 8 ,0 4 ,9 4 ,3 6 ,3 
Pestic idas-Fertiliza 4 ,1 6 ,9 3 ,9 8 ,5 4 ,2 
Otros 61,2* * 4 2 ,5 5 9 ,2 4 8 ,9 5 4 ,7 
Tasa de respuestas 
M 
DT 
 
6 ,45 
2 ,65 
 
6 ,90 
2 ,86 
 
6 ,81 
2 ,29 
 
7 
2 ,67 
 
6 ,70 
2 ,57 
* * p<0 .01 , * p<0 .05 tras la aplicación de ? 2 a cada uno de las agrupaciones consideradas 
de “procedencia” y “genero”. 
 
El análisis de los resultados de la muestra de la poblac ión general 
indica que tanto la variable ideo logía po lítica autoatribuida como e l 
género o fre cen e scasas dife renc ias en lo s porcentaje s de las re spectivas 
Cuestiones ambientales que se perciben como problemas 
12 Medio Ambient. Comport. Hum.,2006 
 
submue stras (ve r tabla 4 ), lo que pone de manifie sto la homoge ne idad 
de l discurso e n la e nume rac ió n de pro ble mas ambie ntale s . 
 
Tabla 4 . Porcentaje de la muestra de población general que indicaron los problemas 
ambientales listados según las variables de género e ideología política 
autoatribuída. 
 Género Ideo logía 
Problem as ambientales 
Varones 
(n=104) 
Mujeres 
(n=102) 
 
Izda y 
Cizda 
(n=98) 
Drcha y 
Cdrha 
(n=53) 
Contaminación Agua. 2 0 ,2 33,3* 4 5 ,9 4 9 ,1 
Cont. Acústica 4 7 ,1 4 3 ,1 4 6 ,9 3 7 ,7 
Contaminación 2 5 ,0 1 9 ,6 3 1 ,6 2 2 ,6 
Capa de Ozono 2 6 ,0 3 3 ,3 3 2 ,7 2 4 ,5 
Deforestación 2 9 ,8 2 1 ,6 3 2 ,7 1 3 ,2 
Biodiversidad 1 5 ,4 1 4 ,7 1 8 ,4 9 ,4 
Prestige. 1 7 ,3 1 8 ,6 1 8 ,2 1 6 .7 
Incendios 1 3 ,5 2 2 ,5 1 6 ,3 2 8 ,3 
Tala de bosques 2 0 ,2 1 8 ,6 2 0 ,4 1 7 ,0 
Cont.atmosférica 5 3 ,8 4 4 ,1 1 9 ,4 2 8 ,3 
No reciclaje 1 1 ,5 6 ,9 1 3 ,3 3 ,8 
Residuos urbanos 2 1 ,2 26,5 2 1 ,4 2 8 ,3 
Gases y humos 2 4 ,0 1 5 ,7 1 5 ,3 2 0 ,8 
Tráfico y vehículos 1 2 ,5 1 1 ,8 1 3 ,3 1 1 ,3 
Efecto Invernadero 1 2 ,5 8 ,8 1 6 ,3 5 ,7 
Lluvia ácida. 4 ,8 5 ,9 9 ,2* 
Industria. 1 8 ,3 1 0 ,8 1 7 ,3 1 5 ,1 
Caza 7 ,7 3 ,9 4 ,1 9 ,4 
Exp.. recursos naturales 1 0 ,6 5 ,9 1 2 ,2 5 ,7 
Residuos no urbanos 3 ,8 2 ,0 3 ,1 
Energía nuclear 1 9 ,2 8 ,8* 1 8 ,4 1 1 ,3 
Escasez de Agua 7 ,7 9 ,8 1 0 ,2 1 ,9 
Desertización 1 4 ,4 1 7 ,8 1 1 ,2 1 1 ,3 
Deterioro medio ambiente 5 ,8 5 ,9 5 ,1 7 ,5 
Urbanismo 8 ,7 2 ,0* 7 ,1 5 ,7 
Calentamiento global 8 ,7 7 ,8 9 ,2 5 ,7 
Conciencia ambiental 6 ,7 1 1 ,8 9 ,2 5 ,7 
Problemas sociales 2 ,9 2 ,9 1 ,0 5 ,7 
Maltrato Seres vivos 1 ,9 4 ,9 4 ,1 5 ,7 
Pesticidas/ Fertilizantes 8 ,7 7 ,8 1 2 ,2 7 ,5 
Otros 4 8 ,1 4 9 ,0 5 6 ,1 4 7 ,2 
Tasa de respuestas 
M 
DT 
 
6 ,02 
2 ,75 
 
5 ,35 
2 ,70 
 
 
 
6 ,16 
2 ,71 
 
5,19 
2 ,86 
* * p<0 .01 , * p<0 .05 tras la aplicación de ?2 a cada uno de las agrupaciones consideradas 
de “ideología política autoatribuida” y “género”. 
 
Juan Ignacio Aragonés, Verónica Sevillano, Beatriz Cortés, María Amérigo 
Medio Ambient. Comport. Hum.,2006 13 
 
Las distribuc io ne s e n po rce ntaje s de lo s pro ble mas ambie ntale s 
me nc ionados por lo s partic ipante s, se gún la inte nc ión de conducta 
manife stada a través de de jar e l núme ro de te lé fo no , apare ce n e n la 
tabla 5 . 
 
Tabla 5 . Porcentaje de participantes que indicaron los problemas ambientales en las 
muestras de estudiantes y población general listados según la variable intención de 
conducta. 
 Muestra de estudiantes Muestra población general 
Problemas ambientales No (n=185) Sí (n=54) No (n=176) Sí (n=30) 
Contamina.del Agua. 4 7 ,6 4 8 ,1 4 8 ,3 5 3 ,3 
Contamina. acústica 4 4 ,9 3 5 ,2 4 3 ,2 5 6 ,7 
Contaminación 4 3 ,8 3 5 ,2 2 8 ,4 1 6 .7 
Capa de Ozono 3 8 ,4 4 8 ,1 2 7 ,8 4 0 ,0 
Deforestación 31,4* 4 6 ,3 2 6 ,1 2 3 ,3 
Biodiversidad 24,9* * 4 6 ,3 1 3 ,6 2 3 ,3 
Prestige. 2 6 ,5 2 5 ,9 2 3 ,3 2 2 ,3 
Incendios 2 2 ,7 3 1 ,5 1 7 ,6 2 0 ,0 
Tala de bosques 2 2 ,7 2 2 ,2 1 8 ,8 2 3 ,3 
Contamina. Atmosf. 18,4* * 3 5 ,2 2 2 ,2 2 3 ,3 
No Reciclaje 2 2 ,7 2 0 ,4 1 0 ,2 3 ,3 
Residuos urbanos 1 8 ,4 25 ,9 2 4 ,4 2 0 ,0 
Gases y humos 21,6* 9 ,3 2 1 ,0 1 3 ,3 
Tráfico y vehículos 1 7 ,8 1 3 ,0 1 2 ,5 1 0 ,0 
Efecto Invernadero 1 2 ,4 2 2 ,2 9 ,1 2 0 ,0 
Lluvia ácida. 1 3 ,5 1 6 ,7 5 ,7 3 .3 
Industria 1 3 ,5 5 ,6 11,9* * 3 0 ,0 
Caza 1 2 ,4 7 ,4 5 ,1 1 0 ,0 
Explo . recur. Natur. 1 0 ,3 1 4 ,8 8 ,0 1 0 ,0 
Residuos no urbanos 1 1 ,4 9 ,3 2 ,8 3 ,3 
Energía nuclear 1 0 ,8 1 1 ,1 11,4* * 3 0 ,0 
Escasez de Agua 9 ,7 1 3 ,0 9 ,1 6 ,7 
Desertización 7 ,6* 1 8 ,5 1 1 ,9 6 ,7 
Deterioro medio amb. 7 ,0* 1 6 ,7 5 ,5 1 3 ,3 
Urbanismo 8 ,1 1 1 ,1 4 ,5 1 0 ,0 
Calentamto global. 5 ,4* * 1 6 ,7 9 ,1 3 ,3 
Conciencia ambiental 8 ,1 3 ,7 8 ,5 1 3 ,3 
Problemas sociales 8 ,1 3 ,7 1 ,1* * 1 3 ,3 
Maltrato seres vivos 3 ,2* * 1 4 ,8 2 ,3* 1 0 ,0 
Pestic idas-Fertiliza 4 ,3 7 ,4 5 ,1* * 2 6 ,7 
Otros 5 3 ,5 5 3 ,7 43,8* * 7 6 ,7 
Tasa de respuestas 
M 6 ,53 7 ,57 5 ,54 7 ,71 
DT 2 ,61 2 ,30 2 ,71 2 ,81 
* * p<0 .01 , * p<0 .05 tras la aplicación de ? 2 a cada una de las agrupaciones consideradas 
de “intención de conducta” en cada muestra. 
Cuestiones ambientales que se perciben como problemas 
14 Medio Ambient. Comport. Hum.,2006 
 
En esta tabla se advierte , al igual que en e l resto de variables 
so c io de mo gráficas analizadas, que la intenc ión de conducta no produce 
discursos dife renc iados. La aplicac ión de χ2 so bre cada uno de lo s 3 0 
pro ble mas pe rmite o bse rvar que e n muy po co s caso s se pro duce n 
dife re nc ias s ignificativas e ntre lo s do s grupo s de cada mue stra y, e n 
ningún caso se pue de re co no ce r que la te nde nc ia se a e n una dire cc ió n, 
ya que unas ve ce s lo s po rce ntaje s so n supe rio re s e n lo s grupo s que 
indican su te lé fono y o tras no . 
Categorización de los problemas ambientales 
Una categorizac ión de carácter temático de lo s 3 0 pro ble mas 
ambientale s permitió agruparlos por dife rentes campos, tal y como se 
mue stra e n la tabla 6 . En e lla se o bse rvan lo s dife re nte s do minio s y 
subdominios en los que se pueden c lasificar los problemas ambientales 
conte mplados e n e ste trabajo . 
El primero de e llo s e s de finido como “abió tico ”, y en é l se inc luyen los 
problemas que atañen a alguno de los tres e lementos: agua, aire y tie rra. 
Obviame nte , co mo se pue de apre c iar e n dicha tabla, alguno s pro ble mas 
pe rte ne ce n a vario s subdominios; vé anse co mo e je mplo s , lo s caso s de 
e fe c to invernadero y contaminac ión. Los porcentaje s en que son 
me nc io nado s cada uno de lo s nive le s e stable c ido s pe rmite n suge rir no 
só lo la importanc ia de cada dominio y subdominio en e l discurso de las 
mue stras e studiadas, s ino tambié n sus dife re nc ias. 
Así, en la menc ionada tabla 6 , se observan lo s porcentaje s de lo s 
partic ipante s que alude n a pro ble mas ambie ntale s que se inc luye n, de 
fo rma e xc lusiva, e n cada uno de lo s subdo minio s. En e l caso de l 
subdominio denominado “agua” apare ce n un 7 1 ,1 % de lo s e studiante s 
que menc ionan al menos uno de lo s problemas inc luidos exc lusivamente 
y un 6 7 % de la segunda muestra. De modo similar, e l “aire ” es c itado por 
7 8 ,7 % de lo s e studiantes y 7 4 ,8 % de la muestra de la poblac ión general. 
Finalme nte , e l subdo mino “tie rra” e s c itado po r e l 3 8 ,1 % y 3 5 ,9 % de 
ambas muestras. 
Co n re spe c to al c o njunto de l do minio de no minado “abió tic o ” pue de 
dec irse que e l 1 0 0 % de los entrevistados de ambas muestras señaló al 
me no s uno de lo s pro ble mas e n é l inc luido s . 
 
 
Juan Ignacio Aragonés, Verónica Sevillano, Beatriz Cortés, María Amérigo 
Medio Ambient. Comport. Hum.,2006 15 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
El segundo dominio , denominado “bió tico ”, comprende e l “re ino 
animal” (me nc io nado po r e l 1 1 ,3 % de lo s e studiante s y e l 5 ,8 % de lo s 
partic ipantes de la muestra de la poblac ión general) y e l “re ino vegetal” 
(co n uno s po rce ntaje s de l 5 8 ,3 % y 6 5 ,7 %, re spe c tivame nte ). El co njunto 
de l do minio e s co nside rado po r un 5 8 ,7 % y 6 7 ,4 % de las re spe c tivas 
muestras. 
El te rcer dominio : “energía y recursos naturales”, agrupa los 
pro ble mas re lac io nado s co n la e ne rgía nuc le ar y la e xplo tac ió n de 
re cursos. Los e studiante s que me nc ionan ambos proble mas re pre se ntan 
un 2 0 ,9 %, y lo s de la mue stra de la po blac ió n ge ne ral un 2 0 ,4 %. 
El último dominio privilegia la propia ac tividad humana y puede 
organizarse en tres nive les de análisis de l comportamiento : variable 
externa, variable inte rna y so c ial. El co njunto de e studiante s que 
me nc io na alguno de lo s pro ble mas inc luido s e n e ste do minio re pre se nta 
e l 3 2 ,2 %, mie ntras que só lo lo c o nside ra e l 1 8 % de lo s partic ipante s de 
la poblac ión general. 
Discusión 
La lista de problemas ambie ntale s que surge de e sta inve stigac ión no 
disc re pa de las e labo radas po r lo s o rganismo s nac io nale s e 
inte rnac ionales que gestionan e l medio ambiente . Todos e llo s pueden 
encontrarse en alguno de lo s listados menc ionados a lo largo de este 
Cuestiones ambientales que se perciben como problemas 
16 Medio Ambient. Comport. Hum.,2006 
 
trabajo . No obstante , los resultados aquí o frec idos re pre se ntan datos 
e mpírico s pro duc ido s po r le go s e n la ge stió n de l me dio ambie nte . 
Puede sostenerse que e l discurso genérico de ambas muestras e s 
ampliamente compartido , aunque parece más “variado” e l de los 
estudiantes que e l de la correspondiente a la poblac ión general. Así, si se 
presta atenc ión a los once primeros problemas – 1 0 y 1 1 tienen e l mismo 
porcentaje -, en las dos muestras se observan grandes similitudes, 
destacando como princ ipales problemas los que están re lac ionados con 
la co ntaminac ió n de l agua y la co ntaminac ió n acústica. Sin e mbargo , e n 
e l caso de la mue stra de e studiante s apare ce , ade más, la falta de 
conductas e co lógicas responsables (no re c ic laje ), y cabe interpre tar la 
mayor productividad y variedad de no tativa e xpre sada por e ste grupo e n 
té rminos de c ie rta “e spec ializac ión” discursiva (valgan como e jemplos, 
las dife renc ias significativas observadas en re lac ión con lo s conceptos 
capa de ozono , pérdidas de bosque , biodiversidad, lluvia ác ida o residuo s 
no urbano s. Indicado re s de c ie rto co no c imie nto que adquie re n 
s ignificac ió n s i se re lac io nan co n la mayo r e xpre sió n de inte nc ió n de 
conducta proambiental. 
Pe se a co nside rar lo s tre inta pro ble mas co mo impo rtante s e n e l 
discurso soc ial, e l porcentaje dife re nte que alcanzan po dría dar lugar a 
desarro llar investigac iones en las que se evalúe cuán importante e s un 
problema ambiental concre to y cómo se valo ra en re lac ión con o tros, 
siempre buscando una explicac ión de la variabilidad cognitiva que 
sugiera corre latos dife re nc iale s de lo s comportamie ntos proambie ntale s. 
Esta líne a no pre te nde invalidar la inve stigac ió n e n la que se e studian 
variables intervinientes que explican la preocupac ión ambiental, sino que 
pue de se r co nside rada co mple me ntaria habida cue nta que s i se c o no ce 
c ó mo se pe rc ibe e l pro ble ma e s más fác il ve r e l pape l que jue gan e stas 
variable s e n e l comportamie nto . 
No e s fác il e xplicar las dife re nc ias s ignificativas e n alguno s 
porcentajes de mención de lo s problemas ambientales que se observan 
entre los grupos que se han dife renc iado según las variables 
so c iodemográficas conside radas. Quizá, las razone s de las dife re nc ias 
pue de n e nco ntrarse e n particularidade s de las submue stras co n las que 
se ha trabajado y e l examen de las mismas requiere mayor inve stigac ió n 
empírica. No obstante , puede aceptarse que e l discurso e s re lativamente 
homogéneo . 
Juan Ignacio Aragonés, Verónica Sevillano, Beatriz Cortés, María Amérigo 
Medio Ambient. Comport. Hum.,2006 17 
 
La cate go ría “o tro s” tie ne un po rce ntaje muy grande e n ambas 
muestras, lo que podría se r entendido como un “cajón de sastre ” en e l 
que tienen cabida aque llos pro blemas espec íficos compartidos por algún 
grupo concre to que , aunque fueran causantes de un grave daño , no 
alcanzan un co nse nso amplio e ntre lo s e ntre vistado s co mo pro ble ma. 
El discurso so c ial captado e n e ste trabajo pare ce te ne r c ie rta 
estabilidad en e l tie mpo , ya que e l listado de pro ble mas co mpartido s po r 
lo s grupo s e ncue stado s no e s muy dife re nte de lo s que pro ce de n de las 
agenc ias encargadas de gestionar e l medio ambiente . No obstante , no se 
pue de de scartar la intro ducc ió n de l fac to r s ituac io nal co mo su c e de c o n la 
aparic ión de l naufragio de l buque Prestige que emerge con un peso muy 
impo rtante e n to do s lo s grupo s co nside rado s. Este re sultado sugie re , tal 
y co mo se ñalaban Co mbs y Slo vic (1 9 7 9 ) e n la inve stigac ió n so bre 
percepc ión de l rie sgo , que lo s medios de comunicac ión pueden sesgar la 
percepc ión de los problemas ambientales, máxime cuando de muchos de 
e llo s no se sue le tener experienc ia dire c ta. 
Si se c o mpara la lista que o fre ce e ste trabajo c o n la e labo rada e n o tro 
previo (Cortés, Aragonés, Sevillano y Amérigo , en prensa), basado en 
no tic ias sobre medio ambiente difundidas por la prensa e scrita, se 
pe rc ibe c ie rto contraste con re spe cto al fo co de ate nc ión. Los me dios de 
comunicac ión al info rmar sobre la ac tualidad pre stan ate nc ión a 
aspectos de novedad , urgenc ia, conflic to , e scala (Pe tts, Horlick-Jo ne s y 
Murdo ck, 2 0 0 1 ); e s de c ir, lo que valo ran e s e l carác te r s ituac io nal de l 
suce so . Sin e mbargo , lo s suje to s de e sta inve stigac ió n pare ce n pre star 
atenc ión a aspectos más e stable s de lo s problemas ambientale s y, po r 
tanto , se e xpre san e n cate go rías más amplias. 
Las cate go rías analíticas e n las que se han o rganizado lo s tre inta 
problemas ambientales permiten observar, desde o tra perspectiva, 
cuále s son lo s ámbitos sobre lo s que se perc iben lo s problemas 
ambie ntale s . Lo s c lasificado s co mo bió tico s y abió tico s pare ce n lo s más 
co mune s e n e l discurso , de stacando e l c o mpo ne nte abió tico que co nvo ca 
a la to talidad de lo s entrevistados, siendo e l aire y e l agua lo s e lementos 
hac ia lo s que parece haber mayor sensibilid ad. 
Re sulta significativo que e l comportamie nto humano apare zca 
e xplíc itame nte me nc io nado -en dife rentes nive le s y con c ie rto peso -, 
c o mo pro ble ma ambie ntal, po rque si bie n po dría e nte nde rse que c ie rto s 
proble mas so c iale s son causa o e fe c to de l de te rio ro me dio ambie ntal, no 
Cuestiones ambientales que se perciben como problemas 
18 Medio Ambient. Comport. Hum.,2006 
 
parece que conductas explíc itas como la ausencia de rec ic laje o la falta 
de co nc ie nc ia ambie ntal se an pro ble mas ambie ntale s e n sí mismo s. 
Quizá, la ide a utó pica que e stá subyac ie ndo e n lo s e ntre vistado s e s que 
si todos los seres humanos fueran e co lógicamente responsables no 
habría problemas ambientale s. 
Merece comentarse e l numero tan alto -2 1 ,3 % - de e studiante s de las 
poblac iones de Talavera de la Re ina y To ledo que no responden al ítem 
correspondiente a la ideo logía po lítica; porcentaje e le vado si se compara 
con lo s o tros grupos de entrevistados. Una inte rpre tac ión posible de e sta 
dife re nc ia pue de se r e l he cho de que e n e stas c iudade s hay un mayo r 
contro l soc ial en comparac ión con las grandes c iudades, en las cuales e l 
anonimato sue le se r una de las no tas distintivas. 
Se e stima que lo s re sultado s hasta aquí apo rtado s pe rmite n avanzar 
e n e l e studio de la pre ocupac ión ambie ntal; de sde un punto de vista 
ope rac ional pue de propone rse que , dado e l nive l de acue rdo de lo s 
entrevistados en los tre inta pro ble mas ambie ntale s , é sto s po drían se r 
inco rpo rado s a lo s pro to co lo s co n que se midan cue stio ne s ambie ntale s 
de sde un e nfo que psico mé trico . 
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