Principales acciones de enfermería en un paciente con EUP - Romero Bernal Eduardo

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UNIVERSIDAD MEXIQUENSE DEL
BICENTENARIO
Fisiopatología
Lic. Enfermería
Las principales acciones de enfermería en un paciente con enfermedad ulcerosa péptica (EUP) se pueden describir detalladamente de la siguiente manera:
· Valorar el estado general del paciente, sus signos vitales, su nivel de dolor y su tolerancia a la dieta. Para ello se debe realizar una entrevista y una exploración física al paciente, registrando los datos obtenidos en los formatos correspondientes. Se debe medir la temperatura, el pulso, la presión arterial y la frecuencia respiratoria del paciente cada 4 horas o según criterio médico. Se debe evaluar el nivel de dolor del paciente utilizando una escala numérica o visual y administrar analgésicos según prescripción médica. Se debe verificar el tipo de dieta que tiene indicado el paciente y observar su ingesta y su apetito1.
· Administrar los medicamentos prescritos para inhibir la secreción ácida, erradicar el H. pylori y proteger la mucosa. Para ello se debe revisar la historia clínica del paciente y verificar las alergias a medicamentos que pueda tener. Se debe preparar y administrar los medicamentos por la vía indicada (oral o intravenosa), respetando las cinco reglas de oro: paciente correcto, medicamento correcto, dosis correcta, vía correcta y hora correcta. Se deben señalizar y separar los medicamentos de alto riesgo (citotóxicos, radiofármacos, insulinas, anticoagulantes y electrólitos concentrados) y los medicamentos con aspecto y nombre parecido (LASA). Se debe realizar una doble verificación antes de preparar y administrar los medicamentos de alto riesgo12.
· Vigilar la aparición de complicaciones como sangrado, perforación o estenosis. Para ello se debe observar al paciente en busca de signos de alarma como hematemesis (vómito con sangre), melena (heces negras), anemia (palidez, fatiga), shock hipovolémico (hipotensión, taquicardia), peritonitis (dolor abdominal intenso, distensión abdominal) o disfagia (dificultad para tragar). Se debe controlar el balance hídrico del paciente midiendo las entradas (líquidos administrados por vía oral o parenteral) y las salidas (orina, heces, vómitos). Se debe realizar un hemograma completo al paciente cada 24 horas o según criterio médico para detectar posibles alteraciones hematológicas12.
· Educar al paciente sobre los factores de riesgo y las medidas preventivas para evitar las recidivas de la úlcera. Para ello se debe brindar información clara y sencilla al paciente sobre su enfermedad, su tratamiento y su pronóstico. Se debe orientar al paciente sobre los hábitos higiénico-dietéticos que debe seguir para favorecer la cicatrización de la úlcera y prevenir su reaparición. Estos hábitos incluyen: evitar el consumo de alcohol, tabaco, café u otras sustancias irritantes; fraccionar las comidas en pequeñas cantidades; masticar bien los alimentos; evitar las comidas picantes o muy condimentadas; evitar el uso indiscriminado de AINE; seguir el tratamiento farmacológico según indicación médica; acudir a revisiones periódicas12.
· Brindar apoyo emocional al paciente y su familia, fomentando una comunicación efectiva y empática. Para ello se debe establecer una relación terapéutica con el paciente basada en el respeto, la confianza y la escucha activa. Se debe identificar las necesidades emocionales del paciente y ofrecerle apoyo psicológico si lo requiere. Se debe involucrar a la familia en el cuidado del paciente siempre que sea posible e informarle sobre el estado del mismo. Se debe facilitar un ambiente tranquilo que favorezca el descanso del paciente3.