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El dibujo como problema 
 
 
 
 
 
 
 
 
Rosalino Rodríguez 
rodriguezrosalino@gmail.com 
 
 
 
 
 
 
 
 
Palabras clave: Las manifestaciones estéticas, la creatividad del sujeto. 
Keywords: Aesthetic manifestations, the creativity of the subject 
mailto:rodriguezrosalino@gmail.com
- Dibujar es sacar una línea de paseo - 
Paul Klee 
 
 
 
...en algún momento el hombre adquirió la capacidad de pensamiento abstracto 
y aprendió a crear sin un objetivo utilitario concreto. 
 
Mara Dierssen 
 
 
 
Introducción 
 
¿Recuerdas cuando te gustaba dibujar? Estas palabras me las encontré viajando en una calle de 
Madrid, escritas en un cartel que invitaba a un taller de arte. Me resultó una pregunta muy acertada, 
pues, a mi entender, apelaba a la memoria del sujeto, a eso que por distintas circunstancias había 
dejado de hacer. Un simple letrero escrito en tiza que invitaba a interpelarse por el placer de dibujar; 
todo un problema en los momentos acelerados que vivimos, o al decir Byung- Chul Han, en un 
tiempo “atomizado”. 
 
Las múltiples circunstancias de abandonar el dibujar, complican cualquier investigación que se pueda 
hacer. Además, estamos en constantes cambios que nos atraviesan y arman nuestra identidad, al 
menos de un modo exterior. Entonces, más que nunca la importancia de la pregunta del cartel que 
toca algo íntimo e intrínseco. 
 
En el desarrollo de este ensayo no pretendo hacer un relato histórico o técnico sobre el dibujo en las 
sociedades. Se trata, más bien, de una suerte de mapa semántico, que reflexiona sobre un conjunto 
de lecturas, y husmea en experiencias concretas, en ejemplos, desde variados campos de 
investigación como el social y cultural, que han planteado problemáticas en relación este tema.
¿Recuerdas cuando te gustaba dibujar? 
 
Hay un libro escrito por John Berger que me ha acompañado por un tiempo; se titula Sobre el dibujo. 
De estilo sencillo, y escrito desde una intimidad que es una maravilla, relata lo esencial, la compleja 
trama que es el dibujo como maestría. También analiza trabajos de artistas que han transitado el 
arte del dibujo desde múltiples miradas. Hay pasajes del libro que llevan a pensar en distintos 
aspectos de la vida. Destaco este en particular que me parece muy reflexivo: 
 
«La actividad más profunda de todas es la de dibujar. Y la que más te exige. Es cuando 
dibujo cuando me lamento de las semanas, los años, quizás, que he desaprovechado». 
 
Me contó una amiga que cuando era niña, a pedido de la maestra, hizo un dibujo relacionado con el 
campo. De su lápiz salieron flores, árboles, nubes y animales. Cuando terminó su trabajo se lo llevó a 
la docente, que, como manda la tradición del adulto, dictó sentencia sobre lo realizado. La maestra 
miró el dibujo y sin rodeos le dijo que eso no era una oveja, que así no eran las ovejas. ¿Cuál es el 
efecto de dichas palabras? 
 
Hoy mi amiga, ya mayor, recuerda eso; ella no dibuja más. Un simple dibujo para una niña era todo 
un desafío, algo muy serio, que demanda respeto por parte de quien lo observa. Sin embargo, 
aquello no había sucedido. La maestra había estampado para siempre un recuerdo negativo de lo 
que es dibujar, por no comprender las sensibilidades de sus alumnos. Escribe V. Lowenfeld al 
respecto de interferir en el arte de los niños: “La mayoría de las interferencias tienen origen en la falta de 
comprensión de las necesidades reales de los niños”. 
 
Los valores constructivos del dibujo en los niños son invenciones a partir de sus experiencias, son 
significativos desde las formas, el trazo, y están cargados de sentimientos que le otorgan una fuerza 
creadora trascendente. 
 
Este relato me hizo acordar al libro El Principito de A. de Saint-Exupéry. Cuando comienza el libro, sin 
más, el escritor relata que de niño sufrió la falta de sensibilidad de los adultos al mostrar un dibujo 
que había realizado sobre una serpiente boa. Los adultos, con poca paciencia y estimación por la 
experiencia de dibujar que presentaba el niño, le aconsejaron que se interesara más por la geografía, 
la historia, el cálculo y la gramática. 
 
 
El dibujo Media con las personas 
 
Hay que considerar la importancia del trazo cuando alguien lo está presentando como lenguaje, 
como forma de decir. Para eso se tienen que dejar de lado aquellos conceptos que tenemos 
formados sobre el entendimiento del dibujo, abrirse a los procesos de creación, a esas 
manifestaciones estéticas, a ese devenir del dibujo. En ese momento, como dice José Jiménez, nos 
podemos encontrar en “las entrañas más profunda del arte, en esa metamorfosis, y por eso no es 
mera repetición, ni simple redundancia, sino producción de realidad, creación”. 
 
En la canción La Mancha, el cantautor Silvio Rodríguez habla del lamento que le dio borrar una 
mancha que había en su pared, dibujada años atrás. Con ese acto había borrado su niñez. 
Son estas confesiones de un tono de profundidad extremo y resaltan el haber borrado la memoria, 
esa mediación que había con el pasado, lo íntimo y familiar. 
 
 
 
La profesora de arte e investigadora Norteamericana Betty Edwards en su célebre libro Aprendiendo a 
dibujar con el lado derecho del cerebro dice: 
 
«Dibujar puede revelarnos más cerca de nosotros mismos, algunas facetas de nuestra 
personalidad que podían haber quedado oscurecidas por el yo verbal. Nuestros propios 
dibujos pueden enseñarnos cómo vemos las cosas y nuestros sentimientos en ellas. » 
 
 
 
 
 
Los campos de investigación 
 
El investigador francés Arno Stern tiene una definición sobre la evolución del dibujo en los y las 
niñas, a partir de la buena enseñanza y respeto de dicha actividad. 
 
 
«El dibujo no es la copia de un jarrón colocado sobre el pupitre, no es la reproducción de un 
modelo trazado en la pizarra, no consiste en colorear una forma impresa en el cuaderno. El 
dibujo es una actividad que, utilizando los recursos que ofrecen los distintos útiles, 
aprovecha todas las necesidades del niño. » 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Hace un tiempo se viene estudiando desde el campo científico el cerebro artístico, concretamente 
desde la neurociencia, se busca desvelar los misterios del hacer, de la creatividad del sujeto que 
inventa y alumbra ciertas obras perdurables; cómo se da la creación desde las conexiones 
neuronales y la plasticidad del cerebro. Las preguntas que rodean estas investigaciones son múltiples, 
pero hay algunas muy específicas. ¿Qué es la belleza artística? ¿Qué características poseen aquellos 
capaces de crearlas? 
 
Por otro lado, tanto en oriente como en occidente, hubo y hay artistas que trabajan como 
científicos. Fue el caso de Albrecht Dürer (Alberto Durero), cuyos dibujos parecen estar en un 
laboratorio. Trabajos como La liebre joven, Lechuza o Las manos, son de una observación increíble. 
 
Herbert Read en su libro El significado del arte manifiesta: 
 
«El arte comienza con el deseo de dibujar, y así empieza el niño- El dibujo es aún uno de los 
elementos más esenciales en las artes visuales- hasta en la escultura, que no es volumen, 
sino volumen y contorno. » 
 
Para Vigotsky, el dibujo necesita de estímulos exteriores, pues con la evolución del niño se pierde y 
abandona definitivamente el deseo de dibujar. 
 
En un reportaje documental acerca del científico español Cajal, quien realizó dibujos de gran 
importancia sobre el funcionamiento del cerebro, este afirma: 
 
 «El buen dibujo, como la buena preparación microscópica, son pedazos de la realidad, 
documentos científicos que conservan indefinidamente su valor y cuya revisión será 
siempre provechosa, cualesquiera que sean las interpretaciones a que hayan dado origen.» 
(Santiago Ramón y Cajal, 1899) 
 
 
 
 
 
Las múltiples fuentes del Dibujo 
 
Recuerdo, una película de animación donde el personaje centralera un artista, un dibujante español, 
que por medio de sus dibujos narraba las duras condiciones de un campo de concentración en el sur 
de Francia, donde fueron alojados y alojadas, miles de personas que cruzaron la frontera huyendo 
del régimen Franquista. Es interesante observar que el dibujo como lenguaje es el hilo conductor de 
todo el relato. El film hace alusión al el dibujante catalán Josep Bartolí. 
 
Hurgando en una librería me encontré con un libro de dibujos realizados por Federico García Lorca, 
de una poética increíble que, salvando las distancias, me recordó a la pintura de Marc Chagall. 
Dibujos de un juego de líneas con mucha libertad, que te trasladan desde el surrealismo al lugar 
donde vivió el poeta Granadino. 
 
¿Cómo unas simples líneas pueden trascurrir el tiempo y llegar a nosotros con tal magnitud? Hablo de 
los dibujos y las pinturas de las cuevas, el llamado “arte rupestre”. ¡Son magníficas! Mi interés se 
centra, sobre todo, en las pinturas de la caverna Chauvet, en Francia. 
Hay un documental donde se acerca un poco a esa grandeza que presentan las obras. Me imagino 
que no tiene comparación con verlas en persona, cosa bastante compleja ahora que se hicieron 
réplicas ya que se estaban dañando a causa de la gran afluencia de turistas que las visitaban. 
 
Para mí fue y es muy complejo dibujar esa gran cantidad de formas de animales, con toda la 
estructura que presenta la cueva y la falta de luz. Los trazos son perfectos, seguros, una 
manifestación artística extraordinaria. 
Recientemente se han encontrado una serie de dibujos en una cueva de la Patagonia Argentina que 
datan aproximadamente de 8.200 años. Maravillas trazadas en las paredes para comunicar cosas a 
grupos y generaciones que allí avistaban o transitaban. 
 
La obra de Kathe Köllwitz es desgarradora. Sus dibujos, cargados de sentimientos, contienen una 
fuerza expresiva imponente, debido a sus trazos que arman las imágenes, trasmitiendo dolor, 
angustia, y denuncia sobre la guerra y quienes sufren las consecuencias. 
 
 
 
 
 
 
“Los pájaros prohibidos 
 
Los presos políticos uruguayos no pueden hablar sin permiso, silbar, sonreír, cantar, caminar rápido ni saludar a otro 
preso. Tampoco pueden dibujar ni recibir dibujos de mujeres embarazadas, parejas, mariposas, estrellas ni pájaros. 
 
Didaskó Pérez, maestro de escuela, torturado y preso por tener ideas ideológicas, recibe un domingo la visita de su hija 
Milay, de cinco años. La hija le trae un dibujo de pájaros. Los censores se lo rompen en la entrada de la cárcel. 
 
El domingo siguiente, Milay le trae un dibujo de árboles. Los árboles no están prohibidos, y el dibujo pasa. Didaskó 
le elogia la obra y le pregunta por los circulitos de colores que aparecen en la copa de los árboles, muchos pequeños 
círculos entre las ramas. 
— ¿Son naranjas? ¿Qué frutas son? 
La niña lo hace callar: 
—Ssshhh. 
Y en secreto le explica: 
—Bobo. ¿No ves que son ojos? Los ojos de los pájaros que te traje a escondidas.” 
 
Eduardo Galeano 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Conclusiones 
 
Desde Oriente, haciendo dibujos a tinta china o simplemente en la arena como los jardines Zen de 
Japón. En Oriente medio a través de la caligrafía, una escritura con líneas, curvas y puntos, cargadas 
de poesía. Por otro lado, los trazos de los pueblos originarios de América con sus simbolismos de 
naturaleza. 
 
«El acto de dibujar no aparece como un estado de conciencia referido al acto puro de 
pensar (en lo que tiene de operación inminente y abstracta); con el lápiz o el pincel, y a 
medida que el dibujo <se va mostrando> se des-oculta el discurrir del pensamiento. » 
Chuhurra, L, Osvaldo 
 
El dibujo ha acompañado a los seres humanos desde que estos comienzan a andar en la tierra. Su 
evolución, y sus múltiples usos, son de carácter amplio y universal. La importancia en los distintos 
campos del conocimiento está consolidada, aunque hoy se utilicen las computadoras y demás 
artefactos que facilitan el trabajo, como en la arquitectura, el diseño, la biología, etc. 
 
Está presente en lo cotidiano de nuestro ser, en el niño con sus primeros trazos y como parte 
importante de su desarrollo. Guille, hermano menor de Mafalda de las tiras cómicas de Quino, 
pregunta asombrado a su madre “¿No ez increíble todo lo que puede tened adentro un lápiz?” 
 
En lo personal, es algo íntimo e inigualable, se vuelve expresión, comunicación, se abandona y se 
retoma, trayendo siempre nuevas cosas en los trazos, formas que se arman a partir de contornos, de 
sombras, de tramas caóticas que se mezclan, es un espacio de regocijo y libertad. 
 
Tendríamos que volver siempre a dibujar, es una necesidad real, perdida entre tantas banalidades 
diarias que no hacen otra cosa que distanciarnos de lo esencial. 
 
 
 
 
 
 
 
Bibliografía de consulta 
 
 
CAJAL, R, S. - https://www.youtube.com/watch?v=D4Nl9MigqUY&t=653s BERGER, J. - Sobre el Dibujo. Ed, GG, 
2011 
 
DIERSSEN, M. El cerebro artístico. Ed, B, A, S, L. 2016 
 
EDWARDS, B. Aprender A Dibujar Con El Lado Derecho Del Cerebro. Ed Urano 1994 
 
GALEANO, E. Memoria del fuego 1982-1986 
 
CHUHURRA, O. Estética de los elementos plásticos. Ed, Labor 1971 
 
JIMENEZ, J. Teoría del arte. Ed Tecnos, 2002 
 
LOWENFELD, V. El niño y su arte. Ed Kapelusz 1977 
 
READ, H. El significado del arte. Ed, Losada 2007 
 
STERN, A. Del dibujo espontáneo a las técnicas gráficas. 
 
VIGOTSKY, S, L. La imaginación y el arte en la infancia. Ed, Akal 1990 
 
RECUPERADA DE INTERNET: https://es.wikipedia.org/wiki/Cueva_de_Chauvet 
 
RECUPERADA DE INTERNET: https://www.europapress.es/ciencia/ruinas-y-fosiles/noticia-arte-rupestre-
patagonia-transmitio-informacion-cien-generaciones-20240216131719.html 
 
 
http://www.youtube.com/watch?v=D4Nl9MigqUY&t=653s

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