El mercurio es prácticamente insoluble en agua y los jabones y detergentes ayudan muy poco. La limpieza del mercurio se realiza con polvos, los cuales tienen una gran área superficial y fomentan que el mercurio se adhiera a ellos.
Si estas en un laboratorio o alguna otra industria que trabaje con mercurio, deberías de estar al tanto de los procedimientos estándar para lidiar con las salpicaduras.
Si por alguna razón tienes suficiente mercurio como para sufrir alguna salpicadura en casa, puedes limpiar con un trapo y después utilizar un poco de harina o azúcar glas para limpiar tus manos, frota estos polvos por toda la piel que haya entrado en contacto con el metal. Luego puedes enjuagarte el polvo y lavarte con jabón.
Las personas de mi generación jugaban con mercurio en la escuela. Ahora sé que esto es peligroso, pero fue hace 60 años y todavía sigo aquí. Como ya mencioné, ahora se que fue algo irresponsable, pero fue antes de la paranoia actual sobre los contaminantes y toxinas que nos rodean.
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