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estructuras y funciones relacionadas en tiempo y espacio a muy diversos niveles de integración. Existen más de 200 tipos celulares diferentes, sin contar los presentes en el sis- tema nervioso. Estos diferentes tipos celulares cumplen funciones distintas y complementarias, siendo necesario que su contribución se coordine con las necesidades reales del conjunto, esto es, del individuo. Los sistemas nervioso y endocrino son los encargados de regular el conjunto, aunque existen otros muchos sistemas de regulación pre- sentes en el interior de las propias células, en microam- bientes locales, etc. Además, procesos y funciones se activan o desactivan en función de circunstancias ambien- tales, condicionamientos sociales, situaciones de emergen- cia, etc. Principalmente en la última sección de este libro se consideran situaciones del entorno físico, individuales y sociales en las que la compleja maquinaria orgánica inter- viene como un todo. Rangos funcionales, aclimatación y adaptación Cada variable fisiológica permite una determinada variación en relación con su valor medio. El rango de esta variación depende de muchos factores, y no es igual para todas las variables conocidas. Por ejemplo, el pH sanguíneo acepta muy limitados cambios sobre su valor medio. Otras estructuras presentan un mayor factor de seguridad. El tubo digestivo puede ser resecado hasta casi la mitad de su longitud sin comprometer la supervi- vencia del individuo. Esto no quiere decir, como se advir- tió más arriba, que se pueda interpretar como superfluo en un 50%; baste considerar la considerable mejora en la alimentación humana en los últimos 50 años y la situa- ción alimentaria para nuestra especie hace por ejemplo 5000 años. Pero sí es cierto que los factores de seguridad para determinadas estructuras, funciones y estados son muy diferentes. Existen mecanismos en el organismo que pueden ser activados para aclimatarlo a situaciones ambientales muy distintas de las usuales. Ejemplo típico es el proceso de adaptación a la altitud (véase Capítulo 53). Estos mecanis- mos pueden ser muy dispares entre sí y ponerse de mani- fiesto a corto, medio o largo plazos. Por ejemplo, en la regulación de la temperatura corporal intervienen procesos fisiológicos celulares (modificación de la actividad mito- condrial), regionales (vasodilatación, vasoconstricción), mecanismos hormonales (mayor o menor liberación de hormona tiroidea) o el individuo completo (ponerse a la sombra o al sol). El término adaptación debería reservarse para las situaciones en las que se produce un cambio en el genoma de una especie que supone alguna ventaja para los que lo heredan. Tal vez tenga también valor adaptativo la presen- cia de estructuras y o funciones carentes de sentido bioló- gico. Esta indefinición morfofuncional las hace susceptibles de una utilidad en potencia, si se presenta el caso. A PROPÓSITO DE ESTE LIBRO Por sus orígenes anatómicos y médicos, es tradicional que los manuales de Fisiología Humana se organicen siguiendo los distintos órganos, aparatos o sistemas. En este sentido, este manual no es una excepción. Sin embar- go, se encarece al lector que trate siempre de hacer una integración mental de lo que lee, rescatando lo que es fun- cional de su soporte estructural. Así, las secciones sucesi- vas dedicadas, por ejemplo, al sistema nervioso, sistema circulatorio y sistema digestivo deben también entenderse en términos de procesamiento de información, transporte, nutrición y metabolismo. Como es lógico, la enorme infor- mación disponible acerca de la Fisiología Humana obliga a seguir una sistematización en su presentación, lo que supone un cierto carácter disgregador. No obstante, con la lectura progresiva se irá alcanzando una perspectiva de conjunto. Los datos, descripciones e interacciones locali- zadas representan primeros planos o breves escenas que sólo toman un sentido completo una vez terminada la lec- tura completa del libro. Aunque este libro se centra en el estudio de la Fisio- logía Humana, es evidente que muchos de los datos y mecanismos que en él se describen proceden de estudios experimentales realizados en especies próximas a la nues- tra. En realidad, innumerables procesos, funciones y mecanismos son básicamente similares para todas las especies animales. Y en lo referente a las diferencias, siempre se comprenderá de un modo más completo el fun- cionamiento de nuestro organismo entendiendo cómo funcionan otros seres vivos. Cuando los conocimientos actuales así lo permiten, se ha incluido una descripción de aspectos fisiopatológicos con una doble finalidad: iniciar al lector en el conocimien- to de los procesos funcionales subyacentes a distintos pro- cesos patológicos e ilustrarlo sobre las diferentes posibilidades de funcionamiento, anómalo o no, que se manifiestan cuando se altera la integridad funcional del organismo. En numerosas ocasiones, los síntomas caracte- rísticos de un proceso patológico aparecen cuando se supe- ran los rangos funcionales, desapareciendo al tiempo la capacidad para compensarlos. En este sentido un buen conocimiento de la fisiología de un órgano o sistema pue- de poner sobre la pista de lo que se avecina; sería como decir que las tendencias van por delante de los hechos. Así pues, actuando con previsión se puede evitar, a veces, la aparición de un síntoma. El libro se ha dividido en diez grandes partes. En la primera (FISIOLOGÍA GENERAL Y CELULAR) se con- sideran los aspectos básicos que caracterizan a las células excitables, principalmente la neurona y la fibra muscular. Entre los Capítulos 4 a 11 (segunda parte: NEUROFISIO- LOGÍA I) se presenta una visión sucinta de los conoci- mientos básicos existentes acerca del funcionamiento del sistema nervioso, desde los mecanismos de la comunica- ción neuronal, hasta la organización de los sistemas moto- res. También se presenta un panorama actualizado de las funciones nerviosas superiores. La tercera parte (Capítulos C O N C E P T O Y C O N T E N I D O D E L A F I S I O L O G Í A 11
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