¿El F-104 fue un fracaso sólo para la Luftwaffe, o la USAF también tuvo problemas con él?

El F-104 no fracasó. Por el contrario es uno de los aviones más prolíficos, importantes y avanzados de su generación.

Si yo llevo unas sandalias. Las mejores del mundo, a un evento en donde tengo que escalar una montaña muy probablemente no voy a lograr nada y no importa que tan buenas sean; simplemente no es el calzado adecuado para eso.

Eso sucede con el F-104, es el mejor interceptor del mundo en su momento, un avión espectacular, con un diseño espectacular y un desempeño espectacular. Para ese momento es el avión de combate más avanzado del planeta.

El primero en llegar a Mach 2.2, el primero con radar y cañón integrados, el primero en integrar dos tipos de misil aire-aire diferentes y con la mejor trepada del mundo.

Pero el avión no es tan excepcional para otras misiones. En primer lugar el avión no está diseñado para volar a baja cota y alta velocidad.

Si bien la variante F-104G no era como tal mala en misiones de ataque e interdicción, nunca fue diseñado para tal cosa.

El problema fue darle uso de caza-bombardero a un avión que primero se diseñó como un interceptor y luego evolucionó a ser un caza de superioridad aérea. Pero que nunca hizo la transición a avión de ataque.

Los aviones de la serie century fueron todas maravillas tecnológicas cuyo primer e inicial propósito era la velocidad. Fenómenos como “la danza del sabre” o la inestabilidad en los diseños eran necesarios para entender las complejidades del vuelo a alta velocidad.

Esos aviones eran buenos porque rompieron con los paradigmas del vuelo trans sónico y súper sónico y entregaron valiosos datos técnicos a los futuros diseñadores de hoy.

El F-104 es parte de esa ola de evoluciones tecnológicas que ayudó a madurar lo que tenemos hoy.

Si, es cierto que el avión no debió ser vendido como un avión de ataque, es cierto que las decisiones de Lockheed y el Alto Mando de la Luftwaffe cometieron un error al adaptar el avión a la misión, el escándalo de corrupción derivado de la venta de licencias del F-104G es inaceptable, fue un error insistir en su perfilamiento y es cierto que esas decisiones costaron cientos de vidas.

Pero entendiendo la dimensión del quiebre tecnológico que implicó la introducción del avión, creo que era un paso necesario y trascendente en la evolución de la industria aeronáutica occidental.

Se pudieron hacer mejor las cosas y evitar pérdidas humanas? Sin duda; pero el contrafactual no existe y ante toda la gama de posibilidades esa era la mejor opción para la Luftwaffe, la OTAN y casi cada usuario del avión.

En lo personal nunca he creído que los aviones sean malos por ser innovadores. Creo qué hay aviones malos por ser diseños conservadores, que no aportan demasiado y/o que simplemente no son buenos en lo que hacen por no introducir nada nuevo al juego.