Advierte una docencia solitaria donde prevalece el trabajo aislado de las personas, la atomización del conocimiento, las interacciones fragmentadas...
Advierte una docencia solitaria donde prevalece el trabajo aislado de las personas, la atomización del conocimiento, las interacciones fragmentadas y superficiales, escasas posibilidades de compartir recursos e ideas, intercambios de experiencias, etc. Ante este panorama, y en respuesta al interrogante del cual parte, De la Barrera (2006) considera que la colaboración puede constituirse en una propuesta alternativa para la innovación en la universidad, siempre y cuando se este dispuesto a avanzar hacia la construcción intersubjetiva de una profesionalidad renovada, comprometida, en búsqueda de un auténtico proyecto compartido, lo que redundara en mejores procesos de enseñanza y de aprendizaje en la universidad.
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