Factores condicionantes de distancias recorridas

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Factores condicionantes en las 
distancias recorridas por 
los jugadores en un partido de fútbol.
Claudio Fernández Feliciate
LICENCIADO EN CIENCIAS DE LA ACTIVIDAD FÍSICA Y DEL DEPORTE (I.N.E.F.). •	
 Universidad de La Coruña.
Entrenador Nacional de Fútbol y de Atletismo•	
 
Son numerosos y variados los estudios realizados por 
distintos autores de renombre como: Reilly y Thomas 
(1976), Van Gool (1998), Ohsahi (1988), Bangsbo (1993), 
Drust (1995), José Luis Arjol (2000), DiSalvo et al (2007) 
sobre las distancias y velocidades a las que se ejecutan 
los distintos desplazamientos que recorre un futbolista a 
lo largo de un partido de fútbol.
Las exigencias físicas han cambiado hasta tal punto, 
que hace cinco décadas, los futbolistas recorrían la mitad 
de distancia que hoy en día. Actualmente se busca repetir 
acciones muy cortas numerosas veces y por ello se tra-
bajan métodos enfocados a la resistencia a la velocidad.
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 DiSalvo et al (2007) llevaron a cabo un estudio con casi 300 jugadores, en los que analizaron, 
20 partidos de la primera división española y 10 partidos de la Champion League, con 8 cámaras 
sincronizadas. Comprobaron que los jugadores recorrían entre 11393 +/- 1016 metros sin tener en 
cuenta los puestos. En relación a cada puesto los desplazamientos obtenidos fueron:
 
 El estudio de José Luis Arjol (2000) relacionado con las velocidades a las que se ejecutan los 
desplazamientos por los futbolistas en un partido de fútbol indica: 
 
 Todos estos estudios se ven condicionados y alterados por una serie de factores que afectan en las 
distancias recorridas y velocidades ejecutadas en cada desplazamiento por cada jugador en un partido. 
Destaco los siguientes:
1) Cambios en el reglamento. A lo largo de la historia del fútbol moderno se han producido modi-
ficaciones en las reglas que han alterado de modo alguno la forma de jugar de los equipos. Así pues tene-
mos:
a. El fuera de juego. Aunque para muchos es de incorporación reciente, la verdad es que data de los 
primeros años del fútbol. Se utilizó esta regla para combatir las actitudes de los “palomeros”. La regla en sí 
ha sido modificada a lo largo de la historia del fútbol con interpretaciones dispares por jugadores y público. 
La modificación más destacada fue la que se produjo en 1990 que permitía que un atacante en línea con 
el penúltimo oponente no se encontrara en situación de fuera de juego. Esto permitió favorecer el fútbol de 
ataque.
La FIFA realizó modificaciones en 2003 y 2005 para favorecer el juego de ataque y dar más emoción al 
fútbol, aunque ocasiona controversia, ya que no queda en ocasiones clara su interpretación. 
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b. La prohibición del uso de las manos en los porteros tras cesión de balón de sus compañeros 
con el pie (1992). Con esta regla se consiguió evitar las largas pérdidas de tiempo que se ocasionaban y 
por tanto los parones y recuperaciones largas en los jugadores.
c. El tiempo límite de retención del balón en manos del portero (1997). Al disponer el portero de un 
tiempo estipulado para poder sacar, se producen acciones más rápidas en el juego.
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d. La predisposición de varios balones alrededor del campo.Cuando el balón principal sale del 
terreno de juego en breve tiempo los recogepelotas facilitan uno, lo que reduce la pérdida de tiempo y dis-
minuye los tiempos de recuperación de los jugadores entre cada jugada. 
Estas reglas condicionan el juego y obliga a realizar más sprints y menos recuperaciones a los jugadores 
con respecto a las normas establecidas anteriormente.
2) El sistema táctico a emplear por un equipo. Hay sistemas que requieren de mayor exigen-
cia física que otros y por tanto habrá que tenerlo en cuenta en la planificación que se vaya a desarrollar. 
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3) Tácticas más conservadores o más ofensivas. Las tácticas conservadores requieren de 
menor exigencia física al permanecer en la retaguardia esperando el fallo del oponente. En un mismo parti-
do, se utilizan unas u otras, en función del resultado y de los intereses del equipo.
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4) El estilo de juego. El fútbol Sudamericano se caracteriza por ser más lento, con más pases cortos 
que el fútbol Inglés que es más dinámico, con más profundidad en los pases, y más presión a los oponentes, 
lo que condicionará las distancias recorridas por los jugadores. Drust (1995) realizó un estudio en el que 
determinó que los jugadores Sudamericanos recorren un promedio de 8638 + /- 1158 metros por partido, 
mientras que en la liga Inglesa recorren entre 10104 + /- 703 metros.
5) El nivel del oponente. Los equipos que mantienen largas posesiones de balón, como el Barce-
lona de Guardiola, que supera en ocasiones el 70%, condiciona el nivel de exigencia físico de los rivales y 
las suyas propias.
6)	 El	puesto	específico	del	jugador	
en el campo. Varios estudios determinan 
que los medios centros y medios de banda son 
los jugadores que más distancia recorren en un 
partido, estando en el polo opuesto los defen-
sas centrales.
7) La fatiga acumulada por los ju-
gadores. Estudios de Van Gool (1988), 
Bangsbo (1991) y Drust et al (1995) determina-
ron que los jugadores de fútbol recorren un 5-6 
% menos en la segunda parte que en la pri-
mera. Autores como Mohr, Krustrup y Bangsbo 
(2005) afirman que la mayor disminución se 
produce en los primeros y últimos 15 minutos 
del segundo tiempo. 
8) El estado físico y psíquico del 
jugador. El estado anímico condiciona el 
estado de forma. Aquellos jugadores anímica-
mente fuertes estarán mejor preparados para 
afrontar situaciones de exigencia máxima que 
los que tengan un estado anímico débil, que 
rendirán por debajo de sus posibilidades. 
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9) La categoría del equipo. En el estudio realizado por Bangsbo (1992), no se reflejan diferencias 
significas en la distancia total recorrida por equipos profesionales de 1ª y 2ª división danesa, aunque sí en la 
velocidad de sus ejecuciones, que eran mayores y más frecuentes, en los equipos de primera. 
10) El terreno de juego. Como es lógico, el estado del terreno de juego y las dimensiones del mismo 
condicionan las distancias y velocidades. En campos embarrados la exigencia física requiere de mayor tra-
bajo de fuerza del tren inferior, que el producido en terrenos en condiciones normales. Se realizarán menos 
desplazamientos y las velocidades serán menores, ya que el tiempo de transferencia de la fuerza del pie en 
el terreno de juego será mayor. La velocidad en el juego en los campos sintéticos es diferente a los de arena 
o a los de hierba natural, seca o húmeda. 
 Jugar un partido en un terreno con dimensiones reducidas (más propio de equipos amateur) condicio-
na a que se produzcan acciones más explosivas y continuas, pero se recorrerá menos distancia al final del 
encuentro que en terrenos más amplios. 
Tenemos que tener en cuenta, estos y otros factores que pudiesen condicionarnos, para marcar las líneas 
de trabajo en las sesiones de entrenamiento y obtener el mejor resultado posible para mi equipo.