Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
Otras Propuestas Periman y Gurin (1972), por su parte, han descrito, desde la organización comunitaria y el trabajo social, un esquema interventivo —denominado proejo de resolución de problemas sociales— que esencialmente explícita el proceso lógico de resolución de problemas en 5 etapas. Cada etapa consta de dos tipos de tareas, unas analíticas y otras de interacción con el entorno social. Las etapas son: 1. Definición del problema. 2. Desarrollo de Estructura Organizativa 3.Formulación de Política. 4. Implementar planes 5.Seguir y controlar Davidson y Rapp (1976) han presentado una estrategia desde el campo de la abogacía social derivada también del proceso general de resolución de problemas. Consta de 3 fases generales con varios escalones internos: 1. Evaluación primaria, durante la cual se evalúan: a) Las necesidades del grupo diana de la intervención. b) Los recursos para satisfacer esas necesidades. c) La disponibilidad de los recursos d) Evaluación de la Vulnerabilidad 2. Selección de estrategias, que se compone de las dos etapas clásicas: e) Definición de las estrategias alternativas disponibles para obtener esos recurso. Pueden ser Positivas, neutras o negativas. f) Selección de la alternativa apropiada 3. Implementación, que comprende el seguimiento del programa y su realimentación Otro esquema interventivo interesante y clásico es el propuesto por Caplan (1979): El proceso consta de 4 fases generales, cada una de las cuales contiene varios procesos e innumerables recomendaciones prácticas, útiles para realizar el programa. Las fases son: A) Iniciación de la actividad comunitaria; B) elaboración del programa; C) establecimiento de relaciones y creación de reputación; D) mantenimiento del programa. El enfoque de Caplan ilustra una estrategia de consenso y concertación en el establecimiento de programas, netamente diferenciada —polarmente opuesta en algunos puntos—, de la acción social y la organización de la comunidad. Clasificación y panorámica de las estrategias de intervención: por niveles No existe un corpus coherente, distintivo y establecido de estrategias globales, o técnicas específicas, que pueda ser formalmente identificado como intervención comunitaria. Sistemas de clasificación de las estrategias por niveles: Rappaport: Rappaport parte de una concepción positiva de personas y comunidades como portadores de recursos y poder frente a la tradicional de déficits y de "culpabilizar a la víctima" social (Ryan, 1971) de sus propios infortunios y problemas. 1. Estrategias centradas en la persona. Parten de la asunción de que las causas del problema están en carencias del individuo y en su incapacidad de funcionar en un contexto social dado. La intervención estaría dirigida a eliminar esos déficits. 2. Centrados en el grupo pequeño. 3. Centradas en la organización. 4. Centradas en las instituciones y la comunidad. Clasificación por funciones u objetivos Glideweil (1977) ha propuesto (a partir de los modelos de formación de psicólogos comunitarios incluidos en la Conferencia de Austin de 1975), los siguientes 4 temas o dimensiones básicas que subyacen a la intervención comunitaria: 1. Desarrollo y profundización vital de individuos y colectivos sociales. (Roles correspondientes: Planificación, diseño y evaluación del desarrollo personal y social). 2. Conflicto y desviación social. (Roles implicados: Consulta, negociación y conciliación.) 3. Justicia distributiva y discriminación y descuido de grupos y colectivos. (Roles implicados: Abogado social, organizador comunitario y agente de cambio social). 4. Sufrimiento y dolor. (Roles implicados: Terapeuta, consejero, y "curador".)* *Si exclusimos la dimensión 4 (más propia de la actividad clínica) el resto conforma un esquema orientativo útil y coherente de los contenidos y funciones básicos de la IC. Prestación de servicios Prestación de servicios humanos (salud, educación, servicios sociales, etc.) alternativos a los clínicos tradicionales (formato individual o pequeño-grupal; centrados en el trastorno y salud mental) desde criterios poblacionales, sociales y comunitarios (cercanía al entorno en que se producen los problemas, potenciación y autodirección personal y social, trabajo "desde abajo" y a través de mediadores comunitarios, etc.). La intervención de crisis, terapias breves y el trabajo reeducativo escolar ilustran este tipo de métodos. También la consulta tiene un componente de prestación de servicios. Algunos autores no admiten este tipo de técnicas entre los "propiamente" sociales o comunitarios por su impregnación clínica o su carácter de servicios directos (al cliente). Desarrollo de recursos humanos Podemos distinguir dos grupos de estrategias comunitarias de desarrollo de recursos humanos (o personas): Indirectos y directos. 1) En el desarrollo de recursos indirectos, se potencia la capacidad de una persona de ayudar a otros mediante la ampliación de su rol profesional para que incluya la prestación de servicios humanos . 2) El desarrollo de recursos directos en la población, se refiere al desarrollo de las personas per se, no en cuanto mediadores comunitarios para prestar ayuda otros. Los grupos de autoayuda, "entrenamientos de competencias" o de resolución de problemas podrían incluirse en este apartado. Prevención Función clásica de la intervención social y comunitaria en sus variantes primaria (prevención propiamente dicha), secundaria (tratamiento y organización de servicios con orientación preventiva) y terciaria (rehabilitadora-resocializadora) o —según otro esquema— genérica (fortalecimiento global) y específica (centrada en el problema de interés). Reconstrucción social y comunitaria La reconstrucción social y el restablecimiento del sentido de comunidad y pertenencia impregna, en consecuencia, no sólo el contenido de muchas de las estrategias de intervención comunitaria (desarrollo y organización de comunidad y autoayuda sobre todo), sino también la forma en que son prestados. Esa reconstrucción social en dirección comunitaria es un componente central en la organización del apoyo social . Cambio social y comunitario A partir del esquema clásico de Rothman y Tropman (1987), distinguiríamos dos grupos de estrategias: a) Las que intentan crear nuevas instituciones o sistemas sociales alternativos (instituciones paralelas o creación de settings). b) Las que pretenden cambiar o reformar un sistema social existente, incluyendo desarrollo de comunidad, acción social y abogacía social. Las diferentes estrategias se distinguen por las asunciones subyacentes sobre los problemas y el cambio social, así como por los métodos usados (derivados de esas asunciones). En el modelo de instituciones paralelas se asume que el sistema social de ciertos grupos es impermeable al cambio o que la producción de ese cambio resultaría, por distintas razones (sistema muy cerrado o jerarquizado; con alto grado de conformismo social; de gran eficiencia funcional combinada con paternalismo aplacador; con un equilibrio cuasiestable de varias tendencias sociales enfrentadas y equipolentes, etc.) extremadamente laborioso y probablemente infructuoso. Se opta, en consecuencia, por crear un sistema o escenario paralelo (escuela, correccional, centro social para pacientes psiquiátricos, etc.) a los institucionalmente existentes, con unos presupuestos ideológicos y organización social distintos. Ejemplos de instituciones paralelas son: Las comunidades terapéuticas para toxicómanos, cooperativas, escuela correccional creada por Sarason (1972) y otros, o "la Posada" de Fairweather y otros (1974), o los "hospitales" de día. Organización de la comunidad La organización de la comunidad —u organización comunitaria— es la forma más reconocida y clásica de acción social. Presupone la organización de las tendencias o esfuerzos de actuación iniciados desde abajo (la propia comunidad o grupo social) a través de una acción, solidariay coordinada, hacia objetivos compartidos de redistribución de poder y recursos sociales. Se asume que la organización aporta eficiencia, directividad y durabilidad a esas tendencias espontáneas y autoinducidas que son el ingrediente básico de partida de toda acción social. Los temas u objetivos básicos de la OC serían para Ecklein: 1) Promover y apoyar los intereses de los grupos oprimidos o desfavorecidos. Una línea de acción muy cercana a la abogacía social (que, de hecho, es una de las 8 áreas de acción de OC descritas por la autora). 2) Mejorar las condiciones sociales de la comunidad y grupos menos favorecidos. 3) Redistribuir el poder, el tema clásico de la acción social. 4) Fortalecer la participación e integración de la comunidad. Ecklein (1984) concluye con pesimismo que la gran mayoría de la organización comunitaria va dirigida a manifestaciones secundarias de los problemas sociales y que, cualquiera que sea su retórica justificativa, la praxis va dirigida casi siempre a ajustes mínimos de la maquinaria social, y no a sus mecanismos o engranajes centrales.
Compartir