Son un género de antropoides que aunque en su vida cotidiana se valen permanentemente de la ciencia aseguran no creer en ella.
Seguro que usan un vehículo dotado de un motor de explosión que los lleva de una parte a otra y eso es ciencia.
Seguro que en su casa tienen unos aparatos que traducen la frecuencia de las ondas de radiación electromagnética en imágenes y sonidos, como la radio y la televisión y eso es ciencia.
Seguro que cuentan con lavadoras centrifugadoras y unas sustancias químicas cuya función es la de elevar el pH del agua de la lavadora ayudando a romper los componentes grasos y ácidos que conforman la suciedad como son los detergentes, y eso es ciencia.
Seguro que su casa está llena de enchufes que suministran una forma de energía que produce efectos luminosos, mecánicos, caloríficos, químicos, etc., y que se debe a la separación o movimiento de los electrones que forman los átomos, y eso es ciencia.
Seguro que cuenta con un aparato que absorbe el calor refrigerando los alimentos y bebidas y haciendo hielo, y eso es ciencia
Seguro que en su casa cuentan con un botiquín que contiene aspirinas, antibióticos, mercromina, alcohol, agua oxigenada, frenadol, etc y eso es ciencia.
Seguro que ha entrado más de una vez en un hipermercado y que a su paso las puertas de cristal se abren y eso no es magia, es producto del mecanismo que activa el sensor de una célula fotoeléctrica y eso es ciencia.
En resumen, hay que ser rematadamente imbécil para no creer en la ciencia mientras te vales de ella cotidianamente.
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Ciências Sociais / Ciências Econômicas
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