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Hormonas gastrointestinales

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79
Hormonas gastrointestinales
José María Remes Troche, Federico Bernhardo Roesch Dietlen
Múltiples péptidos se sintetizan y liberan en el tracto 
gastrointestinal. Aunque sus funciones en la regulación 
de los procesos gastrointestinales se han descrito desde 
hace muchos años, se ha reconocido que algunas de estas 
hormonas juegan un papel fundamental en el control de 
la saciedad y el apetito. El conocimiento de cómo el eje 
neurohormonal entre el intestino y el cerebro regula la 
homeostasis energética ha avanzado de manera significa-
tiva en los últimos años. Por ejemplo, se ha reconocido 
que la grelina, un péptido orexigénico que se produce en 
el estómago, parece ser responsable en el acto de iniciar 
la ingesta de alimentos. Existen otras hormonas cuya fun-
ción es la inducción de la saciedad, entre las que destacan 
el péptido YY, polipéptido pancreático (PP), péptido si-
milar al glucagón tipo 1 (GLP-1), oxintomodulina y co-
lecistocinina (figura 79-1). 
En este capítulo se revisan las principales funciones 
de las hormonas gastrointestinales, haciendo énfasis es-
pecial en su papel en el control del apetito y saciedad.
GENERALIDADES
Todas las hormonas gastrointestinales se originan en el 
sistema APUD (del inglés, Amine Precursor Uptake and 
Decarboxilation), descrito por Pearse en 1966, quien se-
ñaló las características bioquímicas y ultraestructurales 
de las células endocrinas, que, en la actualidad se sabe, 
tienen su origen en el endodermo intestinal.
Las hormonas se sintetizan en las células endocrinas, 
desde el extremo aminoterminal como prehormonas, se 
translocan en el ribosoma y se procesan en el aparato 
de Golgi para, al final, incluirse en gránulos secretorios 
en los cuales se produce la acetilación, la aminación y la 
escisión de las moléculas precursoras.
Las hormonas gastrointestinales tienen una función 
específica relacionada con la absorción, la digestión de 
los alimentos y con el destino final de los diversos nu-
trientes. Para que el mensaje se transmita a los sitios efec-
tores de la célula, son necesarios sistemas especiales de 
señales para la transferencia de información. Esta señal 
no se transmite de manera uniforme a la célula sino que 
se restringe a ciertas regiones específicas de la misma, lo 
cual permite que la célula regule de manera simultánea 
procesos independientes en la membrana, el citoplasma 
o el núcleo.
De acuerdo con la distancia de transmisión de señal 
entre las células y la comunicación intracelular las hor-
monas se han clasificado como: a) autocrinas, cuando la 
hormona actúa en la célula que la produce, b) paracrinas, 
cuando se liberan hacia el líquido intersticial y afectan a 
las células cercanas, y c) endocrinas, cuando circulan en 
la sangre con el fin de alcanzar una célula diana.
Las células endocrinas que se localizan en la mucosa 
gastrointestinal tienen diferente origen endodérmico y, 
por tanto, su función es distinta (cuadro 79-1).
Se han descrito numerosas hormonas que tienen ac-
ción en el sistema gastrointestinal. Las principales son las 
siguientes, y se pueden clasificar en tres grandes grupos:
1. Péptidos neuronales y hormonales, entre los cuales 
se han aislado gastrina, secretina, motilina y péptido 
pancreático.
2. Los pequeños neurotransmisores o agentes paracri-
nos, como colecistocinina, somatostatina y péptido 
intestinal vasoactivo (VIP).
3. Los moduladores no peptídicos, como acetilcolina, 
histamina, óxido nítrico (NO) y prostaglandinas.
Es característica general de todos los péptidos hormo-
nales que sean solubles en agua y muy potentes a las 
reacciones de dosis-respuesta. Circulan a muy bajas 
concentraciones y no están unidos con proteínas trans-
portadoras. Su estimulación origina un aumento rápido 
de sus valores plasmáticos y la actividad biológica del ór-
gano diana es evidente en segundos o minutos. Cuando 
se inhibe la secreción hormonal (feedback o retroalimen-
tación) las concentraciones plasmáticas disminuyen con 
rapidez, por lo general, en pocos minutos.
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Hormonas gastrointestinales 851
Para integrar las funciones en el organismo se cono-
cen dos formas esenciales: la química, constituida por las 
hormonas transportadas por la circulación hasta los órga-
nos diana y los tejidos (en donde regulan y dirigen reac-
ciones específicas); y la nerviosa, la cual es indispensable 
para que el mensaje se transmita de los sitios efectores 
a través de un sistema de regulación coordinado desde 
el sistema nervioso central (SNC) hasta el órgano diana.
PÉPTIDOS NEURONALES 
Y HORMONALES
Gastrina
En 1905, Edkins descubrió un potente secretagogo del 
ácido gástrico en un extracto de la mucosa antral, al cual 
denominó gastrina; aunque al principio no fue posible 
determinar si el extracto tenía histamina, su confirma-
ción se estableció en 1960, cuando Gregory aisló un pép-
tido, identificó la secuencia de sus aminoácidos y se pudo 
sintetizar la hormona. La gastrina existe en tres formas 
con actividad biológica que permiten diferenciarla de 
acuerdo con el número de sus aminoácidos, las cuales 
se conocen como: gastrina pequeña con 14, gastrina in-
termedia con 17 y gastrina grande con 34 aminoácidos. 
La porción con actividad biológica de la molécula com-
prende los 14 aminoácidos del extremo carboxilo y la 
secuencia es idéntica en las tres formas. Se secreta en 
forma inactiva y la conversión a forma activa requiere de 
una enzima desaminante.
Un 90% de la gastrina se encuentra en las células G 
del antro gástrico y el resto en el duodeno. Aunque se ha 
descubierto que el páncreas fetal es capaz de producirla, 
esta capacidad se pierde al nacimiento. Su concentración 
sérica se puede medir con radioinmunoanálisis. Las cifras 
normales en condiciones basales en ayunas son de 21 a 
105 pg/mL y aumenta hasta 42 a 84 pg/mL después de 
30 min de haber ingerido alimentos.
La liberación de gastrina la promueven ciertos es-
timulantes, como el calcio (Ca), la cerveza, el vino y el 
café, así como alimentos, como las proteínas digeridas en 
forma de péptidos y aminoácidos; el contenido gástrico 
con pH < 1, la distensión del antro; la administración 
de Ca y magnesio; la hormona del crecimiento (GH); 
la adrenalina y la bombesina. Su inhibición aparece con 
la ingesta de carbohidratos, grasas y la alcalinización del 
antro con pH > 2.5 o la administración de somatostatina, 
glucagón, secretina y péptido intestinal vasoactivo. Al pa-
recer, este mecanismo lo median las neurohormonas del 
sistema nervioso entérico, las células paracrinas vecinas o 
el contenido gástrico.
Figura 79-1. Principales sitios de síntesis de los péptidos y hormonas gastrointestinales involucradas en la regulación de la saciedad y el 
apetito. Se muestran los principales sitios en donde se producen las hormonas gastrointestinales, sin embargo, muchas de estas moléculas 
se detectan en la totalidad del tracto digestivo, pero en concentraciones menores. Además, cabe destacar, que la mayoría de estas sustancias 
también se producen en el sistema nervioso central.
Esófago
Estómago
Grelina
Leptina
Motilina
Gastrina
Duodeno
CCK
Yeyuno
Grelina
Íleon
GLP-1
PYY
Oxintomodulina
Páncreas
Glucagón
Insulina
PP
Amilina
Colon
GLP-1
PYY
Oxintomodulina
Intestino
delgado
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852  •  Endocrinología clínica de. . . (Capítulo 79)
Las principales acciones de la gastrina son la estimu-
lación de la secreción ácida gástrica y el crecimiento de 
las células parietales; asimismo, incrementa la irrigación 
sanguínea de la mucosa gástrica y la liberación de pepsi-
na.Su principal utilidad clínica, es en el diagnóstico del 
síndrome de Zollinger Ellison, producido por un gastri-
noma, cuando se logran demostrar cifras > 800 pg/mL 
(cuadro 79-2).
Grelina
La grelina es el único agente orexígenico circulante en el 
cuerpo. En contraste, todas las demás hormonas y pép-
tidos que regulan el equilibrio energético tienen como 
función restringir la ingesta de alimentos y aumentar el 
peso corporal. Esta hormona se descubrió como un ligan-
do endógeno del receptor secretor de la hormona del cre-
cimiento (GHS-R1a). Sin embargo, desde su descripción 
inicial se demostró que tiene un efecto independiente 
de la hormona del crecimiento para estimular la ingesta 
de alimentos e incrementar el peso. Desde entonces, esta 
hormona ha sido el blanco de múltiples investigaciones 
sobre obesidad y equilibrio energético.
La grelina es un péptido de 28 aminoácidos derivado 
de la escisión de su precursor, la pre-pro-grelina. Se sin-
tetiza principalmente en las células endocrinas del estó-
mago, denominadas X/A o células de grelina, localizadas 
en el fondo gástrico. Cerca de tres cuartos de la grelina 
circulante es de origen gástrico, mientras que la parte 
restante se produce en el intestino delgado, de manera 
principal en el duodeno, y en menores concentraciones 
en el intestino distal. La grelina actúa a través de su re-
ceptor clásico, GHS-R1a, el cual se expresa en el SNC 
en las áreas que se encargan de la regulación del apetito 
y la energía, incluyendo los núcleos hipotalámicos, los 
complejos vagales dorsales y el sistema dopaminérgico 
mesolímbico. En la perifería, estos receptores se expresan 
en la hipófisis, y desde el punto de vista farmacológico, 
la grelina actúa en el nivel hipofisario e hipotalámico 
para estimular con potencia la secreción de hormona del 
crecimiento. Otros sitios en los que se han descrito re-
ceptores para grelina son miocardio, estómago, intestino, 
páncreas, colon, tejido adiposo, riñón, placenta y células 
T. Múltiples efectos biológicos equivalentes se han atri-
buido a la administración exógena de grelina, por ejem-
plo, regulación en la homeostasis de la glucosa, motilidad 
gastrointestinal, secreción pancreática exocrina, inmuni-
dad e inflamación.
Cuando se administra en el SNC, la grelina estimu-
la la ingesta de alimentos con la misma potencia como 
el péptido NPY, considerado el más orexigénico antes 
del descubrimiento de la grelina. Múltiples estudios han 
puesto en evidencia que la grelina es la responsable de la 
sensación de hambre preprandial. Las acciones exógenas 
de la grelina cumplen con uno de los postulados para 
considerar a una sustancia como iniciador en el proceso 
de ingesta de alimentos, esto es, estimula el apetito cuan-
Cuadro 79-1. Principales hormonas gastrointestinales 
y sus sitios de síntesis y producción
Órgano Hormonas Tipo de célula 
neuroendocrina
Estómago Gastrina
Somatostatina
Grelina
Motilina
G
D
X/A
M
Duodeno y yeyuno Secretina
Colecistocinina
Somatostatina
Motilina
GLP-1
PP
PYY
Oxintomodulina
S
I
D
M
L
L
L
L
Íleon y colon Enteroglucagón
PYY
Neurotensina
Somatostatina
GLP-1
PP
PYY
Oxintomodulina
L
L
N
D
L
L
L
L
Páncreas Insulina
Glucagón
PP
Somatostatina
B
A
D1
D
Cuadro 79-2. Hormonas gastrointestinales 
y sus aplicaciones clínicas
Hormona Aplicaciones
•	Gastrina	 y	 penta-
gastrina
Medición de la secreción de ácido clorhí- 
drico
•	Secretina Medición de la secreción pancreática má- 
xima
Pruebas de estimulación para detección de 
tumores neuroendocrinos (gastrinoma, VI-
Poma, otros)
•	Colecistocinina Vaciamiento de la vesícula biliar y facilita la 
realización de estudios que visualizan las 
vías biliares
•	VIP Detección de VIPoma ante la sospecha clí-
nica
•	Somatostatina	 y	
análogos de la 
somatostaina (oc-
treotide)
Diagnóstico de somatostatinoma
Tratamiento de fístulas intestinales
Control de diarrea secretora
Manejo de sangrado variceal por hiperten-
sión portal hemorrágica
•	Motilina	 y	 agonis-
tas de la motilina 
(eritromicina)
Aumentar el vaciamiento gástrico en perso-
nas con gastroparesia diabética, quirúrgi-
ca o viral
•	Grelina Estimulante del apetito, su inhibición produ-
ce disminución de peso
•	GLP-1,	 oxintomo-
dulina
Anorexigénicos utilizados para el tratamien-
to de la obesidad (en evaluación clínica en 
la actualidad)
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Hormonas gastrointestinales 853
do se administra de manera sistemática a dosis similares a 
aquellas que se encuentran en el estado de ayuno y cuan-
do hay hambre. El tiempo de acción es rápido y su dura-
ción, corta. Los valores basales de grelina se encuentran 
bastante elevados en pacientes que en forma voluntaria 
se deprivan de la ingesta de alimentos. También se ha 
descrito que las concentraciones plasmáticas de grelina 
se correlacionan de manera directa con la intensidad del 
hambre. En la etapa posprandial los valores de grelina se 
suprimen en relación directa con las calorías ingeridas. 
Los lípidos suprimen con menos potencia la grelina que 
los carbohidratos y las proteínas. 
Además de su papel en la ingesta de alimentos, la 
grelina parece participar en el equilibrio energético a 
largo plazo. En humanos, las concentraciones de grelina 
se correlacionan a la inversa con la adiposidad, siendo 
menores en personas obesas, elevadas en delgadas, y muy 
marcado el aumento en los pacientes caquécticos. Ésto se 
debe interpretar como una respuesta adaptativa para res-
tringir la sobrealimentación en obesos y para estimular el 
apetito en caquécticos. Así pues, la grelina se comporta 
en forma opuesta a la leptina, reflejando el estado nutri-
cional y los depósitos de grasa en el cuerpo, suponiendo 
así que esta hormona participa en el mantenimiento del 
peso corporal a largo plazo. Una excepción de estas ob-
servaciones es el síndrome de Prader-Willi, ya que estas 
personas tienen valores muy elevados de grelina, lo que 
contribuye a la obesidad.
Debido al papel que tiene esta hormona en el con-
trol del apetito y el peso corporal, su inhibición tiene 
implicaciones terapéuticas, en especial para aumentar la 
perdida de peso y prevenir ganancia ponderal después de 
dietas que reducen el peso de manera significativa cuan-
do las concentraciones de grelina suelen aumentar.
Secretina
La secretina es el prototipo de hormona gastrointestinal; 
se descubrió en 1902 al demostrar Starling y Bayliss que 
la acidificación yeyunal o la inyección intravenosa de 
extractos de mucosa yeyunal, estimulaban la secreción 
de agua y bicarbonato por el páncreas. Jopes y Mutt la 
aislaron en 1961 y más tarde, en 1966, identificaron la 
secuencia de sus aminoácidos.
Sólo se ha podido identificar un tipo de secretina, 
un polipéptido básico de 27 aminoácidos que contiene 
cuatro argininas y una histidina. Su estructura es similar 
a la de glucagón, VIP, péptido inhibidor gástrico, factor 
hipotalámico liberador de GH, péptido histidina N-ter-
minal isoleucina C-terminal y helodermina, a los que 
en conjunto se les denomina familia secretina-glucagón. 
La secretina se ha aislado en las células S, localizadas en 
el duodeno y yeyuno proximal y en el sistema nervioso 
central. Puesto que su molécula es muy inestable, es di-
fícil medirla. Con las técnicas de inmunoanálisis se ha 
determinado que en ayuno los valores normales son de 
3 a 5 pg/mL.
Su único estímulo conocido es la acidificación duo-
denal a un pH < 4.5 que provoca elevación sérica en 
pocos minutos. Además se ha demostrado que la infusión 
de sales biliares en el duodeno también condiciona un 
ligero aumento. Su vida media en sangre es de 3 a 7.5 
min. Su principal acción es modular de manera positiva 
la secreción exocrina pancreática de agua y bicarbonato 
durante el proceso de digestión. También potencia la ac-
ción de diversas hormonas en el aparato digestivo, como 
insulina sobre las células β delos islotes pancreáticos; se-
creción de pepsina y moco estimulados por somatostati-
na; favorece la secreción de agua y electrólitos de mucosa 
de la vesícula biliar a través de la colecistocinina, y ejer-
ce cierta actividad secretora en las glándulas de Brunell. 
También tiene un efecto inhibitorio en la liberación de 
gastrina y la secreción ácida del estómago, disminuye el 
tono del esfínter esofágico inferior, así como la motilidad 
gástrica.
Su utilidad clínica consiste en evaluar la función 
pancreática por la cuantificación de la secreción de bicar-
bonato, así como obtener muestras del jugo pancreático 
para citología exfoliativa y establecer el diagnóstico de 
neoplasias malignas ductales de este órgano. Esta técnica 
consiste en colocar una sonda duodenal de doble balón 
(sonda de Dreiling) para colectar el contenido pancreá-
tico en condiciones basales por aspiración y luego, con el 
estímulo con secretina en dosis de 1 U/kg de peso corpo-
ral por vía endovenosa. En la actualidad, la colangiopan-
creatografía endoscópica ha permitido canular en forma 
directa el conducto pancreático para obtener muestras 
de mejor calidad para su estudio.
Motilina
Es un polipéptido de 22 aminoácidos que se ha aislado 
en las células endocrinas de la mucosa del duodeno, an-
tro y fundus gástrico, y yeyuno proximal. Asimismo, se 
ha identificado en cerebro, en particular en las glándulas 
hipófisis y pineal. La secuencia de sus aminoácidos es por 
completo diferente de cualquier otro péptido gastroin-
testinal. Se produce en las células enterocromafines del 
intestino delgado proximal; se libera por la acidificación 
del duodeno, e inhibe al alcalinizarse esa zona. Se ha en-
contrado en la sangre en estado de ayuno prolongado y 
su liberación corresponde a la fase III del complejo mo-
tor migratorio cíclico.
La función básica de la motilina es la estimulación 
de la musculatura lisa gastrointestinal al propiciar la con-
tracción del músculo liso, con lo cual origina la iniciación 
de complejos bioeléctricos en la región antroduodenal 
que se propagan de manera distal. Participa, además, en 
el control del vaciamiento de la vesícula biliar y en la 
contracción del esfínter esofágico inferior; promueve el 
vaciamiento rápido de los nutrientes sólidos del estóma-
go y retrasa el de los líquidos, al mismo tiempo que esti-
mula la producción de pepsina.
Polipéptido pancreático (PP)
Al inicio, el polipéptido pancreático se aisló como un 
péptido contaminante en preparaciones de insulina 
pancreática proveniente de gallinas y cerdos. Está cons-
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854  •  Endocrinología clínica de. . . (Capítulo 79)
tituido por 36 aminoácidos, cuyo aminoácido carboxi-
lo terminal es una amida de tirosina. Lo producen las 
denominadas células PP o F, localizadas en la periferia 
de los islotes pancreáticos, el duodeno y región exocrina 
pancreática adyacente (p. ej., cabeza, proceso uncinado y 
cola del páncreas).
Sus funciones son inhibición de zimógenos pan-
creáticos, relajación de la vesícula biliar y aumento del 
vaciamiento gástrico; participa, además, en la motilidad 
gastrointestinal. Su secreción depende de varios factores, 
entre estos destaca la ingesta proteínica y rica en grasas, 
el ayuno prolongado, el ejercicio intenso y, en general, 
aquellas situaciones que producen hipoglucemia por es-
timulación vagal.
Sus valores plasmáticos se incrementan con rapidez 
(menos de 5 min) a través de la estimulación cefálicova-
gal iniciada por el gusto, el olfato y la vista de la comida, 
así como durante la ingesta de alimentos. Este incremento 
es sostenido en forma de meseta durante la fase intestinal 
de la digestión y lo inhibe el efecto de la somatostatina 
y la administración parenteral de glucosa. Dichos valores 
aumentan en padecimientos como insulinoma, gastrino-
ma, diabetes dependiente de insulina e hiperparatiroidis-
mo, y disminuyen de manera considerable en la neuropa-
tía diabética.
En 2003 se descubrió que el PP es un importante 
agente regulador de la saciedad. En el estudio pionero 
se pudo demostrar que la infusión intravenosa de PP re-
dujo de manera significativa la ingesta de alimentos en 
voluntarios sanos. El mecanismo preciso por el cual el 
PP tiene efectos anorexigénicos se desconoce, aunque se 
sugiere que puede ser por la inducción de retraso en el 
vaciamiento gástrico.
Péptido tirosina tirosina (YY) 
El péptido YY está constituido por 36 aminoácidos, su 
estructura se relaciona con el PP y el NPY, se aisló por 
primera vez en 1980. Este péptido se encuentra a lo largo 
de todo el tracto digestivo y sus concentraciones se incre-
mentan en forma distal, con los valores mayores encon-
trados en el colon y recto. La administración exógena del 
péptido YY tiene diversos efectos biológicos, incluyendo 
retraso en el vaciamiento gástrico y disminución de la 
secreción gástrica. 
Esta hormona se libera en la etapa posprandial des-
de las células L del intestino, en donde es co-almacena-
da con el péptido similar al glucagón tipo 1 (GLP-1). 
Al igual que el PP, la administración exógena del PYY 
reduce la ingesta de alimentos en humanos de manera 
significativa. Se cree que esta acción la logra mediante la 
activación del receptor Y2. Debido a esto el péptido YY 
puede tener alguna utilidad en el manejo farmacológico 
de la obesidad. Se ha demostrado que los pacientes obe-
sos tienen menores concentraciones circulantes de PYY, 
lo que sugiere que estos valores bajos pueden tener un 
efecto causal en el desarrollo de la obesidad. Aún se des-
conoce si la disminución en la ingesta de alimentos y la 
inducción de saciedad se debe a la activación de circuitos 
fisiológicos que disminuyen el deseo de ingerir alimentos 
o a que esta hormona produce efectos directos sobre el 
sistema nervioso central.
Péptido similar al glucagón tipo 1 (GLP-1) 
Es un neuropéptido producido en el SNC y en el intesti-
no, y se sintetiza a través del gen del preproglucagón. La 
mayor fuente de GLP-1 en el organismo proviene de las 
células L del intestino delgado. Al igual que el PYY y el 
PP, este péptido tiene efectos potentes como sustancia 
anorexigénica. Se ha demostrado que el GLP-1 induce 
saciedad, ya que actúa sobre receptores específicos loca-
lizados en el hipotálamo y el tallo cerebral. Además de 
inducir saciedad, esta hormona es capaz de incrementar 
el gasto energético del organismo al aumentar la tem-
peratura corporal. La administración crónica de GLP-1 
en el SNC atenúa la ganancia ponderal y la administra-
ción periférica inhibe la ingesta de alimento en roedo-
res y humanos. Existe evidencia de que la secreción de 
GLP-1 está disminuida en los pacientes con obesidad, y 
la pérdida de peso normaliza estos valores. Así pues, la 
disminución en las concentraciones circulantes de GLP-
1 pueden contribuir para el desarrollo de la obesidad y su 
normalización restaura la saciedad. En un estudio piloto, 
la administración subcutánea de GLP-1 durante cinco 
días, previo a la ingesta de alimentos en pacientes con 
obesidad, disminuyó la ingesta calórica en 15% y produjo 
una pérdida de 0.5 kg de peso por día. 
Además, el GLP-1 es el prototipo de las hormonas 
que recién se han denominado incretinas, ya que produ-
cen un incremento en la cantidad de insulina secretada 
por las células β de los islotes de Langerhnas despúes de 
comer, aún cuando los valores de glucosa estén elevados. 
También disminuye la absorción de nutrientes hacia la 
circulación, ya que retrasa el vaciamiento gástrico e in-
duce saciedad.
Bombesina
La bombesina es un tetradecapéptido que se aisló de la 
piel de los anfibios y es similar en estructura al pépti-
do liberador de gastrina de los mamíferos (GRP) y a la 
neuromedina B. Se le han atribuido importantes efectos 
anorexigénicos y termogénicos. La administración de 
bombesina y GRP disminuye la ingestade alimentos en 
personas con peso normal, pero no en obesas. La inyec-
ción periférica o central de bombesina reduce la ingesta 
de alimentos que no está bloqueada por vagotomía. La 
bombesina también activa el sistema nervioso simpático. 
En animales que se han muerto de hambre o tienen lesio-
nes hipotalámicas ventromediales, la bombesina produce 
una profunda caída en la temperatura debido a que el 
sistema nervioso simpático no se puede activar.
Obestatina
En fechas recientes se ha demostrado que la pre-pro-gre-
lina, se somete a una escisión proteolítica adicional, ge-
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Hormonas gastrointestinales 855
nerando un ácido 23-amino péptido, que se ha nombrado 
obestatina. En contraste con la grelina, la obestatina tiene 
efectos anorexígenos, reduce el vaciamiento gástrico, in-
hibe las contracciones del yeyuno y suprime la ganancia 
de peso corporal. Sin embargo, varios estudios recientes 
realizados en ratas y ratones en diversas condiciones ex-
perimentales, no han podido reproducir estos resultados. 
Algunos estudios han demostrado que la obestatina es 
incapaz de cruzar la barrera hematoencefálica, que se de-
grada con rapidez en la circulación y que ejerce sus efec-
tos en comer y beber a través de interacciones directas 
con el sistema gastrointestinal. De hecho, se ha descri-
to la disminución de la actividad contráctil del músculo 
yeyunal in vitro y la supresión del vaciamiento gástrico 
in vivo, después del tratamiento con obestatina. Por lo 
tanto, la inhibición de la contracción yeyunal podría ge-
nerar una señal aferente vagal para inducir saciedad en 
el cerebro.
Oxintomodulina
Así como el GLP-1, la oxintomodulina es un producto 
del gen del preproglucagón que se libera a la circulación 
en la etapa posprandial. Es un péptido de 37 aminoáci-
dos, de los cuales 29 son similares a los que conforman al 
glucagón, y los ocho restantes, presentes en la extensión 
C-amino terminal, se denominan péptido espaciador 1. 
Este péptido se une al mismo receptor que el GLP-1, 
por lo que sus efectos son muy similares, es decir es un 
agente anorexigénico, inductor de saciedad, con poten-
tes efectos para inducir pérdida de peso. Se ha postulado 
que parte de su efecto anorexigénico es por vía de la su-
presión de los valores plasmáticos de grelina. Un estudio 
en donde se administró oxintomodulina subcutánea tres 
veces al día en voluntarios con sobrepeso, durante cuatro 
semanas, produjo una pérdida de peso de 2.5 kg en pro-
medio, comparado con un grupo que solo recibió place-
bo. En la actualidad se considera que la administración de 
oxintomodulina es el primer tratamiento que ha demos-
trado suprimir el apetito con un incremento concurrente 
espontáneo de la actividad física. Existen múltiples estu-
dios que están evaluando la eficacia y seguridad de esta 
hormona para el tratamiento de la obesidad.
PEQUEÑOS NEUROTRANSMISORES
Colecistocinina
En 1928, Ivy y Olderg demostraron que al instilar grasa 
en el intestino delgado se provocaba la contracción de 
la vesícula biliar, por lo que postularon un mecanismo 
hormonal, a cuyo mediador denominaron colecistocini-
na. Harper y Ramner, en 1940, comprobaron que existía 
una sustancia en el extracto de la mucosa duodenal que 
estimulaba la secreción pancreática, que llamaron pan-
creozimina. En 1964, Jorpes demostró que esta sustan-
cia proveniente del intestino delgado ejercía esa doble 
función, y por último, en 1971, Mutt y Torpes identifi-
caron la secuencia de aminoácidos de esta hormona, la 
cual conservó el nombre inicial dado por Irvy y Olderg: 
colecistocinina.
Existen varias formas moleculares de la colecistoci-
nina que contienen 58, 39, 33 y 8 aminoácidos; las se-
cuencias del octapéptido carboxilo terminal son idénti-
cas en todas y la actividad biológica radica justo en ese 
octapéptido terminal C sulfurado. Se ha aislado en las 
células I de la mucosa del duodeno y yeyuno proximal, 
además se ha encontrado en el SNC, en neuronas del ple-
xo mientérico y en los nervios de vejiga urinaria y útero. 
Sus valores normales varían de 0 a 78 pg/mL; su vida 
media en sangre es corta (de 2.5 a 7 min), y se eleva en el 
posprandio de 78 a 392 pg/mL. Su liberación la estimu-
lan las proteínas y grasas digeridas que se encuentran en 
el duodeno y la inhibe la somatostatina, así como la alta 
concentración de ácidos biliares en intestino.
Sus principales acciones son la estimulación de la 
contracción muscular de la vesícula biliar y la secreción 
de enzimas pancreáticas. Provoca relajación del esfínter 
de Oddi, retrasa el vaciamiento gástrico y, con dosis far-
macológicas, aumenta la motilidad de intestino delgado 
y colon. Estudios recientes han demostrado que la cole-
cistocinina puede atravesar la barrera hematoencefálica 
y unirse a receptores específicos en el área postrema, nú-
cleo solitario y núcleo dorsal del vago, por lo que se con-
sidera que ejerce un importante mecanismo de acción 
en el eje cerebro-intestino, regulando la actividad vagal. 
El estímulo sobre la secreción pancreática inducido por 
colecistocinina es independiente de la regulación neural, 
y se considera como un mecanismo de control fisiológico 
diferente de la retroalimentación que integra la regula-
ción neural y humoral de la secreción pancreática.
Somatostatina
Se aisló por primera vez en el tejido hipotalámico y más 
tarde se detectaron grandes concentraciones de ésta en 
otras zonas, en las que actúa como neurotransmisor o 
neuromodulador. Es el principal péptido inhibidor lo-
calizado en el tubo digestivo. Es un péptido cíclico con 
dos formas naturales, de 14 y 28 aminoácidos; las células 
endocrinas que la producen se consideran las más impor-
tantes de las localizadas en la mucosa del antro gástrico, 
los islotes pancreáticos y las neuronas del plexo mienté-
rico. Su precursor es la prosomatostatina, una proteína 
de gran tamaño, que se hidroliza en forma proteolítica y 
procesa para originar la somatostatina y otros péptidos 
activos.
Se trata de un neurotransmisor aferente primario 
producido en la médula espinal. Su principal función es 
la inhibición de la liberación de hormonas, como GH, 
insulina, glucagón, tirotropina y hormona paratiroidea. 
En el ámbito digestivo inhibe también diferentes hor-
monas gastrointestinales, como gastrina, colecistocinina, 
secretina, VIP, motilina. Posee, además, un potente efecto 
inhibidor sobre la secreción del ácido gástrico, intestinal, 
enzimas pancreáticas y bicarbonato, y en mayores dosis 
inhibe la motilidad intestinal y la contracción de la ve-
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856  •  Endocrinología clínica de. . . (Capítulo 79)
sícula biliar. También es un potente inhibidor del flujo 
sanguíneo mesentérico y de la circulación del territorio 
portal.
El principal estímulo para su liberación es la ingesta 
de alimentos y está relacionada de manera íntima con 
la liberación de gastrina. La estimulación colinérgica 
aumenta la liberación de gastrina, pero inhibe la de soma-
tostatina. Tiene interacción con otros neurotransmisores: 
las catecolaminas y la acetilcolina influyen en su libera-
ción ejerciendo algún tipo de control. Si se administra 
dopamina, noradrenalina o acetilcolina, pero no seroto-
nina, se eleva la concentración sanguínea de somatostati-
na. La neurotensina y el ácido g-aminobutírico (GABA) 
pueden ejercer también un control de su secreción. 
Péptido intestinal vasoactivo (VIP)
Se aisló por primera ocasión en 1970 por Said y Mutt en 
el intestino delgado porcino. Contiene 28 aminoácidos 
y su estructura es muy similar a la secretina, al glucagón 
y al péptido inhibidor gástrico. Se encuentra distribuido 
con amplitud a lo largo del árbol gastrointestinal, desdeel esófago hasta el recto, así como en el SNC, en las vías 
urogenitales, placenta, glándulas suprarrenales, páncreas 
y en el árbol respiratorio. Funciona como agente neu-
roendocrino y modifica la secreción local de las mucosas, 
la motilidad y el flujo sanguíneo de los sitios en donde 
se encuentra distribuido. Sus valores séricos en ayunas 
son bajos (23 pg/mL) y no se modifican con la ingesta 
de alimentos.
Su concentración en la sangre venosa del intestino 
aumenta con la estimulación eléctrica, distensión esofá-
gica y estimulación mecánica de la mucosa intestinal. Su 
vida media es de alrededor de 1 minuto. Las acciones 
fisiológicas más importantes son la relajación del esfínter 
esofágico inferior, del fundus gástrico y del esfínter anal. 
Incrementa el flujo sanguíneo intestinal y es partícipe en 
la erección peneana. Administrado por vía endovenosa 
inhibe la secreción del ácido clorhídrico y pepsina, sus 
efectos centrales son numerosos cuando se aplica por 
iontoforesis excitando las neuronas del hipocampo y de 
la corteza cerebral, produciendo escalofríos, hipotermia e 
hipotensión transitoria por la estimulación de la adenilci-
clasa unida a la membrana.
MODULADORES NO PEPTÍDICOS
Acetilcolina
La acetilcolina es el principal regulador de la motilidad 
gastrointestinal y desempeña una función de suma im-
portancia en el control de las secreciones gastrointestina-
les y pancreáticas, así como en la motilidad del intestino. 
Se sintetiza en las neuronas colinérgicas a partir de coli-
na, que se origina del piruvato por la acetil coenzima A 
y la captan las terminaciones nerviosas. La colina acetil-
transferasa, acetila la colina para formar acetilcolina en 
el citoplasma, la cual se inserta en gránulos secretores 
en las terminaciones nerviosas. La despolarización de la 
terminación nerviosa permite el aflujo de Ca por medio 
de los canales N dependientes del voltaje, para inducir 
la liberación de acetilcolina hacia el espacio extracelu-
lar. La acetilcolina liberada interactúa con los receptores 
muscarínicos y nicotínicos de la membrana plasmática 
de las células diana. Los receptores muscarínicos se han 
caracterizado desde el aspecto farmacológico y actúan 
acoplados con las proteínas G en la membrana celular. 
El receptor M2 es el principal receptor del músculo liso 
gástrico y el M3, el principal receptor responsable de la 
regulación colinérgica en la célula parietal, cuya estimu-
lación permite la formación de ácido clorhídrico.
Los receptores nicotínicos de la acetilcolina son ca-
nales iónicos transmembrana que por acción de la acetil-
colina permiten la entrada de potasio y la salida de sodio, 
lo que condiciona la despolarización de las células. Una 
vez liberada la acetilcolina se degrada en forma eficaz 
por la acetilcolinesterasa, generando colina, que es trans-
portada de nuevo a las terminaciones nerviosas, donde 
puede ser reutilizada para la nueva síntesis de acetilco-
lina.
Histamina
Se almacena en los mastocitos de todo el organismo. En 
el intestino, se localiza en las células enterocromafines 
y las neuronas de los plexos mientéricos, en la mucosa 
gástrica se ubica en las células simil-enterocromafines, 
en la denominada porción secretora del ácido. Además, 
se puede encontrar en los basófilos, las plaquetas y las 
células endoteliales. Se forma a partir de la descarboxila-
ción de la histidina y es catalizada por la enzima histidina 
descarboxilasa.
Su función como mediador de la inflamación es co-
nocida, y además regula la secreción de ácido clorhídri-
co y tiene efectos potentes sobre la motilidad intestinal. 
Ejerce sus efectos por medio de la integración de sus tres 
receptores acoplados con la proteína G, denominados 
H1, H2 y H3 y se inactiva con rapidez en la mayor parte 
de los tejidos por desaminación oxidativa.
Óxido nítrico (NO)
Desde hace muchos años, se conoce el hecho de que las 
células endoteliales secretan un factor inestable que pro-
duce la relajación de las células de músculo liso cuando 
se estimulan por vasodilatadores como la acetilcolina. En 
un principio, a este mediador se le conoció como factor 
relajador derivado del endotelio; ahora se sabe que es el 
NO y se considera como uno de los mensajeros químicos 
más diseminados e importantes.
Se deriva de la L-arginina a través de un proceso que 
emplea oxígeno molecular. Existen dos formas de esta 
enzima: la sintetasa de NO constitutiva, la cual se expre-
sa por las células endoteliales y las neuronas que depen-
den de los valores de Ca, calmodulina y fosfato del dinu-
cleótido de nicotinamida para su actividad, y la sintetasa 
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Hormonas gastrointestinales 857
Cuadro 79-3. Resumen de las anormalidades en la densidad de las células endocrinas en diferentes segmentos 
del tracto gastrointestinal de pacientes con SII, los factores responsables de la liberación de hormonas 
intestinales y las funciones de estas hormonas
Segmento 
intestinal
Hormona Liberado por Funciones SII-D SII-C
Estómago Grelina Ingesta de proteínas y 
grasa, los carbohidratos la 
suprimen
Incrementa la motilidad gástrica 
e intestinal. Estimula el apetito y 
la ingesta de alimentos
Alto Bajo
Serotonina Adrenalina, acetilcolina, la 
exposición al ácido y los 
incrementos de la presión 
intraluminal
Activa las terminaciones ner-
viosas submucosas del SNE, 
inhibe el vaciamiento gástrico, 
estimula la motilidad colónica, 
acelera el tránsito intestinal
Normal Alto
Gastrina Péptidos intraluminales, 
aminoácidos, calcio, pH 
bajo y prostaglandinas. 
Su liberación se inhibe por 
somatostatina
Estimula la secreción de ácido 
y la liberación de histamina, la 
contracción del esfínter esofági-
co inferior y el antro
Alto Alto
Somatostatina Acidificación gástrica e in-
gesta de alimentos
Inhibe las contracciones intesti-
nales y la secreción neuroendo-
crina intestinal
Bajo Bajo
Intestino delgado
Duodeno CCK Presencia intraluminal de 
grasa y proteínas
Estimula la secreción pancreá-
tica exocrina, regula la ingesta 
de alimento, inhibe el vacia-
miento gástrico, estimula la con-
tracción de la vesícula biliar
Bajo Normal
Secretina Acidificación del lumen in-
testinal
Estimula la secreción pancreáti-
ca de bicarbonato y fluidos, in-
hibe el vaciamiento gástrico y la 
actividad contráctil de intestino 
delgado y colon
Bajo Normal
GIP Glucosa intraluminal, ami-
noácidos y grasa
Inhibe la secreción gástrica de 
ácido
Bajo Bajo
Somatostatina Glucosa intraluminal, ami-
noácidos y grasa
Inhibe la secreción gástrica de 
ácido
Bajo Bajo
Serotonina Glucosa intraluminal, ami-
noácidos y grasa
Inhibe la secreción gástrica de 
ácido
Bajo Bajo
PYY Proteína y alimentos ricos 
en grasa
Retraso en el vaciamiento gás-
trico, estimula la absorción de 
agua y electrólitos, mayor me-
diador del freno ileal
Normal Alta
Intestino grueso
Colon Serotonina Proteína y alimentos ricos 
en grasa
Retraso en el vaciamiento gás-
trico, estimula la absorción de 
agua y electrólitos, mediador del 
freno ileal
Bajo Bajo
PYY Proteína y alimentos ricos 
en grasa
Retraso en el vaciamiento gás-
trico, estimula la absorción de 
agua y electrólitos, mayor me-
diador del freno ileal
Bajo Bajo
SNE = sistema nervioso entérico; CKK = colecistocinina; PYY = péptido tirosina tirosina; GIP = polipéptido inhibidor gástrico; SII-D = síndrome del intestino irritable 
con diarrea; SII-C = síndrome del intestino irritable con estreñimiento.
de NO neural, que es muy sensible a la concentración de 
Ca. Ambas son muy semejantes en estructura.
Una vez liberado, el NO penetra en las células a tra-
vés de la membrana plasmática, donde ejerce su acción 
directa sobre la guanililciclasa, produciendo, por último, 
monofosfato de guanosina cíclico (cGMP) en el citoplas-
ma. Su acción es de muy corta duración y se oxida con 
rapidez a nitrato y nitrito.
Tienemúltiples efectos en el tracto gastrointestinal 
y se considera el principal mediador de la relajación re-
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858  •  Endocrinología clínica de. . . (Capítulo 79)
gulada por neuronas no adrenérgicas y no colinérgicas. 
Induce vasodilatación de la microcirculación de la mu-
cosa y protege contra la lesión microvascular aguda en el 
estómago e intestino, además puede ser un mediador de 
información importante.
PAPEL DE LAS HORMONAS 
GASTROINTESTINALES EN LOS 
TRASTORNOS FUNCIONALES 
DIGESTIVOS
El síndrome de intestino irritable (SII) es un trastorno 
funcional intestinal en el que el dolor o malestar abdo-
minal se asocia a cambios en el hábito intestinal o alte-
raciones en la defecación. La manifestación principal es 
dolor, malestar abdominal crónico, o ambos, asociado a 
alteraciones en el hábito intestinal, como estreñimiento 
y diarrea, o ambos, y a otros síntomas gastrointestinales 
como distensión abdominal y sensación de inflamación 
(96%), evacuación incompleta, urgencia, pujo y tenes-
mo. Se reconocen en la actualidad cuatro subtipos de 
acuerdo al comportamiento del hábito intestinal, los 
cuales son: SII con predominio de diarrea, SII con pre-
dominio de estreñimiento, SII mixto y SII no clasificable. 
Una condición particular de este síndrome es la inesta-
bilidad de los síntomas, su heterogeneidad y sobreposi-
ción con otros trastornos funcionales gastrointestinales, 
como dispepsia funcional (28 a 57%), pirosis funcional 
(56%), dolor torácico funcional de probable origen eso-
fágico (27%) y trastornos anorrectales (8 a 10%). Aún 
más, existe asociación a otros trastornos funcionales no 
gastrointestinales, como: fibromialgia, síndrome de fatiga 
crónica, dolor pélvico crónico, trastornos de la articula-
ción témporo-mandibular y cistitis intersticial.
Aunque no se conoce cuál es la causa del SII, se cree 
que esta patología tiene una etiología multifactorial, en la 
cual varios agentes interactúan produciendo alteraciones 
sensitivas y motoras dentro del sistema nervioso entérico. 
Las infecciones, las alteraciones neurohumorales, los tras-
tornos emocionales y la dieta son algunos de los factores 
que más se han relacionado con estas alteraciones. 
Varias anomalías de las células endocrinas se han 
descrito en diferentes segmentos del tracto gastrointes-
tinal de los pacientes con SII. Estas células tienen micro-
vellosidades especializadas que se proyectan en el lumen, 
funcionan como sensores para el contenido intestinal y 
responden a estímulos luminales (nutrientes ingeridos 
en su mayoría), con la liberación de hormonas en la lá-
mina propia, donde ejercen sus efectos a través de un 
modo de acción paracrino/endocrino. Ciertos alimentos 
pueden desencadenar los síntomas experimentados por 
los pacientes con SII, incluyendo los ricos en oligo-fer-
mentables, di y monosacáridos, y polioles (FODMAPs). 
En fecha reciente se ha descrito que los efectos de los 
FODMAPs y la ingesta de proteínas, grasas e hidratos de 
carbono en los síntomas del SII, pueden ser causados por 
una interacción con las células endocrinas del intestino.
Esto se debe a que, desde el intestino, las hormonas 
controlan y regulan la motilidad y la sensibilidad gas-
trointestinal y que esta interacción puede ser responsable 
para la motilidad gastrointestinal anormal y la hipersen-
sibilidad visceral observada en estos pacientes. En el cua-
dro 79-3 se resumen todas las alteraciones hormonales 
en el nivel gastrointestinal en los pacientes con síndrome 
de intestino irritable.
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