La razón por la que abundan los reclamos por las torres, quizá sea su falta de estética, o que se instalan sin el consentimiento del vecindario; y ...
La razón por la que abundan los reclamos por las torres, quizá sea su falta de estética, o que se instalan sin el consentimiento del vecindario; y en muchos casos, porque se ignore el efecto que producen las ondas de telefonía en el organismo, en comparación con las de otros artefactos de uso diario. En cambio, pocos se quejan de los celulares, por la libertad individual que hay para usarlos, o para prescindir de ellos.
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