¿Cómo se compone una aleación?

Una aleación es una mezcla de dos o más metales. Los metales que componen una aleación pueden estar en cualquier proporción, pero generalmente hay un metal principal, que se conoce como metal base, y otros metales, que se conocen como aleantes.

Los aleantes se agregan a una aleación para mejorar sus propiedades. Por ejemplo, el carbono se agrega al hierro para formar acero, que es más fuerte y resistente al desgaste que el hierro puro.

La composición de una aleación se expresa en términos de porcentajes de los metales que la componen. Por ejemplo, una aleación de acero con un 1% de carbono se denomina acero al 1% de carbono.

La composición de una aleación puede variar para adaptarse a las necesidades específicas de una aplicación. Por ejemplo, el acero al carbono se utiliza en una amplia gama de aplicaciones, desde la construcción hasta la fabricación de herramientas.

Los metales que se utilizan para formar aleaciones se pueden clasificar en dos categorías:

• Metales de transición: Los metales de transición son metales que tienen electrones de valencia en los orbitales d. Los metales de transición son generalmente buenos conductores de electricidad y calor. Algunos ejemplos de metales de transición que se utilizan para formar aleaciones incluyen hierro, cobre, níquel, cobalto y cromo.
• Metales no ferrosos: Los metales no ferrosos son metales que no contienen hierro. Los metales no ferrosos son generalmente más ligeros que los metales ferrosos y tienen mejores propiedades mecánicas. Algunos ejemplos de metales no ferrosos que se utilizan para formar aleaciones incluyen aluminio, magnesio, titanio, zinc y cobre.

Las aleaciones se utilizan en una amplia gama de aplicaciones, desde la construcción hasta la fabricación de herramientas y componentes electrónicos. Las aleaciones son importantes porque ofrecen una combinación de propiedades que no se encuentran en los metales puros.