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MEDIEVAL I UNED: GRADO EN GEOGRAFÍA E HISTORIA CURSO 2016-2017 Página 1 de 10 TEMA 1: LAS MIGRACIONES GERMÁNICAS. EL FIN DEL IMPERIO EN OCCIDENTE. 1. LA CRISIS DEL BAJO IMPERIO. Algunos autores latinos como Amiano Marcelino percibían ya la decadencia de Roma, causada por una descomposición interna (desidia de sus gobernantes, hedonismo de su población) y peligros exteriores (presencia de numerosos pueblos bárbaros en sus fronteras y en el ejército). Diocleciano, Constantino y Teodosio intentaron frenar una crisis que se había vuelto imparable desde el siglo III con sus reformas, pero no lo consiguieron ya que ésta era política, productiva, social y financiera: - Los impuestos ahogaban a los más humildes y se pagaban tarde y mal. - Los grandes propietarios controlaban la sociedad y la economía y suplantaban al Estado, con lo que las clases medias y bajas se veían obligadas a acogerse bajo la protección de un poderoso. - La sociedad se ruralizó y las ciudades perdieron importancia. - La sociedad se jerarquizó y los cargos se convirtieron en hereditarios. - Los colonos se adscribieron a las tierras. - Los bárbaros se habían organizado y realizaban incursiones en un Imperio débil, por lo que las ciudades no tuvieron más remedio que empezar a fortificarse. Diocleciano: - Creó junto a él la figura de otro Augusto y después la de dos Césares. - Roma dejó de ser la residencia imperial y se trasladó a Tréveris, Milán o Rávena. Constantino: - Apostó por la unidad a través del cristianismo y del poder. - Mantuvo la unidad monetaria con la creación del Solidus de oro. - Fundó Constantinopla (324) sobre las ruinas de Bizancio y trasladó las principales magistraturas allí, consagrándola como la nueva Roma en el 330 lo que aceleró el colapso de Occidente. Teodosio: - A su muerte en el 395, el Imperio se dividió definitivamente en dos: Oriente, con Arcadio. Occidente, con Honorio. Después de la muerte de Constantino, la Iglesia contribuyó a crear un dualismo religión/política. Los papas fueron afianzando su poder y su prestigio sobre el de los emperadores, una característica que iba a ser muy importante en la historia de Occidente durante todos los siglos medievales. La estructura administrativa de la Iglesia era un calco de la estatal, lo que ayudó a que fuera sustituyéndolo en las zonas donde estaba en declive. El cristianismo se proclamó religión oficial en el 392 (la antigua, proscrita, se mantuvo en las zonas rurales o pagus) con la intención de reforzar el Imperio. Algunos autores proclamaron que los males de Roma se debían a la difusión del cristianismo y al abandono de las tradiciones. San Agustín, sin embargo, dijo que sus pecados actuales habían atraído la cólera divina, lo que impregnó la historiografía medieval y presentó a un Dios que se inmiscuía en la vida de los hombres y en el que las victorias eran el resultado del comportamiento moral de los hombres. El ejército contribuyó a debilitar el Imperio. Dos factores contribuyeron a que se integraran elementos bárbaros en él desde la época de Constantino y Teodosio: - La extensión del Limes. - Los romanos podían librarse de ellos pagando rescates, lo que permitía contratar directamente los efectivos que necesitaban en el lugar adecuado (foederati): francos, godos, burgundios, sár atas,… Algunos incluso alcanzaron las ás altas agistraturas ilitares (Estilicón, Aécio). Página 2 de 10 2. LOS PUEBLOS BARBAROS ANTES DE LAS INVASIONES. El término bárbaro es de origen griego y definía a toda persona extranjera, por lo que al principio no tuvo un significado de desprecio. La historiografía les ha tratado de manera diferente: - Historiadores del área editerránea: invasiones ár aras . - Historiadores centroeuropeos: igraciones de pue los . - Tácito (10 dC) les denominaba en su Germania pue los de no les salvajes con una vida simple y no contaminada por la cultura urbana. Imagen general de individuos salvajes cubiertos de pieles y malolientes, e indisciplinados frente a los disciplinados ejércitos romanos. Algunos autores clásicos destacaban ciertos aspectos como su moralidad, fidelidad conyugal y desprecio por los espectáculos y el lujo que los mismos romanos habían practicado en tiempos primitivos. Fuentes: - Escritores clásicos (latinos y griegos). - Arqueología. No hay fuentes escritas directas salvo algunas inscripciones rúnicas, aunque si han llegado hasta nosotros algunos textos: - Codex Argenteus de Upsala. Traducción de la Biblia al germánico por el obispo visigodo Ulfila, quien inventó un nuevo alfabeto de 24 caracteres que sustituía al alfabeto rúnico. - Algunos autores escribieron la historia de sus pueblos en latín: Beda el venerable y Paulo Diácono (ambos en el siglo VIII). - Primeros textos germánicos no fragmentarios desde Inglaterra a partir del siglo VII (leyes, Beowulf) y a partir del siglo VIII entre los francos. El limes, a pesar de estar fortificado, había quedado debilitado en algunos lugares por el abandono y la falta de medios por lo que era fácilmente permeable por los pueblos que estaban al otro lado (barbari), algunos abiertamente hostiles. Su grado de civilización variaba, y algunos se encontraban al nivel del romano (persas sasánidas). La permeabilidad de las fronteras permitía el paso de noticias, modas, ideas, mercancías y hombres. Roma y luego Constantinopla se convirtieron en polos de atracción de las élites bárbaras, quienes hacían carrera en el ejército y llegaban a las más altas magistraturas militares. Esto les situaba por encima de sus connacionales y además iba creando una sociedad cada vez más militarizada. - En la frontera más oriental: Persas, que buscaron sincronizar sus ataques con los de otros pueblos. Eslavos, un enemigo potencial que de momento no era problemático. - En el Norte, una serie de pueblos paganos que vivían en la Edad de Hierro: Anglos y Sajones en las costas del Mar del Norte. Jutos y Frisones en la desembocadura del Elba. Pictos y Escotos en Gran Bretaña e Irlanda. Francos en la desembocadura del Rin. Alamanos (All Maine = todos los hombres) entre el Rin y el Danubio. Quados y Marcomanos en el Danubio Medio. - Otros pueblos mejor estructurados, arrianos: Burgundios, Vándalos y Lombardos junto al Elba. Visigodos, Ostrogodos y Alanos en las llanuras rumanas y rusas. Los dos últimos muy evolucionados por sus contactos con el Imperio de Oriente. - En África, los pueblos bereberes no representaban peligro alguno. Página 3 de 10 3. LOS HUNOS Y LA PRIMERA INVASION GERMÁNICA. Hasta que Julio César se dio cuenta de que más allá del Rin existían pueblos de costumbres más primitivas que los galos, para los romanos sólo existían dos grandes grupos de bárbaros: - Celtas, en Galia, Britania y Europa Central. - Escitas, en las estepas de Europa Oriental. Julio César llamó Germania a la región limitada como sigue, y a los pueblos que allí vivían se les dio el nombre de Germani: - Norte, Báltico. - Este, Vístula. - Sur, Danubio. - Oeste, Rin. Esta clasificación deja fuera a Ostrogodos y Visigodos, establecidos en el bajo Danubio y el Mar Negro, por lo que modernamente la base de la clasificación es lingüística abarcando a más pueblos. El contacto con ellos era fluido gracias a las relaciones comerciales y su alistamiento en el ejército, por lo que la presión que ejercían sobre el limes no representó un peligro hasta que en el siglo IV y sin motivo conocido los Hunos se movieron hacia Occidente desde las estepas del mar de Aral y del lago Baikal: - Primero atacaron a los Alanos, quienes se movieron hacia el Oeste cruzando el Don hacia donde estaban los Ostrogodos. - Tras ser derrotados por los Alanos (374), los Ostrogodos tuvieron que moverse desplazando a los Visigodos hacia el Danubio. - Los Visigodos cruzaron el Danubio (376) y se asentaronen Mesia tras pactar un foedus con Valente. El contingente visigodo era el más numeroso de bárbaros que hasta la fecha había entrado en el Imperio (70,000), por lo que pronto empezaron los problemas por causa de: - Falta avituallamiento para tanta gente. - Incompetencia de los gobernadores encargados de las relaciones con ellos. Los problemas derivaron en revueltas. Valente se vio obligado a regresar a Constantinopla desde Antioquía y presentó batalla a los Visigodos en Adrianópolis (9 de agosto de 378) falto de tropas, ya que no esperó a los refuerzos que Graciano traía desde la Galia. Roma salió derrotada y Valente falleció en la batalla. Los Visigodos pactaron con Teodosio (382) un nuevo tratado estableciéndose en la Mesia Inferior como foederati. Cuando éste murió (395), Alarico I (rey visigodo) reclamó a Arcadio el título de Magister Militum petición que fue rechazada. Sólo cuando Alarico amenazó Constantinopla se le concedió el de Magister Militum per Illiricum, asentándose en Iliria. Pero Alarico I invadió (401) el Norte de Italia (de nuevo problemas de avituallamiento), siendo rechazado por el general de origen vándalo Estilicón. Estilicón fue asesinado y Honorio se trasladó a Rávena, por lo que el camino hacia Roma estaba libre de obstáculos. Tras la negativa de Honorio de concederle a Alarico I el asentamiento de sus gentes dentro del Imperio, este último asedió y finalmente tomó Roma, que fue saqueada el 24 de agosto de 410. Sólo se respetaron las basílicas de San Pedro y San Pablo. Alarico murió poco tiempo después tras intentar pasar a África para establecerse allí, siendo sucedido por Ataulfo. Éste volvió a dirigirse hacia el Norte, entrando en la Galia en el 412 y estableciéndose en Toulouse. Se casó con la hermana del emperador Honorio, Gala Placidia. Página 4 de 10 4. LAS GRANDES MIGRACIONES. 4.1 Suevos, vándalos y alanos. Debido a la presión de los Hunos, los Alanos se desplazaron hacia las llanuras de Hungría donde estaban los Vándalos Asdingos. En el 401 intentaron atravesar el Danubio, defendido por Estilicón, pero tuvieron que avanzar hacia el Rin por lo que forzaron a Vándalos Silingos y Suevos a moverse. Estos pueblos atravesaron un Rin helado por Maguncia (406) entrando en una Galia desprovista de tropas (Estilicón las había retirado para defender Italia de Alarico ya en el 401). El desplazamiento por la Galia fue lento, ya que viajaban familias enteras y en el 409 llegaron a la Península Ibérica donde tras un acuerdo con los representantes del Imperio se establecieron en ella como sigue: - Suevos y Vándalos Asdingos: Galicia y Norte de Portugal. - Vándalos Silingos: Bética (que cambió de nombre a Andalucía). - Alanos: Lusitania y Cartaginense. Suevos, Vándalos y Alanos no cumplieron los pactos y el Imperio mandó al rey Visigodo Valia para que les sometiera, lográndolo con Vándalos Silingos y Alanos. Los supervivientes se refugiaron en Galicia con Suevos y Vándalos Asdingos. Una vez sometidos, Roma envió a los Visigodos a Aquitania donde se formó su reino con capital en Tolouse (418) pero Vándalos Asdingos y Alanos con Gunderico al frente se apoderaron de la Bética y las Baleares. En el 429 cruzaron el Estrecho con Genserico al frente e iniciaron la conquista del Norte de África (muerte de San Agustín en Hipona). Firmaron un Foedus con Roma en el 435, pero lo rompieron y conquistaron Cartago, Sicilia y Cerdeña. Roma intentó apaciguarles casando al hijo de Genserico (Hunerico) con Eudoxia, la hija de Valentiniano III. Así y todo, Genserico no reconoció al Imperio y se constituyó como el primer reino independiente. 4.2 Los bárbaros en el norte de la Galia y Gran Bretaña. Retrocedemos al cruce del Rin por parte de Suevos, Vándalos y Alanos en el 406. El Norte de la Galia se vio expuesto al avance de los pueblos colindantes. - Francos (los únicos bárbaros que no perdieron el contacto con su lugar de origen) divididos en: Salios. Costas de Holanda y Bélgica hasta Cambrai, capital Tournai. Foedus con Aecio. Ripuarios. Desde la zona de Colonia se extendieron por el valle del Mosela, Alsacia y Palatinado. - Burgundios. Desde la orilla derecha del Rin hacia Occidente, donde fueron derrotados por Aecio el 436 (muerte de su rey Günther, poema de los Nibelungos). Establecidos en Saboya (443). La situación de Gran Bretaña era diferente, ya que la presencia romana había sido débil e incompleta. Y tras el Muro de Adriano aguardaban Pictos, Escotos y Caledonios. Tras la salida de las tropas romanas en el 407 debido a su traslado a Galia por el conflicto entre el usurpador Constantino y el emperador Honorio: - Costa Occidental desde Cornualles a Escocia: Escotos procedentes de Irlanda. - Costa Oriental: germanos (Anglos, Sajones y Jutos desde Dinamarca). Ante este panorama, los Bretones emigraron hacia la actual Bretaña francesa desapareciendo la presencia romana de la isla. Página 5 de 10 5. EL FINAL DEL IMPERIO DE OCCIDENTE. Los Hunos fueron los causantes de los movimientos migratorios de los pueblos bárbaros. Se relacionaron con Aecio (se educó en la corte del rey Huno Rugila), Estilicón y Arcadio. En el 405 entraron en Hungría desalojando a los Vándalos Asdingos y ocupando sus territorios, logrando que Teodosio II les pagara un tributo anual de 350 libras de oro para aplacarlos. El contacto de los Hunos con los romanos, una cultura superior, les había ido refinando a medida que avanzaban y además tenían a su servicio a muchos personajes de origen germano, griego y romano: - Secretario: Orestes, padre del último emperador de Occidente Rómulo Augústulo. - Embajador: Edeco, padre de Odoacro. En el 446 llegó al poder Atila tras asesinar a su hermano Bleda: - Acechó la parte Oriental del Imperio. - Reclamó a la hermana de Valentiniano III (Honoria) como esposa y que se le diera la mitad del Imperio. - Intentó pactar con el rey visigodo Teodoredo (Toulouse) para formar una pinza con ellos para acabar con el Imperio. Atila cruzó el Rin en el 451, enfrentándose y siendo derrotado en los Campi Mauriaci o Catalaunici por un ejército encabezado por Aecio y formado por contingentes bárbaros (el vándalo Genserico y el visigodo Teodorico I, este último murió). Atila se retiró, pero al año siguiente volvió a la carga, llegando hasta Milán y Pavía, por lo que Valentiniano III se retiró de Rávena a Roma. Atila salió de Italia tras ser comprado por una embajada romana encabezada por el Papa León I. Fue asesinado mientras dormía en el 453, iniciándose entre sus hijos una lucha por la sucesión lo que significó la desaparición en poco tiempo de su imperio. Los Hunos se establecieron en las llanuras al Norte del Mar Negro hasta que fueron aniquilados por los Avaros en el siglo VI. Los sucesos se desencadenaron con rapidez: - Temiendo por su trono, Valentiniano III asesinó a Aecio con sus propias manos (454). - Valentiniano III fue asesinado por un soldado de Aecio (455). - Agonía del Imperio de Occidente con la sucesión de hasta 9 emperadores hasta que el Magister Militum Odoacro depuso a Rómulo Augústulo (4 de septiembre 476). Acto seguido envió las insignias imperiales a Zenón, emperador de Oriente donde residía el único poder de la Antigua Roma. Esta fecha ha sido tomada por la historiografía como el final de la Edad Antigua y del inicio de la Edad Medieval. 6. LOS REINOS BARBAROS HASTA SU DECLIVE. 6.1 Vándalos. Los sucesores de Genserico dominaron el Norte de África desde Ceuta hasta la Tripolitania, incluyendo las Islas baleares, Córcega, Cerdeña y Sicilia. Desataron una cruel persecución religiosa contra obispos y sacerdotes católicos hasta que llegó al trono Hilderico (523), nieto de Genserico y Valentiniano III, ya que era favorable a un entendimiento con los católicos y de un acercamiento a Constantinopla. Hilderico fue depuesto (530) por el bando opuesto capitaneado por Gelimer.Justiniano tuvo que intervenir, lo que supuso el final del reino. 6.2 Visigodos. Los hijos de Teodorico I, muerto en los Campi Catalunici (451) se hicieron con el poder extendiéndose por la Galia e interviniendo en Hispania como federados del Imperio para frenar a los Suevos de Galicia. Página 6 de 10 El rey visigodo más importante del reino visigodo de Toulouse fue Eurico (466-484), que ocupó toda la Provenza hasta los Alpes e inició la conquista de la Tarraconense llegando a ocupar Pamplona y Zaragoza. Al ser arrianos estaban enfrentados a sus súbditos católicos (galos e hispanos). Su hijo Alarico II era a su vez yerno del ostrogodo Teodorico el Grande. Se enfrentó a los francos de Clodoveo en la batalla de Vouillé (507), un lugar cercano a Poitiers, donde falleció. Los ostrogodos ayudaron a retrasar la caída del reino tolosano, pero los francos ejercían una presión constante que provocó el traslado de los visigodos a Hispania donde ocuparon de manera progresiva la Tarraconense (Campi Gothorum) y la Bética. Los visigodos lograron dominar la Península Ibérica tras los reinados de Leovigildo (568) y su hijo Recaredo (586) al: - Incorporar al reino Suevo (585). - Recobrar gran parte de la Bética de manos bizantinas. - Lograr la unidad religiosa tras la conversión al catolicismo en el III Concilio de Toledo (589). 6.3 Francos. Clodoveo, un franco Salio, fue el fundador del reino franco: - Acabó con la presencia de tropas romanas en la Galia tras derrotar a Siagrio (486) y ocupar el territorio situado entre el Somme y el Loira, frontera este último con el reino visigodo. - Los Alamanos se iban extendiendo hacia el Norte (Alsacia-Lorena, Baden-Würtemberg y Baja Baviera) a costa de los territorios de los francos ripuarios. Clodoveo les derrotó en Tolbiac (496) uniendo a las dos ramas de los francos (salios y ripuarios). - Derrotó a los Burgundios, que dominaban la Borgoña, Saboya, Suiza y el Norte de la Provenza. El 25 de diciembre de 498 o 499 fue bautizado por San Remigio, convirtiéndose en el primer rey bárbaro que se convirtió al catolicismo lo que: - Favoreció la integración entre francos y galorromanos. - Afianzó sus conquistas. Por ejemplo, los obispos que estaban bajo el dominio visigodo vieron en él a su salvación por lo que su campaña contra los visigodos se convirtió en una guerra de liberación. - Se inició la transformación de la Galia en Francia. Sus hijos sometieron a Burgundios (523), Turingios (531), Alamanos (536) y Bávaros (555). Clotario I se convirtió en el rey bárbaro más poderoso de Europa, ya que sus dominios se extendían por la Galia (excepto la Septimania) y Germania abarcando desde el Mar del Norte hasta el Mediterráneo y desde el Atlántico hasta el Rin. 6.4 Ostrogodos. Tras la muerte de Atila en el 453, quedaron acantonados en la Mesia Inferior (483) al mando del rey Teodorico que había sido rehén de Constantinopla durante 10 años. Apoyó la candidatura de Zenón a emperador, ganándose el cargo de Magister Militum Praesentialis y Cónsul en Italia con la intención de deshacerse de Odoacro quien fue finalmente asesinado durante un banquete (493). Así pues se asentaron en el Norte de Italia siguiendo el régimen de la hospitalitas y su reino llegó a extenderse del Ródano al Danubio comprendiendo toda Italia y parte de Panonia y Dalmacia. Rávena era su capital. Teodorico el Grande admiró la civilización romana, respetó la ficción imperial y dejó su administración en manos romanas pero también llevó a cabo una hábil política matrimonial para influir sobre el resto de pueblos bárbaros. Arriano, respetó y toleró el catolicismo obteniendo la simpatía del papado aunque al final de su reinado parece que sí hubo problemas religiosos (Boecio). Página 7 de 10 Falleció el 526 y fue sucedido por su nieto Atalarico bajo la regencia de su madre Amalasunta. Víctima de una conjura capitaneada por su primo Teodato quien fue asociado al trono tras desposarse con Amalasunta que fue encarcelada. Su muerte en 535 justificó la intervención de Bizancio. El reino desapareció en 562 entrando a formar parte de Bizancio. 6.5 La Heptarquía anglosajona. La fuente principal para el conocimiento del establecimiento y conquista de Gran Bretaña en el siglo V de Anglos, Sajones y Jutos es Beda el Venerable con su Historia Anglorum (posterior, siglo VIII). Los Bretones, cristianizados poco antes, tuvieron que emigrar a la Bretaña francesa, Cornualles o Gales desapareciendo del resto de la isla. Se crearon 7 reinos paganos que se convirtieron al cristianismo alrededor del 600 y algunos de sus reyes lograron que su reino adquiriera ocasionalmente la hegemonía (pasando a ser denominados Bretwalda): - Sajones: Sussex Essex Wessex - Anglos: East Anglia Mercia Northumbria - Jutos: Kent Irlanda, habitada por los Escotos, no había sido ocupada por los romanos. En el siglo IX sometieron a los Pictos del Norte de Gran Bretaña fundando un reino y dando lugar a Escocia. Irlanda se convirtió en uno de los focos más importantes de difusión del cristianismo durante la Alta Edad Media con San Patricio como impulsor (más que la Iglesia romana). 6.6 Longobardos o lombardos. Asentados durante hasta el siglo I en el área Báltica, se establecieron en la Europa centro-oriental tras las primeras oleadas bárbaras llegando a Panonia como foederati en el siglo VI. El vacío de poder en Italia debido al enfrentamiento entre Ostrogodos y Bizancio facilitó su entrada en Italia (569). Se crearon dos ducados totalmente autónomos, lo que a la larga contribuyó a debilitar el reino: - Ducado de Espoleto, en la Toscana y en Umbría. - Ducado de Benevento, en Campania. Los bizantinos redujeron su presencia a las zonas donde su flota podía llegar: - Exarcado de Rávena. - Pentápolis. - Lacio. - Sur de Italia. Las relaciones con el Papado no fueron fáciles debido a su arrianismo y al poner en peligro su autonomía respecto a Constantinopla. Su monarca más importante fue Liutprando (744) que inició una política de centralización del poder real frente a los dos ducados. Esto alarmó al Papado, quien estrechó relaciones con los Francos para intentar garantizar su independencia. Página 8 de 10 7. LAS FORMAS DE ASENTAMIENTO Y LAS RELACIONES ROMANO GERMANICAS. El sistema de la Hospitalitas romana proporcionaba a los contingentes bárbaros enrolados como foederati o auxiliares: - Alojamiento en casa de un romano. - Manutención a cargo de la Annona militar. El problema surgió cuando se pasó de asistir a los soldados para hacerlo a pueblos enteros que entraban en territorio romano precisamente gracias a esos foedus. Pronto apareció el desabastecimiento por lo que surgió la idea de recurrir a la hospitalitas instalando a esos foederati en los grandes latifundios, concretamente a: - Burgundios. Tierras entre Lyon y Ginebra. - Visigodos. Aquitania y Campi Gothorumen Hispania. - Ostrogodos. Zona de Pavía. La Lex Burgundionum (517) explica de qué manera se repartían las tierras en lotes llamados sortes gothorum, tertia romanorum,… cuando existía un tratado entre ambas partes: - 2/3 de la Terra Indominicata (tierras cultivadas por colonos del latifundio a cambio de una renta) se los quedaba el hospes (huésped). - 1/3 de la Terra Dominicata (tierra controlada por el propietario) también se lo quedaba el hospes. - El resto del latifundio (pastos, bosques, zonas no cultivadas) se repartía al 50% entre propietario y hospes. Cuando no existían tratados entre Imperio y bárbaros, las tierras eran tomadas de manera violenta por los bárbaros a sus propietarios que eran expulsados (vándalos, lombardos, anglos, sajones y jutos). Otros, sencillamente se asentaban en zonas casi despobladas (francos, alamanos y bávaros). 7.1 Integración y aislamiento. Se estima que las personas bárbaras que entraron en el Imperio representaron alrededor del 5% deltotal de la población. Esa inferioridad numérica hizo que vivieran agrupados para no diluir su identidad entre la población autóctona. La prohibición de matrimonios mixtos de Valentiniano y Valente fue bien vista por visigodos y ostrogodos. Elementos diferenciadores: - Lengua. El latín se introdujo entre ellos rápidamente sobre todo entre las clases altas (cortes, órdenes, reglamentos, leyes, …) en los territorios más romanizados, pero las lenguas germánicas penetraron rápidamente en los que habían sido débilmente romanizados (Inglaterra, Norte de Francia, Alemania). - Derecho. Los pueblos bárbaros se regían por leyes orales impartidas por expertos (rachimburgos), lo que no tenía nada que ver con la complejidad del sistema romano. Por ejemplo: Todavía se permitía la venganza (faida), aunque pronto se vio sustituida por la compensación económica (wergeld). Prueba de la inocencia mediante el juramento de cierto número de co- jurados o conjurados, o de la ordalía. La situación se volvió difícil cuando empezaron los juicios entre romanos y bárbaros, primando el principio de la personalidad vs. territorialidad. Las leyes bárbaras fueron puestas por escrito y para que todo el mundo las comprendiera se usó el latín (con la excepción de las anglosajonas). Cada pueblo tuvo sus leyes: Página 9 de 10 Al irse fusionando la población romana con la germánica (ver 7.2) se pasó al principio de territorialidad y se buscó la unificación de las leyes para ser aplicadas a la población por igual. Por ejemplo, en Hispania Recesvinto promulgó el Liber Iudiciorum a mediados del siglo VII, vigente durante muchos siglos. - Religión. Algunos bárbaros eran arrianos (visigodos, ostrogodos, vándalos) y otros paganos (francos, anglos, sajones, jutos) y con la excepción de los vándalos, los arrianos toleraron por norma general a sus súbditos católicos. No obstante, esta diferencia fue usada por algunos: El franco Clodoveo, recién convertido al cristianismo, justificó su lucha contra el arriano Alarico II para conquistar Aquitania. Justiniano justificó sus conquistas frente a vándalos y ostrogodos. Leovigildo justificó su conquista del reino suevo. Algunos monarcas consiguieron unir religiosamente sus reinos, como Recaredo (Hispania) tras el III Concilio de Toledo (589). 7.2 La lenta fusión entre romanos y bárbaros. Hubo una atracción de lo romano sobre lo bárbaro en las zonas con mayor densidad romana (Aquitania, Septimania, Bética), y un respeto por las instituciones romanas: - Teodorico hizo renacer el Senado y nombró cónsules. Además, fue el monarca que mejor asimiló la situación administrativa que se había encontrado, aunque por norma general el sistema administrativo de las ciudades no fue modificado ni sufrió cambios radicales (sobre todo en lo referente a impuestos). - En las ciudades se nombró a un conde godo junto al comes romano. - Imitando el ceremonial bizantino, visigodos y ostrogodos antepusieron a su nombre el de flavius. La clase dirigente romana, y sobre todo los obispos, asumieron la tarea de representar a la antigua población ante las nuevas autoridades. La clase dirigente germana adquirió grandes posesiones fundiarias y continuaron el sistema establecido en las villas romanas. Hubo discrepancias con la noción de Res Publica, ya que los monarcas bárbaros consideraban el reino como una propiedad privada y como tal hacer lo que quisieran con él. El monarca era, además, el único con poder de mando (ban) y de él emanaba la fuerza de protección de los débiles (mund). Algunos pueblos impusieron rápidamente el principio hereditario (todos los reyes francos pertenecían a la familia de Meroveo), pero en otros fue electivo tuviendo muchos monarcas que acudir a los Concilios para ser legitimados. 7.3 La economía. La ruralización iniciada en el Bajo Imperio se aceleró, llegando a ser considerada la explotación de la tierra como única fuente de riqueza. Las villas dominaron, con unas extensiones de entre 2,000 y 4,000 hectáreas y constaban de Ager y Saltus. El manso era una unidad de explotación familiar más pequeña (5-10 hectáreas). Ley bárbara Ley para población de origen romano Legislación específica para romanos Visigodos Código de Eurico Lex Romana Visigothorum o Breviario de Alarico II (506) Merovingios Ley Sálica (510) Francos Ley Ripuaria Burgundios Ley de Gundobaldo Lex Romana Burgundionum Lombardos Edicto de Rotario Ostrogodos Edictum Theodorici Regis (461) Codex Theodosianus (438) Página 10 de 10 En los lugares fácilmente defendibles y en los cruces de caminos se establecieron vici y burg donde se practica el comercio local. La antigua ciudad romana continuó existiendo, pero con vida lánguida. Era el centro administrativo (comes) y la sede del poder religioso (episcopus) y se llevaba a cabo cierta actividad comercial y artesana. En ellas residían los descendientes de las familias senatoriales provinciales, y la actividad comercial solía ser llevada a cabo por mercaderes judíos y los llamados transmarini negotiatores (sirios y griegos). El patrón usado para la moneda era el nomisma bizantino, imitado por los reyes bárbaros, aunque fue poco a poco sustituido por el tremissis que valía 1/3 de su valor lo que denotava el declive del comercio. No hubo acuñación nueva de monedas de oro hasta los monarcas visigodos (Leovigildo), respetando el ponderal de la moneda bizantina. Página 1 de 10 TEMA 2: EL IMPERIO ROMANO DE ORIENTE FRENTE A LA PERSIA SASÁNIDA. 1. LA CREACION DEL IMPERIO DE ORIENTE (395-527). Evolución interna y transformación del Imperio de Oriente entre los siglos IV y VII que llevaron al Imperio Romano anterior a una realidad diferente tras vivir al margen de las invasiones bárbaras al desviarse estos hacia Occidente: - Cristianización en la que la Iglesia se identificó con la sociedad. - Orientalización fomentada por sus relaciones con persas y armenios. La lengua culta era el griego, pero el latín se mantuvo en el ejército. Teodosio dividió el Imperio en el año 395. La parte Oriental correspondió a Arcadio, capital en Constantinopla y el nombre griego del imperio fue Byzantium. Aunque separadas las dos partes de facto, los lazos familiares unieron a las dinastías de Rávena y Constantinopla hasta la extinción del linaje de Teodosio. Teodosio II, hijo de Arcadio, le sucedió, pero al ser menor de edad (5 años) tuvo que ser tutelado por su hermana mayor Pulqueria y su marido Marciano hasta el 416. Fue derrotado por el Huno Atila, al que tuvo que entregar la Panonia, desviando su atención del Imperio Oriental. Fortificó Constantinopla, consiguiendo que ésta fuera inexpugnable durante siglos. Su mayor obra fue el Codex Theodosianus. El partido germánico, formado por los contingentes bárbaros que habían quedado formando parte del ejército, logró ue su candidato León I el Tracio fuera elegido para ostentar el poder. Al no ser un sucesor legítimo, su coronación tuvo que ser sancionada por el Patriarca de Constantinopla lo que a partir de entonces se convirtió en el procedimiento oficial. Su hija Ariadna se casó con un oficial del ejército bautizado como Zenón, a quien le transmitió los derechos al trono. Su medida más controvertida fue la promulgación del Edicto de Unión (Henótico o Henotikon) en 482: - Este edicto intentaba solucionar la querella monofisita, una teoría defendida por Cirilo (Patriarca de Alejandría) que defendía que la naturaleza de Cristo era única y que había nacido de la fusión de sus dos naturalezas en una sola persona. Esta teoría era seguida por la población de Egipto, Siria y Bizancio, pero había sido condenada por el Concilio de Calcedonia (451). El Henótico fue redactado por el Patriarca de Constantinopla Acacio, y condenaba tanto a Nestorio y Eutiques (postulantes de la teoría monofisista) como al Concilio de Calcedonia, e imponía el Credo del Concilio de Nicea(325). Quedaba de manifiesto la división entre ambos patriarcados (Alejandría y Constantinopla). Este decreto no satisfizo a ninguna de las dos partes ya que: Los monofisitas continuaron alejados del Emperador. El Papa Félix III y el Patriarca Acacio se enfrentaron por la primacía, en lo que sería el primer cisma entre Roma y Constantinopla. Ariadna, la hija de León I, volvió a transmitir los derechos al trono a su segundo marido Anastasio I, un miembro de la guardia personal de Zenón que tuvo que enfrentarse al hermano de Zenón y a algunos enemigos externos. Gracias a una notable reforma económica dejó, a su muerte, una cantidad considerable de reservas en metálico que sirvieron posteriormente a la obra de Justiniano. Su sucesor fue Justino I (518-527), capitán de la guardia palatina de origen campesino. Su reinado fue breve y su medida más importante fue la abolición del Henótico y el restablecimiento de las relaciones con el Papado mediante una nueva fórmula de unión (519). Con él dio comienzo la dinastía que condujo al Imperio de Oriente a su mayor apogeo político, momento que sucedió con la llegada al poder de su sobrino Justiniano y su idea de restauración del Imperio Romano de los Césares. Página 2 de 10 2. LA EXPANSION DEL IMPERIO BAJO JUSTINIANO (527-565). 2.1 Gobierno y organización territorial del Imperio. La obra legislativa. A Justino le sucedió Justiniano, quien intentó la restauración del Imperio Romano de los Césares. Una restauración que hay que entender desde el cambio que había sufrido dicho concepto, mucho más próximo al oriental y más concretamente persa. El poder pasaba de ser concedido por el pueblo a ser otorgado por designio divino: de emperador a autócrator. Esta época estuvo compuesta por: - Grandes victorias bélicas, pero también numerosas y flagrantes derrotas. - Crisis económicas por los gastos motivados por el proyecto de restauración. - Cuestiones coyunturales (terremotos y la gran epidemia de peste bubónica de 542). Justiniano Se rodeó de personajes extraordinarios: Teodora (esposa), Triboniano (jurista), Juan de Capadocia (artífice de la reforma administrativa), y los generales Narsés, Belisario, Mundo y Liberio. En política exterior frenó a los pueblos eslavos que, ante el empuje de los Avaros, se habían asentado en los límites del territorio bizantino y se habían instalado en Macedonia y Mesia. También firmó la paz con los persas tras rivalizar por el dominio de los estados árabes de los Gasaníes y Lajmíes o Himrayitas y en el control de las rutas comerciales. Inició la conquista de Italia aprovechando el asesinato de Amalasunta, hija de Teodorico. Belisario fue el encargado de la expansión de los dominios bizantinos y de la restauración del imperio logrando numerosas victorias para Justiniano. Los 5 primeros años de gobierno fueron malos. El suceso más importante fue la llamada Revuelta de Nika (532) en la que la plebe de Constantinopla se rebeló durante las carreras del hipódromo por su insatisfacción ante las respuestas del emperador a sus quejas referidas a: - Los crecientes impuestos. - La paz humillante impuesta por Persia. Durante 6 días la plebe saqueó la ciudad e incluso Justiniano pensó en huir, cosa que evitó su esposa Teodora. Belisario fue el encargado de sofocar la revuelta, y la represión fue feroz. Consecuencias: - Expropiación de los bienes a los patricios que habían participado en la revuelta. - Reforma administrativa llevada a cabo por el prefecto del pretorio Juan de Capadocia entre 535-536: Los obispos se convertían en los jueces de los administradores provinciales. Se parcelaron las provincias demasiado extensas para evitar el aumento de poder de sus gobernadores. El cuestor Triboniano propuso a Justiniano recopilar las leyes existentes en un solo código que complementara el de Teodosio II y los dos anteriores de Gregorio y Hermógenes en latín. Para ello se nombró una comisión que reunió a los 10 juristas más eminentes (Juan de Capadocia entre ellos). La obra inicial se terminó en 529 (Codex Iustinianeus) pero fue necesaria una reedición en 534 (Codex Repetitae Praelectionis). De manera paralela se compilaron las sentencias de los juristas más famosos y tras 3 años de trabajo se publicó el Digesto o Pandectae. En 533 se había publicado las Institutiones y las Novellae (estas últimas en griego o en bilingüe, ya que era nueva legislación). Consecuencias: - Adecuación del Derecho Romano de Occidente a la realidad de Oriente. - Esta obra fue vital para la cristalización de los derechos germánicos del Occidente europeo. - Este trabajo constituye el llamado Corpus Iuris Civilis, fuente fundamental del derecho bizantino durante siglos. - El legado jurídico de la Roma cristiana se salvó para la Europa medieval y sería la base para el redescubrimiento del Derecho Romano de los siglos XII y XIII. Página 3 de 10 Gracias a esta obra legislativa conocemos en detalle las instituciones del Imperio: - Emperador (Imperator en latín y Autócrator o Basileus en griego). Personificaba al Estado, detentaba el poder supremo, era el jefe del ejército y se le consideraba un santo al nivel de los apóstoles. El cargo era teóricamente electivo y no hereditario, aunque los encargados de dicha elección eran la Corte, el ejército y el Senado de Constantinopla. Con el tiempo se consolidó la designación de sucesor por parte del Emperador siempre que se contara con el apoyo del ejército y del Senado. Vivía en el Sacro Palacio (o corte), centro administrativo y sede de todos los Consejos y oficinas, y se rodeaba de un ritual y etiqueta rigurosa y fastuosa. - Emperatriz (Despoina, o señora, ya que era la mujer del Despotes o señor). Ostentaba los mismos títulos y privilegios que su esposo. Vivía en el Gineceo del Sacro Palacio junto a las damas de la corte, sus hijos y sus eunucos. Ejercía una gran influencia sobre el Emperador. - Consistorio del Príncipe, formado por: Jefes de distintos servicios. Consejeros del Estado (Comites Consistoriani). El primer dignatario de la jerarquía civil era el Magister Officiorum, o ministro del Interior y jefe de la casa imperial. De él dependían: Oficinas (Scrinia). Cuerpos de la guardia palatina (scolae). Correos públicos. Arsenales. Policía estatal. Inspección administrativa de los ejércitos fronterizos. Otros cargos importantes: Quaestor Sacrii Palatii, o jefe de la cancillería. Comes Sacrarum Largitionum, o jefe de la hacienda del que dependían una serie de funcionarios distribuidos en las provincias (Comites y Procuratores). Comes Rerum Privatarum, administrador de los fondos personales del emperador de quien dependían los contables. Praepositus Sacri Cubiculi, o jefe de las habitaciones imperiales. Solía ser un eunuco que dirigía a los servidores de la corte. Magistri Militum, generales en jefe de los ejércitos imperiales. Por debajo de estos estaban los generales (Duces), los jefes de tropas provinciales, los protectores y los instructores. Exarcas de África (hasta la conquista árabe de 698) y de Italia (hasta la conquista lombarda de 751), que pasaron de ser meros jefes de tropas a gobernadores generales con plenos poderes. - Organismos consultivos: Senado de Constantinopla. Asambleas generales, reunidas en el hipódromo de Constantinopla. En las grandes ciudades existían además las Curias Municipales presididas por el Prefecto de la ciudad (Eparca) o el gobernador. Fuera de la organización Estatal propiamente dicha estaban los demos, derivados de los antiguos partidos del hipódromo convertidos en verdaderas organizaciones políticas (Azules, base senatorial y terrateniente, y Verdes, ricos comerciantes y miembros de la burocracia y administración de la corte). Página 4 de 10 2.2 La economía bizantina. - Agricultura. Era la base económica del Imperio, explotada del mismo modoque Roma (sistema e instrumental). Se mantuvo la tríada mediterránea con pequeñas modificaciones sobre las especies. Existían dos tipos de hábitat rurales: Aldeas (Kome o Jorion). Grandes fincas. Aparte existían: Enfiteutas, o trabajadores a censo cuyos derechos de cultivo se mantenían durante varias generaciones o podían ser traspasados. Cultivadores de tierras ajenas independientes. Colonos dependientes o Georgoi (colonato). Era la forma más usual y poco a poco se fue aproximando a la servidumbre ya que quedaron adscritos a la tierra cultivada (enarografoi), especialmente tras la peste de 542. - Comercio. Constantinopla era el gran centro del comercio internacional, aunque también se distinguían Siria y Egipto. Existía un monopolio estatal sobre: Importación de artículos de lujo. Industrias de alimentos básicos (pan). Ciertas industrias suntuarias (brocados). Algunos comerciantes, que actuaban como agentes estatales (Comerciarii) adquirían ciertos productos en las aduanas (seda, especias, esclavos, perfumes) y los revendían. Las ganancias eran elevadas a pesar de estar gravados por numerosos impuestos (La Vectigaliae era un impuesto indirecto sobre la venta y circulación de bienes y mercancías) y con el tiempo se convirtieron en banqueros y cambistas. Se conocen los primeros tipos de sociedades comerciales: Koinopraxia, o asociación total. Asociación para negocios puntuales en la que el reparto de pérdidas y ganancias era a partes iguales. Solían ser 2 socios y la renuncia de cualquiera de ellos significaba la disolución de la sociedad. 2.3 Las cuestiones religiosas. En Oriente, la Iglesia estaba mediatizada por el Estado a través de su política religiosa. La cuestión más conflictiva fue el conflicto entre Monofisitas y Diofisitas: - Diofisismo. Los postulados del Nestorianismo defendían que Cristo tenía dos naturalezas, una divina y una humana, completas pero separadas. - Monofisismo. El monje Eutiquio (451) y el patriarca Dióscoro de Alejandría (454) propusieron que la unión de las dos naturalezas en Cristo es tan íntima que no sólo se garantiza que la persona de Cristo es una si no que también hace de ellas una sola naturaleza. La naturaleza humana quedaba absorbida en la divina. El monofisismo fue condenado, pero luego aceptado primero en un Sínodo y luego en el Concilio de Éfeso (449) convocado por el Emperador quien tenía tendencias monofisitas. Este Concilio fue presidido por el propio Dióscoro tras habersele negado la presidencia a los legados del Papa León I. En 451 Pulqueria y Marciano convocaron el Concilio de Calcedonia, pero los legados del Papa León I ocuparon su presidencia y se procla ó un Señor con dos naturalezas (sustancias) en una persona, sin ezcla ni separación . Dióscoro fue depuesto y exiliado, y ade ás los onofisitas elevaron sus Página 5 de 10 protestas. La posición del patriarcado de Alejandría quedó rebajada, y junto a la Iglesia de Egipto rechazaron Calcedonia. Los monofisitas se hicieron fuertes en Alejandría y en Antioquía, pero bajo el emperador León I (457- 474) tuvieron que abandonar sus patriarcados que les fueron repuestos a la muerte de este y trasladándose el problema al plano político. Zenón intentó con el Henoticón (482) regresar al estado anterior a Calcedonia. Pero la excomunión del patriarca Acacio, consejero de Zenón, provocó la ruptura completa entre la Iglesia de Oriente y la de Occidente (Cisma Acaciano, 484-519). Durante este cisma la doctrina monofisita se difundió rápidamente por todo Oriente y a pesar del restablecimiento de la paz en 519 con Justino, el monofisismo se convirtió en un problema para la unidad del Imperio. Justiniano también intentó la reconciliación con 2 edictos y el V Concilio Ecuménico de Constantinopla (553) pero todo ello no fue reconocido por Roma. La emperatriz Teodora intervino como partidaria de los monofisitas. 2.4 La primera edad de Oro: renovación cultural y artística. Durante el gobierno de Justiniano se erigió el templo de Santa Sofía, construcción en la que se emplearon unos 10,000 obreros durante 6 años (532-537) y que fue diseñada por Isidoro de Mileto y Antemio de Tralles (este último, gran matemático aparte de arquitecto). Otras construcciones: - Constantinopla: Santa Irene y la cisterna de agua. - Murallas en Darás y Palmira. - Fortificaciones en las Termópilas. - Rávena: templos de San Vital y San Apolinar Nuevo. En literatura destacaron los monjes orientales: - Juan Clímaco (Scala Paradisi). - Juan de Éfeso (Historia Eclesiástica). 3. LOS SUCESORES DE JUSTINIANO HASTA HERACLIO. Al morir Justiniano el Imperio estaba exhausto económicamente, y algunos territorios se perdieron ya que los lombardos tomaron la mayor parte de Italia dejando a los bizantinos la franja entre Roma, Rávena, Apulia, Calabria y Sicilia. Además, grupos de eslavos se asentaron en Grecia tras las migraciones de Ávaros y Eslavos. El gobierno de Mauricio (582-602) tuvo gran trascendencia por la creación de los exarcados de Italia y África, uniendo de nuevo en la figura de los Exarcas el poder civil y el poder militar. Se crearon unas circunscripciones excepcionales en las que el poder civil y el militar también estaban unidos en la persona del general gobernante (Stratego), precedentes del sistema de Themas adoptado en el siglo VII. Mauricio fue eliminado por Focas (602-610) durante una rebelión causada por: - Debilidad imperial. - Aumento del poder del Senado. - Descontento del pueblo y del ejército. Los persas consideraron su pacto con Mauricio roto y surgieron de nuevo como amenaza, lo que llevó a su vez a la sublevación del Exarca de Cartago y a la instauración de los Heráclidas (610). Página 6 de 10 4. LA PROVINCIA BIZANTINA DE HISPANIA. El noble Atanagildo se levantó en Sevilla debido a la elección de Agila para el trono visigodo, quien estaba enfrentado con las grandes familias de la Bética. Atanagildo pidió auxilio a Justiniano a través de Ceuta, viendo en ello la posibilidad de reincorporar Hispania al Imperio. Mandó una potente escuadra desde Sicilia al mando de Félix Liberio, gobernador de la provincia de África que había recibido la petición de auxilio. La guerra duró 5 años hasta que Agila fue asesinado por sus propias tropas (555), coincidiendo también con el fin de la lucha en Italia. Justiniano firmó un tratado con Atanagildo, pero se desconoce su contenido. Liberio ocupó una parte importante del litoral sudoriental y estableció el dominio bizantino en Hispania desde Cartagena hasta Córdoba, y hacia el interior hasta Medina-Sidonia y Baza. Se había formado la provincia de Hispania, incluyendo las Baleares. Fue nombrado Magister Militum Hispaniae actuando como gobernador y jefe militar, por lo que las administraciones civil y militar dependían de él. El control bizantino de Córdoba se vio interrumpido en 572 por la conquista de Leovigildo. Entre 579- 584 fue recobrada tras pagar a los enemigos que controlaban la ciudad. Durante este período Cartagena fue la capital. Los puertos de Cartagena y Málaga fueron ampliados y fortificados, constituyéndose en un gran emporio comercial de productos de lujo. Los visigodos fueron culturalmente muy influenciados por los bizantinos, sobre todo en temas políticos y legislativos, aparte de artística, urbana y militarmente. Finalmente, una serie de ofensivas llevadas a cabo por Sisebuto (612-621) y Suintila (621-631) acabaron con la presencia bizantina en Hispania. 5. EL IMPERIO ORIENTAL Y LOS PUEBLOS ESLAVOS. Se les menciona por primera vez cuando Justiniano empezó a redefinir la frontera del Danubio y de los Balcanes. Eslavo proviene del término Sklabenoi, usada durante el siglo VI para designar a dos pueblos de lenguaje similar: esclavenos y antes. Según la Guerra Gótica de Procopio, los eslavos se asentaron en buena parte de los Balcanes donde fueronasimilando la cultura bizantina. Bizancio, por su parte, intentó usarles como mercenarios para atacar a los persas y fueron poco a poco siendo aceptados por la sociedad bizantina. La expansión eslava hacia el Sur fue frenada en parte al instalarse los ávaros en el Danubio Medio, como consecuencia de la marcha de los lombardos hacia Italia (˜565). Esos eslavos fueron sometidos al poder de los ávaros y entonces se produjeron más incursiones: - Eslavos huyendo de los ávaros. - Incursiones combinadas de ávaros y eslavos bajo el mando de los primeros. El primer establecimiento propiamente eslavo en tierras griegas fue fundado durante la gran invasión del año 580, momento en el que Bizancio casi perdió el control de la península balcánica. Los pobladores fueron deportados al Norte del Danubio para contribuir a colonizar el territorio ávaro. Hacia el 600 ya se había perdido todo el territorio al Norte de Salónica, ya que se estaba luchando en dos frentes a la vez (eslavos/ávaros y persas). En el año 626 los ávaros fueron derrotados por los Bizantinos frente a los muros de Constantinopla, sublevándose contra ellos: - Varias tribus eslavas, algunas bajo el mando de Samo, un mercader franco, incluso logrando independizarse y extendiendo su dominio por el Danubio Superior y Medio (capital en Nitra). - Los descendientes de los deportados, y tras vencer a los ávaros regresaron a sus lugares de origen guiados por Kuver (640). El reino eslavo fue repartido entre los hijos de Samo, pero después (679) cayeron bajo el dominio del pueblo búlgaro durante su desplazamiento por la presión de los jázaros. Posteriormente surgiría el importante reino de Bulgaria por la unión de Búlgaros y Eslavos meridionales gracias a Asparuk. Página 7 de 10 6. EL IMPERIO PERSA SASANIDA. 6.1 La dinastía Sasánida. Esta dinastía fue fundada por Ardashir I, quien lideró una coalición que destronó al último rey parto Ardavan en torno al siglo III. Su obra fue continuada por su hijo Sapor I y Sapor II. La lucha incansable contra el Imperio romano tuvo cierto descanso tras la caída de Roma, ya que la política exterior basculó entre el enfrentamiento y la amistad con el Imperio Oriental. En 421, por ejemplo, se firmó un tratado por el cual ambos imperios se comprometían a no edificar nuevas fortalezas en la frontera. El Imperio Sasánida entró en una crisis moral y económica a finales del siglo V y se basculó entre la persecución y la aceptación del cristianismo, al mismo tiempo que dentro del zoroastrismo se sucedían las disputas. El gobierno más fructífero fue el de Cosroes I (531-579), que accedió al trono tras ejecutar a sus hermanos. Fue muy belicista y durante su reinado conquistó Yemen, Siria y Antioquía (540) y le arrebató el Cáucaso a Bizancio con la ayuda de los Hunos Saberios. Para recuperar la zona, Bizancio tuvo que pagar 30,000 onedas de oro anuales. Tras diversas refor as internas (catastro, refor a fiscal,…) inició la construcción de grandes murallas en las cuatro fronteras: - En las llanuras de Gorgán contra los Heftalitas. - En los pasos del Cáucaso. - En el Sudoeste y Sudeste, la llamada muralla de los árabes. Su administración territorial se basaba en: - Los dehcanes, caballeros que poseían un poblado. - Utilizó familias enteras como colonos en las fronteras en un sistema que se anticipaba a los themas bizantinos. Su sucesor fue su hijo Hormizdas IV, pero no tenía las dotes de su padre. Favoreció a los cristianos, lo que le enfrentó a la nobleza y clero provocando en última instancia el levantamiento del general Bahram. Bahram era de la anterior casa imperial, y tras instaurar en el poder a Cosroes II le depuso y se autoproclamó soberano. Cosroes II se refugió en la corte bizantina, compartiendo el Imperio hasta que Bahram fue asesinado en 591. Entonces intentó consolidar su poder en el Golfo Pérsico ayudado por los lajmíes. Cuando el emperador Mauricio fue asesinado en Calcedonia (602) y Focas llegó al poder, Cosroes II se erigió en su vengador llegando incluso a amenazar Constantinopla (620). Heraclio pudo controlar su expansión en el 628. Cosroes II fue destronado y sustituido por su hijo, quien tuvo que firmar una paz humillante y evacuar Armenia, Siria, Egipto y parte de Mesopotamia. El Imperio empezó a debilitarse y llegó a su fin tras la sucesión de 12 reyes en menos de 5 años. El último de ellos, Yezdigerdes III, fue derrotado por los árabes en Kadesiya (637) quienes habían sido mercenarios persas y conocían bien al ejército sasánida. Tomaron Ctesifonte y ocuparon casi todo el país (644). Yezdigerdes huyó y fue asesinado en el 651, desapareciendo su dinastía y pasando sus territorios a formar parte del califato islámico. 6.2 Organización territorial y administrativa del Imperio Persa. El Imperio Persa era esencialmente de carácter urbano y su maquinaria administrativa era una de las más importantes del mundo, aunque mantuvo el equilibrio con las poblaciones nómadas (Kurd) a quienes usó como fuerza militar (dailamitas, gilani y kermani). El territorio estaba compuesto por: - Persia. - Territorios circundantes: Mesopota ia, Ar enia, Georgia,… Administrativa y militarmente estaba dividido en 4 regiones (kust). Al frente de cada una: Página 8 de 10 - Poder civil y militar ejercido por un general (spahbed). Al frente de las cuatro subdivisiones había un general en jefe (Iran spahbed). - Asuntos religiosos controlados por un sacerdote zoroastra (rad). Cada uno de esos 4 distritos o kust, que no eran fijos y dependían del período y de las fuentes que los describieran, contaba con una oficina gubernamental (divan) y una ceca. Cosroes I completó la reforma y añadió un registro para el ejército. La siguiente subdivisión era la provincia (shahr), administrada por: - Reyezuelo local o gobernador nombrado por el rey. - Juez-sacerdote (mowbed). Las provincias se dividían a su vez en rustags, mancomunidades de pueblos (deh). Los jefes de los poblados eran los dehcanes y administraban la justicia y los tributos mediante un servicio de correo. Algunos territorios fronterizos se constituían en satrapías, con un sátrapa o margrave al frente. Pero los que eran de dominio directo se denominaban ostan y al frente tenían un ostandar. Al frente de todo, en la corte, se hallaba el rey de reyes (shahan shah), y de arriba a abajo por orden jerárquico: - Hijo principal de entre los príncipes. - Primer ministro. - Generales. - Juez entre los jueces, sustituido a partir del siglo VI por el mowbed. - Consejeros de la corte. - Quilarcas (mandos militares). En cuanto al ejército, estaba compuesto por caballería e infantería. Se utilizaban elefantes desde los que los arqueros podían lanzar sus flechas protegidos y con mayor campo visual. 6.3 La vida económica. a) Agricultura y ganadería. La propiedad de la tierra se dividía en: - Tierras del Estado. - Tierras de fundaciones (normalmente templos). - Tierras de propiedad colectiva. - Tierras de fundaciones religiosas. A menudo se usaba mano de obra esclava, tanto en las tierras del Estado como en las de propiedad colectiva. Hubo numerosos pleitos por la propiedad de los canales de riego, ya que esta era la que determinaba el control del agua. Las 2 provincias más fértiles eran el Juzestán e Iraq: caña de azúcar, arroz, ... El pastoreo era llevado a cabo en las tierras más altas por los nómadas, quienes también pagaban impuestos al Estado. b) Comercio y artesanía. Claramente contribuyó al desarrollo de la artesanía la importante urbanización de la Persia de esta época, sobre todo en los sectores: textil, vidrio (al ser deportados trabajadores sirios tras su conquista) y metal. Se usaron ingenieros romano- bizantinos capturados durante las guerras. Este auge de la artesanía contribuyó a su vez a favorecer el comercio, aprovechándose de su situación intermedia en las rutas entre Europa y Página 9 de10 el lejano Oriente. El comercio estaba a cargo de compañías y comunidades religiosas que formaban asociaciones comerciales, pero de nuevo tanto la actividad comercial como la artesanal eran de poca consideración social, quedando a menudo en manos de sogdianos, judíos y cristianos. Las ciudades más importantes eran: - La capital, Ctesifonte. - Hamadan, como encrucijada terrestre. - Siraf, gran puerto en el Golfo Pérsico. En cuanto a las rutas marítimas: - Los sasánidas controlaban las dos orillas del Golfo Pérsico. - Se aseguraron las rutas marítimas hacia Sri Lanka y Malasia, donde existían colonias de mercaderes. - Consiguieron el monopolio de la seda en los puertos del Sur de China, a expensas de los etíopes. Prueba de ello son las monedas persas encontradas en los yacimientos de los siglos V a VII, y la existencia de templos zoroástricos. En cuanto al transporte terrestre: - Persia ocupaba un lugar central en la Ruta de la Seda, y pronto se establecieron talleres en Susa, Gundeshapur y Shushtar. - Las rutas de Armenia se habían vuelto peligrosas por el enfrentamiento con los bizantinos, por lo que se buscaron rutas alternativas hacia Mesopotamia y Arabia. A pesar de no admitirse comerciantes bizantinos en el interior de Persia y viceversa, sí lo eran en las ciudades limítrofes y puertos de otros países. c) Economía monetaria. Pronto se abandonó la economía de intercambio y desde Palacio se empezó a: - Emitir moneda. Desde Persis, la moneda llegaba a los mercados del Golfo. Los dracmas sasánidas fueron imitados en India, y el patrón oro fue imitado en Bizancio a través de los dinares. Las mejores minas de plata eran las de Panjshir, en el Jurasán. - Estandarizar pesos. 6.4 Las religiones de los persas. La religión estatal era el zoroastrismo, dualista y en la que luchaban entre sí los dos hijos gemelos de Zurvan (dios del tiempo), Ormuz (luz) y Ahrimán (tinieblas). Se adoraba al sol y a la luna y a otros elementos naturales como el agua, la tierra y el fuego, este último en los conocidos como templos del fuego. El Avesta era su libro sagrado. La organización sacerdotal ascendió a partir del siglo III. Existía otra religión autóctona, el maniqueísmo. Es una doctrina gnóstico-dualista surgida a través del profeta Mani, nacido en el seno de una familia noble de Ctesifonte a principios del siglo III. Trató de combinar la tradición mesopotámica, la irania, la judía, la recién nacida y expandida religión cristiana, y el budismo tras haber entrado en contacto con el tras su huida a la India alrededor de 240. Regresó a Babilonia, gozando del favor de Sapor I y su doctrina se expandió por Siria, Egipto e Irán Oriental, siendo condenado finalmente a muerte por los magos en 276. Su doctrina se basaba en que la lucha entre la luz y la oscuridad se desarrollaba en 3 etapas: - Al principio, estos dos reinos estaban separados y cada uno tenía su propio soberano. - Una parte del mundo de la luz fue a parar al de las tinieblas, mezclándose y surgiendo así el cosmos. - La meta final del proceso será la separación, de modo que no se puedan volver a mezclar. Página 10 de 10 En su sincretismo encontramos que Jesús era el lu inoso , una de las divinidades de la luz ue ue conducía a las almas al reino de la luz. En el Imperio Persa había otras religiones minoritarias, aceptadas salvo en los momentos más críticos del conflicto con el Imperio Romano de Oriente: - Nestorianismo. Establecido en Mesopotamia y Norte de Irán desde antes del Concilio de Éfeso, había surgido en la zona de Edesa a partir del apostolado de Tomás. Su cabeza visible era el katholikos, primero dependiente de Antioquía y luego independiente (residía en Ctesifonte y luego se trasladó a Bagdad en época abbasí). Se convirtió en la única versión del cristianismo aceptada en Persia en 480. - Iglesia Ar enia. Fundada por el apóstol Addai, oriundo de Edesa. Gregorio el ilu inador fue su primer katholikos durante el siglo III y estableció su sede en el monasterio de Ech-miadzin (Rusia). El siglo V fue el momento de su consolidación y se vinculó fuertemente con la familia real armenia. Su expansión popular fue gracias a la invención del alfabeto armenio y la traudcción de las escrituras al idioma armenio. Se mantuvo independiente de la ortodoxia bizantina por el aislamiento geográfico de Armenia gracias a las luchas entre Grecia y Persia. No obstante, bajo Heraclio se produjo un intento de unión con la Iglesia Ortodoxa que no cuajó. Había dos tipos de sacerdotes: Los célibes (vardapets), dependientes de un convento o encargados de una tarea pastoral importante. Los casados, a cargo de las iglesias. - Judaísmo. La relación con los sasánidas era tan próxima que éstos se llegaron a casar con mujeres judías y algunos descendientes suyos se convirtieron en reyes judíos, puesto que la religión la transmitían las mujeres. La visión condescendiente de los monarcas sasánidas hacia esta minoría se puede explicar en parte gracias a la influencia en la configuración de la ideología propia del imperio a través de los relatos bíblicos sobre los persas (p.e. el Libro de Esther). Página 1 de 8 TEMA 3: LA EXPANSIÓN DEL CRISTIANISMO Y LAS PRIMERAS HEREJÍAS. 1. LA ORGANIZACIÓN Y JERARQUÍA ECLESIÁSTICAS. Hay dos ejes centrales en la expansión del cristianismo primero dentro del Imperio Romano y después de las conquistas bárbaras fuera de él: - 313. Libertad de culto (Constantino), pasando al mismo rango que las otras religiones. - 380. El cristianismo fue proclamado religión oficial del Imperio (Teodosio). Esta proclamación supuso de facto la unión del poder político y los representantes religiosos. Los obispos pudieron ejercer, pues, tanto el poder religioso como el civil (derecho de familia, gracias al Codex Theodosianus). Su estructura organizativa y administrativa se basó en la organización imperial: - Obispo. Episcopus, (literalmente el vigilante), controlaba desde la civitas todo el territorio adscrito a la misma (diócesis). - El clero, que asistía al obispo, estaba compuesto por: Sacerdotes (presbiteroi, ancianos). Diáconos (servidores). Durante el siglo IV nació la costumbre canónica del celibato eclesiástico, aplicado diferentemente en Oriente y en Occidente: Oriente: diáconos y sacerdotes se podían casar, pero los obispos no. Occidente: León I impuso el celibato a todos, pero su cumplimiento fue muy irregular durante toda la Edad Media. Las diócesis se dividieron en circunscripciones territoriales más pequeñas (parroquias) para ayudar durante el proceso de evangelización de las zonas rurales o pagus (de ahí el nombre pagano). El proceso se inició durante los siglos II-III y se completó a finales del IV. Las primeras zonas que fueron divididas en parroquias fueron Hispania, Septimania y Aquitania. Italia lo fue durante el siglo VII. Una agrupación de diócesis formaba una provincia eclesiástica y solía coincidir con la provincia civil, con un metropolitano (arzobispo en Occidente) que: - Era superior jerárquicamente al resto de obispos. - Presidía y consagraba a los obispos de su provincia eclesiástica. - Convocaba los concilios provinciales. - Reunía a los obispos de su provincia en sínodos en los que se acordaban las directrices a seguir por todos en lo referente a moral, ritos y todo lo relacionado con la vida religiosa. Durante los últimos días del Imperio la civitas fue perdiendo importancia, ya que las clases dirigentes preferían vivir en las villas. Así pues, en numerosas ocasiones los obispos se convertían en los únicos representantes de la población tanto en el terreno religioso como en el civil. La ciudad se convirtió en el centro de la vida religiosa, que giraba en torno al obispo y a la catedral (donde se custodiaban las reliquias de los santos proporcionando milagros, curaciones, protección, asilo y beneficencia),y pronto se extendió su poder sobre las poblaciones (vici) que formaban la diócesis. Las autoridades civiles tenían que contar con las religiosas, y pronto estas últimas se dieron cuenta de que tenían que controlar su elección al ostentar en numerosas ocasiones más poder que p.e. los comes. En algunos lugares se formaron verdaderas familias episcopales y el cargo se transmitía de padres a hijos, lo que se intentó parar con la implantación del celibato. Muchos obispos pertenecían a la clase senatorial y cuando se morían cedían su patrimonio a la Iglesia, por lo que esta aumentaba su riqueza. Otra manera de financiación venía de las continuas donaciones por parte de los fieles. Página 2 de 8 2. LAS IGLESIAS ORIENTALES: LOS PATRIARCADOS. EL PRIMADO DE ROMA. El Imperio de Oriente estaba dividido administrativamente en 5 Diócesis (no confundir con las eclesiásticas, pero más o menos coincidían con ellas). Estas diócesis formaron los siguientes patriarcados religiosos: - Patriarcado de Alejandría, formado por la diócesis de Egipto (6 provincias). - Patriarcado de Antioquía, formado por la diócesis de Oriente (15 provincias). - Patriarcado de Constantinopla, formado por las diócesis de Asia, Ponto y Tracia. La estructura eclesiástica del Imperio fue establecida en el Concilio de Constantinopla (381). En éste Concilio se estableció la independencia de los obispos, ya que no podían interferir en los asuntos de las otras diócesis. En este Concilio el número de patriarcados aumentó a 5 (4 en Oriente y 1 en Occidente): - Roma. - Constantinopla. - Alejandría. - Antioquía. - Jerusalén. a) Patriarcado de Alejandría. Remontaba sus orígenes al apóstol San Marcos y gozó de gran prestigio y poder político, especialmente durante los siglos V y VI. Foco principal del pensamiento cristiano. Destacó en la defensa de la ortodoxia frente a los arrianos (San Atanasio). Comprendía más de 100 obispados, y fueron conocidos como los nuevos faraones de Egipto. b) Antioquía. Remontaba su origen a San Pedro. Posición discutida por el obispo de Jerusalén y por Chipre. c) Constantinopla. Considerada la nueva Ro a , era la capital del I perio de Oriente. El patriarca de Constantinopla fue ascendido a un rango equivalente al del Papa de Roma en el Concilio de Calcedonia (451), disposición nunca aceptada por el romano. Tuvo que soportar muchas injerencias por parte de los emperadores bizantinos. Se convirtió en el gran rival de Roma tras la desaparición de los otros 3 patriarcados orientales (Alejandría, Antioquía y Jerusalén) por las conquistas musulmanas del siglo VII. d) Roma. Funda su autoridad directamente sobre San Pedro, y el Papa de Roma es el obispo de la Sede Apostólica . En Calcedonia se le reconocío una pri acía honorífica por este hecho. Durante estos siglos trató de mantener su independencia con respecto al poder civil, y también trató de defender la pureza de su dogma. La mayoría de reyes bárbaros (arrianos) desconfiaban del poder del Papa sobre los obispos católicos de sus reinos y por ello también trataron de mantener su independencia con respecto a Roma, aunque lentamente su autoridad se fue afianzando a lo largo de los siglos gracias a la acción evangelizadora. El cénit se alcanzó con san León I Magno, quien: Se esforzó en fijar la ortodoxia en Calcedonia (451). Defendió Roma frente a Atila (452). Evitó numerosas muertes durante el saqueo de Roma por el vándalo Genserico (455). Los Papas de Roma, debido a su lejanía del poder imperial, empezaron a perfilar la doctrina conocida co o la de las dos espadas y ue conduciría con el tie po a un cho ue frontal entre los poderes que se habían empezado a delimitar en Roma: los espirituales para el Papa y los temporales para el Emperador. El poder del Emperador sobre los patriarcas de Constantinopla era absoluto y nunca se desarrolló esta teoría. Página 3 de 8 Los eclesiásticos gozaron de numerosos privilegios, aunque siempre bajo la protección del poder civil, lo que significaba la excusa para inmiscuirse en los asuntos de la Iglesia (elección de cargos, opinión en te as teológicos,…): - Exención en el desempeño de cargos municipales (eran onerosos para sus titulares). - Sujetos al derecho eclesiástico, y no al civil. - El delito de herejía se equiparó al de crímen de Estado. - Poder arbitral de los obispos en los litigios públicos. - … Concretamente, la elección de los obispos inicialmente era cosa del pueblo y del clero, pero al estar dicha elección rodeada de numerosas cuestiones (políticas, religiosas y económicas) muchas veces terminaba en desórdenes. Por este motivo intervino la autoridad civil: - En Constantinopla, los patriarcas eran elegidos casi siempre por el Emperador. - En Roma, los Papas eran elegidos tras grandes presiones y se debía conseguir la aprobación del Emperador. Más tarde se modificó la costumbre para ser sólo necesario el comunicar el nombre del nuevo Papa, bien al Emperador o bien directamente al exarca de Rávena. Carlomagno puso fin a esta práctica tras conquistar el Norte de Italia, cambiando a Bizancio por el nuevo poder Franco. 3. CONCILIOS Y HEREJÍAS. La diferente interpretación de los aspectos fundamentales de la fe dio paso a las herejías. La mayoría de ellas nacieron en Oriente, donde tuvieron mayor trascendencia política y social por lo que surgieron los primeros concilios ecuménicos. Estos concilios: - Se convirtieron en el único órgano que podía fijar la ortodoxia y promulgar decretos administrativos que fueran aceptados por todos. - Los emperadores eran los únicos que podían convocarlos al ser su autoridad reconocida por todas las partes. 3.1 Herejías de Occidente. - Donatismo. Herejía surgida inicialmente como cisma en la Iglesia norteafricana a principios del siglo IV de manos del obispo de Cartago Donato. Se oponían a la vida relajada del clero y hacían depender la eficacia de los sacramentos a la pureza de quien los administraba. - Pelagianismo. Creada por Pelagio, un laico de origen irlandés, a inicios del siglo V. De base estoica e inspirada en el paganismo, postulaba que el hombre nacía sin pecado original, ya que el pecado de Adán no se transmitía al resto de la humanidad. Consecuencias: El bautismo era superfluo. La vida eterna se alcanzaba obrando rectamente y en conciencia. Jesús era fundamental por la excelencia de su doctrina y su ejemplo, pero no como salvador de los hombres tras su muerte. Pelagio fue el primer defensor de la sola fides que después defendió Lutero. Condenada en el Concilio de Cartago (418), siendo San Agustín uno de sus grandes detractores. - Priscilianismo. Fue su creador Prisciliano, obispo de Ávila, durante la segunda mitad del siglo IV y se difundió por Galicia y Lusitania y subsistió en Galicia durante 2 siglos más. Su doctrina mostraba características del gnosticismo y del maniqueísmo. Acusado de brujería, fue decapitado en Tréveris convirtiéndose en la primera víctima de la persecución contra los herejes. Página 4 de 8 3.2 Herejías de Oriente. - Arrianismo. Inicialmente formulada en Antioquia, tomó su nombre de Arrio, presbítero de Alejandría. Según esta doctrina, Jesús había sido creado por el Padre antes de todos los tiempos, por lo que al no poder ser igualado en divinidad a éste, se le consideraba una especie de semidiós. Esta doctrina amenazaba los cimientos del cristianismo, lo que obligó a Constantino a convocar el primer concilio ecuménico, el Concilio de Nicea (325), presidido por el consejero del Emperador el obispo Osio de Córdoba. Medidas tomadas en este Concilio: El Credo o Símbolo de Nicea, que dice que el Hijo fue engendrado, y no creado, por lo que era consustancial al Padre (Omousion to Patri). Se establecieron las normas para calcular la fecha de la Pascua de Resurrección. El Arrianismo no fue condenado hasta el Concilio de Constantinopla(381), casi desapareciendo de no ser por la acción del obispo Ulfila. Éste convirtió a los godos a dicha religión, y para ello tuvo que crear un alfabeto propio y traducir la Biblia a su lengua. Desapareció tras la conversión de los visigodos al catolicismo en tiempos de Redaredo (589). - Nestorianismo. Su creador fue el monje de origen sirio Nestorio, que llegó a ser patriarca de Constantinopla (428). Según esta herejía, Cristo poseía dos naturalezas completas y separadas, una divina y una humana, y la que prevalecía era la humana. En pocas palabras, María había engendrado a un hombre en el que habitaba la naturaleza divina. A esta doctrina se opuso Cirilo, el patriarca de Alejandría. Defendía que las dos naturalezas se hallaban sin separación y confusión en él, por lo que María era la madre de Dios (Theotokos). Y esta fue la doctrina que se publicó en el Concilio de Éfeso (431). El Nestorianismo se refugió en la Persia sasánida, difundiéndose por Irak, India y China donde todavía subsiste. - Monofisismo. La doctrina de Cirilo fue llevada a las últimas consecuencias por el monje griego Eutiques, quien defendió en Éfeso que las dos naturalezas de Cristo estaban unidas en una sola (monofisis) y que la divina se sobreponía a la humana. Esta doctrina fue reconocida como oficial en el Concilio de Éfeso (449), presidido por Teodosio II en el que no se admitió a los legados de Roma. León I consiguió que se celebrara el Concilio de Calcedonia (451) donde el monofisismo fue condenado. En éste, las dos naturalezas se consideraron inconfusas e inmutables, indivisas e inseparables. Pero numerosos obispos sirios, armenios y alejandrinos se opusieron, dando lugar a un cisma que llega a nuestros días. De este cisma surgieron: La Iglesia Ortodoxa Copta. La Iglesia Ortodoxa Siria o Jacobita. La Iglesia Ortodoxa de Armenia Esta herejía fue la que tuvo mayor arraigo, contribuyó a debilitar el Imperio y causó la defección de sus súbditos tras la invasión musulmana. 4. SAN GREGORIO MAGNO Y LA EVANGELIZACIÓN DE LOS ANGLOSAJONES. San Gregorio Magno pertenecía a una familia de patricios romanos (los Anicios). Alcanzó el título de Prefecto de la Ciudad y residió en Constantinopla 10 años como embajador (apocrisario) del Papa Pelagio II. Finalmente fue elegido Papa en el año 590 durante un contexto de dificultades para la Iglesia de Italia, ya que la irrupción de los lombardos en Italia y su lenta pero progresiva conquista del Norte y la creación de los ducados de Espoleto y Benevento ejercieron una fuerte presión sobre Roma. Los Papas sabían que no podían contar con la ayuda del Imperio, por lo que se erigieron como valedores de la urbe y se Página 5 de 8 presentaran como los únicos representantes de sus ciudadanos. San Gregorio Magno tuvo que negociar, desligado de la autoridad imperial, la retirada de las tropas lombardas de Agiulfo que estaban asediando Roma (593), por lo que se convirtió en la figura más importante de la ciudad y de su ducado. Este acuerdo delimitaba la frontera entre el reino Longobardo y las tierras del Ducado (Tuscia Romana), futuro núcleo del Patrimonio de San Pedro. Uno de los puntos más importantes de su papado es el de la conversión de los anglosajones al cristianismo. Éstos se habían mantenido paganos, pese a los intentos de evangelización de los monjes bretones. Gregorio I envió al monje Agustín a la isla (596), futuro obispo de Canterbury. Junto a otros 40 monjes logró la conversión del rey de Kent, Ethelberto, casado con una católica merovingia. Fue este rey quien donó tierras en Canterbury, donde se estableció la cabeza de la organización eclesiástica de la isla. La evangelización avanzó lentamente por Essex, creándose la sede episcopal de Londres. Agustín y Ethelberto fueron canonizados posteriormente. La conversión de Ethelberto, y por extensión la de los demás monarcas germánicos, no suponían la conversión automática de sus pueblos. Las gentes de toda condición, sobre todo las del campo, volvían en cuanto podían a sus prácticas ancestrales a pesar de los castigos o muertes en masa. El abandono de estas prácticas durante la Alta Edad Media no fue ni general ni fácil. El proceso de aculturación de la acción evangelizadora sobre los pueblos germánicos transformó lentamente la fisonomía cultural y mental de Europa. Otros puntos importantes de su papado: - Inspirador de la jerarquía universal de los Papas. - Dictó numerosas normas para que el clero respetara la disciplina eclesiástica. - Dirigió y alentó la labor evangelizadora de los benedictinos. - Creó el canto gregoriano, que desplazó al canto ambrosiano de la liturgia católica. 5. EL MONACATO. 5.1 El monacato oriental. El monacato surgió en Oriente antes que en Occidente hacia la segunda mitad del siglo III. Algunos cristianos deseaban llevar una vida contemplativa y de sacrificio para imitar a Cristo, sustituyendo eso sí el sacrificio rápido y cruento por un sacrificio continuado durante toda una vida. Los llamados Anacoretas abandonaban a sus familias y se retiraban a sitios inhóspitos para aislarse y dedicarse a la oración, p.e. la Tebaida en el Alto Egipto. A medio camino entre la anacoresis y los monjes que vivían en comunidad encontramos las comunidades eremíticas. Un claro ejemplo sería San Antonio el anacoreta (281-356) que vivía junto a otros anacoretas recibiendo instrucción de cómo rechazar al demonio y realizar algunos actos litúrgicos. Pero viendo los peligros que la vida aislada de los eremitas ofrecía a su alma, hacia el 330 san Pancomio fundó una comunidad de cenobitas. La norma de vida de estas comunidades iba a ser el trabajo manual y el estudio de la Biblia. Es el monacato cristiano propiamente dicho. Las Lauras eran un tipo de monacato intermedio desarrollado en Siria, Sinaí y Armenia y propiciado por San Hilarión (292-372). Los monjes vivían aislados durante la semana, pero se reunían los domingos para celebrar la eucaristía y comer juntos. Pero el verdadero fundador del monacato oriental sería san Basilio (329-379), obispo de Cesaréa, cuya regla siguen todavía los monjes ortodoxos y que fue posteriormente la inspiración para la regla de san Benito: - Huye de la mortificación excesiva. - Insiste en el trabajo manual e intelectual. - Sujeta al monje al mando de un superior. Página 6 de 8 5.2 El monacato en Occidente. Fue introducido por personas que habían estado en contacto con el monacato oriental. Su difusión por Europa fue lenta y sin reglas generales hasta el siglo VI con el benedictismo. - Monacato norteafricano. Su impulsor fue San Agustín, quien creó una regla que sería imitada en siglos posteriores. - En Galia, san Martín de Tours (315?-397) creó dos monasterios a mediados del siglo IV: Tours y Poitiers. - En Hispania hay indicios de vida monástica en el Concilio de Elvira, Granada (305?). Donde más floreció fue en el Bierzo y en Galicia, bajo la Regula Monachorum de san Fructuoso. - Los principales focos monásticos de la época altomedieval eran Irlanda y Gran Bretaña y sus figuras más importantes san Patricio y san Columbano. San Patricio (389?-461) era miembro de la aristocracia británica que se educó entre los monjes de la Provenza y predicó en Irlanda donde fundó numerosos monasterios e iglesias. Una de sus mayores dificultades fue que su sociedad estaba todavía dividida en clanes por lo que el poder de los druidas era todavía muy importante. Desde Irlanda, los monjes (scotti) se iban a dirigir hacia las islas de Iona y Lindisfarne hasta dar el salto al norte de Inglaterra con la intención de evangelizar a los pictos e incluso llegando a Europa como es el caso de san Columbano (540?-615). Este último intentó evangelizar las Galias y fundó una serie de monasterios que jugarían posteriormente un papel muy importante durante la época carolingia y otónida, aparte de ser un foco de cultura gracias
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