Si José no fue padre de Jesús, ¿cómo se puede considerar a Jesús como de la casa de David?

Hubo razones por las que el pueblo judío no reconoció al Hijo Creador de Dios en su vida en la carne llamado Jesús.

La Encarnación de Maquiventa

La verdad revelada estaba amenazada de extinción durante los milenios que siguieron al aborto de la misión adánica en nuestro mundo Las razas humanas, aunque progresaban intelectualmente, estaban lentamente perdiendo terreno en el campo espiritual. Alrededor del año 3000 a. de J. C. el concepto de Dios se había vuelto muy nebuloso en la mente de los hombres.

El Sabio de Salem. 1.973 años antes del nacimiento de Jesús, Maquiventa Melquisedek se otorgó a las razas humanas del planeta tierra.. Su advenimiento no fue espectacular; su materialización no fue presenciada por ojos humanos.

En el viejo testamento apenas es nombrado este personaje misterioso, y dice " no nacido de mujer y de no final de días."

Melquisedek era muy conocido y reverenciado en Palestina de la epoca y era también conocido como el Sabio de Salem [el nombre viejo de Jerusalem] o Jeque.

Se presento diciendo: «Soy Melquisedek, sacerdote de El Elyón, el Altísimo, el único Dios.»

La Selección de Abraham

Aunque sea erróneo hablar del «pueblo elegido», no es equivocación referirse a Abraham como ser elegido. Melquisedek sí dio a Abraham el encargo de mantener viva la verdad del Dios único diferenciado de la creencia común en deidades plurales.

Por algún tiempo los síndicos Melquisedek habían estado observando a los antepasados de Abraham, y anticiparon confiadamente la aparición en cierta generación de vástagos que se caracterizarían por su inteligencia, iniciativa, sagacidad y sinceridad. Los hijos de Taré, el padre de Abraham, cumplieron en todas sus facetas con estas esperanzas. Después de varios años mandó emisarios a Ur para invitar a Abraham y su familia a Palestina.

Taré y su entera familia creían a medias en la religión de Salem, que se había predicado en Caldea; supieron de Melquisedek a través de los sermones de Ovid, maestro fenicio que proclamó la doctrina de Salem en Ur. Salieron de Ur con la idea de ir directamente a Salem, pero Nacor, el hermano de Abraham, no habiendo conocido a Melquisedek, no estaba del todo convencido y los persuadió de que se detuvieran en Harán. Mucho tiempo pasó, después de llegar a Palestina, antes de que estuvieran dispuestos a destruir todos los dioses del hogar que habían traído consigo; abandonaron lentamente los muchos dioses de Mesopotamia, a favor del Dios único de Salem.

Pocas semanas después de la muerte de Taré, el padre de Abraham, Melquisedek envió a uno de sus discípulos, Jarán el Heteo, para que invitara tanto a Abraham como a Nacor: «Venid a Salem, escucharéis allí nuestras enseñanzas de la verdad del Creador eterno, y en vuestros vástagos esclarecidos, el mundo será bendecido». Pero Nacor no había aceptado totalmente el evangelio de Melquisedek; decidió quedarse donde estaba y construyó una fuerte ciudad-estado que llevó su nombre; pero Lot, el sobrino de Abraham, decidió acompañar a su tío a Salem.

Lo que enseñó Melquisedek era completo y pletórico, pero los registros de estos días parecían imposibles y fantásticos a los sacerdotes hebreos posteriores, aunque muchos tuvieron cierta comprensión de estas transacciones, por lo menos hasta los tiempos de la revisión masiva de los registros del Antiguo Testamento en Babilonia.

Melquisedek hizo un pacto formal con Abraham en Salem. Díjole a Abraham: «Mira ahora los cielos, y cuenta las estrellas, si las puedes contar; así numerosa será tu simiente». Abraham creyó lo que Melquisedek decía, «y eso le fue contado por justicia». Y entonces Melquisedek contó a Abraham la historia de la ocupación futura de Canaán por sus descendientes después de su estadía en Egipto.

Lo que describen los registros del Antiguo Testamento como conversaciones entre Abraham y Dios fueron en realidad entrevistas entre Abraham y Melquisedek. Los escribas más recientes consideraron el término Melquisedek sinónimo de Dios. Las crónicas de tantos contactos de Abraham y Sara con «el ángel del Señor» se refieren a sus numerosas conversaciones con Melquisedek.

El ego nacional de los judíos fue terriblemente contenido por el cautiverio en Babilonia, así pues corrigieron cuidadosamente todas sus crónicas con el objeto de elevar a Abraham y a sus otros líderes nacionales muy por encima de todas las demás personas, sin exceptuar siquiera a Melquisedek. Los escribas hebreos por consiguiente destruyeron todo registro de estos tiempos monumentales que pudieron encontrar, preservando tan sólo la crónica del encuentro de Abraham y Melquisedek después de la batalla de Sidim, encuentro que según ellos reflejaba un gran honor para Abraham.

De esta manera, al perder de vista a Melquisedek, también perdieron de vista las enseñanzas de este Hijo de urgencia en lo que concierne a la misión espiritual del Hijo auto otorgador [Jesus] prometido; perdieron de vista tan completa y plenamente la naturaleza de esta misión que muy pocos de su progenie fueron capaces o quisieron reconocer y recibir a Jesús cuando éste apareció en la tierra y en la carne tal como Maquiventa había predicho.

Los evangelios de Mateo, Marcos, Lucas y Juan.

Todos estos autores describían honestamente a Jesús tal como ellos lo habían visto, lo recordaban o habían sabido de él, y a medida que su concepto de estos distantes acontecimientos había sido afectado por la subsiguiente adopción de la teología paulina del cristianismo. Estos escritos, a pesar de todas sus imperfecciones, han bastado para cambiar el curso de la historia del mundo durante mas dos mil años.

Con excepción de Marcos, un joven que siempre acompañaba a Jesus y los apóstoles, [además también donde se celebró la última cena en la casa de los padres] los otros evangelios fueron transmitidos a los seguidores de los apóstoles y estos escribieron lo acontecido. en nombre de sus maestros.

Los apóstoles no mintieron o elaboraron historias alrededor de la persona de Jesús, eran sus contemporáneos todos conocían la familia de Jesús. Sabían que María era su madre y que Jesus tenía siete hermanos tres mujeres y cuatro hombres y que todos incluyendo a Jesus tenían a José como padre biologico.

Esta familia numerosa eran muy conocidos en Nazaret, mucho debido a la popularidad de Jesús en los años de su crecimiento y luego cuando se mudó el a Capernaum y fue conocido ahi tambien ampliamente.

Crear historias sobre su nacimiento inmaculado hubiera sido catastrófico, se hubieran burlado y con razón, esos mitos y leyendas se crearon posteriormente. Con el fervor de evangelizar a gentiles y a judíos de la diáspora cuando todos los de la epoca ya habian muerto, se pensó endiosar a Dios más de lo que era.

Jesus era un Hijo Creador de Dios, su divinidad lo comprobó varias veces. Su misión era presentar la personalidad de Dios y enseñar la relación íntima de los hombres con su creador.

A través de una técnica únicamente conocido por Dios vació su preexistencia divina nació de una mujer en la misma forma que todos nosotros. Por esta razón y para recalcar esta realidad se dio el título de "hijo del hombre"

El pueblo judío después de la destrucción del primer templo y la presente ocupación romana ya hacia mucho que añoraban un Mesías, un liberador del yugo de Roma. Pero no esperaban un personaje necesariamente religioso y mucho menos uno que predicaba un Dios universal que abarcaba toda la humanidad.

El Dios de Israel era también el Dios de sus enemigos y eso no era aceptable, Jesus jamas podria ser ese Mesías añorado y además también era evidente que Jesus no tenía ningún linaje con David o Salomón. El padre de Jesus tenía alguna conexión lejana con el rey David a través de un pariente lejano. Fueron elaborados, textos manipulados para convencer de un linaje inexistente y fácilmente comprobados por los mismos judíos que además hace que se alejen del Jesus verdadero. También es importante agregar que el padre natural de Jesus era muy joven[20] cuando se casó con Maria[ 19]; falleció a los 35 años en un accidente cuando Jesús tenía 14 años.

Pero estaban tan saturados con la idea del Mesías que al final Jesus dejó de resistir y eso lo aceptaron como asentido. Pero a los finales de su ministerio varias veces declaró lo obvio " Cualquiera que me vea a mí ve al Padre" "El Padre está en mi , yo estoy en el Padre" " Yo Y mi Padre somos uno"

Y así continuó la trágica historia del Hijo de Dios en la tierra. Trágico desde el punto de vista humano; aunque muy penoso, Jesus igual triunfo como hijo del hombre e Hijo de Dios: dos naturalezas bajo una misma personalidad.