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NACIMIENTO Y EVOLUCIÓN DE LA MÁQUINA TRAGAMONEDAS La primera máquina tragamonedas con carretes, mejor conocida bajo el nombre de Liberty Bell fue producida en 1905 por su inventor, Carlos Augusto Fey, nacido en una familia alemana en Bavaria en 1862. Desde muy temprana edad desarrolló un persistente interés en las máquinas, y después de desempeñar diversos trabajos, se fue a vivir a Nueva York, y después a California. Fey estableció su propia compañía de teléfonos, equipo eléctrico y refacciones, y como tal estaba produciendo partes mecánicas para las máquinas tragamonedas de otro famoso fabricante, Gustav Shultze; sus máquina no eran con carretes. En 1894 Fey decidió construir su propia máquina tragamonedas con tres ruedas, opuesto a carretes. En 1895 Fey comenzó a desarrollar una pasión por la construcción de estas máquinas tragamonedas. Construyó una máquina con una placa frontal concéntrica recortada sobre una lotería popular. Cuando se percató de lo exitosa que era, decidió dedicarse a la construcción de otras máquinas semejantes. En 1896, el creó otra compañía y comenzó a trabajar en la máquina con carretes, la cual tiene menos limitantes que la de ruedas. Esta máquina de carretes, 'Liberty Bell' fue revolucionaria desde varios puntos de vista. Más pequeña, hecha de metal, y en cada uno de sus carretes, símbolos tales como la campana de la libertad, la espada, el corazón, el diamante y la herradura. Ofrecía miles de combinaciones posibles, con 10 paros por carrete, cuando las ruedas solamente ofrecían cientos de combinaciones. Esta máquina tragamonedas de tipo mecánico sobrevivió hasta los años 60's, cuando fue substituida por la máquina tragamonedas electromecánica de Bally. Las máquinas tragamonedas de Charles Fey, un gran éxito popular, provocó la competencia y una de las máquinas Liberty Bell fue robada. El error de Fey fue que quiso mantener la exclusividad en la manufactura de su máquina en lugar de ofrecer su patente en venta. En 1906, el fabricante Mills produjo una máquina similar a la suya, y varios más lo siguieron tales como Watling y Caille Pero Mill tuvo una idea que permitiría que la máquina tragamonedas sobreviviera. Le anexó un distribuidor de dulces a cada una de ellas, reemplazando los símbolos en los carretes por otras frutas que sugerían caramelos: Ciruela, naranja, limón, cereza y hierbabuena. La campana fue el único símbolo que no se suprimió, como tributo a su inventor. Así es como funcionaba: El jugador compraba caramelos con monedas, y de acuerdo con la combinación ganaría o no fichas las cuales podían ser intercambiadas por bebidas u otras cosas. Si el mismo jugador insertaba una ficha, podía girar los carretes en la máquina tragamonedas. LOS DIFERENTES TIPOS DE MÁQUINAS TRAGAMONEDAS Máquinas tragamonedas básicas, también llamadas máquinas tragamonedas directas El premio mayor se mantiene igual y no cambia de acuerdo a la suma de dinero apostada por los jugadores. En consecuencia las tragamonedas básicas ofrecen ganancias menores pero más frecuentes, lo que es especialmente adaptable para jugadores con un presupuesto limitado. Máquinas tragamonedas progresivas Esta máquina tiene un premio mayor que está ligado a la cantidad apostada por los jugadores. Este es el mismo principio que en una lotería, entre mayor sea el número de jugadores, mayor será la cantidad del premio mayor hasta que un día un jugador lo gane. La cantidad del premio mayor se muestra en la parte superior de las máquinas tragamonedas progresivas y se incrementa cada vez que los jugadores apuestan en estas máquinas. Una vez que alguine gana el premio mayor, el premio se vuelve a un nivel muy bajo y aumenta de acuerdo a las apuestas y así sucesivamente. De allí que es interesante apostar el máximo número de monedas con la finalidad de ganar el premio mayor. Más aún, existe una diferencia entre la máquina tragamonedas clásica y la máquina tragamonedas básica. La primera tiene únicamente una línea de juego, con sucesión de tres imágenes en el centro de los tres carretes. La segunda puede tener varias líneas de juego y varios carretes. Si uno añade otras líneas a la máquina clásica, tiene que considerar no solamente la línea central, sino también las líneas que están por encima y por debajo de ésta. Lo que significa que si la línea central no es ganadora pero la línea superior tiene un número 7 tres veces, uno todavía puede ganar. Las máquinas tragamonedas con lo que se llama línea de pago múltiple aumentan la posibilidad de que un jugador gane cada vez que introduce una ficha. Por supuesto, el apostar la cantidad máxima también aumenta las posibilidades de jugar y ganar con todas las líneas posibles, hasta que algún jugador gana el premio mayor. Este premio mayor, como se describió anteriormente, aumenta bajo nuestra vista conforme aumentan las apuestas de todos los otros jugadores , ya que la cantidad se despliega en la parte superior de las máquinas tragamonedas progresivas. Este nivel - una vez que es ganado - regresa a su mínimo y comienza nuevamente su ascenso conforme los jugadores juegan y apuestan. Es interesante mirar este incremento ya que entre más pronto incrementa el premio mayor, lo más que uno debe apostar. Los fabricantes de máquinas tragamonedas Pace, O.D. Jennings, Mills, Rockola, Watling, Caille son los principales fabricantes americanos de máquinas tragamonedas. ¿Cuáles son las ventajas de jugar las máquinas tragamonedas? Existen muchas razones por las cuales más y más gente elije jugar en las máquinas tragamonedas. Primero que nada, son fáciles de usar y son muy divertidas. Más aún, desde una sola apuesta permiten al jugador ganar en grande. A diferencia de los juegos de mesa, las máquinas tragamonedas ofrecen al jugador la oportunidad de apostar, y ganar un bono gracias a la apuesta en todas las máquinas simultáneamente, y por el premio mayor, y ofrece a cualquiera la oportunidad de ganar en grande. En Francia, de acuerdo a la ley, uno solamente puede encontrar máquinas tragamonedas en los casinos que están en las ciudades de aguas termales o de balnearios. También se puede jugar en Internet. Debido a que son sumamente accesibles, son desafortunadamente responsables de cerca del 80% de casos que las encuestas han catalogado como patología del juego.