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vesículas especiales recubiertas por dos complejos proteicos: la clatrina y las proteínas adaptadoras, para dirigirlas hacia los endosomas tardíos (Fig. 26-13). La clatrina es una proteí- na con tres cadenas pesadas y tres ligeras que forma una estructura llamada trisquelión. Se ensambla en la cara cito- plasmática de la vesícula formando una red que distorsiona la membrana del Trans-Golgi y junto con las adaptadoras facili- ta la gemación. Las proteínas adaptadoras son complejos mul- tiproteicos necesarios, tanto para unir el revestimiento de la cla- trina a la membrana de la vesícula, como para seleccionar la carga del interior de la vesícula, pues reconocen una secuencia señal de aminoácidos fosforilados en el extremo carboxilo ter- minal citosólico del receptor de Man6P. La gemación requiere de una proteína ARF con actividad GTPasa y el brote lo facili- ta otra proteína, la dinamina, que también hidroliza GTP y disocia la vesícula de la membrana del Golgi. El revestimiento de clatrina se pierde después de la gemación y antes de la fusión con el endosoma, en un proceso dependiente de energía. La fusión con los endosomas tardíos está facilitada por los receptores v-SNARE y t-SNARE y por la actividad GTPasa de proteínas de la familia Rab. El pH de los endosomas, más ácido que el de las vesículas, contribuye a liberar a las proteí- nas lisosomales del receptor, y a ese pH las hidrolasas comien- zan a degradar el material contenido en el endosoma. Una fos- fatasa hidroliza el Pi de la Man6P de las enzimas para asegurar que no vuelvan a ser reconocidas por el receptor. Dos tipos de vesículas parten desde los endosomas tardíos: unas contienen las enzimas hidrolíticas que se fusionan con los lisosomas mientras que los receptores son reciclados a la red trans del Golgi en unas vesículas de transporte retrógrado específicas. El proceso de marcaje y clasificación de las enzimas liso- sómicas es un acontecimiento muy importante de la biología de una célula, ya que determina la capacidad hidrolítica del orgánulo. Unos trastornos genéticos denominados enferme- dades por almacenamiento lisosómico, son debidos a la defi- ciencia de una o más enzimas lisosomales (Recuadro 26-2). 26.3.6 Biosíntesis de las O-glicoproteínas La O-glicosilación transcurre en el Golgi y es una modifica- ción más sencilla que la N-glicosilación. Las glicosil trans- ferasas responsables de la O-glicosilación están asociadas a 462 | Biología molecular y celular Figura 26-12. Modificación del N-oligosacárido de las proteínas lisosomales en las cisternas del Golgi. Los N-glicanos de las pro- teínas lisosomales que proceden del RE se marcan en el cis-Golgi mediante el reconocimiento de una conformación específica por parte de la N-acetil glucosamina-1-fosfato transferasa. Esta enzima reconoce una región señal en las proteínas lisosomales e incorpora el precursor del marcador Man6P. Las proteínas que contienen esta marca serán enviadas a los endosomas. Cis -Golgi UMP Man8-NAcGIc2 NAcGIc -1-P-transferasa NAcGIc -1-P-fosfodiesterasa P (en varias manosas específicas para la transferasa) Man6P medial Hacia el trans-Golgi UDP UDP-NAcGlc Asn UDP UDP-NAcGlc Asn Asn AsnAsn Transportador 26 Capitulo 26 8/4/05 11:53 Página 462 BIOQUÍMICA Y BIOLOGÍA MOLECULAR (...) CONTENIDO PARTE II: BIOLOGÍA Y PATOLOGÍA MOLECULAR SECCIÓN VI BIOLOGÍA MOLECULAR Y CELULAR 26 MODIFICACIÓN POSTRADUCCIONAL Y TRÁFICO INTRACELULAR DE PROTEÍNAS 26.3 LA RUTA BIOSINTÉTICA-SECRETORA 26.3.6 Biosíntesis de las O-glicoproteínas
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