¿Por qué un aborto no debe considerarse un asesinato cuando la mujer simplemente no quiere tener un hijo o no se siente preparada?

Usualmente se hacen juicios generalizadores acerca de quienes buscan interrumpir un embarazo. La más frecuente de todas es que las mujeres que lo buscan son egoístas, irresponsables y asesinas.

Los argumentos “pro-vida” consisten en pintar a una mujer joven e irresponsable, egoísta solo enfocada en su carrera y en sus placeres.

Las leyes provida han encarcelando incluso a mujeres por abortos espontáneos, han provocado la muerte de mujeres por obligarlas a llevar un embarazo inviable a término, a niñas a experimentar los enormes cambios corporales que supone un embarazo, el dolor y el riesgo de un parto. Todo esto basado en creencias religiosas y en anteponer un embrión por sobre la vida de una persona.

Y es aquí donde entra el encarnizado debate sobre quién es persona, dónde comienza la vida, lo que definimos como vida humana, persona, individuo humano y respeto al cuerpo humano. La vida y el cuerpo de una mujer/niña también vale.

Concretamente el considerar un embrión como una persona es influencia no científica sino únicamente moral religiosa.

Algunos de sus argumentos son:

“Las mujeres que desean abortar son irresponsables, calenturientas y debieron haber usado protección”

En Méx según estimaciones de la Secretaría de Salud en 2013., una mujer es violada cada cuatro minutos.

“El embrión es persona”.

Científicamente el embrión es un conjunto celular que se multiplica siguiendo instrucciones previas. No es una persona. Es un conjunto celular que como resultado generará un cuerpo humano, no es un humano.

“El embrión es un individuo humano porque es indivisible”.

Todas las células del cuerpo humano son indivisibles, inclusive las del cabello. Por pertenecer al cuerpo humano serían individuos humanos.

“El embrión tiene la información genética de cada una de las partes de una persona”.

Cada célula del cuerpo humano posee información del ADN completa y tiene potencial para generar cualquier parte del cuerpo o un individuo completo con todas sus partes.

“La vida de cada uno comienza desde el instante de la concepción” .

Durante las primeras horas que la cabeza del esperma ingresa al núcleo del óvulo, ocurre una degradación proteínica del óvulo que posteriormente ordenará una división celular múltiple, así que técnicamente las primeras horas después de la concepción se tiene un óvulo dividiéndose proteínicamente.

“El feto es una persona porque tiene forma humana”

Antes de la semana 12 no tiene forma humana. Es similar a todos lo fetos de los animales mamíferos., en algunas etapas incluso de los no mamíferos.

“Cuando ya existe embarazo el aborto es un asesinato”.

¿entonces antes de que se implante el embrión no es un asesinato?.

“El producto de la concepción es siempre viable”.

Mentira. La mayoría de embriones fertilizados son expulsados. Técnicamente todas las mujeres sexualmente activas son asesinas sin proponérselo.

“El feto sufre con el aborto y le duele”.

El desarrollo sináptico no comienza hasta después de la semana 28. Hasta ese momento no hay impulsos eléctricos enviados a la corteza que puedan ser interpretados como dolor.

“El niño no tiene la culpa”.

El feto no es un niño, tampoco un bebé y antes de la semana 12 no tiene neuronas.

“El embrión contiene su propio ADN único”, es un ser humano en las primeras etapas de su existencia”.

La información genética constituida en el momento de la fecundación carece de la sustantividad necesaria para que exista suficiencia biológica constitucional (Bedate 1989). El genoma del embrión es dependiente del genoma de la madre, sin cuya dependencia devendrían molas hidatiformes, consecuencia de la fecundación de un ovocito por un núcleo espermático sin que lleguen a fusionarse los núcleos ni a constituirse un embrión zigótico viable (Suarez, A, 1990).

De este modo se sustenta que el embrión o feto considerado persona es más una entelequia filosófica que una realidad biológica. Dandole entidad constitutiva de persona y tratándole como un ser humano sintiente y pensante. Todo esto mediado por la capacidad potencial para desarrollarse normalmente de no mediar una perturbación en su desarrollo.

Ni cualitativa ni cuantitativamente debe darse más importancia a un conjunto celular y a la información genética contenida, que a una persona constituida en todas sus partes, las cuales le permiten pensar, sentir y decidir.

Las leyes que despenalizan el aborto son necesarias debido a las innumerables injusticias que sufren a diario mujeres y niñas abusadas, de bajos recursos, que presentan complicaciones graves en el embarazo, mujeres que físicamente o psicológicamente no están en condiciones de llevar un embarazo a término y esto no debiera condenarles a una vida de cárcel o de riesgo de muerte.

Leer:

Nicolás Jouve de la Barreda (2007)
Entidad del embrión Humano. Una explicación genética del desarrollo embrionario y la macroevolución. www.bioeticaweb.com

Suarez, A. (1990). L'embryon est une persone si l'adult qui dort est une personne. Médicine et Higiene, 1864: 3458-3462.