¿Por qué el Acorazado Bismarck no tuvo más apoyo durante la Segunda Guerra Mundial?

Sencillo, no hay barcos suficientes para acompañarlo.

Primero planteemos el contexto. La marina alemana, a diferencia de las otras marinas principales de la guerra (Inglaterra, Estados Unidos, Italia, Japón Y Francia) no pudo construir ni diseñar ni construir barcos de guerra modernos durante los años 20 debido a las limitaciones impuestas por el Tratado de Versalles. Si bien en las otras naciones tampoco hubo mayor construcción de unidades de guerra por los tratados internacionales puestos en vigencia, ellos se salvaron en su mayor parte de dos cosas que si pasaron en Alemania que fueron.

· La industria naviera se contrajo significativamente.

· Los conocimientos necesarios para construir barcos se perdieron o continuaron siendo estudiados.

En consecuencia, cuando a finales de los años 20 y principios de los 30 se comienza de nuevo la construcción de buques de guerra a gran escala, los germanos no tienen la industria para competir con las otras potencias en número, y están tecnológicamente atrás con respecto a sus rivales. Con eso en mente pasamos a la pregunta.

Los tipos de barcos que se usaban para hostigar el comercio en este punto histórico eran los acorazados, los cruceros (Tanto pesados que eran los que tenían cañones de 203mm, como los ligeros que tenían cañones de 152mm) y los portaaviones. En orden, de estos barcos Alemania logro construir para 1941, 4 acorazados, 6 cruceros ligeros, 6 pesados (Contando a los “acorazados de bolcillo”) y ningún portaaviones (El único que estuvo cerca de ser completado, el Graf Zepelín, nunca fue finalizado porque la falta de escoltas impedía que fuera usado en operaciones a gran escala y el estallido de la guerra cambio drásticamente las prioridades) De estos barcos veamos en condición estaban en Mayo de 1941 cuando el Bismarck realizo su misión.

Acorazados: Dos de estos, el Scharnhorst y Gneisenau estaban en reparaciones en la Francia ocupada tras el termino de sus operaciones en el Atlántico en 1940, el Tirpitz, cuya construcción había sido demorada por ataques aéreos británicos, todavía estaba realizando pruebas de verificación y entrenamiento en el mar Báltico y por lo tanto no pudo unirse a la operación. El cuarto acorazado era el Bismarck.

Cruceros Ligeros: Estos literal no cuentan en el caso de Alemania. Ignorando que dos habían sido perdidos en la Invasión de Noruega, los restantes eran de un diseño tan ligero y poco resistente que terminaron siendo inservibles en las aguas tormentosas del Mar del Norte y el Océano Atlántico. En conclusión, por mal diseño se desperdició un potencial ofensivo poco despreciable.

Cruceros Pesados: 2 ya habían sido perdidos, el Graf Spee y el Blücher, el primero hundido por su tripulación en el Rio de la Plata cuando se hiso claro que no tenían escapatoria de la Marina Inglesa, y el otro durante la Invasión de Noruega. El Lützow estaba recién reparado después de casi perder la popa por un torpedo en la invasión de Noruega, pero por motivos que desconozco (Tal vez logísticos, pero no confirmo nada) no pudo participar, el Admiral Scheer y el Admiral Hipper estaban recién llegados de sus propias misiones de ataque al comercio y seguían en reparaciones, y el ultimo era el Prinz Eugen, que fue la única escolta del Bismarck en su misión.

Y por eso no se enviaron más barcos a acompañar al Bismarck en su misión, simplemente no había nada que enviar. Alemania estaba trabajando con muy pocos barcos y por eso no se podían dar el lujo de crear fuerzas de tareas o flotas como el resto de beligerantes, resultando en que un acorazado, unidad fuertemente escoltada por el resto de las naciones, saliera prácticamente solo a alta mar.