Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
II 12 125 propias de ellos mismos y se estiman dignos de éstas. Si 10 despiertan emulación los bienes que se estiman, es preciso que las virtudes la despierten y todo lo que a otros es útil y beneficioso, porque se rinden honores a los que hacen be neficio y a los que son buenos. Y también despiertan emula ción aquellos de cuyos bienes goza el que está cerca, por ejemplo, la riqueza y la belleza en mayor grado que la is salud. Resulta claro también quiénes son los dignos de ser emulados, pues los que tienen estas cosas y las semejantes a ellas lo son. Son tales cosas las mencionadas, por ejemplo, el valor, la sabiduría, el mando, pues los que tienen mando pueden beneficiar a muchos, como los generales, oradores 20 y todos los que son poderosos con tales cosas. Y también aquellos a los que muchos quieren asemejarse o de los que muchos desean ser conocidos o amigos. Y aquellos a quie nes muchos admiran o a quienes uno mismo admira. Y aquellos de quienes se dicen alabanzas y encomios, bien por los poetas bien por los prosistas (49). 25 Se tiene desprecio de los contrarios, pues lo contrario de la emulación es el desprecio, y emular es lo contrario de despreciar. Es evidente que los que están en tal disposición que emulan a algunos o son emulados, desprecian, y por esos motivos, a los que poseen los males contrarios a los bienes por los que se siente emulación. Por eso muchas ve- 30 ces se desprecia a los que gozan de buena fortuna cuando tienen ésta sin los bienes honrosos. Las causas por las que nacen y desaparecen las pasiones y de las que resultan argumentos retóricos han quedado expuestas. D e l o s c a r a c t e r e s . 12 Cómo se es por el carácter (50), según las pasiones y las disposiciones y las edades y las condiciones de la fortuna, II 12 12e examinémoslo después de lo expuesto. Llamo pasiones a la 35 ira, la concupiscencia y semejantes, de las que hemos ha blado antes [ I I 1-11], y hábitos a las virtudes y vicios; tam bién de éstas hemos hablado antes [I 9], y de cuáles pre fiere cada uno y cyáles son las que practican. Las edades son la juventud y la plenitud y la vejez. Llamo fortuna a la nobleza de cuna y riqueza y las facultades, y también a mn » sus contrarios, y en general a la ventura y desgracia. a ) E n r e l a c i ó n c o n l a e d a d : 1) C a r á c t e r d e l j o v e n . Los jóvenes son por carácter concupiscentes e inclina dos a hacer aquello que desean. Y en cuanto a las pasiones corporales son especialmente sumisos a las de Venus e in continentes en éstas. También son variables y fáciles de har- s tarse (51) en sus pasiones,y desean fuertemente, pero se les pasa deprisa; sus caprichos son vehementes, pero no dura deros, como la sed y el hambre de los que están enfermos. También son apasionados y de cólera pronta y capaces de obedecer a su impulso. Y son dominados por la ira, porque por punto de honra no soportan ser tenidos en poco, sino 10 que se enojan si se consideran víctimas de injusticia. Y son amantes del honor, pero aún más del triunfo, porque la ju ventud desea sobresalir, y la victoria es una especie de ex celencia. Y son más bien estas dos cosas que avariciosos, y son menos avariciosos por no haber experimentado to davía la privación, como es la sentencia de Pitaco sobre 15 Anfiarao (52). Y no son maliciosos, sino cándidos, por no haber pre senciado muchas maldades. Y son confiados, por no ha ber sido engañados muchas veces. Y llenos de esperanza, porque lo mismo que los beodos, los jóvenes están calenta dos por la naturaleza (53), y también a causa de no haber 20 padecido muchos desengaños. Y viven por la mayor parte con esperanza, porque la esperanza es del futuro y la me-
Compartir