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Capítulo 9 Sistema endocrino 259 nas de ellos. Solamente uno, el folículo dominante, llegará a su desarrollo máximo en cada ciclo y en ese momento podremos observar en él la existencia de una capa exterior denominada teca externa, otra denominada teca interna y una zona folicular de cé- lulas granulosas que rodean a un antro relleno de líquido en el que puede detectarse la presencia del oocito a modo de península unida al resto de las células granulosas (Fig. 9.19). Este desarrollo folicular dura aproximadamente 14 días a lo largo de los cuales, las células del folículo que rodean al oocito, cé- lulas tecales y células granulosas, van creciendo y multiplicándose dando lugar a lo que se denomina folículo maduro o folículo de Graaf. En este momento el folículo se rompe y el oocito conte- nido en su interior pasa a las trompas, donde podrá ser eventual- mente fecundado por un espermatozoide. En cualquier caso los restos foliculares que quedan en el ovario se transforman en otra estructura denominada cuerpo lúteo que será la encargada de la síntesis hormonal durante la segunda fase del ciclo. En el proceso de crecimiento folicular las células granulosas producen grandes cantidades de la hormona sexual femenina, el estradiol y también de inhibina. A partir del momento de la ovulación se forma una estructura nueva a partir de los res- tos foliculares, el cuerpo lúteo que produce de nuevo estradiol y también grandes cantidades de progesterona. Vemos pues cómo las estructuras que rodean a los oocitos son las encargadas tam- bién de la producción de las hormonas sexuales en la mujer. Te- niendo en cuenta que se produce la maduración de un folículo cada mes y que la vida fértil de la mujer dura entre los 14 y 50 años aproximadamente a lo largo de toda una vida se producen alrededor de 400 folículos maduros. Hay que tener en cuenta que al revés de lo que ocurría en el testículo, la oogénesis se ha interrumpido durante la fase embrionaria y solamente los ooci- tos contenidos en el ovario en el momento del nacimiento son los que van a tener la oportunidad de ir madurando mes a mes a partir de la pubertad. 6.4.2. Hormonas sexuales femeninas Como acabamos de ver son el estradiol y la progesterona y se producen en las células que rodean al oocito. El estradiol es un esteroide de 18 átomos de carbono que se produce en las células granulosas del folículo y en las del cuerpo lúteo. Sus niveles van aumentando en cada ciclo a partir del día 6-8 contando a partir de las menstruación y que corresponde a la existencia de un folículo dominante. Tras llegar a un máximo poco antes de la ovulación el día 14, después cae y vuelve a subir cuando se forma el cuerpo lúteo. La progesterona es un esteroide de 21 átomos de carbono que se produce fundamentalmente en la segunda fase del ciclo, a partir de la ovulación por las células del cuerpo lúteo. Acciones del estradiol Estimula el desarrollo de los caracteres sexuales femeninos. De- sarrolla las mamas, aumenta la grasa alrededor de las caderas y mantiene un desarrollo muscular poco evidente. Sobre los genitales internos aumenta el tamaño del útero y estimula el crecimiento del epitelio vaginal. Además, cada mes estimula el crecimiento del endometrio uterino, capa que recubre al útero en su interior y éste prolifera marcadamente. Sobre el crecimiento tienen una primera fase estimulante de la velocidad del mismo por estímulo directo sobre las placas me- tafisarias seguido rápidamente de su osificación y cierre. Como el desarrollo de las niñas ocurre 2 años antes que el de los varones (entre los 11 y los 12 años ) las mujeres disponen de dos años me- nos para crecer y por lo tanto miden alrededor de 12 cm menos que los hombres. Acciones de la progesterona Actúa sobre el endometrio proliferado, transformándolo en epi- telio secretor, para posibilitar que éste pueda nutrir al huevo re- cién fecundado. Es fundamentalmente una hormona para «faci- litar el embarazo». También refuerza la acción de los estrógenos sobre la mama. Cuando el cuerpo lúteo se atrofia a los 12 días de su formación si no hay fecundación, cae la producción de estró- genos y progesterona. El endometrio entonces falto de soporte hormonal, se desprende con una pequeña hemorragia que es la menstruación. 6.4.3. Regulación de la función ovárica Las hormonas hipofisarias que regulan al ovario son las mismas descritas en el testículo. La FSH estimula el crecimiento folicular y la LH estimula la ovulación y la formación del cuerpo lúteo. La FSH se regula a su vez por los estrógenos y la inhibina a través de una retroalimentación negativa. Los estrógenos y la progesterona regulan a la LH. Ambas hormonas hipofisarias están estimuladas por la LHRH que necesita secretarse «a pulsos» para actuar. Los niveles de LH y FSH son más o menos estables durante el ciclo pero presentan un «pico» muy marcado durante la ovulación. RECUERDA El ovario es la gónada femenina. Produce estrógenos, pro- gesterona y óvulos. Las primeras son las hormonas femeni- nas responsables de la aparición de los caracteres sexuales secundarios femeninos y se producen en el folículo y el cuer- po lúteo. Los óvulos son los gametos femeninos de los que se libera uno cada mes aproximadamente. El ovario funciona cíclicamente en lo que se denomina ciclo menstrual y su fun- cionamiento termina a los 50 años con la menopausia. 7. REGULACIÓN DEL METABOLISMO DEL CALCIO El calcio es un elemento esencial en múltiples procesos fisiológi- cos. Desarrolla papeles importantes en el crecimiento, división y adhesión celular, excitabilidad y permeabilidad de la membrana plasmática, transporte iónico a través de las membranas, secre- ciones exocrinas y endocrinas, contracción muscular o neutro- transmisión. También desempeña un papel como cofactor de proteínas de la coagulación y tiene una misión estructural en la https://booksmedicos.org 9. Sistema endocrino 7. REGULACIÓN DEL METABOLISMO DEL CACLCIO booksmedicos.org Push Button0:
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