¿Puede un gato reconocer a su dueño a distancia sin olerlo ni escuchar su voz?

Los gatos son animales fascinantes. A diferencia de los perros, normalmente no consideran a los humanos superiores. Para ellos, somos simplemente compañeros felinos de mayor tamaño. Pero su reputación de criaturas distantes es inmerecida. De hecho, hacen conexiones emocionales profundas cuando se crían adecuadamente y reconocen sus nombres cuando se les llama (incluso si no se sienten obligados a venir).

Los gatos también guardan rencor cuando son maltratados. Es una táctica de supervivencia importante para retener recuerdos a largo plazo de personas que consideran peligrosas. Con toda esta atención al detalle con respecto a los humanos, ¿pueden identificar a algunos de nosotros solo con la vista, sin el beneficio de sus otros sentidos excepcionales?

Sentidos de gato

Los felinos tienen una visión borrosa de cerca, pero una vista enfocada cuando ven objetos más lejos. A pesar de su impecable visión nocturna, los gatos solo ven un 10% más que los humanos a la luz del día. Pero sus otros sentidos son inusualmente agudos. Pueden saber qué dueño los está acariciando con su agudo sentido del tacto. Tienen hasta 80 millones de receptores olfativos en la nariz, lo que hace que su olfato sea 20 veces más sofisticado que el de los humanos.

Su audición está mucho más desarrollada que la de los perros, los humanos y la mayoría de los mamíferos, la quinta mejor en el reino animal. Cuando se trata de rangos altos, los gatos escuchan una octava adicional por encima de los caninos. Los gatos pueden aislar la ubicación de un sonido que emana incluso del insecto más pequeño a un metro de distancia con una precisión asombrosa.

Reconociendo a sus dueños

Con unos sentidos tan agudos, casi todos los gatos pueden identificar las voces de sus dueños cuando reproducen grabaciones de audio. Reconocen instantáneamente el sonido y la vibración de los vehículos y los pasos, diferenciando entre sus dueños y, digamos, el cartero. Todos los gatos pueden oler más allá de la colonia, el perfume, el champú y la loción, detectando notablemente los distintos olores de la piel de sus dueños.

Hay tantas formas en que los gatos nos reconocen. Pero la vista es un tema completamente diferente.

Reconocimiento visual

Los gatos no consideran que los rostros humanos sean tan importantes como su olor, tacto y sonido de su voz. Los investigadores creen que esto es hereditario, ya que los gatos históricamente tomaron la decisión de unirse a la sociedad humana en busca de alimento, no la afirmación humana. No les importaba el rostro de quienes los alimentaban. Por el contrario, los perros fueron domesticados voluntariamente por los humanos, lo que llevó a algunos investigadores a creer que anhelar nuestra atención es hereditario para los caninos.

Sin embargo, la evidencia moderna parece sugerir que los gatos, al menos los más inteligentes, reconocen a sus dueños solo con la vista. En 2005, un estudio en dos universidades reveló que los gatos identificaron una fotografía de la cara de sus dueños aproximadamente el 54% de las veces. En el mismo estudio, los gatos reconocieron las caras de otros gatos familiares el 91% de las veces.

Mi experimento

Quizás los dos atigrados masculinos que tuve durante 20 años poseían un intelecto superior al promedio. Pasaron las pruebas de coeficiente intelectual felino que administré con gran éxito. Entonces realicé un experimento basado en la vista. En lugar de llegar a casa del trabajo a las 5:00 p. M., Rompí mi patrón habitual y me presenté a las 3:00 p. M. (Ya que los gatos memorizan las rutinas de sus dueños). Estacioné unas cuadras más arriba de la calle para que el auto no me delatara, porque conocen el sonido del vehículo de cada propietario. Caminé hacia mi casa para ver si mis gatos estaban sentados en el porche como solían hacer por la tarde. Y ahí estaban, los dos hermanos inseparables pasando el rato juntos.

Dado que los gatos memorizan la forma en que caminan sus dueños, no podía simplemente pasear por la casa para evaluar su inteligencia. Probablemente me identificarían. Como nunca trotaba y los gatos nunca me habían visto correr, pasé corriendo por la casa. En lugar de reconocer a mis gatos como siempre lo hice, actué como si no los conociera. Estaba a 50 pies de distancia. Solo mi visión periférica me permitió ver su reacción. Al principio, los gatos no parecían interesados ​​en este tipo al azar que corría por la calle dos horas antes de que su dueño llegara a casa.

Medio dormido en una tarde de descanso, entrecerrando los ojos en relajación, monitoreando a este tipo que corría por la carretera, solo pasaron dos segundos antes de que de repente se sentaran erguidos. ¿Me reconocieron? Me estudiaron intensamente durante uno o dos segundos antes de salir disparados del porche, echando a correr a toda velocidad. Corriendo por el césped, corrieron para alcanzarme, maullando incesantemente y desesperados por que me detuviera.

La artimaña había terminado. Me di la vuelta y me agaché para aceptar a mis pequeños compinches que casi saltan a mis brazos. Aparentemente confundidos por mi auto perdido y mi aparición repentina, probablemente preguntándome por qué no podía encontrar mi propia casa y seguí corriendo, estaban muy emocionados de verme.

Entonces, diría que los gatos más inteligentes reconocerán absolutamente a sus dueños con la vista sin el beneficio del olfato o el reconocimiento de su andar, su vehículo o su rutina.

Los gatos menos inteligentes no reconocerán a los dueños por la vista, pero siempre te reconocerán por el olfato.