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Educacion-para-la-salud--una-propuesta-de-intervencion-pedagogica-para-el-autocuidado-de-pacientes-con-diabetes-mellitus-tipo-2-DMT2

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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO 
FACULTAD DE FILOSOFÍA Y LETRAS 
COLEGIO DE PEDAGOGÍA 
 
 
EDUCACIÓN PARA LA SALUD: UNA PROPUESTA DE INTERVENCIÓN 
PEDAGÓGICA PARA EL AUTOCUIDADO DE PACIENTES CON DIABETES 
MELLITUS TIPO 2 (DMT2). 
 
 
TESINA 
PARA OBTENER EL GRADO DE LICENCIADA EN PEDAGOGÍA 
 
 
PRESENTA 
ANA LAURA GARCÍA SERRANO 
 
 
ASESOR 
LIC. ALEJANDRO R. ROJO USTARITZ 
 
 
 
CIUDAD UNIVERSITARIA. CDMX, 2017. 
 
 
UNAM – Dirección General de Bibliotecas 
Tesis Digitales 
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mencionando el autor o autores. Cualquier uso distinto como el lucro, 
reproducción, edición o modificación, será perseguido y sancionado por el 
respectivo titular de los Derechos de Autor. 
 
 
 
1 
 
Dedicatoria y agradecimientos 
A Dios, por permitirme cumplir con éxito este sueño tan anhelado. 
A la UNAM, la Facultad de Filosofía y Letras y el Colegio de 
Pedagogía, por acogerme en sus instalaciones y contribuir en mi formación 
personal y profesional. 
A mi madre Flor Serrano, por su inmenso amor, dedicación y apoyo 
incondicional. Por ser una mujer trabajadora, luchadora y una persona 
ejemplar. Gracias por confiar en mí. 
A mis hermanas Noemí y Mariana, por entenderme, apoyarme, 
comprenderme y soportarme. Gracias por ser mis mejores consejeras. 
A mi novio Jacobo Cruz, por darme su amor, apoyo y comprensión. 
Gracias por estar a mi lado. 
A mi cuñado Carlos Ortiz, por ser parte de la familia. Gracias por el 
apoyo. 
 A mi sobrino y ahijado Carlos Emilio, por dar tanta alegría y unir más 
a nuestra familia. Gracias por regalarme las más bellas sonrisas. 
 A mis grandes amigas Helen, Jazmín, Yohana, Ivonne, Jessy, Paula y 
Anggie, por estar en los buenos y malos momentos. Gracias por sus dosis de 
motivación y sus consejos. 
 A mi asesor, el Licenciado Alejandro R. Rojo Ustaritz, por acceder 
amablemente a guiar mis pasos. Gracias por creer en mí, por su dedicación, 
experiencia, paciencia y motivación para la realización de este sueño. Mi 
respeto y mi admiración. 
2 
 
A mi compañera, colega y amiga Marcela Casais, que aceptó 
amablemente brindar su apoyo y guía absoluta. Gracias por ayudarme a 
encontrar el camino. 
A mis sinodales, por su valioso tiempo dedicado a la revisión y 
corrección de ésta investigación. Gracias por sus observaciones. 
Al personal de trabajo social de la Unidad de Medicina Familiar 
(UMF) no. 49, a la Licenciada Maricarmen Martínez, a las y los participantes 
y facilitadores, por su disposición para la realización de mi estudio de caso. 
Gracias por permitirme ser partícipe del programa “Yo puedo”. 
Y a todas las personas que de alguna u otra forma contribuyeron para 
la realización de este sueño. ¡Gracias! 
 
 
Ana Laura García Serrano 
Mayo, 2017. 
 
 
 
 
 
 
 
3 
 
ÍNDICE 
 
Introducción ........................................................................................................... 6 
 
Capítulo 1. Educación para la Salud. 
1.1 La educación no formal………………………………………………………….9 
1.2 Educación para la Salud. Su evolución como concepto……………………14 
1.3 Programas integrados en el sector salud para abordar la problemática de la 
DMT2 ............................................................................................... …….20 
 
Capítulo 2. Interdisciplinariedad, Salud y Andragogía: El Autocuidado en 
pacientes con DMT2. 
 2.1 Interdisciplinariedad en la Educación para la Salud………………………...27 
 2.2 Andragogía: Educación de adultos……………………………………………30 
 2.3 Educación a pacientes con enfermedades crónicas………………………..38 
 2.4 Autocuidado en DMT2………………………………………………………….40 
 
Capítulo 3. Diabetes Mellitus Tipo 2. 
 3.1 Aspectos generales... ………………………………………………………….45 
 3.2 Epidemiología……………………………………………………………………47 
 3.3 Etiología………………………………………………………………................49 
 3.4 Síntomas o manifestaciones... ………………………………………………..51 
 3.5 Diagnóstico….…………………………………………………………………...52 
 3.6 Tratamiento………………………………………………………………………53 
 3.7 Calidad de vida... ……………………………………………………………….58 
 3.8 Impacto social y familiar………………………………………………………..61 
 3.9 Necesidades educativas….……………………………………………………64 
4 
 
Capítulo 4. Estudio de caso: Estrategia educativa “Yo puedo” del programa 
PREVENIMSS 
 4.1 Breve historia del IMSS………………………………………………………...71 
 4.2 Análisis del Programa PREVENIMSS………………………………………..76 
 4.3 Estrategia “Yo puedo” en la Unidad de Medicina Familiar no. 49 del 
 IMSS……………………………………………………………………………...80 
 
Capítulo 5. Propuesta de intervención pedagógica: Cuídale lo dulce a tu 
vida………………………………………………………………………………………..85 
 5.1 Contenidos……………………………………………………………………….86 
 5.2 Metodología……………………………………………………………………...89 
 5.3 Cuídale lo dulce a tu vida. Taller de autocuidado para pacientes con 
 DMT2…………………………………………………………………….............94 
 
Conclusiones…………………………………………………………………………..115 
 
Bibliografía……………………………………………………………………………..118 
 
Anexos…………………………………………………………..……………………...128 
1. Preguntas frecuentes…………………………………………………………..129 
2. Peso y talla para mujeres adultas mexicanas ………………………………133 
3. Peso y talla para hombres adultos mexicanos……………………………...134 
4. Glosario de términos relacionados con la DMT2……………………………135 
 
 
 
 
5 
 
Índice de tablas. 
Tabla 1. Educación no formal…………………………………………………………..11 
Tabla 2. Ubicación de la Diabetes Mellitus Tipo 2 dentro de la mortalidad general. 
México 1960-2004……………………………………………………………………….48 
Tabla 3. Repercusiones de la Educación en distintos parámetros de la 
Diabetes……………………………………………………………………………….….68 
Tabla 4. Expansión del IMSS en la República Mexicana……………………………73 
Tabla 5. Introducción de avances en la práctica médica del IMSS………….....….75 
Tabla 6. Contenidos y objetivos……………………………………………………......88 
Tabla 7. Clasificación de tipos de aprendizaje………………………………………..91 
 
Índice de figuras. 
Figura 1. Estructura del sistema de salud en México……………………………..…22 
Figura 2. Subsistemas de Salud en México……………………………………..……23 
Figura 3. Autocuidado…………………………………………………………………...42 
Figura 4. Algoritmo del Tratamiento de la Diabetes Mellitus Tipo 2……………..…58 
Figura 5. Costo de la ignorancia…………………………………………………...…..69 
 
 
 
 
 
6 
 
INTRODUCCIÓN. 
Hoy en día, nos situamos en un momento de continuos cambios que complejizan 
nuestro estilo de vida. Ante ello, surge la necesidad de proponer nuevas prácticas 
educativas interdisciplinarias que nos permitan mejorar las acciones sociales 
dirigidas, como en este caso, a la población adulta. 
Una persona que padece Diabetes Mellitus Tipo 2 o que posee factores de riesgo 
llega a presentar circunstancias particulares como malestar físico o psíquico, 
angustia, miedo, ansiedad sobre todo por los cambios que puedan llegar a surgir. 
A la mayoría de las personas, les aterra no poder con la enfermedad, sienten 
desorientación, vulnerabilidad, tienden a deprimirse, ya que es evidente que 
cualquier persona ante un padecimiento se enfrenta a lo desconocido. 
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la 
Agricultura (FAO en inglés), México es uno de los países con las cifras más altas 
de personas con padecimientos como obesidad, sobrepeso y Diabetes Mellitus, en 
sus diferentes tipos. 
Para lograr o mejorar el estado de bienestar social de una persona con DMT2 o enriesgo, se requiere de la prevención, del diagnóstico o la confirmación de la 
presencia del padecimiento lo antes posible. Y para mejorar la calidad de vida, la 
clave es adoptar por estilos de vida saludables, entre ellos se incluye la 
alimentación, la actividad física y la salud emocional. 
La Organización Mundial de la Salud (OMS) contempla que en el mundo hay poco 
más de 347 millones de personas que padecen Diabetes y se estima que para el 
2030 la cifra se multiplicará. 
Con estas consideraciones, la educación en general y la Educación para la Salud, 
en particular, cobran mayor relevancia. Y es la Andragogía o Educación para 
Adultos, la disciplina que nos ayudará a comprender de qué manera aprenden los 
adultos; a la hora de adquirir nuevos conocimientos y su vez, la Pedagogía nos 
puede ayudar a poner orden en la redacción de objetivos de aprendizaje, 
7 
 
fundamentos, teorías, etc. para argumentar el logro de aprendizajes deseados, en 
el marco de la educación no formal, con su correspondiente intencionalidad, 
gradualidad y proyectiva y así, formar individuos conscientes, autónomos, con una 
capacidad crítica para decidir lo mejor hacia el logro de estilos de vida saludables. 
Es decir, es en la adultez donde se han acumulado los conocimientos y saberes 
que se han adquirido, conformando un conjunto de aprendizajes dirigidos y 
aplicables a cualquier situación de la vida cotidiana del individuo que le sirvieron y 
servirán para resolver problemas y tomar decisiones. 
Los procesos educativos propuestos en la presente propuesta, se sustentan en el 
marco de la Educación para la Salud y de los conocimientos que aporta la 
Andragogía, por ello permiten construir y sustentar la misma y mejorar la calidad 
de vida de las personas adultas, con el objeto de alcanzar un cambio de tipo 
conductual, educativo y social en la población de adultos. 
Detrás de esta propuesta hay un interés de tipo personal y profesional, y el 
objetivo es lograr, a través de una intervención pedagógica para el Autocuidado de 
la Diabetes Mellitus Tipo 2 (DMT2), generar el conocimiento básico de la 
enfermedad, influir en la adquisición de conductas, acciones (individuales y 
sociales) y nuevos hábitos de vida saludables. 
Esta propuesta de intervención pedagógica se diferencia de las demás 
básicamente, porque no sólo ofrece información sobre dicha enfermedad, sino 
conocimientos y algunas estrategias didácticas con actividades para un 
aprendizaje significativo sobre la DMT2 que pudieran trabajarse en dinámicas de 
grupo, con miras a difundir la comprensión de este tema. 
Dicho de otra forma, con el Autocuidado, así como con la promoción de hábitos 
saludables, vinculados con el manejo de emociones, la dieta, el control de peso y 
la actividad física, por citar algunos ejemplos, se podrán identificar los factores de 
riesgo asociados a la DMT2 y reconocer las medidas preventivas para alcanzar 
calidad de vida, estilos de vida saludables y llevar a cabo un plan de acción para la 
persona que vive con Diabetes. 
8 
 
En definitiva, esta propuesta busca realzar, tanto la intervención pedagógica como 
el plan de acción para la persona con DMT2, así como la difusión de 
conocimientos sobre este padecimiento, con la intención de disminuir, o al menos 
contribuir a disminuir las estadísticas que van en aumento. 
A continuación se expone la estructura de los capítulos que conforman la presente 
tesina; en el capítulo 1, se abordan las áreas de educación no formal, retomando 
conceptualización, características y la importancia específicamente en 
intervenciones pedagógicas. Por lo que respecta a la Educación para la Salud, se 
realiza un análisis de la historia del concepto, incluyendo los objetivos que ha 
tenido, y para finalizar, se revisa los programas actuales del sector salud para el 
abordaje de la Diabetes Mellitus Tipo 2. 
En el Capítulo 2, se trata el concepto de interdisciplinariedad y su importancia en 
las áreas de Educación para la Salud, también se aborda la educación de adultos 
o Andragogía en pacientes con enfermedades crónicas cuyo eje principal es el 
autocuidado como parte del tratamiento y prevención de la DMT2. 
Para disipar dudas y problemáticas a las que se enfrenta un paciente con DMT2, 
así como la familia, en el Capítulo 3 se explica en qué consiste la enfermedad, 
aspectos epidemiológicos, manifestaciones, tratamiento, las situaciones que vive 
un paciente, sus necesidades educativas y el impacto que dicho padecimiento 
tiene en la familia y la sociedad. 
Con el fin de comprender y visualizar el impacto de la DMT2 en México, el 
Capítulo 4 alberga la realización de un estudio de caso en la Unidad de Medicina 
Familiar no. 49 del Instituto Mexicano del Seguro Social. Haciendo una mención 
breve de la historia de la institución y de la estrategia educativa que lleva a cabo, 
denominada “Yo Puedo”. 
Y finalmente, en el Capítulo 5 se presenta la propuesta: “Cuídale lo dulce a tu 
vida“. Taller para el autocuidado de la DMT2. 
 
9 
 
Capítulo 1. Educación para la Salud. 
La complejidad de la sociedad y el surgimiento de las nuevas tecnologías han 
propiciado una necesidad de conocimiento. 
A través de la llamada sociedad del conocimiento, la educación no formal surge 
con el fin de brindar educación para todos, analizando las problemáticas y retos 
de la actualidad, rompiendo el paradigma de que la educación y el proceso de 
enseñanza-aprendizaje sólo se imparte en la escuela. 
En el presente capítulo se atienden dos ejes importantes en la vida del hombre 
como lo son la educación y la salud. Que al fusionarse con la educación no formal 
(ENF), dan pie a que se originen una diversidad de programas con miras a difundir 
medidas y acciones para abordar a la Diabetes Mellitus Tipo 2. 
 
 
1.1 La educación no formal. 
 
“La escuela ha dejado de 
considerarse el único lugar el único lugar 
de enseñanza […] y que la enseñanza y el 
aprendizaje han dejado de considerarse 
sinónimo de “escolaridad” Hamadache1. 
 
 
La educación no formal (ENF) surge como un medio de complementación de la 
educación formal, situándose como una herramienta que permite llevar educación 
para todos, capacitando desde ámbitos distintos los cambios e innovaciones que 
acontecen a lo largo de la vida. “La educación no formal surge debido a que la 
educación no puede considerarse como un proceso limitado en el tiempo y en el 
 
1 Sarramona, J., Vázquez, G. & Colom, A. (1998). Educación no formal. Barcelona: Ariel. p. 14. 
10 
 
espacio, confinado a las escuelas y medido por los años de asistencia”2. 
 
Desde el inicio, la ENF ya era vista como una estrategia formativa orientada a 
grupos que no habían podido recibir una educación básica completa, además de 
presentarse la necesidad de satisfacer respuestas extraescolares y demandas 
nuevas o diferentes a las del sistema formal. 
 
En pleno crecimiento demográfico de países tercermundistas, la educación no 
formal comienza a tomar gran auge en la década de los setenta. Y para Trilla su 
conceptualización alude “al conjunto de procesos, medios e instituciones 
específicas y diferenciadamente diseñadas en función de explícitos objetivos de 
formación o de instrucción, que no están directamente dirigidos a la provisión de 
los grados propios de sistema educativo reglado”3. 
 
Lo anterior manifiesta la posibilidad de educar, y por consiguiente responder a las 
necesidades educativas que la población demanda fuera de un sistema 
escolarizado. 
 
En este sentido, las siguientes citas más que definiciones, permiten vislumbrar 
algunas características y modos que definen de manera más completa lo que 
consideramos como educación no formal. Para Sarramona y colaboradores, la 
ENF esboza a “toda actividad organizada, sistemática, educativa, realizadafuera 
del marco del sistema oficial, para facilitar determinadas clases de aprendizajes a 
subgrupos particulares de la población, tanto adultos como niños”4. 
 
Mientras la perspectiva para Herrera es que la ENF es “un proceso educativo 
voluntario, pero intencionado, planificado pero permanentemente flexible, que se 
caracteriza por la diversidad de métodos, ámbitos y contenidos en los que se 
 
2 Coombs, P. & Ahmed, M. (1975). La lucha contra la pobreza rural. El aporte de la educación no formal. 
Madrid: Tecnos. p. 26-27. 
3 Trilla B., Jaume (2003). La educación fuera de la escuela. Ámbitos no formales y educación social. 
Barcelona. p. 30. 
4 Sarramona, J., Vázquez, G. & Colom, A. Op. cit. p. 12. 
11 
 
aplica”5. 
 
Para poder comprender a la educación no formal y todo lo que conlleva hay que 
entender que la diversidad es la particularidad principal, además de tomar como 
referencia ciertos criterios que deben considerarse en todo proceso educativo, 
como los enuncia Trilla en las siguientes características (Ver Tabla 1). 
 
 
 
Tabla 1 
 
Educación no formal. 
 
 
5 Herrera Menchén, María del Mar. (2006). La educación no formal en España. Revista de estudios de 
juventud. No. 74, 11-26. p. 13. [En línea] <http://www.injuve.es/sites/default/files/revista74_articulo1.pdf> 
Consulta: marzo 2016. 
Criterio Descripción 
 
 
Finalidades, 
objetivos y 
funciones. 
Se enfatiza la atención a las necesidades de la población; por ello, 
es más específica, sectorial y delimitada que la educación formal. 
Puede cubrir una amplia gama de funciones y dimensiones del 
proceso educativo con efectos a corto plazo. 
 
 
 
Educandos. 
Con frecuencia son los menos atendidos por el sistema escolar. 
En su mayoría, los programas se dirigen específicamente a un 
sector de la población; aunque en ocasiones, los grupos pueden 
variar en cuanto al género, la edad, etc. 
La participación es voluntaria, impulsados por intereses y 
necesidades personales, por lo que al evaluar la satisfacción de 
sus expectativas, deciden seguir o abandonarlo cuando lo crean 
conveniente. 
12 
 
 
 
 
Educadores. 
Al igual que los educandos, la participación es de manera 
voluntaria y poseen características variables; es decir, pueden ser 
personal profesional, semiprofesional o totalmente amateur, esto 
debido a que la exigencia de títulos académicos para desempeñar 
labores educativas es reducida. 
 
 
 
Contenidos. 
Son diversos como lo pueden ser sus objetivos. Permiten en gran 
medida la selección y la adaptación para la población y el 
contexto. Tienden a ser funcionales y presentes en la cultura. 
 
 
 
 
Métodos. 
 
 
No hay una metodología específica, los criterios revisados hasta el 
momento intervienen para determinar el método y las técnicas a 
utilizar. 
Se posee una inclinación al uso de metodologías activas e 
intuitivas, además tiene la apertura de adoptar nuevos métodos y 
técnicas. 
 
 
 
Ubicación. 
No se realiza en lugares creados específicamente para ese 
propósito ni exige lugares fijos. 
Pueden acogerse en cualquier espacio como: domicilios, museos, 
bibliotecas e incluso escuelas fuera de los horarios establecidos. 
 
 
 
Tiempo. 
Los horarios son flexibles, lo que permite que el educando lleve su 
propio ritmo de aprendizaje, distribuyendo el tiempo según sus 
ocupaciones. 
La duración de los programas no formales es menor que la de los 
cursos académicos. 
 
 
Gestión. 
Se realiza de manera independiente, la supervisión proviene de las 
instituciones que lo patrocinan e incluso, los educandos suelen 
participar. 
13 
 
 
Fuente: Elaboración propia a partir de Trilla, 2003, p. 32-39 
 
Por su parte Herrera también menciona características elementales sobre la ENF6: 
 
1. Al poder abordar una diversidad de temas, cada área permite desarrollar 
principios teóricos que las fundamenta, así como estrategias y valores 
determinados. 
2. Se dirige a destinatarios concretos y se realiza en contextos específicos. 
3. Al ser flexible y adaptativo, permite una continua redefinición de acuerdo 
al objeto, contexto y población en la cual se realiza. 
4. Cada área de la ENF necesita el aporte de varias disciplinas. 
5. La participación es voluntaria; por tanto, los proyectos deben ser 
atractivos, con metodologías lúdicas, en contextos diversos, con la 
utilización de diversos recursos y medios, así como la creación de 
climas de aprendizaje agradables. 
6. Propicia un papel activo de los participantes, desarrollando habilidades 
 
6 Ibídem, p.18. 
 
 
Financiación y 
costos. 
La financiación proviene directamente de los beneficiarios o de 
entidades públicas y privadas. 
Con relación al costo, éste es menor respecto al sistema formal, ya 
que permite atender a poblaciones muy numerosas y dispersas. 
 
 
 
Controles, 
evaluaciones y 
títulos. 
Para poder ingresar no es necesario contar con grados o títulos 
previos; sin embargo, ocasionalmente son requeridos los 
conocimientos previos, sobre todo desde la experiencia. 
La evaluación no se realiza mediante exámenes, sino a partir de la 
labor realizada. 
A pesar de que no se obtengan grados o títulos académicos, la 
formación es altamente valorada a nivel profesional. 
 
14 
 
sociales. “La ENF está muy vinculada a los procesos de participación 
activa, es más, es la encargada de enseñar a participar, así como a dar 
la voz a aquellos que no la tienen”7. 
7. La evaluación es colectiva, participan los responsables, educadores y 
educandos. Además de evaluar el proceso, se busca conocer la 
satisfacción de los participantes y responsables. 
 
La realidad y desde el ámbito pedagógico, la educación no formal apunta a una 
porción positiva de la educación donde se fragmentan los aspectos impuestos por 
la educación formal, como la estructura, la obligatoriedad y todos aquellos 
aspectos oficiales que hoy en día se presentan, posibilitando la toma de 
conciencia de sí mismo; además, que se advierte la atención de necesidades 
particulares, propiciando a su vez una diversidad de áreas como las que hace 
mención Herrera: “Educación ambiental, social, ocupacional, para la paz, 
intercultural, del tiempo libre y la salud”8. 
 
 
 1.2 Educación para la Salud. Su evolución como concepto. 
 
“La salud humana es un 
reflejo de la salud de la 
tierra”. 
 Heráclito de Efeso. 
 
La salud y la educación como términos independientes siempre han sido de vital 
importancia, además de ser un derecho fundamental en la vida de todos los seres 
humanos. 
Tanto el término de salud como el de educación, nacen desde la antigüedad pero 
las definiciones cambian a raíz del transcurso del tiempo, el cambio en la cultura, 
 
7 Ibídem, p. 21. 
8 Ibídem, p. 17. 
15 
 
los estilos de vida y todos aquellos sucesos que ocurren cuando una sociedad vive 
en una continua transformación. 
Ante tal importancia, son varios los significados que se le ha dado a la Educación 
para la Salud, ya que “frecuentemente se combina con otras medidas para mejorar 
el bienestar y fomentar el desarrollo de la comunidad”9 y las oportunidades de 
aprendizaje se dan en ámbitos formales, informales y no formales este último 
como parte de grupos de autoayuda, grupos comunitarios, etc. 
Todo evoluciona, y en concreto el concepto de Educación para la Salud (EPS) ha 
ido cambiando acorde a las necesidades de cada población y el entorno social y 
cultural. Por ello, se realiza un análisis sobre esta evolución, retomando distintos 
autores pero utilizando conceptos distintos. Por ejemplo, la EPS también suele ser 
nombrada como Educación persuasiva o Educación Sanitaria. Para lapresente 
investigación se citará el análisis de Luis Salleras Sanmartí. 
El desarrollo del concepto de Educación Sanitaria, el autor lo divide en dos etapas. 
La primera es denominada clásica e inicia desde principios del siglo XX hasta la 
década de los setenta. Los conceptos de esta etapa hacían referencia a acciones 
educativas dirigidas a los individuos, con el fin de responsabilizarlos de su propia 
salud y la modificación de conductas. Algunos ejemplos son los siguientes. 
Wood, en el año de 1926 menciona que “la Educación Sanitaria es la suma de 
experiencias que influyen favorablemente sobre los hábitos, actitudes y 
conocimientos relacionados con la salud del individuo y de la comunidad”10. 
En esta definición se hace un reconocimiento de factores internos del proceso 
como los conocimientos, actitudes y hábitos. Y por otra parte, es importante 
cuestionar la frase “suma de experiencias que influyen favorablemente”, que 
puede resultar un tanto confusa porque ¿a qué se le puede llamar así? 
 
9 UNESCO. Conferencia Internacional sobre educación de Adultos. (1997). Educación para la salud. 
Promoción y educación para la salud. p. 3. [En línea] 
<http://www.unesco.org/education/uie/confintea/pdf/6b_span.pdf> Consulta: abril 2016. 
10 Salleras Sanmartín, Luis. (1985). Educación Sanitaria: principios, métodos y aplicaciones. Madrid: Ediciones 
Díaz de Santos. p. 55. 
16 
 
Para Grout (1948) es “el procedimiento que entraña traducir los conocimientos 
acumulados acerca de la salud en normas de comportamiento adecuadas 
individuales o comunitarias, valiéndose de la educación”11. 
Con este concepto se recalca la importancia de que los educandos traduzcan e 
utilicen un lenguaje entendible para la población en general, ya que la gran 
mayoría de los profesionales sobre todo en materia de salud tienden a utilizar un 
lenguaje técnico que puede dificultar u obstaculizar la adquisición de 
conocimientos. 
En 1959, Gilbert enuncia: 
Instruir a las iridos al perfeccionamiento de su salud. Según este autor, la educación 
sanitaria pretende inculcar actitudes sanas y formar una mentalidad de salud, apoyada en 
sólidas convicciones, como guía para la elección de las reglas higiénicas de vida12. 
En la definición anterior es evidente la confusión entre el término de educación con 
instrucción. La transmisión de información adecuada es fundamental; sin embargo, 
no es garantía que las personas lo apliquen y modifiquen su comportamiento, ya 
que el individuo es un ser en constante cambio, con capacidad de adaptación en 
el medio que vive. Además de ello, también me cuestionaría ¿qué es una 
mentalidad en salud? 
Sin duda, la existencia de definiciones es mayor de las que cita Salleras; no 
obstante, la gran mayoría tiene elementos en común donde se destaca la 
modificación de conocimientos, actitudes y hábitos en relación a la prevención de 
enfermedades y el fomento de la salud; a través, de acciones educativas 
traducidas en prácticas y reglas para los individuos. 
En la misma línea es pertinente mencionar lo que la Organización Mundial de la 
Salud (OMS) plantea: 
La Educación para la Salud comprende las oportunidades de aprendizaje creadas 
conscientemente que suponen una forma de comunicación destinada a mejorar la 
alfabetización sanitaria, incluida la mejora del conocimiento de la población en relación con 
 
11 Ídem. 
12 Ídem. 
17 
 
la salud, y el desarrollo de habilidades personales que conduzcan a la salud individual y de 
la comunidad13. 
Con lo anterior, se hace hincapié que el proceso debe crearse y realizarse de 
forma consciente, contando con una planeación; cabe mencionar, que a diferencia 
de las definiciones anteriores ésta sólo se reduce a dos factores: los 
conocimientos y las habilidades. 
Posteriormente, la segunda etapa del análisis denominada “actual” inicia a 
mediados de la década de los setenta, del siglo XX; numerosas investigaciones 
demostraron que las conductas humanas no dependen sólo de factores internos al 
individuo, sino también externos, como los ambientales y sociales. 
La Educación para el paciente fue tomando relevancia dentro de la Educación 
Sanitaria, principalmente al ser vista como el medio para recuperar la salud, a 
través de la participación activa del sujeto y el cumplimiento de su tratamiento para 
control o curación. 
Una definición clave de esta etapa es la de Werner y Bower. Su trabajo se dirige a 
personas que viven en situación de pobreza, pero se declara que “la Educación 
para la Salud les ayuda para tener mayor control sobre su salud y su vida, por 
tanto, aportan los siguientes puntos”14. 
1. El aprendizaje debe tener una intención centrada en los individuos, con el 
fin de ayudar a los más débiles a hacerse fuertes e independientes. 
2. El cómo y qué se enseña es sumamente importante. 
3. La atención, el respeto y el interés mutuo es lo más significativo a la hora 
de enseñar. 
Con el argumento anterior, las diferencias con la etapa clásica son evidentes. El 
enfoque se inclina a las personas con bajos recursos debido a las desventajas a 
las que se enfrentan con una situación económica frente a los ricos. Pese a ello, 
 
13 OMS. (1998). Promoción de la salud. Glosario. Ginebra y Ministerio de consumo y sanidad. p. 13 [En línea] 
<http://www.msssi.gob.es/profesionales/saludPublica/prevPromocion/docs/glosario.pdf> Consulta: abril 2016. 
14 Werner y Bower. Citado por Torres F., I.A., et al. (2008). La Investigación en Educación para la Salud. Retos 
y perspectivas. Revista Médica de la Universidad Veracruzana. 8 (1), 45-55. p. 51. 
18 
 
la relación entre educador y educando es relevante; además, de lo que se enseña 
y la manera de hacerlo. 
Las prioridades para la promoción de la salud en el siglo XXI son profundizadas en 
la Declaración de Yakarta: 
La ampliación de la capacidad de las comunidades para la promoción de la salud exige 
educación práctica, adiestramiento para el liderazgo y acceso a recursos. El 
empoderamiento de cada persona requiere acceso seguro y más constante al proceso 
decisorio y los conocimientos y aptitudes indispensables para efectuar cambios15. 
Por último Salleras expone que la Educación Sanitaria posee objetivos 
específicos16: 
1. Que la salud sea patrimonio de la colectividad. 
2. Modificar conductas negativas, a través de la promoción tanto de conductas 
positivas como de cambios ambientales. 
3. Capacitar a las personas para que participen en la toma de decisiones 
sobre su salud en su comunidad. 
Después de analizar ambos períodos y conceptualizaciones, hay puntos que 
deben enfatizarse. El primero de ellos, es que la educación es un proceso 
permanente e inacabado, y aunque este término suele confundirse o utilizarse 
como sinónimo de formación, la realidad es que este último es parte del proceso 
educativo pero se refiere a resultados en concreto o a metas alcanzadas. 
Actualmente, nos encontramos en una situación vivencial paradójica ya que por un 
lado, nos encontramos en una época de gran auge y avances tecnológicos pero, 
por el otro lado grandes problemas socioculturales y un ritmo de vida acelerado 
que se hace notable sobre todo en las grandes ciudades y que nos traído como 
consecuencias problemas en diversos aspectos. Por ello, debemos estar 
preparados y considerar tanto a la Educación no formal como a la Educación para 
la Salud para atender la diversidad de necesidades que puedan suscitarse. 
 
15 OPS. (1997). Declaración de Yakarta sobre la Promoción de la Salud en el Siglo XXI. p. 9 [En línea] 
<http://www.who.int/healthpromotion/conferences/previous/jakarta/en/hpr_jakarta_declaration_sp.pdf> 
Consulta: abril 2016. 
16 Salleras Sanmartín, Luis. Op. cit. p. 59.19 
 
La importancia de la EPS radica principalmente en su objetivo como lo enuncia 
Álvarez: 
Transmitir conocimientos que motiven y potencien el saber y el saber hacer, así como el 
desarrollo de conductas encaminadas a la conservación de la salud del individuo, la familia 
y la comunidad, para lograr estilos de vida saludables. Debe ocuparse de que las personas 
conozcan, analicen las causas sociales, económicas y ambientales, que influyen 
negativamente en la salud; de desarrollar habilidades que lleven a una situación en la que 
las personas: deseen vivir sanas, sepan cómo alcanzar la salud, hagan lo que sea, 
individual y colectivamente, para mantener la salud, y busquen ayuda cuando lo 
necesiten17. 
De tal manera, se habla de un proceso formativo que debe atender tres áreas: los 
conocimientos, las actitudes y las habilidades que en conjunto permitan 
transformar la realidad y la vida de las personas, a través de beneficios para su 
salud y la de su comunidad. Ya que el ser humano por naturaleza es un ser social 
y todo lo que acontece en su entorno influye en sus acciones. 
Por consiguiente, el propósito de la EPS se resumiría con lo que menciona García: 
“mejorar la calidad de vida, es decir, aquellas acciones y cambios que se esperan 
lograr tanto de forma individual como social sean para el beneficio de ellos, 
apostando por la realización al máximo de sus posibilidades y capacidades”18. 
La Educación para la Salud surge ante la necesidad de ayudar a la población. 
Brindando información y a la vez educación a los individuos, con la finalidad de 
que participen y adquieran autorresponsabilidad en materia de salud; 
específicamente, en la adquisición de estilos de vida sanos, la ardua lucha contra 
las enfermedades que hoy en día aquejan a los seres humanos y sobre todo, 
lograr que todas las personas gocen de buena salud, no sólo aludiendo a la 
ausencia de enfermedad; sino, el desarrollo máximo sus potenciales mentales y 
físicos permitiéndoles vivir una vida productiva y en armonía. 
 
 
 
17 Álvarez S., R. (2002). Educación para la salud. Manual de educación. La Habana: Ciencias Médicas. p. 12. 
18 García Martínez, Alfonso. (2006). Contextos no formales y educación para la salud. Revista de estudios de 
juventud. No. 74, 49-70. p. 28. [En línea] < http://www.injuve.es/sites/default/files/revista74_articulo3.pdf> 
Consulta: abril 2016. 
20 
 
1.3 Programas integrados en el sector salud para abordar la problemática 
de la DMT2. 
 
 “Tan sólo por la educación puede el 
hombre llegar a ser hombre. El hombre no 
es más que lo que la educación hace de 
él”. 
 Immanuel Kant. 
 
La educación es parte fundamental en la vida del hombre. Desde la Antigua 
Grecia ya se pensaba en un movimiento educativo con carácter práctico, donde se 
estimulaba la iniciativa, el ingenio y la astucia. 
 
 A partir de ello, la educación fue tomando el carácter de fenómeno, cuya 
característica era asumir diversas formas y modalidades según las tipologías de 
los grupos humanos. Pero el atributo sustancial de la educación es la transmisión 
de cultura de una generación a otra, de manera que la nueva generación adquiera 
las habilidades necesarias para la supervivencia. De ahí, la educación ha tomado 
mayor relevancia, ya que al transmitir conocimientos y cultura de una generación a 
otra, la base de la sociedad es y será más sólida. 
 
Actualmente, para llevar a cabo esa transmisión de conocimientos se ejecutan 
programas con el fin de difundir diversas medidas o acciones relacionadas con la 
salud, en específico la atención de la Diabetes Mellitus Tipo 2 en adultos; de las 
cuales la gran mayoría se han desarrollado en el ámbito clínico por diversas 
instituciones u organizaciones. Poseen características o ejes principales como el 
diagnóstico, control y tratamiento, además de tener como misión el ayudar a 
revertir y/o controlar las cifras estadísticas que se tienen. 
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) define un 
programa de salud como “aquel proyecto que integra actividades y recursos para 
21 
 
cumplir objetivos precisos y bien definidos en torno a uno o varios problemas 
afines y se aplican los procedimientos para ejecutar las acciones con esa 
finalidad”19. 
Ante ello, es pertinente mencionar la diversidad de organizaciones que ponen al 
alcance de todos diversos programas en diversas temáticas de salud. La 
Organización Mundial de la Salud (OMS) es la principal, posee programas 
específicamente sobre la Diabetes Mellitus Tipo 2 donde la aborda como una 
enfermedad crónica con una gran tendencia al crecimiento en todo el mundo. 
Dicha Organización, cuenta con una gran labor y reconocimiento en todo el 
mundo. 
También, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) integra el tema de la 
DMT2 en su sección de Manejo Integrado de Enfermedades, un proyecto 
encaminado a la prevención de dicho padecimiento. 
En el caso específico de México, se cuenta con una gran gama de programas de 
salud enfocados al tratamiento y prevención de la DMT2 en la población adulta. 
No obstante, nuestro sistema de salud enfrenta un gran problema y se trata de 
una segmentación en el acceso a la población según el estatus, teniendo como 
resultado que la República Mexicana cuente con tres subsistemas de salud. (Ver 
figura 1 y 2). 
 
 
 
 
 
 
19 CEPAL. Capítulo VI. Los programas de salud. p. 139. 
[En línea] <http://www.cepal.org/publicaciones/xml/7/24507/CAP06.pdf> Consulta: abril 2016. 
22 
 
Figura 1 
Estructura del Sistema de Salud en México. 
 
 
Fuente: Gómez, O., et al. (2011). Sistema de salud en México. Salud Pública de 
México. Vol. 53(2):220-232. p. 221. 
 
 
 
23 
 
Figura 2 
Subsistemas de Salud en México. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Fuente: Elaboración propia a partir de Fundación Idea y Lilly Diabetes. Diabetes: ¿Qué 
hacer con el principal problema de Salud Pública en México? 
 
 
 
Subsistema de Seguridad 
Social. 
Se compone de instituciones 
como IMSS, ISSSTE, 
PEMEX, Secretaría de la 
Defensa, de la Marina 
Nacional, entre otras. 
 
Subsistema Asistencial. 
Integra el programa de 
Oportunidades, la Secretaría 
de Salud y el Seguro Popular 
 
Subsistema Privado. 
Alude a proveedores y 
aseguradoras privadas; así 
como a la población que 
tenga la capacidad de 
remunerar la atención 
médica. 
24 
 
Ante tal división, se han logrado poner en marcha programas, proyectos y 
estrategias por dependencias públicas en conjunto con el Gobierno de la 
República Mexicana, preocupados por el aumento de sobrepeso, obesidad y otros 
padecimientos en la población mexicana que han traído consigo enfermedades 
crónicas como la Hipertensión Arterial, Diabetes Mellitus, etc. 
La principal a mencionar es la Estrategia Nacional para la Prevención y Control del 
Sobrepeso, la Obesidad y la Diabetes. Puesta en marcha a finales del año 2013 
con el gobierno del Lic. Enrique Peña Nieto, concentra acciones para que México 
por medio del Sector Salud enfrente los problemas de Sobrepeso, Obesidad y 
Diabetes. Incluye también ejes enfocados a la promoción de una vida más 
saludable, la atención médica oportuna, la prevención y demás acciones que 
permitan una mejora en materia en la salud de la población. 
Asimismo, se cuenta con el programa PREVENIMSS ejecutado por el Instituto 
Mexicano del Seguro Social (IMSS) con su estrategia Chécate, Mídete, Muévete. 
Es considerado el programa más popular por su gran difusión en diversos medios 
de comunicación así como también, por el gran número de derechohabientes que 
alberga dicha institución. 
También el IMSS, cuenta con una nueva estrategiaeducativa “Yo Puedo”, la cual 
busca dotar al derechohabiente que cuenta con factores de riesgo como 
Sobrepeso u Obesidad o alguna enfermedad crónica, como Diabetes Mellitus e 
Hipertensión Arterial, de herramientas y habilidades para enfrentar la vida a través 
del autocuidado y el tratamiento médico oportuno, que les prevengan de 
complicaciones, discapacidades y muerte prematura. 
De igual manera y con lineamientos similares podemos encontrar a 
PREVENISSSTE del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales (ISSSTE). 
La misión de ambos programas radica en la prevención, control e identificación 
oportuna de enfermedades, nutrición, promoción de salud, sexualidad, entre 
muchos otros aspectos, además de proporcionar a sus derechohabientes acciones 
de información y educación. 
25 
 
Otro programa de la misma institución es el denominado Programa de Manejo 
Integral de Diabetes por Etapas (MIDE). Está centrado en reconocer al paciente, 
con un modelo de empoderamiento. Se utiliza un enfoque multidisciplinario en el 
primer nivel de atención, con médico, enfermera, trabajador social, odontólogo, 
psicólogo y nutriólogo; rompiendo los paradigmas de la atención especializada.20. 
El Instituto Carlos Slim de la Salud, es una organización mexicana que cuenta con 
un modelo denominado CASALUD. Se aborda la atención a las enfermedades 
crónicas no transmisibles como es el caso de la Diabetes Mellitus, salud materna e 
infantil y la prevención de enfermedades por grupos de edad. Se basa en cuatro 
ejes21: 
1. Disponibilidad de infraestructura física y humana apropiada 
2. Impulso al abasto adecuado de insumo y pruebas de laboratorio 
3. Fortalecimiento del capital humano 
4. Diseño de innovaciones tecnológicas y de conectividad. 
También, la Federación Mexicana de Diabetes se encarga de lo relacionado a la 
Educación en Diabetes, incluyendo información acerca de la prevención, 
síntomas, el cuidado integral por ejemplo de pies, dientes, ojos, etc. y 
recomendaciones necesarias para el control y tratamiento del padecimiento. 
Si bien, los programas y estrategias antes mencionados no son los únicos, si son 
los más importantes o de mayor reconocimiento, ya que albergan a la gran 
mayoría de la población mexicana y aunque a ciencia cierta, no se conoce si están 
diseñados por pedagogos lo que sí es que todos tienen la finalidad de educar, 
formar y brindar conocimientos e información a los sujetos para autocuidarse y 
prevenir algún padecimiento como la DMT2 por lo que podría denominarse 
programas educativos; sin embargo, el aporte o sustento pedagógico desde el 
ámbito de la Andragogía y la Educación a pacientes posiblemente, enriquecerían 
 
20 Sánchez Díaz, Iyari. (2011). Introducción al Programa de Manejo Integral de Diabetes por Etapas (MIDE). 
p.6. [En línea] 
<http://sgm.issste.gob.mx/medica/diabetes/doctos/Curso%20de%20Induccion%20al%20MIDE/Introduccion%2
0al%20programa%20MIDE.pdf> Consulta: abril 2016. 
21 Fundación Carlos Slim Salud. [En línea] <http://www.salud.carlosslim.org/casalud/> Consulta: abril 2016. 
26 
 
los conocimientos y la información a adquirir y a su vez, se obtendrían resultados 
más significativos y óptimos desde la eficacia y eficiencia para la población. 
Por tanto, la importancia de que existan programas así, estriba en la oportunidad 
de desarrollar acciones pedagógicas a favor de la difusión de información, el 
compartir estrategias de prevención y atender las tres áreas de todo proceso 
formativo: los conocimientos, habilidades y actitudes, formando parte de su vida 
diaria y a su vez, obtengan beneficios para su salud ya que todo ello puede ser de 
utilidad para las personas con el padecimiento de Diabetes Mellitus Tipo 2, con 
factores de riesgo, para las familias y el equipo interdisciplinario en el manejo de la 
enfermedad. 
El ser humano es un ser social y todo lo que acontece en su entorno afecta 
directamente en las personas y por consiguiente en su salud. Por tal motivo, en el 
siguiente capítulo además de abordar el término interdisciplinariedad, también se 
hace mención de la Andragogía o también nombrada Educación de Adultos, ya 
que el proceso formativo requiere de una contextualización y planificación, y es en 
la etapa de la adultez donde el sujeto vive según su propia responsabilidad, 
además de abstraer, generalizar, deducir y construir todo tipo de razonamiento y 
conductas. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
27 
 
Capítulo 2. Interdisciplinariedad, Salud y Andragogía: El Autocuidado en 
pacientes con DMT2. 
 
Es imprescindible no sólo proporcionar información, sino también conocimientos 
para vivir sanamente. Se requiere encontrar y proporcionar una manera para 
empoderar a las personas a cuidar su cuerpo, su salud y encontrar su bienestar 
físico y mental. Parte de ello, se puede lograr a través la Interdisciplinariedad, la 
Andragogía y la Educación para la Salud orientadas al Autocuidado de la Diabetes 
Mellitus Tipo 2 (DMT2). 
 
 2.1 Interdisciplinariedad en la Educación para la Salud. 
A través de la historia, la educación es y será una parte fundamental en la vida del 
hombre por lo que se ha convertido en la estructura de la sociedad y en objeto de 
reflexión y preocupación dado que por medio de ella, se transmiten principalmente 
ideas, sentimientos, valores e información a todos los individuos. “El aprendizaje 
como estilo individual interdisciplinar se ha constituido en una esperanza para 
optimizar los procesos de enseñanza escolar, especialmente frente al denominado 
“tiempo de la explosión del conocimiento”22. 
“Ser parte de la realidad social, es estar constituida por procesos, culturas, 
contenidos, intencionalidades y asumir diversas formas o modalidades que le han 
dado a la educación la característica de ser interdisciplinaria”23; debido a que son 
diversas las disciplinas que intervienen en el estudio del campo educativo, 
teniendo dimensiones especificas de abordar. 
 
22 Frega, Ana Lucia. (2007). Interdisciplinariedad: enfoques didácticos para la educación general. Buenos 
Aires: Bonum. p.9. 
23 El concepto de interdisciplinariedad surge por primera vez con el sociólogo Louis Wirtz en el año de 1937; al 
descomponer el término podemos encontrar el prefijo inter, proviene del latín y es entendida como sinónimo 
de entre o en medio; la palabra disciplina que integra a la ciencia y sus subdivisiones y por último las 
terminaciones ar y riedad le dan carácter o acción a la palabra. 
28 
 
“La investigación de los fenómenos sociales no es patrimonio de una sola 
disciplina, sino que requiere del concurso de diversas profesiones que permitan 
con sus respectivos enfoques y herramientas teórico-metodológicas un análisis 
más completo y consistente de los problemas”24. 
Lo anterior nos lleva a considerar, que lo interdisciplinar no es únicamente 
educativo, ya que todo cuerpo de conocimientos puede ser etiquetado como 
disciplina. Para Wallerstein, “las disciplinas son agrupaciones intelectualmente 
coherentes de objetos de estudio distintos entre sí”25. 
Otra conceptualización es “una rama del saber que abarca el conjunto de 
conocimientos de un ámbito específico, agrupados de modo sistemático”26. 
Por consiguiente, “el estudio de la relación entre disciplinas condujo a la aparición 
del término interdisciplinariedad”27, el cual es aplicable en los fenómenos sociales 
y naturales; que ponen en evidencia la complejidad, importancia y dimensión 
como lo menciona Edgar Morin. 
La interdisciplinariedad puede significar pura y simplemente que diferentes disciplinas se 
sientan en una misma mesa, en una misma asamblea, como las diferentes naciones se 
reúnen en la ONU sin poder hacer otra cosa que afirmar cada una sus propios derechos 
nacionales y sus propias soberanías en relación con las usurpaciones del vecino. Puedetambién querer decir intercambio y cooperación28. 
En términos generales se le llama interdisciplinariedad a “la relación o 
comunicación existente entre dos o más disciplinas que tienen por objeto abordar 
problemas complejos”29, manteniendo intacto su objeto de estudio pero a su vez, 
ligando la praxis con unidad y autonomía. “La presencia de interdisciplinariedad 
sería conformar un mundo grande en el que se incluyen diferentes tipos de 
 
24 Rojas Soriano, Raúl. (2000). Guía para realizar investigaciones sociales. 34ª Ed. México: Plaza y Valdés. 
p.28. 
25 Frega, Ana Lucia. Op. Cit. p.16. 
26 Sánchez Cerezo, Sergio. (1995). Diccionario de las ciencias de la educación. México: Santillana. p. 428. 
27 Frega, Ana Lucia. Op. Cit. p. 17. 
28 Morin, Edgar. (2010). Sobre la interdisciplinariedad. Publicaciones Icesi, no. 62. p. 15. 
29 Cachón Reyes, Jorge. Educación, Interdisciplinariedad y Pedagogía. p. 3. [En línea] 
<http://www.comie.org.mx/congreso/memoriaelectronica/v09/ponencias/at08/PRE1178838372.pdf> Consulta: 
agosto 2016. 
29 
 
realidades, no tratando de mirar a través de un único lente, sino que se invita a ser 
explorado desde diferentes mapas, hechos desde múltiples perspectivas”30. 
Actualmente, el mundo que se percibe es sin duda cada vez más complejo, y las 
circunstancias que se hacen presentes, necesitan perspectivas o ángulos de 
visión diferente para ser resueltos. De ahí reside la importancia de esa interacción 
entre disciplinas; principalmente por el enriquecimiento recíproco, las 
transformaciones metodológicas y el diseño de nuevas estrategias para la 
resolución de conflictos. 
En todas las áreas de conocimiento existe tal interacción, por lo que la Educación 
para la Salud no es la excepción; debido a que puede entenderse como “cualquier 
combinación de oportunidades de aprendizaje encaminadas a facilitar la adopción 
voluntaria de comportamientos que mejoren o sirvan al sostenimiento de la 
salud”31. 
“Frecuentemente, se combina con otras medidas para mejorar el bienestar y 
fomentar el desarrollo de la comunidad”32. Las oportunidades de aprendizaje se 
dan en ámbitos formales, informales y no formales, éste último como parte de 
grupos de autoayuda, grupos comunitarios, etc. 
En la Educación para la Salud, la población es partícipe de una serie de 
conocimientos de tipo médico, pedagógico, psicológico, antropológico, filosófico, 
sociológicos y de teoría de la comunicación33 que impulsan razonadamente a la 
acción y responsabilidad. 
 
30 Bernardi, R. Un único cuerpo, pero suficientemente complejo. El diálogo entre el psicoanálisis y la medicina. 
En A. Maladesky y M. López (comp). Psicosomática. Aportes teóricos-clínicos en el siglo XXI. Buenos Aires: 
Lugar Editorial, 2005. p. 45. 
31 Perea Quesada, Rogelia. (2001). La educación para la salud. Reto de nuestro tiempo. Educación XX1 (4). 
Universidad Nacional de Educación a Distancia. Madrid, España. p. 27. 
32 UNESCO. Conferencia Internacional de Educación de las Personas Adultas. (1997). Promoción y educación 
para la salud. p. 3. [En línea] <http://www.unesco.org/education/uie/confintea/pdf/6b_span.pdf> Consulta: julio 
2016. 
33 Calero, Juan del Rey. (1998). Como cuidar la salud: su educación y promoción. Madrid: Harcourt Brace. p. 1 
30 
 
Dentro de los conocimientos pedagógicos, podemos situar a la Andragogía, donde 
ambas continuamente se armonizan puesto que poseen una relación 
interdisciplinaria, debido a que el sujeto conserva una integridad biopsicosocial y 
cultural por lo que es necesario entablar un puente de comunicación que permita 
colaborar en la prevención y autocuidado de las enfermedades en los adultos 
como es el caso de la DMT2. 
La Diabetes Mellitus Tipo 2 es parte de un fenómeno social que ha atraído un 
gran interés específicamente de tipo científico y educativo, además de incluir 
diversas disciplinas con intereses en común como el analizar la situación de la 
enfermedad, el bienestar del individuo, su calidad de vida y la prevención de 
eventos adversos. 
Por lo tanto, el ámbito de la salud en atención a personas adultas requiere de 
trabajo en equipo donde se posibilite la elaboración de recursos y la articulación 
del bagaje conceptual, metodológico y práctico de las disciplinas intervinientes, 
permitiendo visualizar la problemática real y a su vez, que el sujeto aprenda a vivir 
con su padecimiento, mejore su calidad de vida y se sienta apoyado por el afecto 
de sus familias y los conocimientos, habilidades y actitudes que los profesionales 
le aporten. 
 
 2.2 Andragogía: Educación de adultos. 
La Educación de Adultos comúnmente se confunde con la alfabetización de 
quienes no pudieron asistir a la escuela en la infancia y por tanto, a menudo se 
desconocen sus alcances y orígenes; sin embargo, hoy en día su función tiende a 
alcanzar metas más ambiciosas en beneficio de los seres humanos. 
Sus antecedentes se remontan desde la Edad Media, donde los gremios y 
corporaciones artesanales educaban a sus miembros en estilos y habilidades del 
oficio siguiendo reglas y principios. 
31 
 
En el siglo XVIII, se trataba de una educación intencionada y motivada en 
preocupaciones de tipo moral y religioso; se capacitaba para la lectura de la Biblia 
y se promovía la formación de bibliotecas. 
Para el siglo XIX, la Educación de Adultos ya tenía un significado acorde a la 
actualidad, en lugar de preocupaciones se impartían actividades debidamente 
organizadas, metódicas e institucionales. 
Posteriormente, en el siglo XX la educación abarcaba alfabetización, instrucción 
básica y elemental y capacitación técnica o profesional con fines laborales. Y a 
partir de la década de los 50, se comenzaron a realizar reuniones internacionales 
permitiendo establecer una conceptualización entendida principalmente como la 
educación que estaba destinada a los adultos que no habían tenido una educación 
formal, y cuyo propósito era el de proporcionar elementos básicos a los individuos 
para su desarrollo personal y su participación en la vida social. 
Desde 1949, la UNESCO ha organizado cinco Conferencias Internacionales de 
Educación de Adultos. La última, acogida por Alemania en julio de 1997, condujo a 
la adopción del documento: Declaración de Hamburgo donde se establece que la 
Educación de Adultos es 
El conjunto de procesos de aprendizaje, formal o no, gracias al cual las personas cuyo 
entorno social considera adultos desarrollan sus capacidades, enriquecen sus 
conocimientos y mejoran sus competencias técnicas o profesionales o las reorientan a fin 
de atender sus propias necesidades y las de la sociedad”34. 
La Educación de Adultos o también denominada Andragogía se deriva del griego 
“andros” que significa “hombre” y “agogus” que es “conductor o guía”. Por tanto, el 
concepto se refiere a las técnicas de enseñanza y aprendizaje que se utilizan con 
personas adultas. 
Etimológicamente el término “adulto” procede del verbo latino “adolescere”, que 
significa “crecer”, y es la forma del participio pasado “adultum”; significa, por lo 
 
34 UNESCO. VI Conferencia Internacional de Educación de Adultos (CONFITEA VI): Informe nacional sobre el 
desarrollo y el estado de la cuestión sobre el aprendizaje y la educación de adultos (AEA). p. 1 [En línea] 
<http://www.unesco.org/fileadmin/MULTIMEDIA/INSTITUTES/UIL/confintea/pdf/National_Reports/Latin%20A
merica%20-%20Caribbean/Colombia.pdf> Consulta: junio 2016. 
32 
 
tanto, “el que ha terminado de crecer o de desarrollarse, el crecido”35. Sin 
embargo, aunque el término adultez sea sinónimo de madurez, las necesidades 
de recibir educación son imprescindibles y perdurables. 
Para J. Folliet, “un adulto es aquel hombre que ha dejado de crecer y ha logrado la 
talla normalen todos los rasgos de su ser”36. Es un sujeto con libertades, que vive 
y actúa en la sociedad según su propio juicio y responsabilidad. 
Para determinar con mayor precisión el concepto de adulto existen tres criterios 
clave37: 
1. Aceptación de responsabilidades. El adulto es aquel que sabe que es 
responsable de sus actos y que además desea serlo. Reflexiona y calcula 
las consecuencias de lo que decide y realiza, responde de sus actos y 
palabras. 
2. El predominio de la razón. El adulto es capaz de ver con objetividad el 
mundo y los acontecimientos de la vida. Su capacidad se basa en abstraer, 
generalizar, juzgar, deducir e inducir, seguir y construir todo tipo de 
razonamientos. 
3. El equilibrio de la personalidad. El adulto es aquel que ha concluido el 
crecimiento de su ser en todas sus dimensiones, es decir en el cuerpo y en 
el espíritu, en el sentimiento y la sexualidad, en la razón y en la moralidad 
de la propia conducta. 
El hombre adulto durante toda su vida, recibe influencias socio-ambientales que 
contribuyen a producir cambios en su formación que dan pie a una Educación 
integral que, según el Ministerio Educación y Ciencia integra cuatro áreas 
esenciales: 
1. Formación orientada al trabajo. 
 
35 Ludojosky R. (1986). Andragogía: Educación de adultos. Buenos Aires: Guadalupe. p. 17. 
36 Ibídem, p.18. 
37 Ibídem, p. 18-20. 
33 
 
2. Formación para la participación social (derechos y responsabilidades). 
3. Formación para el desarrollo personal. 
4. Formación básica y general. 
La Educación de Adultos comprende todo aquel cambio de actitudes y 
comportamientos y a su vez, la adquisición de conocimientos, conceptos y 
aptitudes nuevas que el adulto es capaz de aprende. 
El aprendizaje es un proceso personal que forma parte de la naturaleza del 
hombre, implica un cambio de conocimientos, conductas y experiencias como 
resultado de una necesidad interna o de una demanda del medio. La persona 
adulta posee distintas características físicas y mentales que lo llevan a aprender y 
educarse de manera distinta a como lo hacen los niños y los jóvenes. El ser 
humano aprende de la misma manera, sólo en lo que difieren las etapas evolutivas 
es en el proceso de aprendizaje, que en el caso de los adultos lo hacen mediante 
el ensayo y error debido a su pensamiento abstracto, sus necesidades e intereses. 
Algunas características particulares en la Educación de adultos son:38 
 El aprendizaje se basa en la experiencia previa. 
 Tienen la capacidad de prever y planear. 
 Tienen mayor capacidad de selección debido a la facultad de abstracción, 
por lo que no se debe forzar la memorización. 
 El comportamiento es más estable debido a la madurez. 
 El adulto tiene mayor resistencia a la fatiga, lo que permite planear sesiones 
con mayor flexibilidad, motivación, intensidad y duración. 
 La atención es más estable, lo que da mayor capacidad de aprendizaje. 
 Posee mayor capacidad de determinación, no se distrae con facilidad y 
 
38 Villalobos Pérez-Cortés, Elvia M. (2002). Didáctica integrativa y el proceso de aprendizaje. México: Editorial 
Trillas. p. 94. 
34 
 
tiene control de su voluntad. 
 Cuenta con mayor capacidad de retención, no sólo en cantidad, sino en 
durabilidad, lo que facilita el aprendizaje. 
 Posee una carga cultural, lo que dificulta inculcar determinadas formas de 
comportamiento, formación de hábitos y actividades. 
 Tiene mayor capacidad de síntesis, de asociación. 
 Reciente con facilidad las experiencias desagradables. 
 El placer en el adulto se deriva de vivencias de carácter espiritual e 
intelectual. 
 Percibe mejor los estímulos auditivos debido a su mayor volumen de 
experiencias de vida y mayor capacidad de abstraer y asociar 
conocimientos. 
Por consiguiente, el aprendizaje de los adultos está estrechamente ligado a la 
práctica real y personal, por lo que al transmitirle cualquier tipo de información 
será necesario tomar en cuenta su experiencia de vida, sus conocimientos, 
habilidades, actitudes, valores y costumbres; con la finalidad de que la persona se 
sienta identificada e interesada ya que lo que escuche, puede aplicarlo a su vida y 
a su relación con diversos escenarios como el hogar, trabajo y sociedad. 
Lindeman identifica los siguientes supuestos en el aprendizaje de los adultos39: 
1. Los adultos se motivan a aprender cuando experimentan necesidades e 
intereses que el aprendizaje satisfacerá. 
2. El aprendizaje de los adultos se centra en la vida; por lo tanto, las unidades 
apropiadas para organizarlo son las circunstancias de la vida, no los temas. 
3. Las experiencias es el recurso más rico para el aprendizaje de los adultos. 
 
39 Knowles S., Malcom. (2001). Andragogía: el aprendizaje de los adultos. 5ª Ed. México: Oxford University 
Press. p. 44. 
35 
 
4. Los adultos tienen una profunda necesidad de dirigirse a sí mismos. 
5. La educación de adultos debe procurar las condiciones óptimas para 
considerar las diferencias en cuanto al estilo, tiempo, espacio y ritmo de 
aprendizaje. 
El adulto es un ser capaz de determinar sus propias necesidades de aprendizaje 
para alcanzar sus metas personales, laborales y sociales. Y aunque posee 
características motivantes para su proceso de aprendizaje, lo cierto es que 
también cuenta con factores internos y externos que pueden limitar o condicionar 
tal proceso40: 
 Factores internos. 
1. La capacidad física: Debido principalmente al desgaste en las funciones del 
cuerpo humano, el adulto se siente incapaz para continuar aprendiendo. 
2. La capacidad sensorial: las capacidades sensoriales que primero se 
deterioran con la edad son la visión y la audición, por lo que el adulto 
muestra inseguridad y apartamiento. 
3. La capacidad intelectual: el adulto ya no es capaz de llevar con rapidez, 
exactitud o eficiencia de sus tareas mentales. La inteligencia se estanca y la 
memoria disminuye, tales casos constituyen una dificultad seria para el 
aprendizaje. Existe preocupación por el fracaso. 
4. Los factores emocionales: Las concepciones contemporáneas del 
aprendizaje enfatizan la incidencia de los factores afectivos o emocionales 
como determinantes del éxito o fracaso en las situaciones de aprendizaje. 
Las propias experiencias infantiles pueden haber dejado sus marcas, quien 
cuando niño fracasó en la escuela es probable que enfrente la escolaridad 
adulta con recelo. 
5. La resistencia al cambio: Se dice que hay transferencia negativa cuando un 
 
40 Palladino, Enrique. (1984). Educación de adultos: Guía de estudio. Buenos Aires: Humanitas. p. 65. 
36 
 
aprendizaje previo incomoda, interfiere o dificulta la adquisición de un 
nuevo aprendizaje, esto es común, todo aprendizaje tiende a repetirse, y 
cuando se lo requiere modificar se resiste a ello. 
 Factores externos. 
1. Trabajo: En la mayoría de los casos el alumno adulto trabaja. Una jornada 
de trabajo causa cansancio, fatiga, disminuye las capacidades de atención 
y de esfuerzo mental. Ante esta situación el adulto dice “estoy cansado y no 
tengo tiempo”. 
2. Tiempo disponible: El adulto se escuda en el no tener tiempo para otras 
cosas, le da más prioridad a las actividades que le proporcionan un 
bienestar y por lo tanto dedica todas sus capacidades a ellas. 
3. Vida familiar: Los adultos tienen un compromiso con su familia, tienen que 
proporcionar el bienestar en su hogar y esto les lleva tiempo, dedicación y a 
menudo les trae preocupaciones, por lo que considera que en ese momento 
lo más importante de su rol es la responsabilidad de su propia familia. 
4. El medio social: El contexto social dentro del cual se mueve el adulto puede 
ser unestímulo o bien un freno para sus ambiciones de perfeccionamiento 
escolar, toda persona está rodeada de amigos, compañeros de trabajo, 
vecinos o conocidos, de los cuales el adulto recibe opiniones y estos llegan 
a influir de cualquier manera en la conducta personal. 
Todo lo descrito anteriormente son factores para que el adulto se sienta motivado 
o limitado para continuar el proceso de aprendizaje, además como lo menciona 
Jaime Díez Castrejón “hay una idea muy vieja; la de que la educación corresponde 
solamente a la infancia y a la juventud”41. Tal prejuicio genera que en nuestra 
sociedad con frecuenta se escuchen ideas como “a su edad pretende estudiar” “si 
no lo hizo de joven menos ahora de grande”, entre otros muchos comentarios. 
 
41 Castrejón D., Jaime. (1974). Educación permanente: principios y experiencias. México: Fondo de Cultura 
Económica. p. 11. 
37 
 
Ante tal situación y al momento de ejecutar una actividad educativa, el pedagogo, 
facilitador, docente o guía del aprendizaje debe tomar en cuenta lo siguiente42: 
1) Necesidad de saber. Los adultos necesitan saber por qué deben de 
aprender algo. Tough descubrió que cuando los alumnos se disponen a 
aprender algo por su cuenta, emplean una energía considerable en sondear 
los beneficios que obtendrán y los costos de aprenderlo. 
2) El autoconcepto de los alumnos. Los adultos tienen un autoconcepto de 
seres responsables de sus propias acciones, de su propia vida. Una vez 
obtenido sienten una necesidad psicológica profunda de ser considerados y 
tratados como capaces de dirigirse. 
3) El papel de las experiencias de los alumnos. Los adultos llegan a una 
actividad con un mayor volumen y una calidad distinta de experiencias que 
los jóvenes. Por la simple virtud de haber vivido más tiempo, han 
acumulado mucho más experiencias que los jóvenes, pero también tienen 
experiencias diferentes. 
4) Disposición de aprender. Los adultos están dispuestos a aprender lo que 
necesitan saber y sean capaces de hacer, con el propósito de enfrentar las 
situaciones de la vida real. 
5) Orientación del aprendizaje. Los adultos se motivan a aprender en la 
medida en que perciban que el aprendizaje les ayudará en su desempeño y 
tratar con los problemas de la vida. 
6) Motivación. Mientras que los adultos responde a algunos motivadores 
externos (mejores empleos, ascensos, salarios, etc.), los motivadores más 
potentes son las presiones internas (el deseo de incrementar la satisfacción 
laboral, la autoestima, la calidad de vida, etc.). 
Un adulto es un sujeto responsable de su aprendizaje, motivado y convencido de 
continuar su proceso y construir su propia realidad. Posee iniciativa, necesidades 
 
42 Ibídem, p. 69-73. 
38 
 
personales y profesionales de crecer, con autodeterminación y potencialidad de 
desarrollar actividades y solucionar problemas; así como vivencias particulares 
que los motivan a participar en procesos de educación formal, no formal e 
informal. 
Sin duda, la Educación de Adultos es y será sumamente importante ya que 
les permite a las personas consideradas por la sociedad como adultos, desarrollar 
actitudes, enriquecer sus conocimientos, mejorar sus competencias técnicas o 
profesionales, generando un enriquecimiento humano y un desarrollo 
socioeconómico y cultural equilibrado e independiente43. 
 
 2. 3 Educación a pacientes con enfermedades crónicas. 
Cada vez es más frecuente la presencia de enfermedades crónicas como el 
Cáncer, SIDA, Diabetes Mellitus, etc. y tanto la Educación como la Promoción de 
la Salud han tenido que diseñar e implementar los medios y las estrategias 
enfocadas a las necesidades que las personas afectadas presentan. 
Una concepción moderna de la promoción de la salud debe tener como objetivo no sólo 
conseguir una vida sana, sino también lograr que la enfermedad se afronte 
adecuadamente y se conviva con ella de forma aceptable. Es decir, también es importante 
una educación para la enfermedad, pues la enfermedad convive interrumpida o 
ininterrumpidamente con nosotros desde que nacemos o incluso antes. Por ello, en el 
correcto tratamiento y cuidados del enfermo, debe incluirse aquellas medidas que 
contribuyan a recobrar o mejorar su estado de salud, a prevenir recaídas, y a favorecer su 
calidad de vida y la de quienes le rodean44. 
La Promoción de la Salud puede analizarse desde muchas vertientes y por 
diversos profesionales, pero puede ser más clara al comprender que la prevención 
se distingue de tres tipos: primaria, secundaria y terciaria. La primaria comprende 
el conjunto de medidas encaminadas a evitar que se produzcan las enfermedades 
y otros trastornos de la salud. La secundaria se trata de diagnosticar a tiempo las 
enfermedades a favor de un mejor pronóstico. Y la terciaria, son las medidas 
 
43 Sarrate, María Luisa. (1997). Educación de Adultos: evaluación de centros y de experiencias. Madrid: 
Narcea. p. 30. 
44 Gallar, M. (2006). Promoción de la salud y apoyo psicológico al paciente. Madrid: Paraninfo. p. 8. 
39 
 
encaminadas a mejorar la calidad de vida de la persona enferma45. 
El término Educación del Paciente (EP) y el más reciente de Educación 
Terapéutica (ET) se reservan a la prevención secundaria y terciaria; es decir, el 
diagnóstico temprano y reducir o evitar las complicaciones y secuelas de la 
enfermedad. 
En 1966, Alfonso menciona que a diferencia de la Educación para la Salud, que 
tiene como finalidad promover la salud y prevenir la aparición de enfermedades. 
La Educación del Paciente es una prevención secundaria o más bien terciaria, dirigida 
exclusivamente a los individuos afectados por una enfermedad crónica. Su finalidad, es 
capacitar al paciente en la vigilancia del tratamiento, y la prevención de las complicaciones 
derivadas de su propia enfermedad. En definitiva, se trata de que el paciente sea capaz de 
gestionar su propia enfermedad”46. 
Por otro lado, la OMS en el año de 1998 trató de diferenciar la Educación para la 
Salud que se enfocaba en la prevención de enfermedades y el proceso que se 
deben de seguir las personas con algún padecimiento, surgiendo el término 
Educación Terapéutica: 
Conjunto de actividades educacionales esenciales para la gestión de las enfermedades 
crónicas, llevadas a cabo por los profesionales de la salud formados en el campo de la 
educación, creadas para ayudar al paciente o grupos de pacientes y familiares a realizar su 
tratamiento y prevenir las complicaciones evitables, mientras se mantiene o mejora la 
calidad de vida”47. 
“Es un proceso necesario para asegurar la calidad del tratamiento, ya que no es 
un añadido; es parte del mismo y aporta valor a toda la terapia”48. 
Evidentemente, el paciente es lo más importante y el principal afectado ante la 
presencia de una enfermedad; sin embargo, es un ser social que necesita de 
familia y amigos los cuales, también suelen verse perturbados por la situación y 
además, el medio social puede afectar el comportamiento del paciente o ser una 
herramienta de motivación que permita el cumplimiento de los propósitos de la 
 
45 Vignolo, Julio, et al. (2011). Niveles de atención, de prevención, y atención primaria de la salud. Archivos de 
Medicina Interna. 33(1). [En línea] http://www.scielo.edu.uy/pdf/ami/v33n1/v33n1a03.pdf> Consulta: abril 2017. 
46 Alfonso, Ma. Teresa. Educación al paciente crónico. p. 2 [En línea] 
<http://www.revistaseden.org/files/art565_1.pdf> Consulta: julio 2016. 
47 Rico, M. A, Calvo I., Díaz G., I & Gimena, M. (2008). Educación Terapéutica (ET) en pacientes con 
obesidad. Revisa Española de Nutrición Comunitaria. 14 (3). p. 172-178. [En línea] 
<http://www.fesnad.org/resources/files/Publicaciones/RevNutCom/6.pdf>Consulta: julio 2016. 
48 Figuerola, Daniel. (2011). Manual de educación terapéutica en diabetes. Madrid: Díaz de Santos. p. 3. 
40 
 
Educación Terapéutica. 
También, es pertinente mencionar que no sólo los profesionales de la salud son 
los que deben de llevar a cabo las intervenciones educativas, se requiere de un 
equipo interdisciplinario; es decir, la colaboración y participación de más 
profesionales que complementen el proceso. 
Para García y Suárez, la Educación Terapéutica entra en juego cuando la 
enfermedad ya está instalada y su objetivo radica en: 
Formar, convencer, motivar y fortalecer a las personas con enfermedades no transmisibles 
para que participen activamente en su tratamiento; aprendan a acoplar las posibles 
limitaciones de su enfermedad con su actividad diaria y se motiven para afrontarlas uno y 
otro día49. 
En las definiciones anteriores y en los términos de Educación para la enfermedad, 
Educación del Paciente y Educación Terapéutica, encontramos diferentes 
maneras de llamar a la Educación en pacientes con enfermedades crónicas; y a 
pesar de poseer diversas perspectivas, coinciden en elementos como, el papel 
activo que el paciente representa al momento de gestionar y controla su 
padecimiento, así como la toma de decisiones sobre su comportamiento de salud 
y su cuidado; todo ello con el fin de mejorar su estado de salud y prevenir futuras 
complicaciones. 
 
 2.4 Autocuidado en DMT2. 
La Diabetes Mellitus Tipo 2 es un padecimiento complejo que involucra una serie 
de situaciones que comprometen el cuidado y control en los pacientes, 
favoreciendo su calidad de vida y disminuyendo complicaciones, muertes 
prematuras y los costos que implican los servicios de atención médica y 
hospitalización. 
 
49 García G., R. y Suárez P., R. (2001). Dimensión Educativa del cuidado de las personas con enfermedades 
crónicas. Revista Cubana de Endocrinología 12 (3). p. 178. [En línea] 
<http://bvs.sld.cu/revistas/end/vol12_3_01/end07301.pdf> Consulta: julio 2016. 
41 
 
En la literatura se pueden encontrar diversos términos y definiciones que aluden a 
las acciones que las personas adoptan para beneficios de su propia salud, entre 
los que se destacan: autocuidado, autocontrol, autogestión, autoayuda o self-
management en el idioma inglés. Sin embargo, en países del continente 
americano es más común el término de autocuidado. 
Definido por Dorothea Orem en 1993, “el autocuidado es la práctica de actividades 
que los individuos inician y realizan para el mantenimiento de su propia vida, salud 
y bienestar”50. El concepto de auto contempla las necesidades físicas, psicológicas 
y espirituales; mientras que cuidado, se refiere a la totalidad de actividades que el 
individuo realiza para beneficio y mantenimiento de la vida, la salud y el bienestar. 
Para Coppard, “comprende todas las acciones y decisiones que toma una persona 
para prevenir, diagnosticar y tratar su enfermedad es decir todas las actividades 
individuales dirigidas a mantener su salud”51. 
Por otro lado, Tobón indica que el autocuidado 
Se refiere a las prácticas cotidianas y a las decisiones sobre ellas, que realiza una persona, 
familia o grupo para cuidar su salud; estas prácticas son “destrezas” aprendidas a través 
de toda la vida, de uso continuo, que se emplean por libre decisión, con el propósito de 
fortalecer o restablecer la salud y prevenir la enfermedad; ellas responden a la capacidad 
de supervivencia y a las prácticas habituales de la cultura a la que se pertenece52. 
Entre las características o principios que rigen al autocuidado se destacan:53 
1. Es un proceso voluntario de la persona. 
2. Implica responsabilidad y está ligada a la filosofía de vida y experiencias 
previas. 
3. Tiene un carácter social por la elaboración de conocimientos. 
4. El fin o meta es mejorar el nivel de salud. 
 
50 Orem, Dorothea E. (1993). Modelo de Orem 4° Ed. México: Masson-Salvat. 
51 Sánchez Chávez, Nora, et al. Impacto de un programa de educación para la salud promoviendo conductas 
de autocuidado en pacientes diabéticos tipo 2 en el estado de Oaxaca. Revista Mexicana de Atención 
Primaria a la Salud. [En línea] <http://crutondesign.com/socmed/?page_id=171> Consulta: julio 2016. 
52 Tobón Correa, Ofelia. (2003). El autocuidado una habilidad para vivir. p. 3. [En línea] 
< file:///C:/Users/Satellite/Downloads/articulo370_5%20(3).pdf> Consulta: julio 2016. 
53 Ibídem, p. 4-5. 
42 
 
5. Se requiere de cierto grado de desarrollo personal para el permanente 
fortalecimiento de autoconcepto, autocontrol, autoestima, autoaceptación y 
resilencia. 
Asimismo, la autora hace mención de los factores internos y externos de los que 
depende el autocuidado (Ver figura 3). 
 
 
 
Figura 3 
Autocuidado. 
Factores internos o personales. 
Los aspectos internos dependen 
directamente de la persona y 
determinan de manera personal el 
autocuidado. 
Factores externos o ambientales. 
Son aquellos aspectos que hacen 
posible o no el autocuidado de las 
personas. 
 Conocimientos 
 Voluntad 
 Actitudes 
 Cultural 
 Género 
 Científico y tecnológico 
 Físico, económico, político y 
social 
 
Elaboración propia a partir de Tobón 2003 p. 7-8. 
 
 
43 
 
El ser humano por naturaleza posee una gran capacidad de adaptación a los 
cambios producidos en sí mismo o en su entorno; sin embargo la OMS declara 
que los enfermos crónicos necesitan de conocimientos y hábitos de 
autotratamiento que les permitan controlar los síntomas y reducir las 
complicaciones. Algunos de ellos son54: 
 Aptitudes de adaptación (control de las emociones relacionadas con las 
enfermedades crónicas). 
 Fijación de objetivos (para hábitos específicos y moderadamente difíciles. 
 Autovigilancia (llevar un control de los hábitos). 
 Modificación del entorno (generar un contexto favorable al máximo grado de 
cumplimiento de los objetivos). 
 Autorrecompensa (consolidación de los hábitos mediante la concesión a 
uno mismo de recompensas inmediatas, personales y deseables). 
 Obtención de apoyo social (ganándose el apoyo de otros). 
Y aunque el cuidarse es un proceso voluntario e intencionado que los individuos 
realizan. El autocuidado es un fenómeno totalmente activo, donde las personas 
deben ser capaces de usar la razón para comprender su estado de salud, y el uso 
de conocimientos que les permita la toma de decisiones. Su finalidad es fomentar 
y promover la salud, prevención de enfermedades y recuperar o rehabilitar la salud 
integral. 
En el caso de una persona que vive con DMT2, busca adaptarse con una 
intención causada por la situación crónica de su padecimiento. 
El conocimiento que posee sobre su autocuidado es fundamental, ya que de esto depende 
que asuma con responsabilidad los cambios sobre su estilo de vida, hábitos higiénico-
dietéticos, ejercicio físico y cumplimiento del régimen terapéutico, aspectos que se 
consideran importantes para que el paciente pueda incrementar su calidad y esperanza de 
 
54 OMS. (2005). Preparación de los profesionales de la atención de salud para el siglo XXI. El reto de las 
enfermedades crónicas. p. 28 [En línea] 
<http://apps.who.int/iris/bitstream/10665/43236/1/9243562800_spa.pdf> Consulta: marzo 2017. 
44 
 
vida disminuyendo y/o evitando futuras complicaciones agudas o crónicas que le provocan 
discapacidad o muerte prematuras55. 
La Diabetes Mellitus en su Tipo 2 es un padecimiento complejo y entorno a él 
surgen mitos e información de fuentes poco confiables que lo complejizan aún 
más. 
Por tanto, en el siguiente capítulo se encuentra una compilación de información 
relevante y especifica, ya que al ser una enfermedad crónica, lleva implícita una 
serie de situaciones que comprometen

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