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Fascismo italiano

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Fascismo italiano
Contenido
Fascismo italiano	3
Origen del fascismo italiano	4
Violencia fascista	4
Creación del Partido Nacional Fascista	5
Marcha a Roma	5
Ascenso de Mussolini al poder	5
Camisas negras en Napoles	5
Características del fascismo italiano	6
Fascismo italiano
El fascismo italiano fue un movimiento político de carácter totalitario, liderado por Benito Mussolini. Se desarrolló entre los años 1920 y 1943, especialmente tras la crisis política y económica que generó la Primera Guerra Mundial. Italia se convirtió así en el primer Estado fascista de la historia.
La ideología fascista concilió diversas políticas que exaltaban el nacionalismo y el totalitarismo. Enalteció la idea de nación antes que al individuo, incentivó la violencia, promovió el unipartidismo y limitó la libertad de expresión.
El fascismo italiano surgió entonces como una respuesta de carácter político-cultural para reparar la profunda crisis económica y política que enfrentaba el Reino de Italia tras la Primera Guerra Mundial.
De este modo, se presentó como una “tercera posición” política. Esto es, como alternativa que se distanciaba del capitalismo liberal y del colectivismo comunista. Su repuesta fue impulsar el ultranacionalismo y el centralismo estatal.
Su fin era responder a los cambios que encaraba la civilización occidental. Tales como:
· La lucha de clases y la contención del movimiento bolchevique.
· La pérdida de influencia italiana en Europa.
· El surgimiento de las vanguardias intelectuales y artísticas del momento.
Otros gobiernos tomaron al fascismo italiano como modelo a seguir a lo largo del siglo XX. Los elementos fascistas han estado presentes en sistemas políticos que se caracterizan por ser nacionalistas, revolucionarios y tener líderes carismáticos populistas.
Origen del fascismo italiano
La crisis de posguerra en Italia dio paso a que los militantes de grupos patrióticos, ex sindicalistas y demás agitadores se reagruparan para defender ideas nacionalistas de tipo radical.
El poeta Gabrielle D'Annunzio fue de los primeros en liderar estos movimientos. Fue así que fundó el Estado libre de Fiume (1919-1920), y redactó una constitución en la que expuso, de forma notable, su tendencia fascista.
Por su parte, Benito Mussolini se valió de la pobreza y crisis política de su país para refundar en marzo de 1919, en Milán, los Fascis italiani di combattimento (en español, Fascios italianos de combate), conocidos como fascistas. Los años siguientes se caracterizaron por ser turbulentos.
Violencia fascista
Los grupos fascistas, respaldados por terratenientes y diversos miembros de la clase media, provocaron numerosos enfrentamientos violentos en contra de las condiciones laborales y económicas que enfrentaba el pueblo italiano.
Gran parte de estos ataques ocurrieron en la zona norte de Italia y fueron dirigidos por escuadrones de “Camisas negras”. Estos grupos atacaron, especialmente, a los partidos de izquierda que apoyaban el socialismo y el comunismo, y a todos aquellos que consideraban enemigos políticos.
Creación del Partido Nacional Fascista
En 1921, Mussolini convirtió a los Fascis italiani di combattimento en el Partido Nacional Fascista (PNF), y a partir de ese momento se dio a conocer también como Duce (Líder). Esta fue la única formación política legal en Italia entre 1925 y 1943, considerada como la máxima representación del fascismo italiano.
Marcha a Roma
En octubre de 1922, Mussolini convocó a los militantes del PNF y los Camisas negras a ejercer actos violentos por todo el país. Ante la pasividad de las fuerzas militares y policiales, los fascistas se dirigieron hacia Roma para tomar el poder y dejarlo en manos de Mussolini.
Esto se conoce como la “Marcha a Roma”, que puso fin al sistema parlamentario italiano e inició el régimen fascista que condujo a la dictadura totalitaria.
Ascenso de Mussolini al poder
El 25 de octubre, tras la presión de los Camisas negras, el rey Víctor Manuel III llamó a Benito Mussolini. Su intención era evitar una guerra civil e intentar detener sus actos. Sin embargo, Mussolini exigió ser el jefe de gobierno y el rey tuvo que acceder a su pedido. El 30 de octubre de 1922, Mussolini estableció su gobierno y tomó el mando como primer ministro.
Camisas negras en Napoles
Mussolini acompañando la marcha de los Camisas negras en Nápoles (octubre de 1922)
Características del fascismo italiano
1. La nación sobre el individuo
Lo más importante para el fascismo era defender y luchar por la nación. La figura del individuo quedó desplazada y suprimida al limitar su libertad.
2. Totalitarismo y uso de la violencia
Fue un sistema de gobierno dictatorial cuyo líder, Mussolini, se caracterizó por el anhelo de controlar todas las áreas de desarrollo humano, imponiendo su ideología. El duce reguló la educación, la creación de leyes, las entidades públicas, los medios de comunicación, etc.
En el fascismo también se reforzó la visión de que a partir de la lucha violenta se podía alcanzar el poder. La violencia paramilitar de los Camisas negras fue una herramienta eficaz en ese objetivo.
3. Unipartidismo y corporativismo
El Partido Nacional Fascista se fundamentó en el nacionalismo italiano, siendo el único partido legal para representar el poder político nacional.
Además, se estableció un único sindicato, la Confederación General de Corporaciones Sindicales Fascistas, que agrupaba todos los gremios. Al sistema de sindicato exclusivo aunado a los intereses del Estado se le conoce como "corporativismo". A través de este se seguían las directrices del líder fascista.
4. Suspensión de elecciones e ilegalización de partidos
El gobierno fascista no permitió la realización de elecciones justas. Por esta razón, durante el tiempo que Benito Mussolini gobernó en Italia, el pueblo no tuvo un derecho real a expresarse mediante el voto.
Se disolvieron numerosas organizaciones políticas, desaparecieron los partidos sindicalistas y otras facciones políticas opositoras. El Partido Nacional Fascista fue el único partido político considerado legal.
5. Libertades coartadas
Se censuró la libertad de expresión. Los medios de comunicación se usaron para difundir la propaganda fascista y los lemas de Mussolini.
También se censuró la libertad de asociación, lo que casi provocó la extinción de los movimientos antifascistas y la prohibición de hacer huelgas por ser consideradas ilegales. Incluso fue prohibida la masonería.
6. Sistema judicial represor
El Tribunal Especial de Defensa del Estado juzgaba a todas aquellas personas que se oponían al fascismo. Muchos opositores fueron arrestados y enviados a islas lejanas o al exilio. Incluso, hubo quienes recibieron pena de muerte.
7. Dominio absoluto de la vida pública
El Partido Nacional Fascista logró dominar casi todos los aspectos de la vida de los italianos (trabajo, educación, actividades de ocio, etc.), sobre todo, a partir de 1930, cuando Mussolini alcanzó la cumbre de su poder.
8. Italianización fascista
Las minorías étnicas se consideraron como un obstáculo para crear un Estado totalmente italiano. Esto dio paso a la italianización fascista, que consistió en obligar a los ciudadanos de origen extranjero a asumir la cultura y lengua italiana.
9. Expansionismo
El fascismo italiano fomentó la idea de expandir su poder político sobre otros territorios en el extranjero. Esto llevó a a la invasión de Etiopía (1935-1936) y de Albania (1939).

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