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1 
 
Área temática: Comunicación, Prácticas Socioculturales y Subjetividad 
 
Palabras claves que definen el trabajo: Mujer- Deporte- Fútbol femenino- 
Representaciones- Género. 
 
Datos de las Tesistas: 
Contreras, Paola Soledad (14468/2) 
(0221) 15-649-7034 
paomillo@hotmail.com 
 
D`Emilio, Andrea Vanina (14142/2) 
 (0221)15-555-6058 
andrea.demilio@hotmail.com 
 
Datos del Director: 
Lic. Andrés López 
(0221)15-481-8046 
alopez@perio.unlp.edu.ar 
2 
 
ÍNDICE 
 
 
 
 
Introducción 3 
 
 
 
PRIMER TIEMPO 
 
Estado del arte 5 
 
Marco teórico 8 
 
Mitos sociales 19 
 
Marco metodológico 27 
 
Protocolo 30 
 
 
 
SEGUNDO TIEMPO 
 
Capítulo I: Orígenes del fútbol femenino en Argentina 34 
 
Capítulo II: Las representaciones de las futbolistas 50 
 
Capítulo III: Futbolistas, ¿cómo se relacionan con su entorno? 62 
 
Capítulo IV: La mirada de los “otros” 79 
 
Capítulo V: Hacia una lógica femenina futbolera 92 
 
 
 
Conclusión 98 
 
Bibliografía 103 
 
 
Anexos 111
3 
 
INTRODUCCION 
 
El presente trabajo intentará analizar las representaciones que las mujeres 
futbolistas profesionales del club Estudiantes de La Plata poseen sobre su práctica 
deportiva y los modos en que conviven con el discurso hegemónico que el hombre 
legitimó en torno a su figura. 
De este objetivo general se desprenden los siguientes objetivos específicos: 
analizar los mitos y estereotipos con respecto al rol de la mujer, construidos 
culturalmente; relevar testimonios que hablen sobre el rol de la mujer dentro del fútbol 
y de qué manera fue evolucionando la participación de la misma; identificar las 
características que la mujer futbolista incorpora para construir su propia imagen. 
El foco de la investigación nos llevó a pensar cómo operan las 
representaciones sociales en las prácticas de las mujeres futbolistas, y a hacernos 
preguntas en relación a la representación masculina hegemónica dentro del fútbol 
como práctica deportiva. ¿La mujer es consciente de tal asimetría? ¿Alimenta esta 
hegemonía en sus prácticas cotidianas? ¿Se apropia de determinados elementos y se 
identifica, o construye su propia representación? ¿El deporte es femenino porque lo 
juegan las mujeres o tiene características propias? 
La unidad de observación fue el fútbol femenino del club Estudiantes de La 
Plata, porque milita en el Torneo de Primera División que organiza la Asociación de 
Fútbol Argentino, y porque participa del mismo desde que fue institucionalizado. 
El tiempo en el que enmarcamos la observación estuvo comprendido desde el 
período 2010 al 2011, tiempo en el que pudimos estudiar las representaciones que las 
mujeres futbolistas tienen sobre su práctica. 
Nuestro aporte quiere destacar a la mujer como deportista y su propia visión 
acerca de su participación dentro del fútbol, dado que siempre se construye la imagen 
desde la visión del hombre. 
4 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
PRIMER TIEMPO 
 
5 
 
ESTADO DEL ARTE 
 
Indagando sobre otras producciones del ámbito académico, y más 
precisamente en la Facultad de Periodismo y Comunicación Social, se pudo observar 
la existencia de diferentes producciones que vinculan a la mujer con diferentes 
ámbitos de la vida social, los cuales tomamos a modo de referencia. 
El primer trabajo que nos brindó elementos para la construcción de nuestro 
marco teórico, fue “Mujeres en la política”1 de Nerina Braconi, que desarrolla dicha 
investigación dentro de los Estudios Culturales, de la Teoría Feminista y de la 
Perspectiva de Género. 
En la misma línea teórica, la tesis “Activismo Feminista en la Red. Usos y 
apropiaciones del espacio virtual”, de María Belén Rosales y Ana Lucía Rímaro2 
también se enmarca dentro de la Teoría Feminista. En este caso, lo que rescatamos 
para nuestro trabajo es la influencia de dichas corrientes y los métodos y técnicas, 
dejando de lado las apropiaciones del espacio virtual. 
Otra tesis, denominada “Recepción. Construcción social de sentidos en torno al 
rol de la mujer”, de Analía Elefante, Maite Espondaburu y Paula Giacobone3 nos 
permitió rescatar los conceptos que plantean desde la Perspectiva de Género: 
―Siguiendo esta teoría entendemos que la concepción hegemónica y el imaginario de 
lo femenino se han dado siempre desde una perspectiva basada en la dominación 
masculina; pero a la vez resaltamos que las representaciones sociales, y la 
producción, negociación y construcción de sentidos a nivel social son procesos de los 
 
1
 Braconi, Merina; “Mujeres en la Política”, Tesis de Grado de la Licenciatura en Comunicación Social 
orientación Periodismo, UNLP, 2009. 
2
 Rosales, María Belén y Rímaro, Ana Lucía. “Activismo Feminista en la Red. Usos y apropiaciones del 
espacio virtual”, Tesis de Grado de la Licenciatura en Comunicación Social orientación Periodismo, UNLP, 
2009. 
3
 Elefante, Analía, Espondaburu, Maite y Giacobone, Paula. “Recepción. Construcción social de sentidos 
en torno al rol de la mujer”, Tesis de Grado de la Licenciatura en Comunicación Social orientación 
Periodismo, UNLP, 2009. 
6 
 
que las mujeres también participamos‖. También tuvimos en cuenta conceptos claves 
como hegemonía, cultura, poder y mitos sociales. 
El último trabajo académico que tomamos como referencia es la investigación 
―Muñecas animadas. Saludos políticos a la mujer en el diario Clarín (1983-2007)‖4, de 
María Blanco, Valeria Imoli y Romina Lacomba. Esta investigación nos proporcionó un 
breve contexto histórico sobre la mujer en la Argentina, el cual nos sirvió de base para 
comenzar a referenciar nuestro trabajo. A su vez, las autoras definen el concepto 
―género‖ desde diferentes perspectivas a tener en cuenta, desde la teología, el 
psicoanálisis, la biología y lo cultural. Esta última concepción fue la utilizada para 
nuestro trabajo, dado que entendemos, al igual que las tesistas que ―los hombres no 
nacen sino que se hacen y varían en las diferentes culturas a través del tiempo‖5. 
Además, consideramos el libro de Liliana Morelli denominado Mujeres 
Deportistas6, porque nos permitió conocer a las figuras femeninas que se destacaron 
en el aspecto deportivo en nuestro país y comprender que, como dice Félix Luna en el 
prólogo de este ejemplar, en casi toda mujer ―subyace una historia de vicisitudes y 
obstáculos muchos más arduos que los que pudo haber enfrentado un hombre. Y el 
precio que debieron pagar por esos triunfos es, en algunos casos, amargo y 
abrumador‖. 
Otro libro que nos aportó material valioso, precisamente sobre fútbol femenino 
fue el trabajo realizado por la socióloga Adolfina Janson titulado Se acabó ese juego 
que te hacia feliz. Este nos ayudó a contextualizar la parte histórica el surgimiento de 
las primeras futbolistas, y a su vez nos sirvió para reconstruir la historia del fútbol 
femenino en Argentina. Más allá de datos concretos, Janson contribuyó a pensar al 
 
4
 Blanco, María Daniela, Imoli, Valeria Anabel y Lacomba Romina; “Muñecas animadas. Saludos políticos 
a la mujer en el diario Clarín (1983-2007)”, Tesis de Grado de la Licenciatura en Comunicación Social 
orientación Periodismo, UNLP, 2009. 
5
 Blanco, Imoli, Lacomba. Op. Cit. pp. 61. 
6
 Morelli, Liliana; Mujeres Deportistas, Editorial Planeta, Buenos Aires, 1990. Prólogo. 
7 
 
deporte desde otros espacios, y su mirada sociológica se hace presente en diversos 
análisis puntuales sobre la relación de la mujer y el fútbol. ―En líneas generales 
significa que las prácticas deportivas son un producto histórico, construidas 
socialmente, definidas en el plano cultural y puestas al servicio de intereses y 
necesidades de grupo poderosos de la sociedad‖7. 
Por último, es pertinentemencionar también La pelota se tiñe de rosa: valores 
socioculturales femeninos en un campo identificado hegemónicamente con lo 
masculino, tesis realizada por Andrés Parra López. El sociólogo realizó una 
investigación en la cual abre varias aristas y se formula una pregunta clave: “¿Por qué 
el fútbol, para describir la relación entre mujer y deporte? Porque es el deporte más 
popular y uno de los más masculinizados, lo que significa un esfuerzo para las mujeres 
que quieran integrarse, en desmedro del baloncesto y el atletismo que fueron los 
deportes con resultados más exitosos para las damas chilenas en el siglo XX, hoy el 
fútbol es el deporte más masivo y común entre las mujeres, ―deporte‖ por ciertas 
actividades identificadas como femeninas (baila entretenido, step, aeróbica, fitness)‖8. 
Analizando la sociedad chilena, este trabajo recorre un interesante estudio sobre la 
mujer en el deporte. 
 
7
 Janson, Adolfina. Se acabó ese juego que te hacia feliz. Nuestro fútbol femenino (desde su ingreso a la 
AFA en 1990, hasta el mundial de Estados Unidos en 2003). Buenos Aires, Aurelia Rivera, 2008, p.33. 
8
 Parra López, Andrés. La pelota se tiñe de rosa: valores socioculturales femeninos en un campo 
identificado hegemónicamente con lo masculino. Memoria de práctica profesional para optar al título de 
Sociólogo. Santiago, 2008, p. 6. 
8 
 
MARCO TEÓRICO 
 
El presente trabajo se enmarca dentro de los Estudios Culturales, de la Teoría 
Feminista y de la Perspectiva de Género. 
Los Estudios Culturales nos permiten pensar la comunicación desde la cultura 
y comprender la multiplicidad de formas de comunicación que surgen de los procesos 
de producción social de significados. A partir de la crisis de paradigmas que se dio en 
las ciencias sociales, ―la y -comunicación y cultura- fue reemplazada por la barra-
comunicación/cultura-, lo que significó pensar la imposibilidad de un tratamiento por 
separado de ambos territorios‖9. La barra acepta la distinción, pero anuncia la 
imposibilidad de un tratamiento por separado. 
Desde esta perspectiva consideramos que las prácticas comunicativas son 
espacios de interacción entre sujetos en los que se verifican procesos de producción 
de sentido, mientras que la noción de cultura es entendida ―no como mera 
reproducción, reflejo de las condiciones materiales de existencia, sino como 
producción y recreación social del sentido‖10. Es decir que, desde la cultura, la 
comunicación tendrá sentido transferible a la vida cotidiana. 
 La obra de Raymond Williams, The Long Revolution (1965), marca una doble 
ruptura en el Centro de Birmingham. ―Primero con la tradición literaria, que sitúa la 
cultura fuera de la sociedad, para sustituirla por una definición antropológica: la cultura 
es ese proceso global a través del cual las significaciones se construyen social e 
históricamente; la literatura y el arte no son más que una parte de la comunicación‖11. 
 
9
 Mattelart, Armand; Neveu, Eric. Los Cultural Studies. Hacia una domesticación del pensamiento salvaje. 
Ediciones de Periodismo y Comunicación Social. Facultad de Periodismo y Comunicación Social. UNLP, 
2002. 
10
 Ídem. 
11
 Mattelart, Armand; Mattelart, Michele. Historia de las teorías de la comunicación. Ediciones Paidós- 
Barcelona, 1991. Cap. 3, p.72. 
9 
 
Williams investiga el rol de la cultura en la vida humana, clasificando las 
diversas instancias de producción, distribución y circulación cultural, y sus relaciones 
con las prácticas materiales de la vida cotidiana. 
Desde la perspectiva crítica tomaremos de Williams la definición de cultura, 
entendida como ―el sistema significante a través del cual necesariamente un orden 
social se comunica, se reproduce, se experimenta y se investiga‖12, para estudiar la 
relación entre la cultura y las demás prácticas sociales. 
Para Raymond Williams ―la hegemonía constituye todo un cuerpo de prácticas 
y expectativas en relación con la totalidad de la vida: nuestros sentidos y dosis de 
energía, las percepciones definidas que tenemos de nosotros mismos y de nuestro 
mundo. Es un vivido sistema de significados y valores -fundamentales y constitutivos- 
que en la medida en que son experimentados como prácticas parecen confirmarse 
recíprocamente. Por lo tanto, es un sentido de la realidad para la mayoría de las 
gentes de la sociedad, un sentido de lo absoluto debido a la realidad experimentada 
más allá de la cual la movilización de la mayoría de los miembros de la sociedad –en 
la mayor parte de las áreas de sus vidas- se torna sumamente difícil. Es decir que, en 
el sentido más firme, es una ‗cultura‘, pero una cultura que debe ser considerada 
asimismo como la vívida dominación y subordinación de las clases particulares‖13. 
En nuestro trabajo será crucial dicha definición porque nos permitirá ver que el 
fútbol es un deporte liderado y practicado, en su mayoría, por los hombres, y un 
espacio en el que las mujeres buscan mediar a través del consenso y la negociación. 
Dicha dominación masculina Pierre Bourdieu la define desde la "violencia 
simbólica", la cual es entendida como ―aquella forma de violencia que se ejerce sobre 
 
12
 Williams, Raymond. Cultura. Sociología de la comunicación y del arte. Ediciones Paidós- Barcelona, 
1981. 
13
 Williams, Raymond. Marxismo y Literatura. Ediciones Península- Barcelona, 1980. 
10 
 
un agente social con la anuencia de éste‖14. Para el autor, la cultura expresa y ayuda a 
constituir y reproducir estructuras de constituir y reproducir estructuras de dominación: 
―En este sentido, podemos decir que la dominación de género consiste en lo que 
en francés llamamos una contrainte par corps, un aprisionamiento efectuado por 
medio del cuerpo. El trabajo de socialización tiende a producir una somatización 
progresiva de las relaciones de dominación de género a través de una doble 
operación: por medio de la construcción social de la visión del sexo biológico que 
sirve como fundamento, por su parte, de las visiones míticas del mundo, y a través 
de la inculcación de una hexis corporal que constituye una verdadera política 
encarnada. En otras palabras, la sociodicea masculina debe su eficacia específica 
al hecho de que legitima una relación de dominación inscribiéndola en una 
biológica, que es a su vez una construcción social biologizada‖
15
. 
 
En la misma línea, Tim O´Sullivan permite comprender los orígenes de la 
hegemonía masculina como dominación naturalizada y legitimada, dado que explica el 
sistema patriarcal, y dice que "no es simplemente un sistema de diferencias entre 
hombres y mujeres, sino que estas diferencias están organizadas dentro de una 
relación estructurada de subordinación y dominación, históricamente reproducida de 
generación en generación"16. 
Esto permite advertir que la hegemonía opera en la esfera de la conciencia y 
de las representaciones que, en palabras de Serge Moscovici, son ―aquellas que se 
constituyen y son constituyentes de un imaginario social en el cual pueden encontrarse 
anclajes significativos determinados por situaciones históricas y socioculturales que 
conforman la matriz de las prácticas sociales‖17. 
 
14
 Bourdieu, Pierre y Wacquant, Loic. Respuestas por una antropología reflexiva. Editorial Grijalbo. 
México, 1995. 
15
 Ídem 
16
 O´Sullivan, Tim. Conceptos Clave en Comunicación y Estudios Culturales. Amorrortu Editores, Buenos 
Aires, 1997. 
17
 Echeverría, María Paz. “El análisis de las representaciones sociales: un camino posible en la 
investigación en comunicación”. En revista Question, Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la 
UNLP, Disponible en la web: http://perio.unlp.edu.ar/ojs/index.php/question/article/view/507/426http://perio.unlp.edu.ar/ojs/index.php/question/article/view/507/426
11 
 
Señala Moscovici que ―las representaciones sociales son conjuntos dinámicos, 
su característica es la producción de comportamientos y de relaciones con el medio, 
es una acción que modifica a ambos y no una reproducción de estos comportamientos 
o de estas relaciones, ni una reacción a un estímulo exterior dado‖18. 
Teniendo presente que las representaciones sociales son las imágenes del 
mundo presentes en una comunidad lingüística, ―(...)-en la medida en que es 
conservada y no reemplazada por otra- constituye una creencia (o es elemento de una 
creencia) y es la base del significado que adquiere cada nuevo estímulo relacionado 
con esa cosa, evento, acción o proceso‖19. De esta manera, ―las imágenes ya 
existentes también intervienen en el proceso, condicionando la que será la imagen 
resultante para un estímulo particular. El papel de las creencias previas en la 
construcción de las nuevas representaciones es fundamental‖20. 
 
¿Cómo se forman las representaciones sociales? 
Los seres humanos se comunican mediante el lenguaje porque no pueden vivir 
aislados ni pueden no comunicarse. Aquí el lenguaje es sólo un mediador, es decir, un 
instrumento para perfeccionar la comunicación pero cumple un papel fundamental en 
la formación de las representaciones. En palabras de Alejandro Raiter, ―es una 
poderosa herramienta cognitiva que ha permitido –y permite– la formación y 
complejización de las representaciones y ha posibilitado –y posibilita– no sólo la 
transmisión e intercambio de esas representaciones entre los miembros de la especie 
sino también la modificación del mundo‖21. Y agrega que, (...) ―en las representaciones 
los seres humanos ´completan´ el mundo o le agregan elementos‖. 
 
18
 Moscovici, Serge. El Psicoanálisis, su imagen y su público, Editorial Huemul, Buenos Aires, 1979, Cap. 
I, pp. 27-44. 
19
 Raiter, Alejandro. Representaciones Sociales. EUDEBA, Buenos Aires, 2001. 
20
 Ídem. 
21
 Raiter. Op.Cit. p. 3-4 
12 
 
Siguiendo al mismo autor, podemos decir que una vez almacenadas las 
representaciones en la mente, éstas interactúan entre sí y pueden formar nuevas 
imágenes. Cuando estas representaciones se transmiten por los miembros de la 
comunidad, las representaciones individuales se convierten en representaciones 
sociales. 
Por lo tanto hay dos mecanismos fundamentales: el de formación y el de 
transmisión de las representaciones. ―Por el primero queda garantizado que cada 
miembro de la especie forme sus propias representaciones, por el segundo, que éstas 
se compartan. No deben confundirse el mecanismo ni la actividad con el contenido de 
las representaciones, con cuáles son, concretamente, las creencias. A lo largo de la 
historia los seres humanos siempre tuvieron y se transmitieron representaciones, pero 
éstas han cambiado, no son permanentes como sí lo son el mecanismo y la actividad. 
De este modo, que los seres humanos tengan representaciones es permanente, 
cuáles son esas representaciones formará parte –entre otras cosas– de la concepción 
del mundo que la comunidad tenga en un momento determinado‖22. 
Para nuestro análisis, las “representaciones” son de fundamental importancia 
porque van a guiar nuestro análisis, además de permitirnos saber cuál es el sentido 
que las futbolistas de Estudiantes le dan a su práctica deportiva. 
 
La Teoría Feminista y la Perspectiva de Género 
A partir de los años setenta el feminismo modifica radicalmente el terreno de 
los Cultural Studies. ―Limitada al inicio al Women´s Studies Group (CCCS, 1978), la 
cuestión del género (gender) impregna poco a poco las investigaciones en su 
 
22
 Ídem. 
13 
 
conjunto‖23. De esta manera, los Estudios Culturales nos brindan otro aporte desde su 
vinculación con los estudios feministas y con las problemáticas del género. 
La Teoría del Género fue elaborada por grupos académicos y feministas de 
Estados Unidos y Europa a fines de la década de 1960, mientras que la Perspectiva 
de Género forma parte de ésta. 
A partir de la dominación masculina imperante en la sociedad, estos grupos 
analizan las categorías patriarcales que legitiman y naturalizan las relaciones 
asimétricas de poder entre mujeres y hombres. 
En general, las distintas autoras que trabajan sobre el tema señalan que en los 
períodos de ilustración y en los momentos de transición hacia formas sociales más 
justas y liberadoras es cuando ha surgido con más fuerza la polémica feminista. 
―Es posible rastrear signos de esta polémica en los mismos principios de nuestro 
pasado clásico. La Ilustración sofística produjo el pensamiento de la igualdad entre 
los sexos, aunque, como lo señala Valcárcel, ha sobrevivido mucho mejor la 
reacción patriarcal que generó: "las chanzas bifrontes de Aristófanes, la Política de 
Aristóteles, la recogida de Platón". Con tan ilustres precedentes, la historia 
occidental fue tejiendo minuciosamente -desde la religión, la ley y la ciencia- el 
discurso y la práctica que afirmaba la inferioridad de la mujer respecto al varón. 
Discurso que parecía dividir en dos la especie humana: dos cuerpos, dos razones, 
dos morales, dos leyes. 
El Renacimiento trajo consigo un nuevo paradigma humano, el de autonomía, pero 
no se extendió a las mujeres. Un importante precedente y un hito en la polémica 
feminista había sido la obra de Christine de Pisan, La ciudad de las damas (1405). 
Pisan ataca el discurso de la inferioridad de las mujeres y ofrece una alternativa a 
su situación (...) A pesar de las diferencias entre los tratados, habrá que esperar al 
siglo XVII para la formulación de igualdad‖
24
. 
 
Al respecto, Geneviève Fraisse y Celia Amorós señalan la obra del filósofo 
cartesiano Poulain de la Barre y los movimientos de mujeres y feministas que tuvieron 
lugar durante la Revolución Francesa como dos momentos clave –teórico uno, práctico 
el otro– en la articulación del feminismo moderno. La obra de Poulain de la Barre, 
publicada en 1673 y titulada ―Sobre la igualdad de los sexos‖ es considerada como la 
 
23
 Mattelart, Armand; Neveu, Eric. Los Cultural Studies. Hacia una domesticación del pensamiento salvaje. 
Ediciones de Periodismo y Comunicación Social. Facultad de Periodismo y Comunicación Social. UNLP, 
2002. 
24
 De Miguel, Ana. Los feminismos a través de la historia, Cap 1: Creatividad Feminista. Este artículo es 
una recopilación de los cuatro capítulos que aparecen en la página: 
ttp://www.nodo50.org/mujeresred/historia.htm 
14 
 
primera obra feminista que se centra explícitamente en fundamentar la demanda de 
igualdad sexual. 
A su vez, ―Amorós encuadra la obra de Poulain en el contexto más amplio de la 
Ilustración. Aun reconociendo el carácter pionero y específico de la obra, ésta forma 
parte de un continuo feminista que se caracteriza por radicalizar o universalizar la 
lógica de la razón, racionalista primero e ilustrada después. Asimismo, mantiene que el 
feminismo como cuerpo coherente de vindicaciones y como proyecto político capaz de 
constituir un sujeto revolucionario colectivo, sólo puede articularse teóricamente a 
partir de premisas ilustradas: premisas que afirman que todos los hombres nacen 
libres e iguales y, por tanto, con los mismos derechos‖25. 
En este breve recorrido, podemos afirmar que es en la Revolución Francesa 
cuando aparecen las mujeres con un fuerte protagonismo en los sucesos 
revolucionarios. La convocatoria de los Estados Generales por parte de Luis XVI se 
constituyó en el prólogo de la revolución. Los tres estados -nobleza, clero y pueblo- se 
reunieron a redactar sus quejas para presentarlas al rey. Las mujeres fueron 
excluidas, por lo que comenzaron a redactar sus propios "cahiers de doléance"y se 
autodenominaron "el tercer Estado del tercer Estado"26, dice Ana de Miguel. 
Tres meses después de la toma de la Bastilla, las mujeres parisinas 
protagonizaron la crucial marcha hacia Versalles, y trasladaron al rey a París, donde le 
sería más difícil evadir los grandes problemas del pueblo. Luego de este suceso, las 
mujeres habían sentado el precedente de iniciar un movimiento popular armado y se 
formaron clubes de mujeres, en los que plasmaron efectivamente su voluntad de 
participación. 
Sin embargo, ―pronto se comprobó que una cosa era que la República 
agradeciese y condecorase a las mujeres por los servicios prestados y otra que 
 
25
 Ídem. 
26
 Ibídem. Cap. II: "Feminismo Moderno” 
15 
 
estuviera dispuesta a reconocerles otra función de que la de madres y esposas (de los 
ciudadanos)‖27. 
Aunque la participación en la vida política se vio limitada, el movimiento de 
mujeres surgido durante la Revolución Francesa sentó las bases para lo que vendría 
luego. 
 
El movimiento feminista 
Entre sus representantes, destacamos los aportes de Simone de Beauvoir, 
quien en 1949 afirmó: "Una no nace mujer, sino que se hace mujer"28. Con esta frase 
se inició el movimiento feminista del siglo XX. 
 
Las clasificaciones más difundidas señalan tres olas del feminismo: 
 
- La primera abarca al amplio movimiento de mujeres que se produce en 
Estados Unidos y ciertos países de Europa a partir de los años 60, de la mano 
de la liberación sexual. 
 
- La segunda ola se ubica a comienzos de los 70 y se extiende hasta los 80, 
cuya plataforma política fue ―El segundo sexo‖ de Simone De Beauvoir (1949). 
El mayor impacto de esta obra fue la denuncia al ―papel preponderante en que 
los modos de socialización intervienen en la distinción biológica de ‗mujeres‘ y 
‗varones‘. A raíz de ello en Estados Unidos se acuñó la palabra ‗gender‘ 
(género) para designar lo culturalmente construido sobre la diferencia sexual, 
subrayándose una clara oposición entre el ‗sexo‘ en tanto dato biológico, 
 
27
 Ibídem. 
28
 De Beauvoir, Simone. El Segundo Sexo. Editorial Siglo Veinte, Buenos Aires, 1970. 
16 
 
dimórfico, natural y el ‗género‘, entendido como ‗sexo vivido y socio-
culturalmente construido‘‖29. 
 
- La tercera ola comienza en 1990 y se desarrolla hasta el presente. El 
movimiento surgió como una respuesta a los fallos percibidos en el llamado 
Feminismo de segunda ola, cuya representante principal fue Judith Butler. En 
esta etapa se reconceptualiza la noción de “género”, entendiéndolo ―como un 
modo de organización de las normas culturales pasadas y futuras y un modo 
de situarse uno mismo con respecto a esas normas‖30, proponiendo que no 
existe un único modelo de mujer sino que hay múltiples modelos determinados 
por cuestiones sociales, étnicas, de nacionalidad o religión. 
 
El feminismo ha llevado a importantes cambios en la sociedad y ha introducido 
en el mundo académico nuevos conceptos y áreas de estudio. En palabras de Celia 
Amorós ―ha podido hacerlo porque, como teoría, su misión es ver y ‗hacer ver‘, 
visibilizar; ahora bien, como teoría crítica que es, su ‗hacer ver‘ está en función de 
irracionalizar e inmoralizar conductas que en su día fueron consideradas socialmente 
como recibo‖31. 
 
Conceptos claves: Género y Patriarcado 
Para nuestro trabajo la Perspectiva de Género nos ofrece como herramienta 
fundamental el concepto de género (lo masculino/lo femenino), el cual es entendido no 
como una realidad natural, consustancial al ser humano, sino como una construcción 
cultural. 
 
29
 Femenías, María Luisa. Historia con mujeres. Mujeres con historia. Cap. 1: De los estudios de la Mujer 
a los debates sobre Género. pp. 9-10. 
30
 Ídem. 
31
 Amorós, Celia. Dimensiones del poder en la teoría feminista. UNED, Madrid, 2005. p.12. 
17 
 
De modo que el género sería el resultado de la inmersión en un conjunto de 
valores socialmente construidos que dan lugar a la concepción de ―lo femenino‖ o de 
―lo masculino‖. Las características meramente biológicas (el sexo), a través de una 
evolución social, han sido revestidas de un conjunto de comportamientos, actitudes, 
pensamientos, percepciones, que la humanidad ha impuesto a la mujer. 
Asimismo, desmontar la creencia de que la biología determina la condición 
femenina, afirmando su naturaleza social, es uno de los principales objetivos de la 
Teoría Feminista. 
En la misma dirección, retomamos los aportes de María Jesús Buxó Rey con 
respecto al valor socio-simbólico que la sociedad le asigna a los sexos y de ahí la 
importancia de la ―eficacia ideológica‖32. 
Por otra parte, es importante tener en cuenta el papel central que ocupa el 
concepto de patriarcado en la teoría feminista. La introducción del término se debe a 
Kate Millett, en su libro Sexual politics (1970), y hace referencia al dominio del orden 
social por los hombres, que se manifiesta de innumerables formas. Esto crea un 
estado de cosas que configura, de forma exterior a las mujeres, todos los aspectos de 
su existencia, a través de una violencia simbólica, de mitos y creencias que convierten 
la situación de subordinación en ―lo natural‖. 
Este concepto será clave para nuestro análisis porque nos permitirá 
observar si las futbolistas desnaturalizan la visión de mundo que sostiene el 
patriarcado, o si por el contrario, aceptan esas reglas, colaborando con la 
reproducción y legitimación. 
Por último, tendremos presente el concepto de ―androcentrismo‖, entendido 
como la visión del mundo y de las relaciones sociales centradas en el punto de vista 
masculino, ya que nos ayudó ver que la mayoría de los textos de estudio referidos 
al fútbol parten casi siempre de una visión masculina. 
 
32
 Buxó Rey, María Jesús. Antropología de la mujer. Promoción Cultural, Barcelona, 1978. 
18 
 
Coincidimos con Alabarces en que ―hoy, el deporte invade todos los reductos 
de la cotidianeidad, transformándose en uno de los principales productores de 
identidades, constituyendo el mayor ritual secular de masas, produciendo la mayor 
facturación de la industria cultural. En ese panorama expansivo, de deportivización de 
nuestras sociedades, las ciencias sociales deben interrogar al fenómeno, tanto con 
vistas a producir saberes novedosos sobre un objeto cambiante y multiforme, como 
para colaborar en la gestación de políticas públicas específicas‖33. 
Finalmente, en este contexto es importante preguntarse: ―¿Qué ocurre 
entonces cuando las mujeres, especialmente en los últimos años, se introducen en un 
mundo en el cual enunciadores y enunciados son del orden de lo masculino? Si, como 
afirman Bourdieu y Wacquant, el poder simbólico y la autoridad para imponerlo 
provienen simplemente de ´el poder de constituir lo dado, enunciándolo´, la aparición 
de un ´otro´ que está afuera del discurso, se presenta como un extranjero que perturba 
el campo y al que es necesario definir‖34. Dicha definición debe incluir las 
características que las propias protagonistas le asignan a su propia práctica. Y es el 
aporte que buscamos hacer desde esta tesis. 
 
33
 Alabarces, Pablo. ―¿De qué hablamos cuando hablamos deporte?” Nueva Sociedad, 1998. Nro.154 
Marzo-Abril, pp. 74-86. Disponible en la web: http://www.nuso.org/upload/articulos/2669_1.pdf. 
34
 Alabarces, Pablo. “Cuestiones de género. Mujeres y Fútbol: ¿Territorio Conquistado o a Conquistar?”, 
en Peligro de Gol. FLACSO, Buenos Aires, 2000. 
http://www.nuso.org/upload/articulos/2669_1.pdf
19 
 
MITOS SOCIALES 
 
Consideramos de fundamental importancia analizar los mitos y estereotipos 
para rastrear de qué manera sonconstruidos culturalmente. Podemos definir al mito 
como una manifestación cargada de valor simbólico, material e inmaterial que nos 
permitirá interpretar y acceder a las expresiones que tiene la sociedad sobre el tema 
en cuestión. 
Entendemos junto con Juan Fernando Rivera Gómez que ―el mito posee un 
origen individual, pero se articula con la experiencia colectiva de percepción; para que 
un mito se constituya como tal, debe trascender este grado personal y entrar a ser 
parte de una colectividad, intentando ofrecer una explicación e interpretación ‗del 
mundo‘ que particularmente rodea e interacciona con determinado grupo, dentro de un 
contexto espacio- temporal específico‖35. 
Por lo que ―el mito constituiría la manera como el ser humano expresa la 
concepción que tiene de su entorno; es una serie de ideas, aparentemente 
desordenadas y sin conexión, pero se organizan en un plano psíquico y representan 
una manera para entender aspectos de su entorno. Luego, el mito conceptualizado en 
el plano psíquico, sufre su primera materialización y se demuestra a través del 
lenguaje, el cual hace que el mito adquiera continuidad en el sentido de ser expresado 
y transmitido al colectivo para su aprehensión y aprendizaje‖36. 
 Al igual que Gómez, Fontdevila, Ilardo, y Kotler, entendemos que la 
hegemonía se construye y sostiene mediante diversos mecanismos de la vida 
cotidiana, dado que es principalmente a través de las instituciones que se va 
modelando la visión del mundo. ―Esta dominación no se logra por la fuerza, sino por la 
construcción de un ámbito simbólico, un discurso socialmente compartido en el que los 
 
35
 Rivera Gómez, Juan Fernando. El partido de fútbol como ritual. En Revista digital 
http://www.efdeportes.com. Buenos Aires-Año 10 - Nº 85 - Junio de 2005. 
36
 Ídem. 
http://www.efdeportes.com/%20Revista
20 
 
distintos grupos se reconocen. Ésta no es una situación estática, sino que los grupos 
dominantes reconstruyen la hegemonía constantemente para que las demandas de los 
grupos subordinados aparezcan representadas‖37. 
En este punto tenemos en cuenta lo que sostienen Berger y Luckmann, con 
respecto al papel central que ejerce la familia como una de las instituciones 
fundamentales en la socialización primaria, dado que en esta primera etapa el niño se 
identifica con los otros significantes y es por medio de ella que se convierte en 
miembro de la sociedad. Además, ―el niño acepta los ‗roles‘ (las comillas pertenecen a 
los autores) y actitudes de los otros significantes, o sea que los internaliza y se apropia 
de ellos. Y por esta identificación con los otros significantes el niño se vuelve capaz de 
identificarse él mismo, de adquirir una identidad subjetivamente coherente y 
plausible‖38. 
Esta etapa, de fundamental importancia en la vida de los individuos, marca las 
pautas socio-culturales que cada sexo debe seguir en la sociedad. En el trabajo de 
campo que hemos desarrollado se manifestó en muchos de los relatos. A continuación 
citaremos algunos fragmentos para reflejar lo dicho: 
―En el juego las diferencias son todavía algo notorias pero esto es algo natural 
porque las mujeres por una cuestión obvia no nacen con una pelota bajo el brazo 
como el hombre. Lo que quiero decir es que el hombre desde niño está jugando y 
pateando una pelota, eso hace que adquiera habilidades que aún las mujeres no las 
tienen‖39 (Andrés Roque Pérez, Periodista Deportivo). 
―Empecé a jugar al fútbol antes de tener noción de que era ‗para varones‘. Lo 
que ocurre por lo general es que los hombres cuentan con una capacidad técnica más 
 
37
 Gómez, Pedro Arturo; Fontdevila, Eva; Ilardo, Selva; Kotler, Rubén. “Estudios culturales: contexto, 
métodos y teorías Contexto de nacimiento y desarrollo de los estudios culturales. El Centro de 
Birmingham”. Apuntes de Cátedra, Teoría de la Comunicación I-UNT Disponible en la web: 
http://tc1unt.blogspot.com/ 
38
 Berger, Peter y Luckmann, Thomas, La Construcción Social de la Realidad. Amorrortu Editores, 1968. 
p.167. 
39
 Roque Pérez, Andrés (Entrevista con las autoras). Es Periodista Deportivo. 
http://tc1unt.blogspot.com/
21 
 
desarrollada, ya que por cuestiones sociales (que son impuestas como naturales) 
empiezan a jugar al fútbol desde muy chicos. Las mujeres, en cambio, son 
desalentadas si empiezan a practicar este deporte desde chicas‖. (Lucía Ravazzoli, 
estudiante de Comunicación Social y exjugadora de Estudiantes de La Plata). 
Desde la niñez, cada sexo es marcado por determinadas pautas culturales que 
luego aparecerán como naturales en la sociedad. Tal es el caso del fútbol femenino, el 
cual es visto como ―raro‖ cuando lo practican las mujeres porque es considerado 
culturalmente como exclusivo de los varones. 
Dichas creencias, con el transcurrir del tiempo, logran su eficacia a través de 
los mitos sociales. De aquí la importancia de analizar los tres mitos entrelazados sobre 
la mujer (mujer-madre, pasividad erótica femenina y amor romántico) dado que son 
considerados como mitos fundantes de la subordinación femenina en el mundo 
occidental. 
La psicóloga Ana María Fernández, sostiene que ―la ‗institución‘ de la familia 
moderna y su continuidad es posible no sólo por las condiciones materiales 
económicas que la reproducen sino por la eficacia simbólica de sus mitologías, 
emblemas y rituales que la sostienen y reproducen‖40. 
De esta manera, los mitos sociales se inscriben en una dimensión socio- 
histórica de gran relevancia, como es ―la producción de sistemas de significación que 
hacen posible la producción de consensos‖41. 
Aquí entra en juego la violencia simbólica de los mitos, ya que opera en la 
cotidianeidad a través de las instituciones –tal como lo planteó Gramsci– justificando, 
racionalizando y legitimando los datos socio-culturales. 
En la misma dirección, María Jesús Buxó Rey afirma que ―el mito representa 
un modelo de acción por medio del cual el grupo dominante proporciona los 
 
40
 Fernández, Ana María, La mujer de la ilusión. Pactos y contratos entre hombres y mujeres. Buenos 
Aires, Editorial Paidós, 1993. p. 245. 
41
 Ídem. 
22 
 
contenidos simbólicos de la dominación para garantizar mejor la defensa de sus 
intereses‖42. Por lo tanto, a lo largo de la historia las sociedades producen 
racionalizaciones bajo la forma de sistemas mitológicos y magias para poder controlar 
la realidad. 
Dichas racionalizaciones cumplen un papel clave en la sociedad, dado que 
tienen como función principal mantener la forma tradicional de la estructura asimétrica 
que gobierna las relaciones entre ambos sexos. ―En las racionalizaciones míticas, la 
mujer y su naturaleza acostumbran ser símbolo de lo negativo, valoración que resulta 
en parte por su forma de usar la lengua en cuanto que dicha actividad simboliza el 
desorden y la polución‖43. 
Teniendo en cuenta que los mitos logran su eficacia simbólica a través de la 
repetición, retomamos a continuación la descripción que Fernández hace de los tres 
mitos sobre la mujer. 
 
El mito de la Mujer- Madre, pasividad erótica femenina y amor romántico 
Ana María Fernández explica que nuestra sociedad organiza el universo de 
significaciones en relación con la maternidad alrededor de la idea Mujer-Madre: ―la 
maternidad es la función de la mujer y a través de ella la mujer alcanza su realización 
y adultez‖44. Desde esta perspectiva, la maternidad da sentido a la feminidad. 
Lo que propone Fernández es pensar la maternidad como una función social, 
más que como un fenómeno natural propio de las mujeres y adscripto a su sexo 
biológico. Así, busca diferenciar la reproducción (que pertenece al orden de la especie 
y a una cuestión biológica) con la maternidad, que entra en el ordende la cultura. 
 
42
 Buxó Rey, María Jesús. Op. Cit. p. 89. 
43
 Ídem. 
44
 Fernández, Ana María. Op. Cit. 
23 
 
A lo largo de la historia las sociedades han sufrido cambios estructurales, y 
junto con ello, el concepto de maternidad también se fue modificando para adaptarse a 
las características propias de cada época. Resulta un error emparentar a la 
maternidad con un hecho biológico y natural porque, al pertenecer al orden de la 
cultura, cada sociedad construye y reconstruye su significación en función a la 
necesidad de cada momento histórico concreto. 
El segundo mito habla de la pasividad erótica femenina y refleja el papel 
subordinado que le cabe a la mujer en las relaciones amorosas. Tanto hombres como 
mujeres han imaginado el lugar del placer sexual de las mujeres más como 
acompañante que como protagonista en el encuentro sexual. Sostiene Fernández: 
―más madre que mujer, más objeto que sujeto erótico, más pasiva que activa, más 
partenaire (la cursiva pertenece a la autora) que protagonista‖. 
Sin embargo, cabe destacar que el erotismo de mujeres y hombres se 
constituye no sólo desde los posicionamientos psicosexuales de cada uno, sino desde 
un conjunto de significaciones imaginarias sociales. De aquí la importancia que 
Fernández les asigna a los cuerpos de ambos géneros: ―no sólo sostienen la 
constitución de la diferencia sexual sino que también soportan-sostienen los mitos 
sociales de lo femenino y lo masculino; éstos configuran desde la imaginarización de 
sus respectivas anatomías hasta las imágenes y prácticas de sí, desde donde juegan 
su ‗identidad‘ sexual‖45. 
La idea de pasividad femenina que se le atribuye a la mujer está asociada al rol 
de madre que la sociedad le ha asignado, dejando en un segundo plano su erotismo. 
También destaca la autora que históricamente este mito demarca relaciones de poder, 
a saber: dominador/dominado/a. La ecuación dominador = activo, dominado/a = pasivo 
es reemplazada por varón = activo, mujer = pasiva. 
 
45
 Ídem. p. 249 
24 
 
Por último, el tercer mito que tendremos en cuenta es el que vincula a la mujer 
con el amor romántico, el cual exalta algunas cuestiones y deniega otras. Es decir, 
para que el ideal amoroso se realice, es necesaria ―la fragilización de la subjetividad 
de las mujeres”46. La misma crea condiciones para un tipo particular de dependencia 
por la cual ella espera tal vez demasiadas cosas del amor de un hombre. 
En este sentido es pertinente preguntarse, como lo hace Fernández: ―¿Por qué 
las mujeres seguimos esperando tal reconocimiento de quienes pareciera que no 
pueden otorgarlo? Tal vez la ilusión de que el amor de un hombre pueda redimir los 
exilios y destierros sea uno de los resortes a través de los cuales el mito del amor 
romántico mantiene su eficacia –y su violencia- simbólica‖47. 
 
Mitos y estereotipos de la mujer deportista 
Desde que se crearon los distintos deportes, fueron instalándose en la 
sociedad estereotipos que circulan en la relación a la figura de la mujer, y eso es uno 
de los principales obstáculos que tiene el género femenino a la hora de incursionar en 
determinadas prácticas, como es en este caso la deportiva. Stanley Eitzen y George 
Sage en su libro Sociology of North American Sport. Boston: Mc Graw Hill hacen 
hincapié en tres factores que limitan el acceso de la mujer en el ámbito deportivo: ―tres 
generalidades derivadas de la consideración del deporte como un espacio masculino: 
1) que la actividad física y deportiva masculiniza a las mujeres; 2) que la práctica 
deportiva es peligrosa para la salud de las mismas, y 3) que las mujeres no tienen 
interés por la práctica deportiva‖48. 
 
46
 Ídem. 
47
 Ibídem. 
48
 Pedraza Bucio, Claudia Ivette. “Mujeres en el Periodismo Deportivo: reflexiones para comprender la 
transgresión desde la práctica discursiva de las reporteras de deportes” en Derecho a comunicar. Revista 
Científica Mexicana de Derecho a la Comunicación. Nº4, Enero – Abril 2012. Disponible en 
http://www.derechoacomunicar.amedi.org.mx/pdf/num4/5-pedraza.pdf 
http://www.derechoacomunicar.amedi.org.mx/pdf/num4/5-pedraza.pdf
25 
 
 A las mujeres se les atribuyen determinados rasgos, como son la delicadeza, 
fragilidad y la dependencia, con respecto al hombre, y es así como luego se las 
identifica en relación a esas características. ―Los estereotipos pueden definirse como 
categorías cognitivas que las personas emplean para codificar, almacenar y recuperar 
la información proveniente de sus interacciones con otros seres humanos, y como 
tales podrían concebirse como parte del componente cognitivo de las actitudes‖49. 
A pesar de la preponderancia de los estereotipos, poco a poco la mujer fue 
incursionando en nuevos espacios, y el deporte es uno de ellos. Se puede observar 
más participación por parte de ellas en clubes, canchas de fútbol 5, gimnasios, pero 
siempre (o todavía) en menor medida que los hombres. 
Para reforzar esta idea, citamos el trabajo realizado por Diana Solís, quien 
afirma que ―al indagar la presencia de cuestiones de género en las representaciones 
del deporte no encontramos reparos a la práctica deportiva femenina en las 
respuestas de los varones. Todos coinciden en que el deporte es bueno, que es bueno 
para todos, recalcan el derecho de la mujer a hacer deporte y algunos indican que es 
bueno ‗si ellas quieren‘ hacer deporte‖50. 
Las frases significativas que destaca la autora de los testimonios recopilados en su 
investigación son los siguientes: 
- “Es bueno porque las mujeres tienen el mismo derecho que los hombres.” 
- “Simplemente las ayuda a mejorar y desarrollar mejor su cuerpo y la salud.” 
- “Es bueno para todos: hombre, mujer, chico, chica.” 
- “Porque la mujer puede distraerse en otra cosa” 
 
 
49
 Mirić, Marija. “Estigma y discriminación: vinculación y demarcación”. Artículo publicado en Paradigmas, 
Año I, No.2, 2003. pp. 4-5. 
50
 Solís, Diana. “Miedos y paradojas, presencias y ausencias en las representaciones del deporte en una 
escuela de Bella Vista”. Disponible en la web: http://www.efdeportes.com/efd55/miedos.htm 
http://www.efdeportes.com/efd55/miedos.htm
26 
 
Según Sandra Barletta ―la práctica del deporte, sea cual fuera, expresa libertad 
en todo sentido, le da a cada deportista la posibilidad de expresarse y de hacer lo que 
siente. Tal vez sea eso que molesta tanto a la sociedad cuando ve a mujeres practicar 
deportes que considera masculinos, porque se expresan a través del deporte y se 
liberan de las ataduras de un modelo femenino que la sociedad sigue imponiendo‖. 
Es necesario aclarar, porque suele confundirse a los estereotipos en muchas 
ocasiones con el concepto de estigma social. Esto se produce porque los estereotipos 
negativos pueden relacionarse con determinados atributos estigmatizantes. Según 
Erving Goffman un estigma es utilizado ―para hacer referencia a un atributo 
profundamente desacreditador, pero lo que en realidad se necesita es un lenguaje de 
relaciones, no de atributos‖51. 
 
51
 Goffman, Erving. Estigmas. La identidad deteriorada. Amorrortu editores. Buenos Aires, 2006. p. 13. 
27 
 
MARCO METODÓLOGICO 
 
En nuestra investigación predominó la metodología cualitativa dado que 
consideramos que el conocimiento de la realidad requiere sistematicidad y 
planificación. 
Consideramos que la relación sujeto/objeto es de interacción, especialmente 
cuando el objeto de estudio es la persona humana. ―Por eso, la conducta social no 
puede explicarse sino a través de la interpretación que los sujetos hacen de la 
situación en sus respectivas interacciones‖52. 
Este tipo de métodoactúa sobre ―contextos reales y el observador procura 
acceder a las estructuras de significado propias de esos contextos mediante su 
participación en los mismos. El presupuesto fundamental es que la investigación social 
tiene que ser más fiel al fenómeno que se estudia que a un conjunto de principios 
metodológicos‖53. 
 Asimismo, para indagar la situación actual de la mujer en el ámbito del fútbol 
realizamos entrevistas en profundidad, entendiéndola como una técnica mediante la 
cual el entrevistador sugiere al entrevistado unos temas sobre los que éste es 
estimulado para que exprese todos sus pensamientos y sentimientos de forma libre. 
Las mismas se realizarán a protagonistas que se desarrollen en el ámbito local. Como 
bien define Calos Sabino, la ventaja de la entrevista es que ―son los mismos actores 
sociales quienes proporcionan los datos relativos a sus conductas, opiniones, deseos, 
actitudes y expectativas, cosa que por su misma naturaleza es casi imposible de 
 
52
 Pérez Serrano, Gloria. Investigación cualitativa, métodos y técnicas. Retos e interrogantes. La Murralla, 
Madrid, 2001. 
53
 Vasilachis de Gialdino, Irene. Métodos cualitativos: Los problemas teóricos-metodológicos. Ceal, 
Buenos Aires, 1992. 
28 
 
observar desde fuera‖54. Es por ello que coincidimos con Sabino en que nadie mejor 
que la persona involucrada para hablarnos de todo lo que piensa y siente. 
Se tuvo en cuenta la entrevista en profundidad, porque es una herramienta que 
permite recoger gran cantidad de información al mantener una conversación con las 
personas implicadas en el objeto de estudio. Como afirma Claudia Oxman, la 
entrevista ―no se trata solamente de la transmisión de saberes donde únicamente 
cuenta lo dicho por el entrevistado, sino de un evento comunicativo construido 
progresiva y cooperativamente por ambos, aún cuando, por una serie de juegos o 
contratos, el interés recaiga en el entrevistado‖55. 
Las preguntas realizadas a las jugadoras del plantel del fútbol femenino fueron 
divididas por franja etaria en dos grupos. 
 El primero, con jugadoras a las que se consideró de experiencia, y las cuales 
podía aportar datos históricos, debido a que formaron parte de la primera camada 
desde que se creó el fútbol femenino en dicha institución. También se consiguieron 
con estas entrevistas datos de la institución, logros conseguidos en cuanto a nivel 
deportivo y un breve recorrido en la evolución de esta práctica. 
El segundo grupo de testimonios lo integraron futbolistas adolescentes que 
hace pocos años constituyen el plantel. El objetivo en este caso –como en el primer 
grupo– también fue obtener datos para analizar las representaciones sociales que 
construyen las futbolistas sobre su propia práctica, pero además se buscó contrastar 
testimonios. Esto se debe a que en muchos casos las costumbres eran diferentes y 
bien marcadas. Un claro ejemplo es la relación con el entorno familiar. Se observó en 
base a las entrevistas que las jugadoras adolescentes contaron con mayor apoyo en 
sus padres cuando decidieron jugar este deporte. En cambio, las futbolistas más 
grandes padecieron cierto rechazo de la familia cuando empezaron a jugar al fútbol. 
 
54
 Sabino, Carlos. El proceso de investigación. Lumen/Hvmanitas. Argentina, 1996. p. 167. 
55
 Oxman, Claudia. La entrevista de investigación en ciencias sociales. Eudeba. Buenos Aires, 1998. p. 
61. 
29 
 
Además, las futbolistas que integraron este segundo grupo de testimonios 
aportaron información sobre la selección argentina debido a que dos de ellas tuvieron 
la oportunidad de disputar torneos y partidos internacionales, representado al fútbol 
femenino argentino. 
 Otra parte de la investigación estuvo destinada a relevar testimonios 
relacionados al fútbol femenino. Se buscó entrevistar a personas que puedan analizar 
este deporte y aportar diversas miradas desde su formación. Es por ello que se 
dialogó con sociólogos que se especializan en deporte, profesores de Educación 
Física, periodistas que cubren fútbol femenino (u otros que en algún período se 
relacionaron con este deporte), doctores en filosofía, directores técnicos de fútbol 
femenino y también jugadoras de otros países (como fue el caso de la brasileña 
Marcia Smoskowytz, y la argentina Florencia Quiñones, que juega en el Barcelona de 
España). 
 En este caso el cuestionario estuvo armado según guías o pautas que –como 
las denomina Sabino– son de tipo organizativas y ―se guían por una lista de puntos de 
interés que se van explorando en el curso de la entrevista. Los demás deben guardar 
cierta relación entre sí‖56. 
 Es importante mencionar que muchos testimonios no fueron realizados de 
manera presencial debido a que las personas viven o residen en otros países (Suecia, 
España, Brasil, Chile), es por eso que los cuestionarios fueron enviados a través de 
casillas de correo. En estas entrevistas no se pudo utilizar el recurso de la repregunta 
porque no había cara a cara entre entrevistador y entrevistado. Ante esta limitación lo 
que se hizo fue volver a enviar mails en caso de que alguna idea o concepto no haya 
sido clara. Es decir, se puntualizaron aspectos que necesitaban tener mayor 
desarrollo. 
 
56
 Sabino, Carlos. El proceso de investigación. Lumen/Hvmanitas. Argentina, 1996. p. 173. 
30 
 
PROTOCOLO 
 
Se presenta a continuación la guía de preguntas que realizamos en primera 
instancia a las jugadoras de plantel de Estudiantes de La Plata, y segundo las que 
respondieron distintos protagonistas relacionados a la temática del fútbol femenino, 
como fueron periodistas deportivos, preparadores físicos, filósofos, sociólogos, 
antropólogos, profesores de educación física y directores técnicos, entre otros. La 
mayoría de las entrevistas, además, se complementaron con repreguntas que se 
desprendieron de respuestas emitidas por nuestros entrevistados. 
El protocolo nos sirvió para organizar el trabajo y, sobre todo, porque el 
cuestionario fue trabajado y analizado en base a nuestros objetivos propuestos en la 
investigación. El cuestionario de preguntas nos permitió recuperar la información que 
necesitábamos para conocer más sobre el fútbol femenino de Estudiantes, de 
Argentina y también de otros países. 
 
Preguntas realizadas al plantel de primera división de Estudiantes57: 
- ¿Por qué jugás al fútbol? 
- ¿Cómo era el fútbol femenino en sus orígenes en Estudiantes? 
- ¿Cómo llegaste a Estudiantes? 
- ¿Habías jugado en algún otro lugar? 
- ¿Qué te dijeron tu papá y tu mamá cuando les comentaste que ibas a empezar 
a jugar al fútbol? 
- ¿Mirabas fútbol antes de practicarlo? 
- ¿Alguien de tu familia jugaba al fútbol? 
- ¿Te parece que se sigue ejerciendo un discurso machista por parte de los 
hombres o se están cambiando esas ideas? 
 
57
 Algunas de las preguntas que forman parte de este cuestionario también fueron realizadas a 
exjugadoras de Estudiantes. 
31 
 
- ¿Qué diferencias existe en tener un entrenador hombre o una entrenadora 
mujer? 
- ¿Qué diferencias existe entre el fútbol femenino y el fútbol masculino? 
- ¿Qué es lo que más te gusta de este deporte? 
- ¿Tienen algún tipo de cábala o rituales antes de cada partido? 
- ¿Qué recuperan de la Mística que identifica al club? 
- ¿Considerás que en algún momento se puede llegar a vivir de esto en 
Argentina? 
- ¿Cuál es el factor por el que el fútbol femenino no evoluciona? 
- ¿Por qué los dirigentes no deciden invertir en el fútbol femenino? 
- Cuando dejó de existir el fútbol femenino en Gimnasia, ¿eso generó un paso 
atrás para que el deporte siga creciendo en La Plata? 
- ¿Cómo es la relación con tus colegas varones? 
- ¿Qué deseos esperásconcretar con el fútbol femenino? 
 
Preguntas realizadas a entrevistados relacionados al fútbol femenino: 
- ¿Qué sabés del fútbol femenino? 
- ¿Se trabaja diferente desde la parte física el fútbol femenino del fútbol 
masculino? 
- ¿Por qué pensás que en otros países como Estados Unidos o Suecia sí tienen 
protagonismo y logró desarrollarse el fútbol femenino? 
- ¿Cómo es la relación cuando en un partido de fútbol un equipo de hombres 
enfrenta a un equipo de mujeres? 
- ¿Por qué genera tanto dilema que la mujer se interese en el fútbol? 
- ¿Con el boxeo pasa lo mismo que con el fútbol? ¿Les cuesta más a las 
mujeres desarrollarse y ser aceptadas? 
- ¿Pudiste identificar algo que caracterice a las mujeres futbolistas? 
32 
 
- ¿Considerás que en algún momento las mujeres pueden llegar a vivir del fútbol 
en Argentina? 
- ¿Qué diferencias creés que existen entre el fútbol femenino y el fútbol 
masculino? (En cuanto al juego, u otros aspectos) 
- ¿Cómo ves al fútbol femenino en cuanto a nivel, apoyo y difusión? 
- ¿Cuál es el factor por el que el fútbol femenino no evoluciona? 
- ¿Creció la popularidad del fútbol en el ambiente femenino? Me refiero a que 
quizás en la actualidad es más común ver mujeres jugando al fútbol en un 
parque, o que sea un deporte practicado por un grupo de compañeras de 
trabajo, etc. 
33 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
SEGUNDO TIEMPO 
34 
 
CAPÍTULO I: 
ORÍGENES DEL FÚTBOL FEMENINO EN ARGENTINA 
 
El Barón Pierre Coubertin, francés creador de los Juegos Olímpicos, tildaba la 
participación femenina en el deporte como ―antiestética‖. Según Coubertin, los juegos 
estaban destinados a la exaltación solemne y periódica del atletismo masculino. Por su 
parte, las mujeres debían ejercer lo que se conocía como ―mandato social‖, que las 
limitaba a desempeñar quehaceres puramente domésticos: lavar, cocinar, criar a sus 
hijos, todo en el seno de la familia. 
El lema de los Juegos Olímpicos era ―Citius, altius, fortius‖, cuyo significado es 
"más rápido, más alto, más fuerte‖. En ese contexto, ―la gran mayoría de las disciplinas 
deportivas han sido desde los inicios del deporte diseñadas a partir de las 
características fisiológicas masculinas‖, según expresa Claudio Tamburrini58. 
El fútbol, como la mayor parte de los deportes fue pensado y destinado para la 
práctica de los hombres. Gracias a su masividad y aceptación dentro de la sociedad se 
convirtió en uno de los deportes más populares del mundo, inscribiéndose como 
práctica cultural representativa de muchas naciones. Aunque la incorporación de la 
mujer pudo hacerse presente en este espacio, hasta el momento no logró despojarse 
de los prejuicios que circundan a su alrededor. Además, lo que se buscó desde dicha 
práctica es que las mujeres puedan desarrollarse futbolísticamente pero con sus 
propias características, aunque en el juego las reglas son iguales para todos. 
Las mujeres como deportistas no escapan a las pautas hegemónicas ejercidas 
por la masculinidad, tuvieron que vencer y superar diversas barreras impuestas por la 
sociedad, situación que se magnifica si tenemos en cuenta que el deporte nació como 
 
58
 Tamburrini, Claudio (Entrevista con las autoras). Es Doctor en Filosofía, trabaja actualmente en la 
Universidad de Estocolmo, Suecia, donde está radicado desde la década de los '70. Estuvo desaparecido 
durante la última dictadura militar, y tras poder escaparse se exilió en Europa. Exjugador de fútbol 
profesional en la República Argentina, fue arquero del equipo Almagro. Trabajó distintos temas que 
articulan la filosofía y el deporte. 
35 
 
un conjunto de destrezas en el cual los hombres potenciaban sus cualidades 
corporales. Es por ello que el género femenino se enfrentó, entre otras cosas a la 
discriminación, desigualdad e indiferencia por parte de las organizaciones y también 
de sus colegas, los hombres. 
Los hombres contaban con la existencia de ámbitos exclusivos, de los cuales la 
mujer quedaba al margen. Uno de ellos fue la política, lugar en el cual el género 
femenino no tenía injerencia, tanto que no podía votar. A medida que la mujer fue 
accediendo a distintos espacios y actividades, se fue incorporando al deporte, con las 
limitaciones que conllevaba ingresar en un campo hegemonizado por hombres. 
 
El deporte moderno en la época victoriana 
En el período de la Inglaterra victoriana surgieron los deportes modernos, y fue 
en las escuelas inglesas donde los juegos se transformaron en actividades cotidianas, 
organizadas y con sus respectivas reglas. El deporte estaba impregnado de una 
concepción de la masculinidad que resaltaba ―la competitividad, la rudeza y la 
dominación física‖59. En este contexto, se pensaba a las mujeres fuertes en el ámbito 
de la moral y el espíritu pero se las consideraba débiles intelectual y físicamente, se 
argumentaba que eran portadoras de una ―naturaleza más delicada‖60. Éste era el 
motivo por el cual debían ser madres, esposas y resguardarse en el seno del hogar y 
la familia. 
 Angélica Ordóñez expresa que, desde el punto de vista histórico, ―la posición 
de rechazo respecto a la incorporación de la mujer al deporte se acompañaba de un 
discurso patriarcal que dictaba lo que podían hacer o no en este ámbito. Como en 
tantas otras esferas de la vida, el médico, el padre (y con frecuencia la madre, 
actuando como reproductora de los valores dominantes) y el cura eran los encargados 
 
59
 Ordóñez, Angélica. ―Género y deporte en la sociedad actual‖. Articulo disponible en la web: 
http://usfq.edu.ec/publicaciones/polemika/Documents/polemika007/polemika007_016_articulo012.pdf 
60
 Ídem. 
http://usfq.edu.ec/publicaciones/polemika/Documents/polemika007/polemika007_016_articulo012.pdf
36 
 
de transmitir estas normas. Partiendo de estas consideraciones, se establecían 
prescripciones muy concretas respecto a los deportes aptos para mujeres y a los que 
no lo eran‖61. Esta mirada relegaba al género femenino a representar lo frágil y la 
elegancia, distanciándose del deporte que era sinónimo de fuerza. 
 
El Football 
El fútbol, un deporte de origen inglés y de elite en sus comienzos, cuando llegó 
a Argentina a mediados del Siglo XIX sólo era practicado por cierto sector de la 
sociedad. Como bien explica el historiador Julio Frydenberg, ―el fútbol fue jugado en 
las escuelas y clubes de la colonia inglesa, así como en los clubes de la élite criolla 
durante todo el último cuarto del siglo XIX, sólo durante los últimos años del siglo XIX y 
los primeros del XX su práctica se difundió entre los sectores populares‖62. 
El 9 de mayo de 1867 se fundó el Buenos Aires Foottball Club el primer club de 
fútbol en la Argentina y en Sudamérica. Un grupo de jugadores de cricket fueron los 
artífices de esta iniciativa: ―si algo tenían en común era su condición de ‗clerks‘ 
(oficinistas) y ‗merchants‘ (comerciantes)… jóvenes que se conocían de los ámbitos 
bursátiles de Buenos Aires, en especial empleados de casa exportadoras e 
importadoras, corredores de bolsa, personal de bancos y algunos estancieros. La 
amplia mayoría eran miembros del Buenos Aires Cricket Club‖63. Entre los fundadores 
se destacaron Walter Heald, los hermanos James y Thomas Hogg, Thomas Jackson y 
Theodore Smith. 
Según destaca Ezequiel Fernández Moores, la epidemia de fiebre amarilla que 
azotó a Buenos Aires en 1871 frenó el inicio del fútbol organizado, que se reactivó en 
 
61
 Gutiérrez Pequeño, José Miguel. ―Mujer, deporte y medios de comunicación‖. Artículo disponible en la 
web: http://www.pilarlopezdiez.eu/documents/CSD.LibroDeporteymujeres.pdf 
62
 Frydenberg, Julio. “Espacio urbano y práctica del futbol, buenos aires 1900-1915”. Disponible en la web: 
http://www.efdeportes.com/efd13/juliof.htm63
 Fernández Moores, Ezequiel. Breve Historia del deporte argentino. Editorial El Ateneo, Buenos Aires 
2010. p. 60. 
http://www.efdeportes.com/efd13/juliof.htm
37 
 
la siguiente década. Una persona influyente y clave en la expansión de este deporte 
fue Alexander Watson Hutton, un escocés que llegó a Argentina para ser el rector de 
la escuela escocesa Saint Andrews. ―Dos años después fundó la Buenos Aires English 
High School, que al tiempo se convirtió en la mayor escuela privada de la ciudad. Pero 
su fama no la ganó por la educación sino por el fútbol. Con él y en aquella escuela 
nació Alumni‖64. El citado Alumni fue un equipo emblema de los primeros años del 
fútbol argentino, el primer gran campeón de los torneos jugados en nuestro país y en 
él se destacaron los hermanos Brown, junto a otros jugadores que marcaron época. 
Hutton fue importante en la historia en Argentina porque fomentó su inserción al 
incluirlo entre los juegos escolares. 
Mientras tanto, en la Inglaterra victoriana los obreros ansiaban hacer deporte e 
incursionar en el profesionalismo (el fútbol se había declarado profesional en 1885). 
―La ‗ideología del amateurismo sirvió a las clases medias como forma de control y 
exclusión. Sólo el amateur podía practicar el fair play. Jugaba por el placer de jugar. 
No por dinero‘‖65. Es así como el fútbol fue creciendo entre la clase obrera, sin 
embargo en Buenos Aires ―el fútbol era cosa de elegantes‖66. 
El fútbol llegó al Río de La Plata junto con la inmigración británica que arribó, y 
fue ése el desembarco de un deporte que iba a cautivar a los rioplatenses. Poco a 
poco su popularización se produjo porque se empezó a incluir a todos los sectores 
sociales en su práctica. Este fenómeno generó que los argentinos lo adoptasen como 
deporte nacional. Julio Frydenberg expresó que ―la adopción del deporte estuvo 
asociada a la fundación de clubes. Los jóvenes sintieron la necesidad de tener un 
terreno, un espacio propio, para ser usado como field, como campo de fútbol. Así, el 
proceso de popularización del fútbol que se inició en Buenos Aires contó con tres 
 
64
 Ídem. p. 62. 
65
 Ídem. p. 63. 
66
 Ídem. p. 63. 
38 
 
ingredientes estrechamente unidos: la iniciación en la práctica del juego, la fundación 
de un club y la búsqueda de una cancha propia‖67. El sociólogo costarricense Sergio 
Villena Fiengo definió ese estilo nacional: “no se limita a habilidades técnicas y 
tácticas, sino que también implica la adquisición de determinados valores morales 
(éticos)‖68. La construcción de la identidad futbolera en nuestro país se formó en 
relación al mito del pibe, la gambeta, la picardía y el potrero. 
En nuestro trabajo será crucial dicha definición porque nos permitirá ver que el 
fútbol es un deporte dominado hegemónicamente por los hombres, y un área en el que 
las mujeres buscan mediar a través del consenso y la negociación. La subjetividad 
colectiva dificultó (y continua haciéndolo) el ingreso de la mujer a la práctica del fútbol, 
determinadas prácticas socioculturales moldean nuestras formas de pensar y generan 
estereotipos que luego van a regir a cada género. 
A pesar de que las jóvenes o adultas, que empiezan a jugar al fútbol lo hacen 
en lugares también frecuentados por los hombres, como lo son parques, plazas, la 
estrecha relación del potrero y ―el pibe‖ forman no sólo parte de una construcción 
social que se hace alrededor de lo masculino, sino también fueron relacionados 
históricamente como un espacio con presencia de pibes. Eso de fondo, conlleva a 
pensar en todo un ámbito económico, social y cultural. Y las protagonistas, a pesar del 
desacuerdo que manifiestan, tienen muy presente esa idea. 
Eduardo Archetti hizo hincapié en el fútbol (en Argentina) como algo propio del 
mundo masculino: ―forma parte de las dimensiones más generales de una sociedad y 
su cultura sino que, paralelamente, se relaciona con la construcción de un orden y un 
mundo masculino, de una arena, en principio, reservada a los hombres. En América 
 
67
 Frydenberg. Op. cit. 
68
 Alabarces, Pablo. Futbologias: Fútbol, identidad y violencia en América Latina. CLACSO, Buenos Aires, 
Argentina. ISBN: 950-9231-86-X. 2003. Texto disponible en la web: 
http://bibliotecavirtual.clacso.org.ar/ar/libros/alabarces/futbol.html 
http://bibliotecavirtual.clacso.org.ar/ar/libros/alabarces/futbol.html
39 
 
Latina el fútbol es un mundo de hombres, es un discurso masculino con sus reglas, 
estrategias y su ‗moral‘‖69. 
El fútbol en los hombres se presenta como un juego, un trabajo, un mundo 
donde se exaltan ciertos valores: moral, valores, códigos. 
Sin contradecir a Archetti, y situándonos geográficamente, consideramos que el 
fútbol en todas partes responde a ser un mundo netamente masculino, más allá de 
casos puntuales (como Suecia, Alemania y Estados Unidos) en los cuales el fútbol 
femenino está mucho más desarrollado y difundido. 
 
El emblema: el soccer estadounidense 
Tomando como ejemplo a Estados Unidos, es necesario abrir el interrogante 
sobre varias aristas. En este país, la práctica se desarrolla mucho más en el ámbito 
femenino, se remunera a las futbolistas que juegan soccer (así lo denominan al fútbol 
creado en Gran Bretaña, para diferenciarlo del fútbol americano). A su vez, las 
jugadoras se compran y realizan transferencias de un club a otro; los sponsors 
deciden invertir en ellas, en los canales de deporte también es noticia televisada un 
resultado de un partido de fútbol femenino. Estos aspectos, se acercan bastante a lo 
que predomina en el fútbol masculino a nivel mundial. 
Estados Unidos es el sitio en el que más se valora a la mujer futbolista, de 
hecho casi la mitad de las practicantes del deporte son chicas. Su cultura deportiva es 
muy potente y ha integrado de manera exitosa a la mujer en muy poco tiempo. No sólo 
en fútbol, como se comprobó en los últimos Juegos Olímpicos. Se promociona y se 
explota una imagen positiva de la deportista, por ejemplo en anuncios. 
Muchas personas relacionadas a este deporte afirman que este fenómeno se 
debe a que en Estados Unidos el deporte más popular es el fútbol americano, y que 
por ello las mujeres ganaron terreno y se impusieron en el soccer. Pablo Cervantes, 
 
69
 Archetti, Eduardo. ―Fútbol y ethos‖, en Monografías e informes de investigación, Serie Investigaciones, 
Flacso, Buenos Aires, 1985. p. 7. 
40 
 
especialista en fútbol femenino, aportó: ―El entramado universitario acerca el deporte y 
establece unas bases para su desarrollo. No es de extrañar que en período estudiantil 
las mujeres prefieran jugar a un juego técnico que a otros más físicos. Se ha llegado a 
decir muchas veces que en EEUU el fútbol es ―cosa de chicas‖, pero hay que decir 
que influye que tenga una selección de fútbol masculino bastante mediocre, muy por 
debajo del nivel europeo, y que su liga de hombres nunca fue referente mundial. Estoy 
de acuerdo en que en EEUU han tenido que superar menos clichés aprendidos que en 
nuestros países, con mayor tradición futbolística‖70. 
Pensar esto nos parece minimizar la situación, teniendo en cuenta que muchos 
países que no logran ser potencia dentro del espacio del fútbol masculino están lejos 
de aprovechar esa falencia para tener más presencia del género femenino en el fútbol. 
Creemos que esto se debe a que hay ciertas pautas culturales que influyen en que en 
determinados lugares la mujer logre acceder a espacios que quizás en otro lugar, con 
otra cultura, dificultan dar las mismas condiciones de igualdad entre el fútbol femenino 
y el masculino. 
―En Estados Unidos el deporte masculino por antonomasia es el Fútbol 
Americano, el 'soccer' es el deporte que practican desde pequeñas las mujeres, desde 
laescuela hasta la Universidad, y su liga profesional siempre se ha caracterizado por 
ser una de las mejores del mundo a nivel de impacto mediático. En Estados Unidos 
apuestan claramente por el fútbol femenino. Y lo hacen desde la base, una garantía de 
éxito para su desarrollo‖, explica la periodista española Isabel Roldán71. 
 
70
 Cervantes, Pablo. (Entrevista con las autoras). Es un periodista español. Director de protagonistas del 
Juego http: //protagonistasdeljuego.com/quienes-hacen-pd/, un sitio en español que trata con continuidad 
el fútbol femenino a nivel global. Primero empezó con las ligas dominantes de la época, alemana y 
estadounidense. Editó la revista bimestral Protagonistas pero ha dejado de publicarse, siguen a la venta 
los números publicados hasta fin de existencias. 
71
 Roldán, Isabel. (Entrevista con las autoras). Es una periodista española. Estudió Filosofía y Letras en la 
Universidad de Deusto (Bilbao). Máster de Periodismo de la Universidad Autónoma de Madrid-El País. 
Trabajó en diversos medios de comunicación: El País, El Sol, Grafía y en AS desde 1996 (sección fútbol, 
femenino y masculino). 
41 
 
A su vez, Roldán mencionó las potencias que son Estados Unidos, Alemania, 
Suecia, Inglaterra y Francia, y remarcó que al fútbol femenino le falta tener visibilidad. 
―El apoyo cada vez está siendo mayor, pero sobre todo lo que necesita el fútbol 
femenino es convertirse visible. Para ello, es fundamental el apoyo mediático y el 
aumento de su presencia en los medios de comunicación. Y que los clubes masculinos 
tengan un compromiso de apoyar y arropar al fútbol femenino teniendo equipos 
femeninos y ayudando a darlos a conocer‖. 
 
Juegan las mujeres 
El fútbol femenino dio sus primeros pasos en Inglaterra a fines del Siglo XIX. 
Allí se empezaron a organizar los primeros encuentros. La activista Nattie Honeyball 
fundó ‗British Ladies Football Club‘: ―En 1894 se funda en Inglaterra el primer equipo 
de mujeres y desde 1895 en adelante diferentes equipos de mujeres jugaron partidos 
de fútbol antes miles de espectadores, hombres y mujeres‖72. 
La Primera Guerra Mundial (1914-1918) y el contexto social, político y 
económico generado por el conflicto internacional, estimuló que las mujeres participen 
más en el deporte porque estaba relacionado a cierto sentido de patriotismo: ―fue el 
proceso clave para la manifestación del fútbol femenino en Gran Bretaña, ya que la 
mayor parte de los hombres estaban en el frente y muchas mujeres trabajaban en las 
fabricas de armamento. Así, en los momentos de ocio jugaban al fútbol en los patios 
de diferentes factorías. El equipo más popular de ese período fue el Dick Kerr´s 
Ladies, que participó en torneos para recaudar fondos‖73. 
Finalizado el conflicto bélico, en 1920, se jugó el primer partido internacional 
entre clubes franceses e ingleses. Este hecho coincide con la reivindicación del 
 
72
 Janson, Adolfina. Se acabó ese juego que te hacia feliz. Nuestro fútbol femenino (desde su ingreso a la 
AFA en 1990, hasta el mundial de Estados Unidos en 2003). Buenos Aires, Aurelia Rivera, 2008. p. 50. 
73
 D Mujer: Publicación anual sobre mujer y deporte/ Nº2, año 2012. Gratuita. Edición Zaragoza Consejo 
Superior de Deportes. p. 5. 
42 
 
deporte femenino que estaba llevando adelante la activista francesa Alice Milliat, quien 
fue fundadora de la Internacional del Deporte para Mujeres. 
Allí se registraron encuentros amistosos de fútbol femenino, los cuales eran a 
beneficio de los perjudicados por la guerra. Aquí la figura femenina comenzó a 
despegar de su rol ligado a las tareas de hogar. Luego de ese período se frenó el 
avance del fútbol femenino, y a pesar de aumentar la cantidad de mujeres que jugaban 
este deporte. Posteriormente a la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) se incrementó 
el porcentaje de las mujeres que querían jugar al fútbol, y este fenómeno fue creciendo 
paulatinamente en todo el mundo. En 1947 Unión Soviética organizó certámenes 
regionales, mientras que en Italia en Junio de 1948 se disputó un partido en el Estadio 
Olímpico de Roma (los equipos integrados por actrices y bailarinas de la ópera 
romana, este encuentro era a beneficio). Sin embargo, muchos se mostraban reacios 
a que esto continúe avanzando. Adolfina Janson describe que ―el futbol femenino 
como deporte organizado desaparece en la década del treinta y se reanuda en la 
década del sesenta, sumando nuevos países que se sienten alentados por aquellos 
que han sido vanguardia de este movimiento y se han dado a conocer a través de 
giras y campañas más allá del territorio europeo‖74. 
En la década del cincuenta en Alemania, la German Football Asociation 
prohibió cualquier evento de fútbol femenino. Esto cambió en los años setenta, cuando 
se empezó a hablar de ―las damas del fútbol‖75. Esta indiferencia hacia la mujer 
futbolista no se daba sólo en Europa. En Brasil, hasta 1979, el ingreso de las mujeres 
estaba prohibido. Tuvo que aparecer la FIFA (Federación Internacional de Fútbol 
Asociación) para impulsar el progreso del fútbol femenino de manera casi intimidatoria 
y así los países se vieron en la obligación de comenzar a fomentarlo. 
 
74
 Janson, Adolfina. Se acabó ese juego que te hacia feliz. Nuestro fútbol femenino (desde su ingreso a la 
AFA en 1990, hasta el mundial de Estados Unidos en 2003). Buenos Aires, Aurelia Rivera, 2008. p. 51. 
75
 Ídem. 
43 
 
Otro hecho relevante para el desarrollo del fútbol femenino se produjo el 25 de 
febrero de 1970, cuando se creó en la ciudad de Turín la Federación Internacional de 
Fútbol Femenino (FIEFF), la cual estaba avalada por la UEFA (Unión de Asociaciones 
de Fútbol Europeas). ―En 1970 se disputó el primer Mundial y un año después el 
segundo en México, ambos sin el reconocimiento de la FIFA‖76. Luego de este hecho, 
UEFA empezó a fomentar la incorporación del deporte por el continente europeo, y 
esto llevó a que en otros también comiencen con la práctica. ―En Asia, el campeonato 
femenino se celebró en 1976. En Oceanía se empezó a disputar a partir de 1983. La 
Euro Femenina lo hizo en 1984 y el resto de campeonatos de África, Sudamérica y 
América del Norte iniciaron sus torneos en 1991‖77. 
En 1986 durante un congreso realizado en México, la FIFA hizo hincapié en 
proyectar mundialmente el fútbol femenino. Fue así como João Havelange, presidente 
de dicha institución, prometió la realización de la 1ª Copa Mundial Femenina para 
Mayores. Este anuncio cobró aún más valor cuando en el Mundial de Fútbol masculino 
Italia (1990), la FIFA reconoció al fútbol femenino, e impulsó a los países para formar 
sus selecciones. Ese fue el puntapié inicial para darle promoción, profesionalización y 
entidad a la práctica de fútbol femenino. 
Antes del comienzo de los torneos en Argentina, encontramos un antecedente 
de fútbol femenino el 18 de julio de 1971 en el Estadio de Nueva Chicago, el cual fue 
escenario de un partido internacional: ―un elenco de universitarias argentinas 
enfrentaba al seleccionado femenino de México. Ganaron las locales 3-2 y quien 
dirigió –Guillermo Nimo, en ese entonces era exárbitro de la Asociación del Fútbol 
Argentino– se vio obligado a expulsar a una jugadora de cada bando, tras una mutua 
agresión en la que no faltaron los tradicionales arañazos y tirones de pelos‖78. 
 
76
 D Mujer: Publicación anual sobre mujer y deporte/ Nº2, año 2012. Gratuita. Edición Zaragoza Consejo 
Superior de Deportes. p. 6. 
77
 Ídem. 
78
 ―Libro del Fútbol‖. Volumen III. Abril Educativa y cultura S.A. Buenos Aires, Argentina. 1974. p. 174. 
44 
 
Es pertinente detenerse en este último párrafo. Que ante una pelea de mujeres 
se mencionen “los

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