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El ser humano y el medio ambiente • Las enfermedades que son causadas, precipitadas o favorecidas por la exposición a agentes ambientales suponen un apartado importante de la patología médica. • Estos factores ambientales pueden ser de orden biológico, químico o físico, y en ocasiones combinaciones de ellos. • La OMS estima que hasta un 23% de los fallecimientos pueden estar relacionados con las condiciones ambientales. Y, en este sentido, se proponen diferentes medidas de carácter preventivo . • El desarrollo de la tecnología y la industria, el interés por el deporte y por el turismo, la siniestralidad, el subdesarrollo y las catástrofes, entre otros factores, han propiciado la exposición humana a entornos que le resultan hostiles o para los que está poco adaptada, como la polución, la radiación, la electricidad, el sobreesfuerzo, el medio acuático, la altitud o las temperaturas extremas. . • Asimismo, cabe tener en cuenta que la patología ambiental tiene a menudo una implicación determinante en las enfermedades profesionales y los accidentes laborales, donde reside entonces un importante potencial preventivo. • EFECTOS DE LA CONTAMINACIÓN ATMOSFÉRICA SOBRE LA SALUD • Los efectos van desde síntomas menores hasta la muerte por agravamiento de enfermedades respiratorias o cardiovasculares. • En relación con los niveles de ozono y las partículas finas, se ha observado un aumento de crisis asmáticas, un aumento de la sintomatología respiratoria, fundamentalmente tos y expectoración, un aumento delos ingresos hospitalarios por asma y un deterioro de la función pulmonar en niños asmáticos. • EFECTOS DE LA CONTAMINACIÓN ATMOSFÉRICA SOBRE LA SALUD • Asimismo, la baja temperatura y la elevada concentración ambiental de NO2 se asocian a un incremento en las consultas a urgencias y hospitalizaciones por agudización de asma bronquial. enfermos afectados por enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). DIOXIDO DE CLORO • Hay una mayor frecuencia de exacerbaciones de la bronquitis crónica en períodos de gran contaminación por SO2 (dióxido de azufre) y partículas en suspensión. • Respecto al sistema cardiovascular, • está demostrada la asociación entre los contaminantes aéreos y la mortalidad total, debido a la aterosclerosis, así como la asociación entre la hospitalización por insuficiencia cardíaca o muerte por insuficiencia cardíaca y todos los gases y partículas contaminantes (excepto el ozono). • Se sabe que las PM (materia particulada) aumentan la coagulabilidad, producen activación plaquetaria, inflamación sistémica y estrés oxidativo con lesión vascular directa o indirecta, aterosclerosis y disfunción autonómica. • La contaminación atmosférica provoca aumento de la presión arterial. • Se conoce que elevaciones de la contaminación en un período de tiempo corto durante horas o días puede conducir a infarto de miocardio, accidentes cerebrales vasculares o insuficiencia cardíaca descompensada. • Se ha confirmado que la exposición a las partículas en suspensión (PM10 y PM2,5) está asociada con el bajo peso al nacer (< 2,5 kg). • La contaminación atmosférica se ha demostrado que es carcinógena para los seres humanos, al ser causa específica de cáncer de pulmón. • la exposición al humo ambiental de tabaco. Produce efectos sobre la salud como el cáncer de pulmón, la cardiopatía isquémica, las infecciones respiratorias, el asma infantil y las descompensaciones asmáticas. • También se relaciona con el síndrome de muerte súbita del lactante. • El ozono produce fundamentalmente descenso de la función pulmonar con síntomas respiratorios, irritación de los ojos, la nariz • El ozono produce fundamentalmente descenso de la función pulmonar con síntomas respiratorios, irritación de los ojos, la nariz el rendimiento atlético. • La intoxicación por CO produce síntomas digestivos, como náuseas, vómitos, efectos cardiovasculares y neurológicos. El plomo inhalado(plomo inorgánico) que proviene de procesos industriales (industrias de baterías, metalurgia) y motores de combustión se deposita en la vía respiratoria baja, se absorbe por completo y, finalmente, se deposita preferentemente en los huesos, el hígado, los riñones y el músculo estriado Su exposición crónica ocasiona una enfermedad insidiosa, lenta, con manifestaciones variadas: fatiga, apatía, irritabilidad, síntomas gastrointestinales, insomnio, alteraciones de la memoria y cefalea; puede llegarse a estados graves con encefalopatía, convulsiones y coma
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