ITALIA

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ITALIA
Su nombre deriva de Italo, rey de Etruria, región que fue cuna de una cultura de gran importancia, localizada en el noreste de la península desde el siglo VIII a. C.
La superficie es de 301.277 km1, si se compara con la provincia de Buenos Aires, esta la supera en 6.341 km2. En el área de Italia se encuentran comprendidas las de dos micro-estados: la Ciudad del Vaticano de 0,44 km2 y la República de San Marino de 60 km2. Limita al norte con Suiza y Austria, al este con Eslovenia y el mar Adriático, al sur con los mares Jónico y Mediterráneo y al oeste con Francia y el mar Tirreno.
Predominan los tipos raciales germánico y alpino en el norte; en el centro y el sur son mayormente mediterráneos. La lengua oficial es el italiano, pero en algunas regiones se habla alemán como en el Alto Adigio, francés en el Valle de Aosta y esloveno en Trieste y Gorizia. Una gran mayoría de la población profesa el catolicismo romano. La moneda es la Lira Italiana. Su organización política corresponde a una República Parlamentaria de tipo unitario, dividida en veinte regiones y noventa y cinco provincias.
Roma es la capital del estado.
Evolución histórico-cultural
Italia ya estaba poblada en el período Paleolítico y más densamente aún durante el Neolítico por tribus como los ligures, Veroneses, italis y sicarios.
Los invasores indoeuropeos llegaron luego en oleadas sucesivas. En el siglo X a. C. los griegos ocuparon Italia meridional, formando la Magna Grecia. Misteriosamente, los etruscos aparecieron en el siglo VIII a. C., llegando a su apogeo entre los siglos V y VI a. C., dominaron Italia central y septentrional. Es probable que en el siglo VI a C., Roma surgiera como una ciudad que luego de sobrepasar los períodos Monárquico y Republicano, alcanzara durante el Imperio su máximo esplendor y extensión. A partir del año 395 d. C. aconteció la invasión de los germanos, así llegaron ostrogodos, visigodos, vándalos y otros pueblos bárbaros; la iglesia sufrió su primer Cisma. El cielo Bizantino arraigó fuertemente al noreste de la Italia continental y repercutió en Sicilia. Corría el siglo IX cuando Italia meridional era invadida por los normandos de origen escandinavo y sufría las incursiones de los sarracenos del norte de Africa. También durante la Edad Media, prosperaron las grandes Repúblicas Marineras: Amalfi, Pisa, Génova y Venecia. Se impuso esta última como dominadora de la ruta comercial hacia Oriente, lo que explica gran parte de su esplendor. Enorme importancia tuvo el ciclo Románico, logrando originalidad y trascendencia en algunas regiones. Mientras que el arte Gótico de origen francés, era por lo general rechazado :o modificado de tal manera, que tomó un fuerte carácter nacional.
Italia es la cuna del Renacimiento, que se extendió luego por todo el continente y estableció en forma definitiva las pautas de la denominada cultura occidental; base del mundo moderno. En el siglo XVII floreció en Roma el estilo Barroco, convirtiéndose nuevamente la ciudad en centro universal del arte.
El país permaneció durante varios siglos dividido en diferentes estados, algunos bajo dominación extranjera. Finalmente la unidad política no se logró hasta el ano, 1861, en el que nació como una monarquía parlamentaria. En la primera década del siglo XX tuvo lugar una expansión de tipo colonial, producida a partir de la guerra con Turquía, incorporándose los territorios norafricanos de Tripolitania y Cirenaica, hoy Libia, y el archipiélago del Dodecaneso en el mar Egeo.
Intervino del lado triunfador en la Primera Guerra Mundial (1914-18), anexando en consecuencia los territorios del Trentino y el Alto Adigio o Tirol Meridional así como algunos grupos insulares y puertos en Dalmacia. Durante la década de 1920 prosperó el movimiento madre de la ultra derecha: el Fascismo. Bajo el gobierno de Mussolini se anexaron Albania y Abisinia, hoy Etiopía. En 1928, en virtud del Tratado de Letrán, las relaciones con el papado fueron recompuestas, Italia reconoció la soberanía del Estado Vaticano y éste a su vez a Roma como la capital natural del país. Al estallar el segundo conflicto mundial los italianos, aliados a la Alemania nazi, consolidaron el Eje Roma -Berlín. Como consecuencia de la derrota, Italia perdió todo su imperio colonial y algunos valles alpinos fronterizos con Francia; la península de Istria pasó a integrar la entonces Yugoslavia.
El Plebiscito celebrado inmediatamente después de terminar la guerra, favoreció por poco margen a la República frente a la Monarquía. Un hecho sobresaliente de la posguerra fue el denominado Milagro Económico y la firma del Tratado de Roma, cimentó las bases para la futura Unión Europea.
En la actualidad, Italia forma parte del llamado “Club de los Países Ricos”.
Espacios geográficos
Su territorio está formado por tres espacios geográficos: Continental, integrado por la Cordillera de los Alpes y la Llanura del Po; Peninsular, incluye a la Cordillera de los Apeninos y las llanuras litorales, e Insular comprendiendo a las islas de Sicilia, Cerdeña, Elba, Capri, Ischia, los archipiélagos de Pantellería, Lipari o Eolias y otros.
ITALIA CONTINENTAL
Cordillera Alpina
El relieve corresponde a la gran cordillera de los Alpes, extendida a modo de arco sobre la totalidad de su frontera septentrional, producto de la orogenia Terciaria o Alpina de la era Cenozoica. Las formas dominantes están dadas por elevados cordones montañosos desde los cuales emergen picos enhiestos y agudos, de laderas abruptas, separadas por angostos valles o pasos que los cortan en forma transversal, facilitando de este modo las comunicaciones. Los glaciares erosionaron intensamente el relieve ahondando los valles, impusieron la dirección natural al curso de los ríos, profundizaron las zonas más débiles de la corteza, que fueron ocupadas más tarde por las aguas de los deshielos, formando así, gran cantidad de lagos de origen tectónico-glaciario como el Mayor, Garda y Como, entre los más extensos. Integran el paisaje una serie de colinas llamadas pre-alpinas, escalón intermedio por su menor altura, entre la llanura al sur y la cordillera al norte.
El clima varía con la altura, desde el tipo mediterráneo en los valles, hasta el frío de altura sobre las cumbres más elevadas; por consiguiente la vegetación de acuerdo a estas características climáticas conforma estratos o pisos, que van desde el matorral mediterráneo en la base, hasta la flora de alta montaña. El bosque templado trepa hasta los 1.000 m, con predominio de fresnos, hayas, nogales y castaños. Entre los 1.000 y 2.500 m domina el bosque frío de coníferas. La explotación de estos bosques es de gran importancia económica para la región. Suceden luego los prados de altura y finalmente las nieves eternas cubren los imponentes picos.
En primavera toda el área comienza a descongelarse, originándose así numerosos cursos de agua denominados torrentes; su régimen es nival, crecen en primavera, pierden caudal en otoño y en invierno permanecen congelados. Np son navegables pero son utilizados intensamente para la obtención de energía hidroeléctrica.
Escasa, la población vive en los valles dedicada fundamentalmente al turismo, al cultivo de manzanas, peras, membrillos, duraznos, vides y cereales. Se crían bovinos con propósito lechero y la explotación forestal está muy racionalizada.
El hombre realizó grandes obras de ingeniería, invirtiendo enormes capitales para aprovechar la energía hidráulica, facilitando las comunicaciones por medio de la construcción de puentes, túneles, viaductos, teleféricos y cablecarriles. De modo tal, que toda la región puede ser I transitada con facilidad por cómodas carreteras o modernos ferrocarriles, estos favorecen las conexiones con el resto del continente.
Por sus características diferenciadas el arco alpino está dividido en tres secciones: Alpes Occidentales o Italo - Franceses, Alpes Centrales o ítalo Suizos y Alpes Orientales o ítalo Austríacos.
Alpes Occidentales
Situados entre el paso de Cadibona al sur y el del gran SanBernardo al norte, los cordones montañosos están dispuestos a modo de arco con rumbo predominante norte sur, en general asimétrico; son los más elevados de todo el sistema, culminando en el Monte Blanco de 4.810 metros, la mayor altura de toda Europa ubicado en la frontera Ítalo-Francesa.
Desde el punto de vista de las comunicaciones, los pasos más utilizados entre Francia e Italia son los de Tenda, Monginevro, Frejus y Cenis; por el valle de Aosta se llega al túnel del Monte Blanco de 12 km, que conecta Courmayeur, con Chamonix en Francia. Hacia Suiza él paso más importante es el del Gran San Bernardo. 
Los Alpes son las montañas más hermosas y majestuosas de Europa. De fisonomía variada, el faldeo meridional pertenece totalmente a Italia y abarca 1.400 km Cada región tiene su patrimonio alpino de picos y cimas renombradas, que también son centros de gran fama. Desde la mira netamente deportiva, el tono dominante de las estaciones de ski lo dan no sólo el largo y amplitud de los descensos, sino también la moderna perfección de las instalaciones, agregándose la multiplicidad de la estructura receptiva. Por otra parte, cabe señalar como el aspecto de gran notoriedad, la extensión del espacio alpino italiano que permite la organización de verdaderos viajes con los esquíes. Los grandes centros invernales han comunicado sus instalaciones de remonte con funiculares, telesquíes y skilifts integrando sistemas homogéneos; de manera que en el cuadro de un circuito, se puede esquiar por decenas de kilómetros descendiendo y remontado sin repetir nunca la misma pista. La actividad está incrementada por las áreas de patinaje, los estadios de hielo, así como por las piscinas climatizadas que ofrecen un relax a esquiadores y visitantes. Los salones de los hoteles son sede de eventos culturales que favorecen el esparcimiento de los huéspedes.	
Una tercera parte de Piamonte corresponde a la alta montaña, con decenas de pistas; desde Turin, en pocos minutos es factible visitar las más importantes.
Sestriere, con sus torres-hotel, las primeras de ese tipo en el mundo, fueron inauguradas parcialmente en 1932. Emplazadas a 2.000 m de altura sobre una enorme extensión de nieve rodeada de montañas, cuyas lejanas cimas, permiten la entrada del sol durante todo el día, aún en invierno cuenta con siete horas de luz solar directa. Las corres, provistas de rampas helicoidales sin escalones, independizan todas las habitaciones.Denominada “la montana de dos riberas”, Limone Piamonte concentra la afluencia de esquiadores procedentes de la Rivera Ligut como de la Costa Azul. Otros centros importantes son Clavíére, Mattarone, Oropa, Ala di Stura y Alpe di Mera.
El Valle de Aosta es una región estrictamente alpina con singular belleza, rodeada por elevadas montañas como el monte Blanco de 4.810 m, el Gran Paradiso de 4.061 m, el Cervino de 4.478 m y el monte Rosa que, con sus 4.663 metros es la segunda cumbre del continente. Está recorrido en su parte central por el río Dora Baltea, salpicada por bosquecillos de abetos, que alternan con prolijos cultivos de cereales y vides dispuestas entre castillos medievales. Una moderna autopista une Turin con Aosta, ciudad capital de la provincia del valle homónimo. Allí todavía pueden admirarse restos de la Muralla Romana datada en época de Augusto; la población es bilingüe, se habla francés e italiano y la vida transcurre tranquila para los pobladores del valle, los cuales están dedicados a los cultivos y pasturas para el ganado lechero, ya que la región elabora el famoso queso Fontina, base de la “fondue”. Durante las largas noches invernales surgen de las hábiles manos de los pobladores las peculiares artesanías en madera, que hacen famosa a la región.
Aosta, paso obligado de las comunicaciones en los Alpes Occidentales, es también importante por su ya mencionado patrimonio Romano, al que se agrega la Puerta Pretoria del siglo I a. C. y las ruinas de un teatro del mismo período. La ciudad es aún más conocida por los deportes invernales, en sus cercanías sobresalen estaciones de ski de prestigio internacional como Courmayeur, Breuil-Cervinia, LaThuile y Pila.
El Monte Blanco es una colosal aglomeración de rocas y de hielos, ninguna de sus cien cimas quedó sin escalar, ninguno de sus cincuenta glaciares atemoriza. Hoy se puede gozar del espectáculo de todos ellos, así como esquiar a lo largo del año. Por su parte, el Monte Cervino con forma de pirámide cuadrangular, luce un aspecto siempre diferente. Desde la localidad de Breuil-Cervinia situada a 2.000 m, ascienden numerosos funiculares y telesquíes, el que sube hasta Plateu Rosa efectúa el recorrido suspendido a centenares de metros sobre un paisaje de belleza indescriptible aquí a 3.500 m, se practica ski durante todo el año. No menos famoso, el Monte Rosa, posee el denominado “Mar de Hielo” (Mer de Glace), glaciar extendido en línea recta a lo largo de 22km, con crestas, aristas y afiladas rocas, se llega por medio del funicular Alagna-Punta Indren; en esta última localidad puede practicarse el esquí ante el soberbio panorama que ofrecen el monte Blanco, los grupos de Bernina, L’Ortes, el Cevedale y L’Adamello; es decir un desfile de los más renombrados picos alpinos.
Alpes Centrales
Son Ios más anchos, extendidos principalmente en Suiza, desde el paso del Gran San Bernardo hasta el paso de Resia. Los cordones montañosos configurados a modo de abanico parten desde un punto focalizado en el nudo de San Gotardo, con gran cantidad de glaciares. El túnel del Simplón, el más extenso y transitado en la conexión con Italia, permite el paso del ferrocarril París- Berna-Milán.
Los deportes invernales son únicamente importantes en el extremo septentrional, que posee nieve todo el año. Ponte de Legno, con su enorme trampolín de salto con esquíes, está unido por telecabina a Vedreta de Presena y al grupo del Adamello a los 3.554 metros de altura. Valtellina ofrece uno de los ambientes de ski más interesantes, tanto por la duración de la nieve como por la estructura del terreno, especialmente adecuado para el esquí alpino y excursionismo.
Milán es la llave a la región de los lagos, estos presentan una enorme y variada infraestructura que facilita la actividad turística.
El lago Mayor (Maggiore) o de Verbano, es el más célebre de los lagos italianos. Las Islas Borromeas constituyen por su belleza una de las mayores atracciones. Se visitan desde la localidad de Stresa. La Isola Bella, la más famosa, posibilita la visita del Palacio Borromeo del siglo XVII, ricamente decorado y amueblado, con jardines y terrazas superpuestas que constituyen un extraordinario museo de escultura y de especies-botánicas exóticas. El recorrido también incluye la lsla de Los Pescadores, totalmente urbanizada y la Isla Madre, con un palacio rodeado de jardines.
Sobre las márgenes del lago, inmersa entre castaños y magnolias surge Pallanza, que es además estación climática y está rodeada por espléndidas mansiones y parques destacándose la “Villa Taranto”
Al norte de Milán, el lago de Como es el más profundo de los lagos europeos con 410 metros, ofrece los paisajes más variados entre los lagos de Italia.
Como, el principal centro urbano de la región lacustre es un núcleo textil por excelencia, especializado en la producción de seda natural. Esta ciudad ya era importante en la época romana gracias a su privilegiada ubicación. El pulso de la misma se mide en los alrededores de la Plaza Covour, frente al lago, desde aquí parten numerosas excursiones en diversas embarcaciones. La Catedral o Duomo, realizada totalmente en mármol, aunque de líneas gótico- renacentistas está coronada con una importante cúpula de 75 metros de altura, obra de Felipe Juvara.
Cemobbio, un lugar de veraneo muy bien sistematizado, ofrece la Villa D’Este del siglo XVI convertida hoy en un confortable hotel rodeado de jardines.
Tremezzo resulta una de las localidades más frecuentadas, entre ésta y Cadenabbia, se encuentra Villa Carlotta, con jardines y terrazas de vegetación exuberante. El edificio data delsiglo XVIII, contiene una extraordinaria colección neoclásica de esculturas entre las que “Amor y Psique” de Canova ocupa un lugar preponderante, acompañada de otras obras del danés Bertil Thorvaldsen.
 Alpes Orientales
Se extienden fundamentalmente en Austria, desde el paso de Resia hasta las cercanías de la ciudad de Viena. De altura menor, los cordones se disponen en tres alineamientos casi paralelos separados por profundos valles. En Italia culminan en el Macizo de la Marmolada a los 3.300 metros.
El paso del Brennero es el más utilizado para las comunicaciones durante todo el año. Estos cordones montañosos son de estructura predominantemente dolomítica, por lo que adquieren una belleza insuperable en todo el sistema alpino. Por tal motivo los centros de ski de carácter internacional se hallan en esta región Cortina D'Ampezzo es una estación invernal de montaña, situada al término de la Ruta de las Dolomitas, famosa por su infraestructura y práctica de deportes invernales. Fue en varias oportunidades sede de los Juegos Olímpicos de Invierno.
A su vez, Madonna di Campiglio domina el área del macizo del Brenta a 3.174 metros. Sobre sus pistas tiene lugar la denominada “Tres T”, una de las mayores competencias nacionales del país.
Llanura Padana
Localizada en una zona de hundimiento tectónico, entre los Alpes al norte y los Apeninos al sur, ha sido rellenada por los aluviones del río Po, que la recorren de oeste a este y toda la red de afluentes que recibe principalmente de la zona alpina. El relieve es ondulado con afloramientos de peñascos rocosos al oeste, resulta sensiblemente baja y pantanosa al este donde se depositando los sedimentos más finos.
Un clima casi templado de transición, determina formación de una estepa herbácea. Debido a la gran instalación humana en la región la flora y fauna son las más empobrecidas del país.
El Po resulta el río más notable de Italia, debido a su cuenca, caudal, navegabilidad y una extensión 650km. Nace en el monte Viso, Alpes Occidentales desemboca formando un extenso delta de cinco brazo su régimen es irregular de tipo alpino. Como consecuencia del constante rellenamiento del cauce, se realizaron numerosos trabajos de rectificación y profundización para impedir los desbordes.	'
Este ambiente es el más densamente poblado, el de mayor desarrollo económico y concentración industrial determinando los mejores niveles de vida del país.
Se trata de una región con niveles de industrialización comparables a los de Europa noroccidental con varios centros de alta especialización.
Estos factores unidos a la enorme provisión de energía de carácter hidroeléctrico, geotérmico y de gas orgánico, permiten una altísima tecnificación de las actividades primarias de carácter intensivo y notables índices de productividad. Milán es la capital industrial y nudo de comunicaciones.\Destacan también: Turin, Brescia,< P dua, Mestre, Bolonia y Verona.	’ •
Una intrincada red de autopistas y vías férreas inte conectan el espacio padano con el resto de Europa, a tra; vés de la magnífica muralla alpina.	*
TURIN (TORINO), nació como un campamento militar romano, denominado Augusta Magna Taurin rum. Capital de la región del Piamonte, fue construid en su mayor parte según un plano regular durante los^i gios XVII y XVIII. Es una ciudad próspera y llena de ' i da, con anchas arterias flanqueadas de pórticos; las esp ciosas plazas lucen monumentos conmemorativos ycu-, bijan iglesias y palacios imponentes. Arteria PrinclPa^’'&gawa vía Roma está flanqueada por pórticos bajo los cuales se suceden lujosas vidrieras. Sobre la vía Po, algunos de estilo neoclásico tuvieron un rol político destacada durante el siglo XIX. Ambas son importantes calleSjCO-, merciales.
El ambiente urbano, cortés y refinado, es el de-atínja centro cultural que dispone de numerosas librerías; edición de periódicos como La Stampa y una prestigiosa universidad; pero la ciudad tiene otros recursos, cotno,^ centro industrial es sede de la fabrica F.I.A.T. de automó?5^|g^ tores, así como de numerosas empresas relacionadas esta actividad y muchas otras de gran significado c La vía Roma conduce a la Plaza San Carlos (Piazza ^Stin Carlo) (1), de planta cuadrangular, fue diseñada por !j¿nadeo Castellamonte y construida en la época de Cris- ■ tina de Francia. En el centro destaca la estatua ecuestre ^Émanuel Fíliberto de Saboya, obra del escultor Maro- ícííétti, está considera como su mejor trabajo. A un costado pueden observarse dos iglesias muy parecidas: San garlos y Santa Cristina, esta última con el anexo convento de las Carmelitas Descalzas y hermosa fachada barro-
obra del arquitecto Juvara.
r Retomando vía Roma se llega a la Plaza del Castillo (Ptazza Costello) (2), hacia este espacio convergen las principales y más antiguas calles del centro de la ciudad, como vía Roma, Po y Pietro Micca. Su planta rectangular abarca una gran superficie y permite el acceso al Palacio Real de estilo Tardo-Renacentista, este fue iniciado en 1646 por el arquitecto A. Castellamonte. Antes de ingresar, una importante verja de hierro, cuya puerta principal está adornada por dos interesantes grupos escultóricos de los dióscuros Cástor y Polux, ubicados sobre pilastras; ya en el interior sobresalen las diferentes Salas de Estado, con el Salón del Trono, de Baile, el Despacho del Rey, la Galería de Espejos y Retratos, en los que se distribuyen la famosa colección de tibores Chinos y Japoneses.
La Armería Real, anexa al Palacio, es la segunda colección de armas del continente; exhibe más de 60 armaduras completas, entre las que descuella aquella que perteneció a Francisco I, rey de Francia.
Ocupando una singular posición sobre el centro de la plaza, el Palacio Madama (3), posee una de larga historia, ya que fue iniciado como puerta romana en época de Julio César, llamada Decumana. Durante la Edad Media, sobre sus ruinas, surgió una casa fortificada convertida luego en castillo. Una parte fue modificada por el arquitecto Juvara, quien levantó la gran fachada barroca que pasó a ser modelo de los palacios de la época; ésta posee neto predominio de líneas horizontales, la parte basal presenta un tramo medio algo saliente, ocupado por tres arcos de medio punto que sirven de pórticos de acceso. Tres ventanas rectangulares con guardapolvos planos, están separadas por pilastras salientes, estructuradas con panes de piedra horizontales. A partir del balcón de la planta noble, todas las aberturas adoptan forma de arco incluso en paños rectangulares; las tres centrales más anchas se encuentran separadas por columnas del orden gigante en número de cuatro y otras tantas pilastras a cada lado. El gran entablamento dispuesto sobre un entrepiso con aberturas rectangulares, sostiene una elegantísima balaustrada adornada con esculturas en el centro y copones en los laterales. El palacio hospedó al primer Senado de la Italia unificada; en el primer piso pueden apreciarse los Aposentos de Estado, ricamente decorados.
Finalmente, la Iglesia de San Lorenzo (4), obra
del arquitecto Guarino Guarini; constituye una de las más sugestivas creaciones del Barroco Piamoncés, en particular por la gran cúpula y en general por el dominio de una arquitectura que excluye toda línea recta. Dicha cúpula, muy original, es poco perceptible en su curvilínea magnificencia desdé el exterior. Interiormente, una serie de nervios se entrecruzan a la manera de lacería musulmana, mientras la luz penetra abarcando el todo por un ingenioso sistema de óculos, además de las pequeñas aberturas casi ocultas en la base del tambor y los cuerpos lenticulares ubicados en las partes intermedias.
Cercanas al Palacio Real, prácticamente anexas al mismo, surgen la Catedral y la Capilla del Santo Sudario (Santa Sindone) (5), la primera es un edificio de estilo Renacentista-Toscano con campanario románico; le fue agregada otra de las obras notables de Guarini: la Capilla del Santo Sudario, joya del Barroco Piamontés, posee una original cúpula de más de 60 m de altura y diseño semejante a la corona de espinas.Adornan el interior cuatro estatuas de príncipes de la casa de Saboya. En el centro hay un altar con la urna que aloja el lienzo llamado Sábana Santa (Santa Sindone), con las huellas del cuerpo de Cristo depuesto de la Cruz. La reliquia fue traída a Turin en 1578 desde Chambéry; por sobre este conjunto la peculiar cúpula arranca sobre tres grandes arcos. Una sucesión de molduras apenas insinuadas en su curvatura, de ménsula central, van apoyadas una sobre otras, de manera que sus uniones integran triángulos. Este conjunto visual, acentuado por el efecto de la alta linterna, semeja el enmarañado ramaje de la corona de espinas ceñida alrededor de la cabeza de Jesús. Guarini hace uso de varias formas geométricas, inclusive los colores representan una finalidad, tal como acontece con los mármoles oscuros de la parte inferior, símbolo del luto por la muerte de Cristo y la fabulosa luz que arremete desde lo alto, símbolo de la Resurrección.
La Puerta Palatina (6), próxima a la Catedral, perdura como testigo de la Turin romana, fue una de las principales aberturas de la muralla construida en épocas de Augusto.
Algo más alejado, él Santuario de la Consolación (La Consolata) (7), ocupa el lugar donde alguna vez estuvo la Iglesia de San Andrés, de la que sólo subsiste el campanario románico. Obra conjunta de Guarini y Juvara, presenta una nave principal de planta elíptica, dispuesta lateralmente al clásico frontis con columnas que obra de acceso.
Si bien es producto de la arquitectura moderna, la Mole Antoneliana (8), llegó a convertirse en el símbolo de la ciudad. Fue iniciada en 1863 por el arquitecto Anto- nelíi, de ahí su nombre, para cumplir con el objeto de alojar un templo israelítico; adquirido luego por el municipio se transformó en Museo del Resurgimiento. Su es- tructurai sin prescindir de los elementos clásicos de la arquitectura, tales como columnas y pilastras, incorpora una colosal cúpula de hierro y vidrio que, con su linterna y aguja coronante alcanza los 167,5 m de altitud. En la actualidad es posible subir utilizando el ingenioso ascensor central terminado en un mirador para gozar desde allí uno de los mejores puntos panorámicos sobre la ciudad con sus armoniosos paisajes circundantes.
AI costado de la Iglesia de San Felipe, dando marco a la plaza que lo precede, el magnífico Palacio de la Acade-
HfeaísR
mia de ¿as Ciencias (9), de severa arquitectura, refleja militudcs a la otra gran obra civil de Guarini: el Palacio-*^ Carignano. La Academia surge en 1678 como Colegio de los Nobles, hoy día aloja en sus dependencias al seo Egipcio, la Calería Sabauda y el Museo de las Antigüe^ dades. La colección egipcia es comparable y complementaria de aquellas otras conservadas en los museosdékj Louvre, Británico y del Cairo. Entre las grandes escultu-' ras de bulto, sobresalen las correspondientes a Ramsés II, sedente, ubicado en el trono ostentando el cetro de oro, la de Amenofis Arrodillado, en acritud de presentar a las divinidades los vasos del vino ritual.
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La Tumba de Kha, arquitecto de los faraones, fue en; contrada intacta y contiene objetos variadísimos en exce-.
lente estado de conservación. Notable resulta también la colección de momias y papiros iniciada por Drosetti y acrecentada luego de las doce campañas de Schiapparelli a Egipto. Proceden de El-ElesÍya, al sur de Aswan.
Dispuesta sobre el segundo piso, la Galería Sabauda, aloja más de 600 obras pictóricas de las escuelas Piamon- tesa, Renacentistas Italianas y del norte de Europa.
p Entre los muchos óleos de personajes de la dinastía de - Saboya, destaca el “Retrato Ecuestre de Tomás de Sabo
ya Cariñán”, pintado por Van Dyck.
Son varias las pinturas del Renacimiento Italiano atesoradas en el museo, tales como “La Virgen con el Niño, \ San Juan y Cinco Santos”, por Mantegna y otras tantas
1 de Botticelli, Bronzino y Andrea del Sarto.
, Los extranjeros cuentan aquí con el mayor número de obras del país, algunas de enorme significado como “San Francisco Recibiendo los Estigmas” de Van Dyck, y “Los Episodios de la Pasión”, serie de Hans Memling.
Muy cerca, enmarcando a la plaza seca homónima se alza el Palacio Carignano (10), quizás la obra curvilínea más representativa, de uno de los jefes de la Escuela Barroca de la región: Guarino Guarini, fue uno de los primeros trabajos civiles emprendidos por el arquitecto entre 1674 y 1685. Influido por los principios de Borromini, utilizó el ladrillo como material del acabado constructivo, bastante insólito en la escuela Barroca. El edificio consta de un cuerpo central elíptico que integra la parte convexa de la fachada y por el lado posterior se adelanta a un patio. Este tramo es el de mayor originalidad, ya que sustituyó pilastras y columnas por formas rectangulares salientes decoradas con estrellas, la parte superior ostenta tres grandes óculos de forma elíptica. Este mode- lo de palacio en el que las formas cóncavas y convexas se
· conjugan con cuerpos laterales rectos, determina las fa- c. chadas ondulantes que tanta difusión tuvieron en los países de habla alemana; fueron precisamente los arquitectos de Europa Central quienes llevaron a la corte portu-
:• guesa estos principios, luego tan difundidos en la Amé- >■ rica Lusitana.
En este palacio nació Víctor Manuel II y funcionó el
· primer Parlamento Subalpino, luego, Parlamento Italiano, cuya Sala Histórica se mantiene intacta; hoy el edificio alberga al Museo del Resurgimiento.
Turin es sede histórica de la industria automotriz, re- 7 sultando casi obvio que su Salón Internacional del Automóvil, atraiga cada primavera a gran número de visitantes. La muestra se realiza en el Palacio de las Exposiciones (Palazzo degli Sposizioni) (11); complementa a este tipo de evento la visita al Museo del Automóvil, en el que puede verse una muestra evolutiva con prototipos de colección para cada período a nivel mundial. El Museo, está
dispuesto en áreas de moderna concepción edilícia.
Extendido a lo largo del Po, el Parque Valentino (13), constituye el espacio verde más importante en el centro de la ciudad. Se desplaza sobre la margen izquierda del río a lo largo de 1,5 km. ocupando casi 500.000 m2; inclusos en este excelente predio arbolado, pueden visitarse el Castillo (Castello) (14), una de cuyas fachadas enfrenta directamente al río. El edificio fue modificado en su estructura original por orden de la reina consorte Cristina de Francia, presenta un particular coronamiento de grandes buhatdillas pizarrosas típicas del Renacimiento Francés.
En otro sector del parque, el Barrio Medieval (Borgo Medievale) (15), fue erigido en 1884, con otra serie de edificios hoy desaparecidos, para albergar una exposición internacional. Diversos conjuntos medievales de la región han sido reproducidos fielmente dentro de una planta urbana pequeña, típica de la época.
Sobre un promontorio rocoso, ubicado en la margen derecha del río, algo aislado del resto de las colinas que enmarcan este sector, se ubica el Monte de los Capuchinos (Monte dei Cappuccini) (16), la iglesia del mismo nombre es de planta centralizada y elegante cúpula poligonal, desde aquí se goza de una excelente vista panorámica.
Cuando en 1814, aconteció la Restauración de la monarquía como consecuencia de la caída de Napoleón, el retorno del rey fue conmemorado con la construcción de una iglesia: la Gran Madre de Dios (Gran Madre de Dio) (17), cuyas formas son casi idénticas al Panteón de Roma. En su interior hay un Osario Conmemorativo a los Caídos en la Primera Guerra Mundial.
Al oeste de la ciudad, puede visitarse el complejo ocupado por la Fábrica Italiana de Automotores de Turin (Fabrica Italiana Automobbili Torino), FIAT.
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En la misma dirección se llega al Palacio de Caza de Stupinigi, última obra de Juvara en Turin; la magnífica planta parte del Gran Pabellón Central con alas articuladas degradantes a la manera de cruz de San Andrés, para continuarse luego en un polígono casi cerrado, que enmarca de sutiles formas arquitectónicasa un espacio par- quizado geométricamente. La balaustrada unifica los brazos de la estructura y oculta casi los agudos tejados. Por otra parte, destacan notoriamente los trofeos y copones que la coronan en los tramos principales. Un airoso ciervo de espléndidas astas domina la altura y define el objetivo cinegético que originó tan singular construcción. En la Sala de Juegos, prevalece el gusto por lo exótico tan en boga durante el siglo XVIII, así, monos, pájaros de oriente, palmípedas y pequeños felinos salvajes se entremezclan con ménsulas rococó y motivos grutescos. De notable efecto, la Sala de las Perspectivas ofrece
un testimonio de la predilección de la técnica de Trampa al Ojo (Trompe l’oeil), esta puede apreciarse en los grandes espacios ovales enmarcados, que ofrecen vistas de ruinas clásicas monocromas, probablemente inspiradas en la Roma antigua. Sobre las paredes de la Sala de los Escuderos pueden verse escenas de caza, temática preferida en la decoración del palacio; la minuciosidad de las mismas permite reconstruir el fasto y despliegue que caracterizó a este tipo de actividades tan caras a la nobleza de la época. Una bóveda plena de luz pictórica, ofrece “El Carro del Sol con la Aurora guiada por el Amor”, en tonalidades celestes y rosadas, la figura de Ja- són vencedor del dragón alado, se percibe casi entre penumbras sobre un ángulo.
La parte más sugestiva es sin duda el Gran Pabellón Central de planta elíptica. Las grandes pilastras perime- trales están alternadas jónicas y decoradas, por una balconada que separa la planta baja del primer piso. Este ambiente único permite que la luz que penetra por la doble hilera de grandes ventanas cree una sensación casi mística en un espacio dedicado a los festejos.
Como un alrededor notable en pleno ambiente alpino se levanta el complejo de Superga (12), edificado en 1706, para conmemorar la derrota de los franceses que asediaban a la ciudad. Víctor Amadeo III de Saboya ordenó la construcción a Felipe Juvara, quién empleó elementos clásicos y barrocos combinados obteniendo uno de los mejores ejemplos de simetría central. La obra está considerada como la más importante del arquitecto, aquí utilizó la conjunción de un gran cuerpo edificio elíptico coronado con una elegante cúpula y flanqueado por campanarios que lucen cupuietas bulbiformes. Un espacioso atrio arranca desde la fachada que, peraltado con respecto al espacio plano precedente, ofrece columnas corintias en número de cuatro por el frente y dos por cada lateral; desde aquí se goza de un panorama muy amplio de los Alpes Marítimos y Peninos, abarcando desde el monte Viso al monte Rosa. Ei ascenso es posible por carrerera o transporte a cremallera desde el barrio Sassi.
MILÁN (MILANO), la segunda ciudad de Italia por el número de habitantes y la primera por su actividad económica, se encuentra en el interior de la llanura Padana y constituye uno de los mayores nudos de transportes de Europa. Sus activos aeropuertos Linate y Malpensa, distan 10 km al este y 46 al noroeste respectivamente. Dos anillos concéntricos de autopistas y avenidas se extienden rodeando al núcleo central urbano; el menor, surgió como reemplazo de las murallas del siglo XIV
El origen de Milán se remonta a los tiempos de un primitivo asentamiento celta; fueron los romanos quienes en el 222 a. C. sistematizaron la ciudad original a la
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que bautizaron como Mediolanum, que significa en ijfég dio de la llanura. Durante el Renacimiento, Milán ti^ como otras ciudades italianas sus propios mecenas, las milias Visconti y Sforza propiciaron las artes y ciencia Más modernamente le cupo a Napoleón Bonaparté^ll culminación de varias obras importantes. La industrial^ zación empalmó muy bien con las tradiciones artesanal cuya vigencia debe rastrearse en el mismo MedioevoíVsP* Milán creció y dio lugar al florecimiento de centros -i dustriales especializados y otros complementarios erí^L región lombarda.	4?-
Capital mundial de la moda y el diseño, expone-lós* mejores productos de su actividad en este sentido sóbr^ los Corsos Vittorio Emanuele y Venezia. Anticuariátó-y£ artesanías de época, están concentradas sobre la Vía Monte Napoleone; mientras la Plaza San Babila y su al¿ rededores ofrecen diversiones nocturnas.
El teatro hizo y hace escuela en Europa a través de la' tradición establecida por la jerarquía de una de las m ti tuciones de mayor prestigio en éste género, como lo e e Piccolo Teatro.
La Plaza de la Catedral (Piazza del Duomo) (1)/ planta rectangular, fue remodelada a mediados del siglo? XIX; sobre un sector se levanta el Monumento a Víctor Emanuel, obra de E. Rosa, representa al rey en la batalla/ de San Martino. Los relieves de la base grafican la entrap da de las fuerzas aliadas del Piamonte y Francia a la ciuss dad, luego de Iá\batalla de Magenta.
La plaza está rodeada por el Duomo o Catedral que: hace de espectacular telón de fondo; sobre uno de los-, flancos, el Palacio Septentrional integra a la Galería Víc< tor Emanuel II y por el otro lado, el Palacio Meridional luce sus hermosas arcadas de medio punto de inspiración; renacentista.
El Duomo fue edificado sobre el área que ocupaba; una iglesia del siglo IX dedicada a Santa María Mayor, la-, conclusión de las obras demandó unos 900 años y la in-1 tervención de varios arquitectos. A mediados del siglo; XVIII se construyó la aguja central sobre el cimborrio,-, que poco tiempo después fue coronado con la escultura de la Asunción (Madonnína) a 108,5 m de altura. En, 1805, a iniciativa de Napoleón se construyó la fachada, obra de Cario Amati; las cuatro puertas laterales son del. siglo XX. Existe discordancia estilística, ya que las puertas de la fachada y las aberturas del primer piso responden al Neorenacimiento, alejándose del estilo gótico ca^. racterístico del resto del edificio.
La catedral cubre una superficie de 11.700 m2, su lar; go es de 157 m, alcanzando 92 en el crucero. La fachada de neto corte triangular abarca 61,50 m de ancho por 56 de alto. Gran número de agujas configuran un verdade ío bosque marmóreo ya que suman 135, la mayoría coronadas por importantes estatuas. El edificio está totalmente revestido en mármoles procedentes de Candoglia, de color blanco rosado con pequeñas vetas azuladas apenas perceptibles.
El acopio escultórico alcanza las 2.245 estatuas exteriores que, sumadas a las del interior llegan a 3.159. Cinco naves dividen el espacio interno separadas por imponente pilares cuyos capiteles rematan en exuberante decoración vegetal, los de la nave central presentan además esculturas de santos. Este sector y las naves centrales del crucero son de doble ancho que las restantes. Hacia la derecha el monumento a Gian Giacomo de Medici, general de Carlos V, es una de las obras más logradas de León Leoni, posee la forma de un arco de triunfo con importante coronamiento. La parte inferior está dividida en tres bandas flanqueadas por columnas; ofrece en el área central a Gian Giacomo, luciendo armadura romana y manto desplegado sobre la rodilla izquierda, está acompañado por las alegorías de la Milicia y el bajorrelieve fluvial del Adda; a ellos, se contraponen la Paz y el Ticino respectivamente. Dos columnas laterales externas sostienen las figuras de la Prudencia y la Fama.
El cimborrio de planta octogonal, luce en los penachos de las arcadas los bustos de los Doctores de la Iglesia y sesenta esculturas de santos sobre ménsulas en el entredós de arcos.
Se accede a la cripta por la parte trasera del magnífico coro. Una capilla subterránea, también octogonal revestida de plata alberga los testos de San Carlos Borro- meo, cuyo cuerpo cubierto por preciosos atuendos, puede verse dentro de una urna de cristal de roca que fue el tributo de Felipe IV, rey de España. Los ocho relieves de la bóveda muestran las hazañas del Santo.
Hacia un costado de la plaza domina la silueta de la Galería Víctor Manuel (Gallería Vittorio Emmanuele) (2), obra que data del siglo XIX en cuyas postrimerías se concluyó. Su planta de cruz latina desplaza un brazomayor de 196 m y uno menor de 105. El crucero intercala en un octógono que, como todala bóveda está realizado en hierro y vidrio; sobre los luneros aparecen figuras alegóricas de los continentes así como la Industria, Arte, Ciencias y Agricultura. Entre cada lunero, águilas exployadas descansan sobre las armas ovales de la dinastía de Saboya.
La arquitectura general evoca lincamientos renacentistas adaptados a la altitud del edificio y los brazos presentan tres pisos dispuestos sobre los arcos de la planta baja-, uno de estos concluye en la Plaza de la Scala (Piazza della Scala) (3), dominada en su sector central por la estatua de Leonardo da Vinci, obra de Pietro Magni, datada a fines del siglo XIX.
No menos famoso, el Teatro de la Scala debido a José Permanini luce fachada neoclásica con un singular relieve del -Carro de Apolo contenido en el gran frontón triangular. Fue construido en el siglo XVIII en el lugar donde se levantaba la iglesia de Santa María della Scala. Su capacidad es de 3.000 espectadores y posee una acústica perfecta. Rodeando su planta de herradura surgen cuatro órdenes de palcos de sobria decoración neoclásica. Esculturas de numerosos músicos engalanan el atrio, como los bustos de Rossini, Verdi, Bellini y Donizzetti, acompañados por Sthendal, ferviente admirador de Italia y su cultura.
La vía de Brera, elegante por los numerosos palacetes neoclásicos que la enmarcan, nos conduce al Palacio del mismo nombre iniciado por la Compañía de Jesús. El soberbio patio rectangular resulta de gran efecto escenográfico, aportado por la equilibrada sucesión de dos órdenes de arcadas que reposan sobre pares de columnas toscanas y jónicas. Domina el espacio central, la figura de Napoleón Bonaparte, obra en bronce debida a Antonio Canova, el Emperador empuña la lanza y él cetro.
El Palacio alberga en el primer piso a la Pinacoteca Brera (4), una de las más importantes galerías del país que además es sede de la Academia de Bellas Artes. En la Sala Cuadrada, pueden admirarse obras de la talla del “Cristo Muerto” de Mantegna y los “Desposorios de la Virgen* por Rafael. Por demás interesantes resultan “El Hallazgo del Cuerpo de San Marcos”, de excepcional perspectiva, obra de Tintoretto, como la soberbia “Piedad” de Bellini y la gloriosa composición lograda por Piero della Francesca en “La Virgen y el Niño en Majestad, adotada por Federico de Montefeltro”. Además de otras tantas obras de pintores italianos, la institución ofrece también trabajos del Greco, Van Dyck, Rubens y Rembrandt.
Luego de transponer la Vía Dante, arteria dinámica y animada de la ciudad se arriba a un significativo espacio urbano en gran parte arbolado, con estadios, espejos de aguas y el neoclásico Arco de la Paz. El principal edificio que’enfrenta a este céntrico pulmón verde, es una mole de corte netamente militar conocida como Castillo de losSfirza (Castello Sfirzesc'o) (5), iniciado en el siglo XIV luego recibió sucesivos aportes arquitectónicos entre los que no pueden dejar de considerarse los del gran Brunelleschi, quién trabajó en los sectores residenciales de la familia.
La fechada que enfrenta al casco urbano está dominada por una torre de 70 m que aún sobresale en el horizonte ciudadano. Utilizóse el ladrillo y la piedra pararealizar las espesas murallas que protegen a esta estructura cuadrangular. El almohadillado fue empleado pai^ revestir las potentes torres cilindricas angulares Varias dependencias rodean patios interiores armoniosos perú austeros, entre las que destaca la Corte Ducal, cuyo cói tile permite el acceso a los Museos Artísticos con de pendencias en las que puede admirarse la estatua eché tre de Bernabó Visconti, obra del escultor Campiófri pero el verdadero tesoro lo constituye la “Piedad RónJ daniní”, última obra de Miguel Angel, que quedó in ' conclusa. En la Sala Dorada, dominan pinturas^'clc grandes maestros como Lippi y Bellini, entre las qtc emerge la magnífica “Virgen en Gloria y Sanios , d 1 genial Andrea Mantegna.	.
Por encargo de los Dominicos fue construida la IgZ sia de Santa Marta de las Gracias (Santa María delle’ Grazie) (6), se combinan aquí elementos tardíos 'del Gótico con aportes del Renacimiento. De éste ultimo período son el cuerpo absidal y la cúpula, realizados-por Bramante. A la izquierda de la iglesia, en lo que fue* 1 .refectorio del convento se halla “La Última Cena", ó lebre pintura de Leonardo da Vinci. En la acrualidad luego de largos y concienzudos procesos de restauración ha sido finalizada.	-*
Entre las múltiples iglesias con las que cuenta Milái i aquella que evoca a su santo patrono San Ambrosio (\ Ambroggio) (7), merece un análisis particular por su pfc valente significado en la historia del arte de Occidente; Si bien algunas de sus partes fueron iniciadas en el 279.A1. C., el aspecto que hoy presenta fue logrado durante el-si gio XII. Esta joya del estilo Románico, encuéntrase pre? cedida por un espacio rectangular adornado por arcos de medio punto. La fachada de corte triangular es sencilla está agilizada visualmente por su propia división en, un doble espacio horizontal, ostentando el superior ciñió arcos de medio punto degradantes hacia los extremos;-.! 1 nártex basal luce tres arcos de iguales dimensiones.\Sin un crucero esbozado, el interior presenta tres naveswlo pilares sostienen bóvedas en las que quizás por vez pi i mera aparecen ya definidos los elementos que luego iban a determinar las bóvedas de crucería en el arte Gotico Notable resulta el púlpito que se apoya sobre un sarcófa.^ go paleocristiano probablemente del siglo IV. Los mojí vos decorativos de excelente factura expresan temacic'i del Antiguo y Nuevo Testamentos. Por otra parte, el d i sel ocupa una posición prevalente, muestra cuatro;co lumnas con hermosos capiteles tallados durante el siglo IX. Son singulares las figuras decorativas en estuco colu reado que otorgan rasgos particulares al monumento, es tas expresan escenas bíblicas referidas a las relaciones de Cristo con San Pedro y San Pablo, así como con los San
tos Gervasio y Protasio, cuyos cuerpos, junto a los del Patrono. están conservados en la cripta de la basílica. Este importante templete cobija una de las gemas del patrimonio deja iglesia: El Frontal, elaborado con oro y planta es en sí una preciosa pieza de orfebrería del siglo IX. ¡El paño central muestra una cruz cuyo centro elíptico está ocupado por un Cristo en el trono; cada brazo contiene los símbolos de los Evangelistas, el resto, subdividido *en espacios cuadranglares ofrece espléndidos relieves separados por marcos cuajados de notables trabajos esmaltados y pedrerías, engarzadas a la manera característica Me las piezas más refinadas del arte Carolingio.
‘ En el predio que ocupa la Feria Campionaria (Fiera ^Campionaria), se celebran anualmente muestras industriales tan importantes como la Feria Textil, que marca la moda en telas para cada temporada a nivel mundial. En octubre tiene lugar la dedicada a la metalurgia con la muestra de la Máquina-Herramienta.
Hacia elsur de la ciudad, puede visitarse la Cartuja de Pavia (Certosa di Pavia), ésta se inició por voluntad de Galeazzo Visconti, duque de Milán en 1396. La íjnayor parte de la construcción fue realizada durante los siglos XV y XVI. El estilo particular de la fachada es rico en profusión de esculturas policromadas, piedras duras. medallones y adornos que adosados por doquier a los mármoles, determinan los caracteres del Renacimiento ^Lombardo. Los arquitectos fueron Bernardo de Venezia :y Jacopo Campione. Rojos ladrillos predominan en los : laterales y claustros, mientras que las columnas y pináculos son de mármol. La tierra cocida (terra cotta), fue seleccionada para frisos y adornos en los arcos; este fasto de líneas y materiales empleados en Lombardia, contrastan con la austeridad racional del Renacimiento Toscano, así, Ja Cartuja de Pavía, sepulcro de los Visconti y Sforza, in- r"Jfluyó sobre toda Europa más que en la propia Italia, ori- “/ginando en Francia un primer ensayo del Renacimiento, combinando formasaún góticas con elementos decorati-
ívos lombardos. No menos importante, la trascendencia a España contribuyó a la afirmación del Plateresco, versión ■local del Renacimiento en la península Ibérica, iniciado
· ¿por orfebres italianos.
VENECIA (VENEZIA), es una de las ciudades . mas singulares y originales del mundo, no sólo por las - obras artísticas sino por su inimitable trazado urbano.
· » Venecia se originó como refugio de los pobladores de Aquilea, Alttno y Padua que perseguidos por los bárba-
• ros en los siglos X y XI, buscaron refugio en las islas de u la laguna litoral. El primer núcleo urbano surgió en tor- ?. no a la zona de Rialto. Para consolidar el terreno insular fueron excavadas tupidas redes de canales, gigantesca obra que se llevó a cabo siguiendo un sistemático plan regulador; fue así como surgió el Gran Canal, el más ancho, hacia el cual convergen los estrechos y numerosos “rii” que rodean a los ciento dieciocho islotes que integran la ciudad. Con el fin de poder construir sobre este basamento bajo, anegadizo y poco sólido, fue necesario realizar una obra importante, utilizando para ello gruesos troncos de madera imputrescible que, ligados entre sí, actuaron como base sobre la que se levantaron posteriormente pesadas construcciones.
Debido al rellenamiento aluvional constante del Po y sus confluentes sobre el golfo de Venecia, el nivel de las aguas sube inexorablemente sobre la ciudad.
Durante la Edad Media Venecia se convirtió en una de las principales potencias marítimas, creando en consecuencia un vasto imperio colonial, diseñado en función del dominio de las rutas comerciales entre Europa y Oriente; esto produjo un flujo de riquezas, que justifica el esplendor edificio y artístico que caracterizan a la ciudad. El poderío de Venecia comenzó a decaer con la toma de Constantinopla por parte de los tuteos, hecho que desplazó el poder marítimo del Mediterráneo al Atlántico. Como recuerdo permanente de los tiempos del esplendor declinante de los siglos XVI y XVII, subsiste el famoso carnaval veneciano.
El puente de la Libertad (ponte della Libertá), permite el acceso ferro-vial a la ciudad, el Piazzale Roma actúa como un gran parking, cuando se satura, deben ser utilizados los estacionamientos de Mestre y Marghera; en la primera ciudad se encuentra el aeropuerto Marco Polo.
De planta rectangular, la Plaza de San Marcos (Piazza San Marco) (1), ofrece uno de los espacios abiertos más generosos de la ciudad, ya que su largo llega a los 175 m y su ancho a los 80. Bautizada como “El Salón de Mármoles sin Techo”, esta amplia superficie está rodeada por armoniosos edificios, cuyo conjunto constituye en sí una maravillosa escenografía. Tres lados de la plaza están ocupados por las Procuradorías Vieja (6), Nueva (7) y Novísima (8), unificadas por los porticados de medio punto, determinando extensas “loggias’!, que albergan a lamosos e históricos cafés con sabor de época y lujosos' comercios.	. - -
El cuarto lado lo ocupa la Basilica de San Marcos (3), cuya fechada está precedida por tres mástiles apoyados en bases que datan del siglo XVI y simbolizan los territorios venecianos de Chipre, Creta y Morca. La construcción de la basílica se inició en el siglo XI, con el objeto de custodiar los resros del Apóstol San Marcos, cuyo cuerpo fue traído desde Alejandría de Egipto, convirtiéndose así en patrono de la ciudad. Joya del estilo Bizantino, la basífi-
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(¿sigue los lincamientos arquitectónicos de la desaparecida iglesia de los Santos Apóstoles de Constantinopla. Así lo testimonia la planta en cruz griega. Cuatro cúpulas coronan cada brazo de la cruz y rodean a la que cubre el crucero; éstas son semiesféricas por la cara interna y responden a la más pura técnica bizantina de elaboración. Los tambores apenas notables, proyectan una etérea luminosidad filtrada a través de sus múltiples aberturas.
El suntuoso interior formado por pilares y arcos que sostienen a las cúpulas, se halla revestido en sus parres básales por preciosos mármoles procedentes de Dalmacia y-Oriente. A partir de la balconada interna, unos 4.000 m2de mosaico de oro sirven de telón de fondo y dan marco a otras tantas representaciones religiosas en perfectas teselas polícromas. Apoyada en la cara interna del altar mayor que cubre la tumba del Apóstol, la Pala de Oro constituye una joya veneciana debida a Bonninseg- na. Pose forma rectangular de 3,48 por 1,40 metros; sobre ella se engarzaron gran cantidad de piedras preciosas que complementan 80 figuras esmaltadas. El conjunto da. marco al diseño central compuesto por Cristo bendi- cente rodeado por los cuatro Evangelistas.
Si bien la fachada no expresa pureza de estilo, ofrece en cambio una combinación de diferentes corrientes estéticas aportadas en épocas distintas, así, sobre los luneros de modernos mosaicos aparecen doseles góticos, influencias románicas y del arte oriental. Los caballos de bronce que campean en el nivel medio, son réplicas de aquellos originales que proceden del Hipódromo de Constantinopla. En el ano 1204 fueron traídos a Venecia y adornaron la fachada; hoy se los puede ver en el interior de la basílica. En lo referente a las cúpulas, su forma externa responde al recubrimiento decorativo que las aproxima más a la manera oriental.
El espacio que conecta la Plaza de San Marcos con el Gran Canal es denominado la Placita (Piazzetta) (2), corre entre la excelente fechada que Sansovino diseñó para la Biblioteca Marciana, obra cumbre del Renacimiento Venero y el Palacio Ducal; frente a las aguas, dos esbeltas columnas sostienen la figura de San Teodoro, antiguo patrono de la ciudad y el León Alado, símbolo del evangelista San Marcos.
La torre que sirve de campanario a la catedral está separada de la misma y se asienta sobre un artístico basamento renacentista, obra de Sansovino, conocido como la “Logget- ta*. El Campanario (Campanile) (4), con sus 99 metros de altura es accesible por ascensor, nada iguala la percepción panorámica de la ciudad como desde este lugar.
La armonía de la plaza, sólo se altera levemenre por la presencia de la Torre del Reloj (5), obra del siglo XV con un cuadrante que ostenta los dorados signos zodiacales, en lo alto, las célebres figuras de los Moros de bronce, golpean cada hora la campana del mismo material como lo han hecho a lo largo de 500 años.
La Puerta de la Carta de excepcional factura, responde a las pautas del Gótico Flamígero, permite el ingreso al patio del Palacio Ducal (Palazzo Ducale) (9), conocido también como palacio de los Dogos o Dux. Este fabuloso edificio de planta- cüadrarigúlár, se asoma a un gran patio central; una fechada da a la plaza, otra se refleja en las aguas abiertas y una tercera está separada del Palacio ' de las Prisiones por un romántico y angosto canal cruzado por el famoso Puente de los Suspiros (Ponte dei Suspiri) (10), que conecta ambos edificios.
Sede del gobierno de Venecia, el Palacio que comenzó a construirse en el siglo XII, fue profundamente modificado durante el XIV y XV. La parte superior de las fechadas tiene un revestimiento de panes de mármoles rosados y blancos, combinados geométricamente con muy pocas aberturas y balcones. La parte superior en cambio, es de aspecto etéreo ya que incluye la fabulosa galería de arcos ojivales y tréboles de cuatro hojas, que reposan sobre treinta y seis elegantes columnas. La parte basal está constituida también por arcos ojivales, menos gráciles por la poca altura que desarrollan apoyados sobre pesados pilares. Una vez en el patio interno, apenas traspuesta la Puerta de la Carta, una a magnífica escalera, flanqueada en su parte terminal por las esculturas de Marte, dios de la Guerra y Neptuno, dios del Mar, obras de Sansovino, permite alcanzar la planta noble que contiene las principales dependencias palaciegas. Ya en el interior, dimensiones extraordinarias de 52 por 25 metros ofrece el Salón del Gran Consejo, que contiene la mayor pintura sobre tela del mundo: “El Paraíso”, compleja obra de Tintotetto de 22 por 7 metros, la gran composición sebasa en un centro ideal ocupado por Cristo y su madre, en torno a los que giran los Beatos.
La antigua Sala de Espera, es conocida como el Salón de las Cuatro Puertas, los frescos pintados por Tintoretto representan a “Las Alegorías”. Trabajos del mismo autor como “La Fragua de Vulcano”, “Mercurio y las Gracias” y “Las Bodas de Baco y Ariadna’-, pueden admirarse en la Sala del Antecolegio, en la que el Veronés aporta “El Rapto de Europa”, de exquisita coloratura y armónica composición.
En la Sala del Colegio, sede de las reuniones de las altas autoridades, Veronés ofrece un ciclo pictórico sin igual, integrado por las obras de la bóveda “Neptuno y Marte”, “La Fe”, “Venecia en el Trono con la Paz y la Justicia”, con otras tantas figuras de Virtudes ubicadas sobre los laterales. Completa esta brillante muestra de color el gran lienzo de la “Batalla de Lepanto”.
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El Canal Grande es la avenida acuática de los venecianos, posee unos tres kilómetros de extensión, sobre él se reflejan las fechadas de unos doscientos palacios de mármol, construidos durante un largo período desarrollado entrs ios siglos XII y XVIII. El poder que alcanzó Vene- cía como estado talasocrático y mercantil, se sintetiza en estos palacios de variados estilos, que a veces lucen improntas adquiridas en tierras lejanas, cuyos mares eran dominados por la bandera veneciana.
Tres grandes puentes cruzan el Canal, el primero, próximo a la estación del ferrocarril es el de los Descalzos (Gli Scalzi) (13), emplazado al lado de la iglesia homónima, de excelente fechada barroca. Sobre este sector se erige e! Palacio Vendramin Calergi (14), sede del casino en baja temporada, fue el lugar donde murió Richard Wagner. El Palacio Pessaro (CaPes'aro) (15), es un interesante exponente del Barroco Veneciano. Su arquitecto, Long- hena, logró grandes efectos de contraste entre luces y sombras. La fachada se divide en tres tramos horizontales, la feja basal está tallada con la técnica de punta de diamante; Ja siguiente, más airosa, equilibra la sensación visual con un desarrollo de elegante columnata del orden Jónico, prolongada en un tercer nivel con columnas corintias. Aquí funcionan las instalaciones de un interesante museo de Arte Contemporáneo y Oriental. Prototipo del Gótico Veneciano, el Palacio de Oro (Cad’Oro) (16), posee rasgos a la vez tardogóticos y orientalizantes combinados. Su nombre deriva de la antigua cobertura de mosaico de oro extendido por toda la fechada; la mitad izquierda de la misma luce tres loggias superpuestas de arcos góticos, cuyos entrelazamientos se complican en cada nivel. Vieja morada patricia, en la actualidad exhibe una interesante colección artística donada al Estado por su último propietario el barón Frachetti.
Un segundo puente llamado de Rialto (17), es por su arquitectura renacentista de mármoles de audaz concepción, uno de los símboles identificáronos de la ciudad, daca del siglo XVI; se encuentra flanqueado por negocios con balcones sobre el Gran Canal desde los que cuelgan a la manera de reposteros antiguos, los anuncios de los principales eventos culturales de temporada.
Mandado a construir por deseos del Dux Foscari, el Palacio que lleva su nombre (18), resulta el mejor ejemplo del estilo Gótico en Venecia. Combina acertadamente materiales tan diferentes como el ladrilloy el mármol, el elemento sobresaliente lo constituye la singular doble balonada superpuesta de galerías góticas, alternándose la basal simple y austera, con la superior entrelazada por tréboles de cuatro hojas. El palacio es hoy dependencia universitaria. Originado en el siglo XVIII, el Palacio Pez- zontco (19), posee imponente y dinámica arquitectura
■*n				 barroca, es famoso por su patio interno del que arran^^^M la elegante escalera que conduce el Museo del 700
Atravesando el puente de madera de la dwAaaBM llega a la Galería del mismo nombre (Gallería della Ac&Sg&S demia) (24), principal pinacoteca de Venecia,
en un complejo edilicio integrado por la
Iglesia de Santa María de la Caridad y el Canónigos Lateranenses. Brinda un panorama comple§||gg| de las escuelas Veneciana y extranjeras. Resultan dibles obras como “Los Milagros de la Santa Cruz-í-^^^Mg Bellini; “La Tempestad”, de Giorgione; “La Cena éñ‘ <^58583! sa de Leví”, del Veronés. Carpaccio ofrece el preciosdVuSllSBÍl cío pictórico que relata la leyenda de Santa ÚrsulaiÍ43g§«BB escuelas extranjeras sobresale el célebre “Retrato de'Jtj-^^^ ven”, del flamenco Hans Memmling.	'
Otro jalón de la pintura universal lo ofrece la EafeZaaaaBi de San Roque (Scuola de San Rocco) (20), este singiilgwegjí» edificio del Renacimiento fue erigido según los planósdS^S Bartolomeo Bon, del análisis de sus líneas surge una fuerá38§|s te influencia renacentista lombarda, manifiesta tantOjensjaBSS la decoración como en la disposición y variedad dé;I,is¡$ss|a aberturas. El interior exhibe una colección de cinriie’ófagggffi y seis telas de Tintoretto, sobre las que trabajó durantéSrlaffi un período de dieciocho años; un lugar destacado oeugáge||í| "La Crucifixión”, de enorme valor compositivo y adrní¿Wj|g rabie manejo de la luz y el color.
Conocida popularmente como “La Salute", la de Nuestra Señora'de la Salud (21), data del siglo XVII yví;¿jS está considerada como la obra cumbre de Longhena.<EliSgjS|S estilo Barroco, presenta planta octogonal en su principal-^^ffi cuerpo constitutivo. El exterior está revestido con moles blancos; una gran cúpula de original tambor bóligja3jÍ8 gonal, permite desde sus ángulos la inserción de vqh)$¡gH¡¡K circulares que sostienen esculturas, conforman una silüeSsHS . ta eternizada por varios artistas. Fue levantada en agrádg|s|S®| cimiento a la cesación de una peste que cobró casij'í^^ 50.000 víctimas. Al lado, la Aduana del Mar
(25), luce un gran globo dorado que sostiene a la éstajsg®|| tua giratoria de la Fortuna, desde aquí la vista es excelen-'jtS^S te hacia la isla de San Jorge, fácilmente identificable pjftgaBg la Iglesia del Santo (San Giorgio Maggiore) (22), obrái'dejS§S|H Palladio, que con su clásico equilibrio forma otra defas siluetas inolvidables de Venecia.
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Italia.
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Europa.
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Algo retirada del Gran Canal, la Iglesia de San luárríjíiggS San Pablo (Santi Giovanni e Paolo) (23), emplaza sus mas góticas sobre la plaza homónima, este templo cstáV^^ considerado como panteón de los venecianos célebré$M|||| En la plaza que lo precede se alza la magnífica estatúfyéi¡i¡ei ecuestre de Bartolomeo Colleoni, obra que fue concebídfi^^g por Verrocchio, maestro de Leonardo en la segunda tad del siglo XV; está considerada entre las dos mejores7g®|
'Hel mundo en su género, junto al monumento ecuestre ¿laborado por Donatello en Padua.
Hacia el sector opuesto de la Venecia histórica, otro templo gótico, Santa María de ¿os Frailes (Santa Marta ¿Gloriosa dei Frari) (26), también de ladrillos e inacabado, iJa cobijo a una pintura excepcional: “La Asunción”, considerada obra cumbre de Tintoretro.
Venecia posee pocas calles peatonales, por lo que la actividad comercial se vuelca sobre la calle Mercerie y 'áreas contiguas. Desde la estación, comienza la Lista de Spagna, artería que culmina en el “Campo” o Plaza de San Jeremías (S.Geremia) (27), aquí el mayor atractivo lo constituye la visita al cuerpo incorrupto de Santa Lucía- obtenido por los venecianos en Sicilia, el cuerpo de la Santa se secó sin pudrirse, hecho que considerado milagroso atrae un gran número de fíeles y curiosos al lugar.
.. La laguna sobre la que reposa Venecia está separada del mar Adriático por una barrera litoral denominada Zr- do- esta debe su origen a la acumulación de sedimentos fluviales acarreados por el poderoso Po y los ríos confluentes en el golfo.
' Las playas arenosas que enfrentan al mar, así como la persistencia de una tradición hotelera de romanticismo decimonónico, convocan a miles de turistas en la alta temporada; durante este período ferial del año, el Casino abandona los salones invernales del palacio Vendramín para asentarse en las modernas instalacionesdel Lido.
Un acontecimiento singular sucede en el vecino edificio del Palacio del Cine, sede del Festival Internacional de Cinematografía. Otro evento tiene lugar cada dos anos, cuando la ciudad ofrece en el Palacio de las Exposiciones^ Bienal Internacional de Arte, verdadera muestra de vanguardia a nivel mundial.
Cristales y vidrios, antiguos y modernos en sus disenos y concepciones, ofrecen una infinita muestra avalada por siglos de tradición artesanal en la Isla de Murano. Tan lamosa como esta, la pequeña Burano hace las delicias de los compradores y coleccionistas de encajes, manufactura instalada en el lugar desde el siglo XV.
La cercana ciudad de PADUA (PADOVA)» se originó en la romana Patavium, fue fundada en el 89 a. C., pero ya existieron asentamientos protohistóricos de orígenes vénetos y euganeos. Soportó vicisitudes y diferentes dominaciones que dejaron sus influencias culturales, cristalizadas en un excelente y variado patrimonio; no obstante, el carácter de la ciudad es eminentemente véneto. Se la considera como Docta en el Continente, ya que su célebre Universidad fue creada en 1222, donde ejercieron la cátedra San Alberto Magno y Galileo Galilei, entre otros. De sus atractivos turísticos más relevantes, nos vemos obligados a detenernos particularmente en el análisis de la Basílica y la Capilla Scrovegni.
El espacio sobre el que se asoma la Basílica es conocido localmente como Plaza del Santo, seca. e imponente, sólo el Duomo realza su altura ya que los demás edificios que la enmarcan son relativamente bajos, uniformes y se equilibran entre sí por los porticados que las caracterizan. Sobre un costado de la fachada una soberbia escultura a caballo, una de las dos más representativas del Renacimiento, agrega un motivo más que elocuente para ■ justificar la visita. Se trata de la estatua ecuestre de Eras- mo de Narni, conocido como el “Gattamelata”, por la astucia felina que caracterizó a este sagaz gobernante y militar. La obra fue encargada a Donatello por la. viuda y ejecutada en 1453, es un trabajo de la madurez del artista que refleja su inspiración en obras clásicas precedentes; la obra corona un doble pedestal con relieves laterales de escudos heráldicos con ángeles tenantes.
Iniciado en 1232, el Duomo ofrece una combinación de elementos románicos, góticos y bizantinos perfectamente equilibrados, pese a su diversidad.La fachada de corte triangular obedece a la tradición románica del país, es ausrera, ya que sólo la dinamizan cuatro arcadas apuntadas casi ciegas. Sólo una galería de arquitos y balcón, separan el tímpano con óculos y bíforas laterales. Siete cúpulas de tambor cilindrico y media naranja coronan el edificio; la central más alta, exhibe un tronco de cono y aguda linterna.
El interior a cruz latina se divide en tres naves con galerías laterales sobre las paredes. La Capilla de las Reliquias, ubicada en el períbolo y conocida también como el Tesoro, ofrece una de las más valoradas reliquias: la Lengua de San Antonio, mantenida incorrupta a lo largo de casi 800 años. Sobre el crucero izquierdo, la Capilla del Arca del Santo es uno de los sitios venerados, ya que contiene la urna con sus despojos. En eí presbiterio, el Altar Mayor muestra1 obras de Donatello como el “Cristo Crucificado”, de gran valor dramático; “La Virgen con el Niño”, enmarcada por los Santos Antonio, Justina y Prosdócímo por una parte, y por la otra lo hacen las figuras de San Francisco, Daniel y Luis Obispo. Tres claustros complementan la visita a éste, el segundo templo erigido por la orden Franciscana a lo largo de la historia.
AJgo alejada de la Plaza del Samo, la Capilla de los Scrovegni está situada en los terrenos sobre los que se levantaba un anfiteatro romano del que sólo sobreviven vestigios. Construida con una nave de corte basilical y dimensiones reducidas, es sin embargo tenida como la “Capilla Sixtina” de Giotto, con sus treinta y ocho frescos. Sobre las paredes pueden verse las escenas dedicadas a la Vida de la Virgen, que ocupan el nivel superior. En el intermedio dominan las de la Vida de Jesús; mientras que las pinturas que evocan a Pentecostés, la Ascensión y la Pasión ocupan el tramo basal. El “Juicio Universal”, la “Fug?t a Egipto” y la “Deposición”, son fieles testimonios de equilibrio compositivo, un maravilloso manejo de los colores y una expresividad que anuncia el rompimiento de las cadenas que sujetaron a la pintura medieval.
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marcan
 el acceso, sostienen una planta con perfectas ’bf foras, cuya proporción con las paredes pintadas y tras decoradas, configuran un todo sobrio impregnados de nobleza. Rematan el edificio una serie de esculturas
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Veroneses 
célebres, tales como Cátulo, Plinio, Vitrubioy* otros. Los Palacios Comunal y de Justicia datan 
de los si-
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)Sobre las riberas del Adigio (Adige), enmarcada por los Alpes y dispuesta sobre bellas colinas surge VERO- ÑA. Por su disposición geográfica, es considerada un verdadero centro geopolítico regional. Sobresalió en el Medioevo y el Renacimiento, para pasar luego a depender de Venecia y Milán; ios austríacos ocuparon la ciudad a partir de 1814 y sufrió las vicisitudes que conllevaron a la unidad de Italia. Hoy, es punto de partida para el circuito lacustre, de ski alpino y eje de comunicaciones hacia el centro de Europa.
La Plaza Bra (Piazza Bra), marca sin duda el centro dinámico de la ciudad, muy animado por numerosos bares y restaurantes que enfrentan a la célebre Arena, segundo anfiteatro en tamaño construido por los romanos después del Coliseo. Su interior parcialmente restaurado, obedece al uso como teatro al aire libre, siendo su temporada lírica estival la más importante del mundo.
La configuración del espacio urbano del área central es compleja, consta de varias plazas secas ínterconectadas por calles serpenteantes, angostas, de fuerte sabor medieval y renacentista. El lugar del antiguo Foro Romano está hoy ocupado por la Plaza de las Hierbas (Piazza degli Erve), que cobra inusitada animación cuando se convierte en feria de flores, frutas y hortalizas. Una columna triunfal ofrece su simbología del antiguo poder veneciano, mientras que severos y elegantes palacios erigidos durante el Renacimiento, cierran armónicamente los laterales, entre ellos el Maffei y la Casa de los Mercaderes.
Sobre la angosta y vetusta Vía Cappello, en el número 23, la literatura sitúa la casa en la que vivió Julieta, personaje emergido de la pluma de Shakespeare, que tiñó la ciudad de sombras trágicas y romanticismo perenne, surgido de su amor por Romeo, al que también se le adjudica una casa paterna.
Una vez transpuesto el Arco de la Costa, se llega a la Plaza de los Señores (Piazza.dei Signori), con aspecto de salón al aire libre; en el centro domina la estatua de Dante Alighieri, padre de la lengua y la literatura italianas. La planta rectangular concebida con racional criterio, permite el lucimiento de los edificios que la rodean, creando visualmente un marco onírico, casi teatral. El palacio denominado del Conseja (loggia del Consiglio), es el más elegante del conjunto, ocho arcos con dos escalinatas
gios XII, XIII y XVI; muy próximas, volcadas sobre la- misma calle aparecen las fantasmagóricas Arcas Escaliggé ras, verdadero panteón mandado a construir por los dé^ Ha Scala, señores de Verona entre 1260 y 1387 Uní magnífica verja de hierro encierra el área ocupada por>és^ tos monumentos que en sí mismos, son templetes góti-* eos que coronan a la manera de dosel a los sarcófagos-sé-* pulcrales, sobre los que invariablemente, aparecen los- personajes dos veces, en la típica posición de la muerte^ pero también en posición guerrera, dominando la alturí ’ de los pináculos.
Reconocible por sus seis torres cuadradas con grué-?¿ sos muros almenados, el Castillo Viejo (Castelvecchio), Riel erigido por deseo de Cangrande della Scala en 1345, Iue-3¡ go modificado por los Visconti y mutilado por los fraiS^ ceses; aloja hoy la más importante pinacoteca de Verona;a mostrando a jefes de escuela de la pintura gótica como': Pisanello, hastalos maestros venecianos que constituyen? su principal atractivo; entre las obras expuestas, la ‘Sagrada Familia”, de Mantegna; el “Descendimiento’, deh Veronés; “La Virgen de la Codorniz” debida a Pisanello < y la del “Rosal”, por Stefano de Verona, están entredós?; trabajos más destacados.
Anexo al castillo, el Puente Fortificado denominad® Scaligero, se extiende potente sobre el río Adigio, la esí.; ttuecura apoya sobre pilares poligonales, que a su vez so^ portan torres adornadas con almenaje gibelino en ‘cola* de golondrina”, tipo de coronamiento que caracteriza ay todo el puente y lo empalma con el castillo del que parent, ce formar una escenográfica prolongación.
De las varias iglesias de estilo Románico, San Zenon., (San Zeno), representa quizás su mayor exponente; dj edificio tal como aparece en la actualidad fue iniciado en< 1120, pero su mayor modificación corresponde al siglo? XIV, en que el ábside y la magnífica bóveda de madera.; fueron rehechas en estilo Gótico, La fachada domina la . plaza, flanqueada por una torre cuadrangular almenada i del siglo XIII y el airoso campanario separado del cuerpo^ de la iglesia; éste fue aligerado en su aspecto visual por¿ motivos geométricos horizontales, la parte superior en-: cambio disminuye su masa por el empleo de dos arcadas superpuestas de tres aberturas cada una. Triangular en su, concepción integral, la fachada es simple; la puerca central está sostenida por columnas que reposan sobre Icones echados, justamente el atrio protege una de las joyas £ ¿Je Ja iglesia: la puerta, original de madera, recubierta por £ cuarterones de bronce con magníficos relieves de época, ^muestran la evolución escultórica entre los siglos XI y
XII- Variadas son las representaciones que versan sobre ? motivos bíblicos, el Juicio Final y escenas de la vida de
San Zenón.
El interior, austero y sólido está dividido en tres naves delimitadas por gruesos pilares cruciformes alterñá- ■ dos con esbeltas columnas, entre ambos sostienen la arquería de medio punto. Gótico en su concepción, el ábside alberga otro tesoro consistente en el fabuloso Tríptico de Andrea Mantegna, el lienzo central exhibe a la Virgen con el Niño rodeada de angelotes músicos y canto
res, una verdadera sinfonía armónica del color.
VICENZA, surge sobre la llanura, al pie de los pre- Alpes. Dominada por los venecianos, alcanzó enorme prosperidad derivada de su particular posición geográfica. Testigos de tal ciclo son los magníficos edificios que la caracterizan, el valor de los mismos hizo que se le diera el nada deshonroso apelativo de la “Venecia Terrestre”.
Andrea Palladio, paduano por nacimiento, creó la gran última escuela del Renacimiento, de enorme trascendencia en su país y en el ámbito de las Islas Británicas desde donde fue proyectada a la América Anglosajona. Inspirado en Vicrubio, arquitecto de la época augus- tea, estableció una versión propia denominada.Estilo Pa- Uadiano.
Vicenza goza de gran número de obras del maestro y su discípulo Scamozzi; a lo largo de la avenida que lleva el nombre del arquitecto aparecen varios palacios de su propia autoría y escuela.
La mayor importancia recae sobre el imponente edificio denominado "La Basílica”, que en realidad no cumplió funciones religiosas. Un lado de la Plaza de los Señores (Piazza dei Signori), está dominada por esta colosal estructura, que sin duda resulta ser la envoltura de una construcción precedente. Palladio fue el elegido éntre los varios arquitectos de lama que presentaron otros tantos proyectos. Dos fajas horizontales dominan la composición arquitectónica, creando un gran efecto escenográfico de carácter intradimensional, sustentado en la articulación de elementos repetitivos en la planta baja y la noble, respectivamente. Son arcos de triunfo superpuestos e idénticos con tres aberturas, la central en arco, las laterales rectas y más bajas presentan óculos en cada paño. Varía sí, el orden establecido, siendo el basal Toscano y el superior Jónico, en ambos casos las columnas adosadas entre los arcos repiten el mismo ordenamiento. Una gran balconada remata la parte superior y los pilares terminales ostentan elegantes esculturas. Pero es en el Teatro Olímpico donde se perciben las conclusiones próximas al final de la vida del artista, sobre todo aquellas que derivadas de sus viajes de estudio a Roma. Palladio logra crear un sentido unitario y armónico del teatro antiguo, relacionando así el proscenio como eje de coordinación entre la cávea, gradería y loggia. La escena fija, una de las más bellas en su género logra un notable efecto óptico de la perspectiva atribuido al continuador de la obra, el ar- qüit’écfo’Scamózzi.
La región véneta cuenta con varias villas campestres que integran un interesante circuito, entre ellas, algunas • sobresalen tanto por la relación de la arquitectura con los espacios verdes que las acompañan, así como por los tesoros artísticos conservados en sus magníficos interiores.
Hemos seleccionado algunas posibilidades de visita acordes a la importancia de las villas en su conjunto. La llamada Valmarana, denominada también de los Enanos por las estatuas que complementan su decoración, es célebre por los frescos de Juan Bautista Tiepolo que lucen en el Atrio y en las Salas de Ifigenia y Orlando Furioso. Pero la Villa modelo de difusión de la concepción Palla- diana, es conocida como Almerico Capra, o simplemente la Rotonda. Está configurada por una planta cuadrangu- lar con salón redondo en el centro del que parten cuatro brazos a la manera de cruz griega, cada uno prolonga ex- teriormente en cuatro atrios idénticos cubiertos por una galería sostenida por seis columnas del orden Jónico, que soportan frontis triangulares decorados con esculturas. El esquema es repetido flanqueando las cuatro escalinatas de veinte peldaños que conducen a la planta noble.
RAVENA (RAVENNA), antiguo puerto y hoy ciudad interior, alcanzó la fama por su patrimonio que le ha valido el apelativo de “Bizancio de Occidente”, ya que confluyen aquí las influencias del Románico Occidental con los refinamientos aportados por el Bizantinismo. El primitivo asentamiento urbano estuvo caracterizado por viviendas paíafíricas levantadas por pobladores de probable origen umbro. Durante el Imperio Romano, la estratégica posición de la vecina Classe y su puerto militar, evocan la posición estratégica de esta ciudad que llegó a convertirse en capital del Imperio Romano de Occidente, así como sede principal de los reyes.germánicos de estirpe Ostrogoda y Érula. Brilló entonces Ravena durante los siglos V y VI como lo testimonian sus originales construcciones que, con modificaciones parciales subsisten hasta la actualidad.
Recorriéndola, entre sus muchos atractivos inmersos en el lánguido paisaje de la llanura Badana, el visitante transcurre su estadía en una atmósfera tranquila y apacible. Variada en su concepción respecto de las plantas arquitectónicas, Ravena ofrece desde las basilicales con ábside sin crucero, hasta las complejas realizadas con crite rio centralizante. Es evidente la relación entre el tipo Ro- mano-paleocristiano con los principios centralizadores simétricos del puro Bizantinismo. Los interiores confluyen a potenciar el sentido de la infinidad espacial, conjugado con un ritmo permanentemente lineal de las superficies. Trascendente resultará pues, la influencia ravenesa en los artistas del ciclo Románico, sobre todo en la concepción poligonal de los ábsides y otros elementos como la calla de capiteles y el uso del arco pulvino.
Seleccionamos a continuación una serie de edificios, que por su valor constituyen el patrimonio más sobresaliente de la ciudad como la Iglesia de San Vital (San V7- tale), cuyo nombre evoca al Santo originario de Lírica que evangelizó la región y murió por su fe. Fue consagrada por el arzobispo Maximiano en el 547; en su concepción intervienen elementos tardo romanos, pero se perfila un predominio bizantino. Esta estructura octogonal, está coronada por una cúpula de la misma forma que sostiene tina pirámide de