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DEFINICIÓN DE CONTROL REMOTO Antes de entrar de lleno en el significado del término control remoto vamos a conocer el origen etimológico de las dos palabras que le dan forma: -Control, en primer lugar, deriva del francés. Exactamente emana de “controle”, que procede, a su vez, de la expresión “contre role”, que puede traducirse como “contra el rollo”. Se utilizaba esta para referirse al rollo que se empleaba para poder comprobar la autenticidad de otro original. -Remoto, por otra parte, deriva del latín “remotus”, que es sinónimo de “alejado”. Es fruto de la suma de dos partes diferenciadas: el prefijo “re-”, que significa “hacia atrás”, y el verbo “movere”, que puede traducirse como “mover”. La idea de control tiene varios usos: en este caso nos interesa quedarnos con su acepción como el mando o el dominio de algo. Remoto, por su parte, puede aludir a algo distante. Estas definiciones nos permiten comprender el concepto de control remoto. Se trata de un dispositivo que se utiliza para administrar el funcionamiento de una máquina o de un sistema a distancia. Por eso en España al control remoto se lo conoce como mando a distancia. Otros datos de interés sobre el control remoto son los siguientes: -El primer modelo de control remoto de carácter universal fue presentado a mediados de la década de los años 60 por parte de William Russell McIntyre. -También existen armas de fuego que se pueden usar con control remoto. -En la actualidad, además de para la televisión o el dvd por ejemplo, los controles remotos juegan un papel esencial para subir y bajar las puertas de los garajes de casa. Esos dispositivos se convierten en un sistema que no solo facilita el poder acceder y salir de ese espacio para estacionar el vehículo sino que apuesta por la seguridad. Sí, porque evita que, al bajarse del coche para abrir manualmente la puerta del garaje
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