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MEDICINA-RESUMEN (15)

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Pulmón con TBC 2º: órgano macizo seccionado coronalmente, con 
clara alteración de su parénquima. Las zonas más conservadas 
presentan una consistencia laxa esponjosa, de color homogéneo, y 
aparenta ser un órgano lobulado con cisuras (diagnóstico de pulmón). 
En la región apical se identifican varias lesiones cavitadas, sobre todo 
hacia la derecha donde se ve una gran cavitación, de 6cm en su 
diámetro mayor, con gran pérdida de tejido. Dicha lesión, a modo de 
caverna, presenta bordes irregulares, y está rodeada de bandas 
engrosadas irregulares de consistencia aumentada, compatibles con 
fibrosis. La fibrosis y destrucción del tejido nos hablarían de un 
proceso crónico, y por las características detalladas el preparado 
podría corresponder a un pulmón con TBC 2º (principales diagnósticos 
diferenciales: micosis endémicas sistémicas y silicosis crónica). 
Corazón con Fiebre Reumática: sección transversal de órgano hue-
co con cámaras, una inferior voluminosa, con paredes gruesas muscu-
lares, y dos superiores, de menor diámetro y con paredes más delga-
das, separadas de la inferior por estructuras valvulares con cuerdas 
tendinosas. La de la derecha aparenta ser un órgano vascular. Diag-
nóstico de corazón. El ventrículo aparenta estar dilatado y el miocardio 
levemente engrosado. El pericardio presenta un marcado engrosa-
miento (probablemente inflamatorio  pericarditis), y a la vez se pue-
den observar sobre la superficie externa lesiones a modo de placas 
múltiples, irregulares, blanquecinas, como "babas" que sobresalen del 
pericardio. Podrían corresponder a exudados fibrinosos ("en pan con 
mantequilla"). Existen áreas de derrame. Las cuerdas tendinosas se 
encuentran acortadas y engrosadas, algunas están rotas. Las válvulas 
se hallan levemente engrosadas, estenosadas, y además presentan en 
la superficie y borde de las cúspides, numerosas verrugas o vegetacio-
nes como cúmulos pálidos, arrosariados (compatible con endocarditis 
valvular). Las lesiones son compatibles con cardiopatía reumática. 
Tiroiditis de Hashimoto: se observan varias secciones de un 
órgano macizo, parenquimatoso, de 5-6cm en su eje mayor, pálido 
homogéneo en la superficie de corte. Por su morfología (atrás se ve 
órgano bilobulado con lóbulo piramidal central), aparenta ser una 
tiroides. La glándula se presenta difusa y levemente agrandada 
(bocio); la cápsula intacta, no infiltrada, sería de una consistencia 
duro-elástica, similar al caucho (aunque está en un frasco, no la 
pueden palpar), color pálido rosado, homogéneo. Se pueden identi-
ficar estructuras nodulares múltiples, a modo de folículos, fascicu-
lados, de diferentes tamaños. Entre los mismos se denotan bandas 
grises difusas, que podrían corresponder a fibrosis. En base a estos 
rasgos, podría tratarse de una tiroiditis de Hashimoto. En algunas 
secciones se observa una lesión focal, circunscrita, bordes poco 
netos, de coloración blanquecino-grisácea, que podría corresponder 
a un proceso neoplásico (¿linfoma?) 
TRABAJO PRACTICO 4: INMUNOPATOLOGIA 
 
 
 
 
 
TRABAJO PRACTICO 5: PATOLOGIAS INFECCIOSAS 
 
TBC miliar: frasco con múltiples vísceras, que por su 
tamaño parecen corresponder a un paciente pediátrico. 
Se observa un bloque constituido por dos órganos 
macizos seccionados coronalmente, con lóbulos 
separados por cisuras (diagnóstico de pulmón), y unidos 
por una serie de conductos, donde el mayor presenta 
anillos aparentemente cartilaginosos (bronquios y 
tráquea). En la zona inferior se observan dos órganos, 
con forma de haba, uno entero y otro seccionado 
coronalmente, donde se identifica una región cortical 
periférica y una medular con estructuras piramidales 
(riñón). Arriba, sección sagital de órgano macizo, con 
múltiples pliegues cerebriformes separados por surcos, y 
una gran cavidad ventricular curva en la cara inferior 
(cerebro). Los pulmones, bronquios, tráquea y riñones, 
presentan una afectación global de su parénquima, 
caracterizada por la presencia de múltiples lesiones 
diseminadas, irregulares, de menos de 2mm de diámetro 
(algunas como cabezas de alfiler), de un color blanco-
amarillento pálido homogéneo. El pulmón derecho se ve 
más afectado, donde algunas de las lesiones son de 
mayor tamaño, confluentes, sobre todo a nivel periférico 
y central del lóbulo superior. El cerebro presenta una 
marcada alteración de las meninges basales, que se 
presentan engrosadas y tapizadas por un material 
blanquecino y de aspecto grasiento, que se proyecta 
hacia el ventrículo. Podemos inferir un cuadro de TBC 1º 
miliar (predominio exudativo, con meningitis bacilar), 
compatible con el caso de tratarse de un niño. 
 
 
 
 
 
 
 
 
Amiloidosis generalizada por TBC pulmonar: cuatro órganos 
macizos cortados por su eje mayor. La descripción de los mismos 
para el diagnóstico de órgano ya la vimos en otros preparados y es 
fácil. Inferior izquierda se observa un pulmón con clara afectación de 
su parénquima. Se ve una alteración difusa y heterogénea por todo 
el tejido, con áreas de dilatación bronquial, y presencia de múltiples 
lesiones blanquecinas-amarillentas irregulares, muchas rodeando las 
estructuras bronquiales. Aparentan corresponder a focos de bronco-
neumonía exudativa. En el lóbulo superior se observan lesiones cavi-
tadas múltiples e irregulares, con áreas de atelectasia y consolida-
ción parenquimatosa que podría corresponder a fibrosis. La pleura se 
encuentra difusamente engrosada, opaca, con zonas de retracción 
(por los datos influimos un proceso inflamatorio crónico con fibrosis). 
Estos cambios son típicos de la TBC 2º. Los otros órganos no pre-
sentan alteraciones apreciables a simple vista. La coloración es ho-
mogénea y aparentemente conservada. Sin embargo, aparentan 
estar difusamente aumentados de tamaño, firmes, de apariencia 
cérea. El riñón, además de aumento de tamaño, simula aumento de 
la consistencia. El color está conservado. Las estructuras medulares 
e hiliares muestran leve estrechamiento y distorsión, quizás debido a 
algún proceso fibroso. El bazo manifiesta esplenomegalia, y lo llama-
tivo es la presencia de múltiples lesiones nodulares, diseminadas, 
que van desde el tamaño de la cabeza de un alfiler, hasta 3mm de 
diámetro (recuerda al aspecto del “bazo en sagú”). El hígado aparen-
ta estar aumentado de tamaño (hepatomegalia) y presenta lesiones 
focales múltiples con un patrón puntiforme, del tamaño de una ca-
beza de alfiler, dispersas por todo el parénquima. Estas característi-
cas nos recuerdan a la amiloidosis, aunque son muy inespecíficas, 
y para confirmar siempre es necesaria una biopsia teñida con rojo 
Congo. Teniendo en cuenta que el paciente tenía TBC 2º, que es un 
trastorno crónico, no es rara la presencia de amiloidosis, ya que 
cualquier trastorno inflamatorio crónico está habilitado a acompañar-
se de la misma. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Corazón con hidatidosis: sección transversal de órgano 
hueco con paredes musculares, y dos cámaras separadas por 
un tabique. Se observan estructuras tendinosas. Se trata de 
un corazón, cuyo VI aparenta estar aumentado de tamaño, 
con disminución de la luz (hipertrofia). En la pared del VD se 
visualiza una lesión quística voluminosa (decimos que es un 
quiste porque posee pared propia) de 7cm de diámetro, cuya 
cápsula es lisa, opaca, mate. Presenta plano de clivaje y pue-
de verse como comprimió el miocardio y el tabique. Existen 
zonas de fibrosis circundante. Por la morfología y localización, 
se puede sospechar un quiste hidatídico. La hipertrofia del VI 
se debería a que el quiste afectó la función cardíaca, llevando 
a insuficiencia. 
Hígado con quiste hidatídico: ídem. La descripción de 
un hígado ya vimos como se hace. Acá observamos una 
sección coronal. La descripción de la lesión también. Re-
cuerden, es una lesión cavidad, circunscrita, etc., peroes 
importante aclarar que es QUÍSTICA porque posee un con-
tinente (la CÁPSULA), y un contenido (que acá ya no está). 
Sino seria una cavidad cualquiera o caverna. Expliquen que 
el hígado es el órgano más afectado en la parasitosis. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Pabellón auricular con lepra: órgano que por su morfología dedu-
cimos se trata de un pabellón auricular (no digan oreja). Está cubierto 
de piel, presenta pliegues cartilaginosos que forman el hélix, antehé-
lix, trago, antitrago y concha. El lóbulo se presenta engrosado y con 
su eje cefalocaudal aumentado, como prolongado. Además pueden 
observarse lesiones nodulares confluentes, que nos hacen suponer un 
caso de lepra lepromatosa. A esta lesión de la denomina “oreja en 
badajo de campana”. 
Divertículo de Meckel: 3 órganos huecos tubulares, secciona-
dos transversalmente, de pared lisa, excepto por uno de sus 
bordes que presenta tejido adiposo, pliegues serosos y vasos 
(mesenterio). En base a esto, decimos que estamos frente a 
cortes de intestino delgado. Sobre el borde antimesentérico 
puede observarse una lesión solitaria, protruida hacia el exterior, 
en forma de dedo de guante, sacular, de bordes regulares. Es-
tos rasgos son característicos del divertículo de Meckel, la mal-
formación congénita más frecuente del intestino. 
Cabeza de fémur con artrosis: hemiseccion de pieza ovalada de 
consistencia duro-pétrea, color blanquecino, maciza. Presenta una 
región cortical maciza, laminada, y una médula con múltiples trabécu-
las dando un aspecto esponjoso. Inferimos se trata de tejido óseo, 
probablemente la cabeza del fémur. La superficie externa, lisa, brillan-
te, corresponde al cartílago articular, el cual presenta una zona ero-
sionada irregularmente, con degeneración del cartílago, permitiendo 
ver el hueso subyacente. Diagnóstico de artrosis. 
Riñón en herradura: bloque constituido por dos órganos macizos 
que aparentan ser riñones por mostrar zona cortical, medular con 
estructuras piramidales (ya vimos como se hace diagnóstico). Lo 
llamativo es que ambos órganos se presentan unidos por su polo 
inferior, cada uno con su uréter de morfología normal. El diagnósti-
co es fácil. 
Hipertrofia prostática benigna: Sección (lonja) de órgano macizo, 
de 6cm de ancho, que en la superficie de corte presenta múltiples 
lóbulos nodulares separados por tabiques fibroconectivos; por estas 
características y su forma de castaña, inferimos se trata de una prós-
tata. Aparenta estar uniformemente aumentada de tamaño, ya que 
sus bordes se presentan romos y su consistencia es dura. Coloración 
homogéneamente clara, amarillento pálido o cérea. Los nódulos for-
man imágenes arremolinadas y se hallan delimitados por los tabiques. 
En torno a estos datos, y a la ausencia de signos de malignidad, los 
cambios enumerados podrían corresponder a una hiperplasia benigna 
de la próstata. 
 
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TRABAJO PRACTICO 6: PATOLOGIA GENETICA Y DEL DESARROLLO - PATOLOGIA 
AMBIENTAL - ENVEJECIMIENTO Y GRUPOS ETAREOS 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Miomatosis uterina: sección de un órgano que aparenta ser 
macizo, pero en realidad es hueco ya que se aprecia una pe-
queña luz longitudinal. Las paredes aparentan ser musculares. 
Tanto en la vista externa como en la superficie de corte, se 
puede apreciar una considerable afectación del órgano, que no 
permite reconocer estructuras normales. Tanto la forma como el 
tamaño están alterados. En la superficie externa se identifican 
numerosas estructuras nodulares protruyendo, irregulares, de 
diferente tamaño, que se condicen con las lesiones nodulares 
observadas en la superficie de corte. Aquí claramente se apre-
cian 4 lesiones nodulares, de distintos diámetros, bastante cir-
cunscriptas, con plano de clivaje. La coloración es homogénea y 
presentan, estructuras fasciculadas o arremolinadas. La consis-
tencia de las mismas es mayor que la consistencia del tejido 
normal, al cual comprimen, quizás debido a un crecimiento ex-
pansivo. La compresión se deduce gracias a la presencia de una 
banda de tejido fibroso perilesional. En base a los datos enume-
rados, podemos inferir que se trata de un útero con múltiples 
leiomiomas murales (Miomatosis uterina). El hecho de que sean 
lesiones circunscritas, conservadas, con plano de clivaje y una 
apariencia similar aunque distorsionada del tejido normal, apo-
yan el diagnóstico de benignidad. 
Aorta abdominal con linfoma en ganglios (no Hodgkin), 
superficie externa: órgano tubular cortado longitudinalmente 
(no se ve, no encontré foto), de superficie lisa con placas amari-
llentas, compatible con aorta y ateromas. Lo más llamativo es la 
presencia de una masa irregular, con múltiples nódulos de dis-
tinto tamaño, que presentan focos hemorrágicos y parecen estar 
cubiertos por serosa (peritoneo). Esta masa multinodular en-
vuelve a la aorta y estrecha su calibre. Además se observan 
áreas de invasión de la pared. El preparado podría corresponder 
a un linfoma de ganglios paraaórticos. 
Adenocarcinoma gástrico: corte de órgano hueco sacular con 
superficie interna que presenta múltiples pliegues cerebriformes, 
y una superficie externa cubierta por serosa. Aunque la forma 
de corte no lo permite, podemos inferir que se trata de un es-
tómago. En la cara interna, podemos observar una lesión sobre-
elevada, exofítica, irregular, de coloración heterogénea con 
áreas hemorrágicas y consistencia aumentada. Si bien faltan 
más datos y otros estudios para poder confirmar, sospechamos 
que se trata de un adenocarcinoma. 
Cistoadenoma gigante de ovario: estructura hueca, sacular, 
de grandes dimensiones, que no es compatible con ningún ór-
gano de la economía. Aparentemente se trata de un quiste, de 
paredes lisas, brillantes, de 5mm de espesor, que presenta es-
tructuras vasculares y restos de serosas. Por la forma y dimen-
siones sospechamos se trata de una neoplasia quística benigna, 
o sea un cistoadenoma, y probablemente corresponda a ovario 
(por ser el órgano donde más frecuentemente asientan), aun-
que no se puede identificar ninguna estructura normal. 
TRABAJO PRACTICO 7: NEOPLASIAS 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Mioma nacens: diagnóstico de útero (ya vimos como se hace). 
Llama la atención la presencia de una lesión como una masa irregu-
lar y de consistencia aumentada, protruyendo a través del cuello 
uterino y unida a la mucosa por un pedículo (no se ve, sería en la 
cara interna). Compatible con leiomioma submucoso (nacens). Li-
posarcoma: tejido blando, amorfo, amarillento, de aspecto céreo, 
que presenta una lesión irregular, grisácea y de consistencia aumen-
tada respecto al tejido circundante. La misma parece infiltrar el pa-
rénquima con proyecciones irregulares que invaden en distintas 
direcciones. Diagnóstico más probable: liposarcoma. 
Tumor secundario de hígado: diagnóstico de hígado (ya lo 
vimos), corte coronal. El órgano se muestra aumentado de ta-
maño, opaco, de consistencia aumentada. Se observan múltiples 
lesiones nodulares, de consistencia más aumentada, color hete-
rogéneo, con centros oscuros que podrían corresponder a focos 
de hemorragia o necrosis. Al ser de distintos tamaños, irregula-
res y estar dispersas por todo el parénquima, podríamos inferir 
que se trata de múltiples metástasis hepáticas. El hígado es uno 
de los órganos más afectados por las MTS. 
Adenocarcinoma papilar de ovario: se puede identificar un 
pequeño órgano ovoide, de 3cm en su eje mayor, consistencia 
heterogénea y color grisáceo, que podría corresponder a ovario 
(no se llega a ver en la foto). Lo anormal, es la presencia de una 
masa exofítica, de grandes dimensiones, consistencia aumenta-
da, coloración heterogénea, con focos de hemorragia.La super-
ficie externa de la misma presenta múltiples proyecciones papi-
lares irregulares, que le dan un aspecto aterciopelado o de coli-
flor. En base a estos datos, inferimos se trata de un adenocarci-
noma velloso de ovario. 
Adenoma prostático: la descripción es similar a la de la 
hiperplasia, sólo que el órgano se muestra más aumentado 
de tamaño, con múltiples lesiones nodulares de consistencia 
dura, y zonas de degeneración quística (pequeñas cavida-
des). Al no haber infiltración de la cápsula, zonas de hemo-
rragia, y falta de similitud entre el tejido normal y el patoló-
gico, se infiere se trata de una neoplasia benigna. 
Adenocarcinoma de tiroides: sección de órgano macizo 
bilobulado, aspecto glandular, con múltiples estructuras simila-
res a folículos, algunas áreas quísticas. Probablemente se trate 
de una tiroides. La consistencia, al igual que la coloración, es 
heterogénea, con zonas más duras y grisáceas, irregulares, 
que parecen invadir el parénquima. Los datos enumerados 
podrían corresponder a un adenocarcinoma de tiroides. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Adenocarcinoma velloso (papilar) de colon: órgano hueco 
tubular, seccionado longitudinalmente, que en su cara interna 
presenta múltiples pliegues perpendiculares y en la externa 
apéndices de tejido adiposo, serosa y vasos. Posiblemente se 
trate de intestino grueso (colon). Se puede apreciar una lesión 
exofítica de la mucosa, de consistencia aumentada y coloración 
heterogénea, con múltiples proyecciones papilares. La mucosa 
circundante presenta confluencia de pliegues hacia la lesión y 
consistencia aumentada (singo de infiltración). Áreas de hemo-
rragia. Inferimos se trata de un adenocarcinoma papilar de co-
lon, que por ser exofítico probablemente se trate de colon dere-
cho (los de colon izquierdo generalmente son endofíticos): 
Adenocarcinoma velloso de colon: la descrip-
ción es la misma que la del preparado anterior. 
Noten el aspecto aterciopelado o de coliflor de la 
lesión exofítica. 
Adenocarcinoma de colon: ídem, aunque en este caso no se 
observa el típico aspecto aterciopelado, porque probablemente 
se deba a un adenocarcinoma NO velloso de colon (por ejemplo, 
tubular). Macroscópicamente sólo podemos sospechar (a menos 
que sea muy obvio). Cualquier confirmación se realiza sólo por 
microscopía. Se trata de ciego, ya que podemos observar el 
apéndice cecal próximo. 
Adenocarcinoma ulcerado de estómago: el diagnóstico 
de estómago ya lo vimos. Los pliegues de la mucosa apare-
cen “borroneados” en algunos sectores. La consistencia glo-
bal del órgano está aumentada, similar al “caucho”. La su-
perficie mucosa presenta múltiples proyecciones papilares o 
sésiles, pequeñas, dando un aspecto de empedrado. Pode-
mos pensar en un tumor muy infiltrativo y difuso (criterio de 
malignidad). Arriba a la derecha, lesión ulcerada o excavada, 
con convergencia de pliegues, consistencia aumentada, bor-
des irregulares y presencia de focos hemorrágicos. Podemos 
inferir un adenocarcinoma invasor de estómago, con úlcera. 
Muchos cánceres de estómago se originan en áreas de gas-
tritis crónica atrófica debida a enfermedad ulcerosa e infec-
ción concomitante con H. pylori. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Cistoadenocarcinoma de ovario: estructura hueca, sacular, 
de grandes dimensiones, que no es compatible con ningún ór-
gano de la economía. Aparentemente se trata de un quiste, de 
paredes rugosas, opacas, de 4mm de espesor, con focos hemo-
rrágicos. Las paredes muestran consistencia aumentada, y en el 
ángulo superior derecho se observa una zona engrosada, con 
múltiples proyecciones papilares que crecen hacia la luz. Estos 
cambios pueden corresponder a un cistoadenocarcinoma papilar 
de ovario. 
Carcinoma de pulmón: sección de órgano macizo con gran 
alteración de su parénquima (no permite reconocer estructuras 
normales). Hacia la derecha, zona más conservada, de consis-
tencia laxa esponjosa, coloración más oscura y estructuras tubu-
lares (diagnóstico de pulmon). Hacia la izquierda, zonas de con-
sistencia aumentada y color heterogéneo (amarillento, con focos 
más oscuros), que parecen confluir o invadir tejido circundante 
(se ven islotes más pequeños alrededor). Podemos inferir se 
trata de un carcinoma de pulmón (no sabemos si es adenocarci-
noma o si es escamoso, necesito biopsia). 
Metástasis pulmonares: ídem al anterior, excepto que aquí 
se aprecian múltiples lesiones nodulares, de distinto tamaño, 
consistencia aumenta, y coloración homogénea, amarillenta 
pálida, con focos hemorrágicos. Teniendo el diagnóstico proba-
ble de pulmón y esta imagen típica de “suelta de globos” (en la 
radiografía), nos hablaría de un secundarismo pulmonar. 
Osteosarcoma de tibia: órgano macizo de consistencia duro-
pétrea, el largo predomina sobre el ancho, presenta una corteza 
compacta y delgada, y una médula con tejido trabecular (hueso, 
y por la forma, tibia). En la metáfisis se observa una lesión en 
forma de masa, de consistencia aumenta, zonas hemorrágicas y 
que invade la cortical e infiltra la médula, produciendo destruc-
ción del tejido óseo. Claramente se trata de una neoplasia ma-
ligna de tejido óseo. 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Carcinoma renal: corte longitudinal coronal de órgano macizo, 
donde se puede identificar una zona cortical y una zona medular 
con 6 estructuras piramidales. La forma, al igual que el tamaño, 
aparenta estar alterados. Se trata de un riñón, en cuyo polo 
superior se observa una masa, algo circunscrita, de 10cm en su 
eje mayor, que comprime el parénquima y colapsa el sistema 
pielocalicial. La superficie externa es irregular, presentando va-
rias protrusiones y áreas de hemorragia (coloración oscura, pero 
no se ve en la foto). La superficie de corte se muestra muy he-
terogénea, con gran degeneración del parénquima, áreas quísti-
cas y zonas de hemorragia. La consistencia global es aumentada 
respecto al tejido normal. Claramente se trata de una neoplasia 
maligna de riñón. 
Vista de la superficie de corte del leiomioma nacens descripto 
más arriba. 
Vista de la superficie de corte del linfoma no Hodgkin de 
ganglios paraaórticos descripto más arriba. 
Melanoma maligno: lonja de piel, donde podemos reco-
nocer la epidermis y el tejido adiposo de la hipodermis (no 
se ve en la foto). Sobre la superficie epidérmica se observa 
una lesión pigmentada de grandes dimensiones, bordes 
irregulares, asimétrica, de coloración heterogénea (zonas 
amorronadas con zonas más claras y distintos matices). La 
lesión es de consistencia aumentada e infiltra la hipodermis 
(no se ve en la foto). Por estas características, es claro el 
diagnóstico de melanoma.

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