¿Por qué hay división entre cristianos y católicos? ¿Por qué no hay unidad en las creencias y se fomenta la conciliación?

No hay división entre cristianos y católicos. Hay diferentes denominaciones del cristianismo y las ha habido desde las primeras comunidades cristianas. Evidencia de esto se encuentra en las epístolas de Pablo quien advierte que debe mantenerse la unidad de la iglesia en lugar de denominaciones (p. ej. los de Pedro, los de Pablo, los de Santiago, etc.).

Durante las primeras comunidades cristianas no hubo unidad doctrinal. Varios obispos se proclamaron sucesores de la doctrina apostólica, y otros líderes desconocían estas proclamaciones. Se escribieron varios libros sobre la vida y mensaje de Jesús, sobre las primeras comunidades, sobre cómo deberían vivir los cristianos, etc.

Varios consideraban a Jesús como el maestro supremo, pero tan sólo un hombre. Otros como el hombre elegido, el ungido (en griego jristo, en hebreo mesías) de las profecías. Otros como un mensajero celestial (un ángel). Otros como Dios mismo encarnado. Los seguidores de la doctrina apostólica fueron los precursores del actual catolicismo y de las actuales iglesias ortodoxas quienes sólo reconocían ciertos evangelios y ciertas epístolas y concluyeron la doctrina de la Trinidad bajo la cual Jesús es Hijo de Dios, totalmente humano, totalmente dios, al igual que el Padre, y Padre, Hijo y Espíritu Santo son tres personas distintas pero un solo Dios verdadero.

No era la única versión, los gnósticos desconocían la naturaleza humana de Jesús. Otros su naturaleza divina. El obispo de Alejandría tenía una interpretación diferente de la Trinidad.

Finalmente en el siglo IV, el emperador romano Constantino legalizó el cristianismo como una religión oficial del imperio, pero, para ello, se necesitaba conciliar una única doctrina. El emperador llamó a las distintas partes a conciliar y las interpretaciones que no lograron llegar al Concilio de Nicea fueron consideradas doctrinas heréticas.

Por algunos siglos tuvieron el control de que quienes se apartaban de la doctrina oficial eran considerados herejes aunque había discusiones y diferencias con respecto al rito y a la importancia de los jerarcas de la iglesia (p. ej. si el obispo de Roma es primero entre iguales o si el patriarca de Constantinopla es igualmente igual), la relación con los reyes, emperadores y otros líderes civiles, etc.

Finalmente hubo un rompimiento formal entre la iglesia en Roma y la iglesia en Constantinopla. Relativamente pocas diferencias doctrinales (la inclusión de uno u otro libro en la Biblia), pero más diferencias de forma tales como la aceptación de imágenes, o la relación entre jerarcas. Esta es la separación entre la iglesia ortodoxa y la iglesia católica.

Con la invención de la imprenta surgen nuevos desafíos. Primero, producir biblias se hace más económico y más personas tienen acceso a la Biblia. Segundo, nuevas ideas tienen formas más eficientes de difundirse. En menos de un siglo surge el protestantismo bajo la idea de que no es la iglesia sino la Biblia la que guarda la palabra de Dios.

Originalmente hay dos grandes variantes de protestantismo: el luteranismo, basado en las ideas de Martín Lutero y que ritualmente es muy cercano al catolicismo, y el calvinismo que sigue las ideas de Juan Calvino, entre las que se destaca la predestinación. Estas iglesias protestantes rompen con el papado en Roma.

Sin poder central que controlara la doctrina, surgieron otros líderes, pensadores y teólogos, cada uno con una idea diferente para interpretar la Biblia y los conceptos de pecado y salvación.

Católicos y protestantes se enfrentaron en varias veces y en muchas ocasiones consideraban a los otros de no ser verdaderos cristianos: los católicos consideraban a los protestantes una nueva herejía, los protestantes consideraban a los católicos una corrupción.

En los Estados Unidos, tras su independencia, hubo varias escuelas de ideas y entre ellas surgió lo que se conoce como el Gran Despertar. Muchas de esas ideas son religiosas con pastores que exponían lo que consideraban formas más puras de interpretar la Biblia. Proliferaron así varias denominaciones, muchas de ellas encabezadas por pastores carismáticos que se enfocaban en la evangelización, formando lo que se conoce como el movimiento evangélico.

En años más recientes, varias de estas iglesias evangélicas comenzaron una tendencia de quitarse los apellidos. Ya no eran, por ejemplo, cristianos pentecostales sino simplemente cristianos.

Surge también la idea de que los católicos no son sólo una corrupción del cristianismo, sino que ni siquiera son cristianos (algunos consideran que el catolicismo es paganismo, otros consideran que Jesús Cristo no es considerado por los católicos como el único camino a la salvación, sino que se intercede por medio de santos).

Quienes hacen la distinción entre católicos y cristianos generalmente ignoran, no sólo a la formas no evangélicas del protestantismo, sino a la iglesia ortodoxa. Otras personas consideran que el catolicismo es sólo una subdivisión del cristianismo, y otros que es la original y única iglesia.

No tenemos las palabras originales de Jesús, ni podemos entrevistarlo para que aclare las diferentes interpretaciones. Partimos de las epístolas de Pablo que definen (o corrigen) la línea doctrinal de la primera iglesia, los evangelios que comenzaron a ser escritos dos o tres décadas y hasta un siglo después de la muerte de Jesús y, en ninguno de esos libros se dice en blanco y negro que Jesús es Dios. ¿Es Juan 3:16 prueba suficiente? Son interpretaciones. Y dado que son interpretaciones, extrapolaciones, etc., cada persona tiene una interpretación diferente y de ahí que haya gnósticos, maniqueos, adventistas, ortodoxos rusos, católicos romanos, luteranos, anglicanos, cátaros, baptistas, anabaptistas, menoritas, coptos, los de Pedro, los de Pablo, los que consideran que las iglesias y las religiones están mal y que el cristianismo no es una religión sino una relación personal con Jesús, los mormones, los ortodoxos griegos, los testigos de Jehová, los sedevacantistas, etc.