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Trastornos temporomandibulares Los trastornos temporomandibulares (TTM) son un conjunto de condiciones que afectan las articulaciones temporomandibulares (ATM) y los músculos que controlan la masticación y el movimiento de la mandíbula. Estos trastornos pueden ser dolorosos y pueden afectar significativamente la calidad de vida de quienes los padecen. Imagen 1. Trastornos temporomandibulares. Fuente: https://www.msdmanuals.com/- /media/manual/home/images/d/e/n/den_tmj_es.gif?thn=0&sc_lang=es Los TTM pueden presentarse en cualquier persona, pero son más comunes en las mujeres y en las personas entre los 20 y 40 años. Las causas de los TTM pueden variar, pero a menudo están relacionadas con el estrés, la ansiedad, la mala postura, la tensión muscular y los problemas de alineación dental. Los síntomas más comunes de los TTM incluyen dolor en la mandíbula, dolor de oído, dolor de cabeza, dolor en el cuello y los hombros, ruido o chasquido al abrir o cerrar la boca, dificultad para abrir o cerrar la boca, y bloqueo de la mandíbula en posición abierta o cerrada. El diagnóstico de los TTM se realiza a través de un examen físico y una evaluación de la historia clínica del paciente. En algunos casos, puede ser necesario realizar pruebas adicionales, como radiografías o resonancias magnéticas. El tratamiento de los TTM varía según la gravedad de los síntomas y las causas subyacentes. En muchos casos, los síntomas de los TTM pueden mejorar con medidas conservadoras, como ejercicios de relajación, cambios en la dieta, fisioterapia, uso de dispositivos orales, como férulas oclusales o placas de mordida, y medicamentos para controlar el dolor y la inflamación. En casos más graves, puede ser necesario realizar procedimientos quirúrgicos para corregir problemas estructurales en la ATM o para aliviar la presión en los nervios y los músculos afectados. Es importante tener en cuenta que la prevención es la clave para reducir el riesgo de desarrollar TTM. Mantener una buena postura, evitar el estrés, practicar ejercicios de relajación y evitar hábitos nocivos, como morderse las uñas o masticar chicle en exceso, pueden ayudar a prevenir los TTM. En resumen, los trastornos temporomandibulares son un problema común que puede afectar significativamente la calidad de vida de quienes los padecen. El diagnóstico y el tratamiento tempranos son fundamentales para controlar los síntomas y prevenir complicaciones a largo plazo. La prevención también es importante para reducir el riesgo de desarrollar TTM.
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