Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
A) P F R B) R P F C) F R P Figura 6-4. Palanca de primer género o interfija. A) Esquema de la palanca de primer género. B) Una tijera como ejemplo de palanca de primer género, con el punto fijo entre la fuerza y la resistencia. C) Extensión del cuello: el punto fijo se halla en la articulación occipitoatloidea y está situado entre la potencia (músculos posteriores del cuello) y la resistencia (peso de la cabeza hacia delante). F: Punto fijo o fulcro; P: Potencia; R: Resistencia. el brazo de palanca de la potencia era cuatro veces mayor que el brazo de resistencia (lo que permitía vencer una resistencia cuatro veces mayor), el desplazamiento de la resistencia era sólo la cuarta parte del desplazamiento de la potencia (Fig. 6-3): brazo P \ 4 ] brazo R sustituyendo en la ecuación (4): desp. R \ desp. P ] brazo R 4 ] brazo R \ desp. P 4 Dependiendo de las posiciones relativas entre el punto donde se ejerce la potencia, el punto donde existe la resis- tencia y el punto de apoyo, se pueden clasificar todas las palancas en tres grandes grupos: a) Palancas de primer género o interfijas. Estas pa- lancas, cuya representación esquemática se muestra en la Figura 6-4A, ya se han descrito, y en ellas el punto fijo se encuentra entre el punto de aplicación de la fuerza y el punto de aplicación de la resistencia. La capacidad de estas palancas para realizar grandes desplazamientos o para ven- cer grandes resistencias depende de la relación existente entre los brazos de potencia y los de resistencia. Un ejemplo cotidiano de este tipo de palancas es un balancín de un parque infantil, o unas tijeras, donde la fuerza (potencia) se ejerce en un extremo, el punto de apoyo (eje de las tijeras) está en el centro y la resistencia (lo que hay que cortar) está al otro lado del punto fijo (Fig. 6-4B). Un ejemplo de palanca de primer género en el cuerpo humano lo constituye la articulación occipitoatloidea, que es la responsable de la inclinación hacia delante y hacia atrás de la cabeza sobre el cuello. Si imaginamos el movimiento de extensión del cue- llo (llevar la cabeza hacia atrás), los músculos de la parte posterior del cuello con su contracción representan la poten- cia, el peso de la cabeza hacia delante representa la resisten- cia y la articulación se encuentra entre estas dos fuerzas (Fig. 6-4C). b) Palancas de segundo género o interresistentes. Como su nombre indica, en estas palancas el punto fijo o fulcro está en un extremo y la resistencia que hay que vencer se aplica en un punto intermedio entre el punto fijo y el punto de aplicación de la potencia (Fig. 6-5A). Como puede apreciarse, estas palancas tienen siempre el brazo de potencia mayor que el brazo de resistencia, por lo que son útiles para vencer grandes resistencias, pero en cambio los desplazamientos que originan son más limitados. Un ejemplo cotidiano es el cascanueces. En esta herramienta, el fruto que hay que romper se coloca en la parte central y el esfuerzo se hace en el extremo opuesto a la bisagra o punto fijo del cascanueces. Si se observa con atención, se verá que un movimiento no despreciable de las manos en el extremo del cascanueces se traduce en un movimiento muy pequeño en el fruto, pero con gran fuerza para romper la cáscara (Fig. 6-5B). En el cuerpo humano, este tipo de palancas se encuentra en aquellas articulaciones que tienen que hacer un gran esfuerzo muscular, con poco desplazamiento. Un ejem- plo se puede ver en la acción de ponerse de puntillas. En 92 Estructura y función del cuerpo humano
Compartir