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INFLUENZA Y COVID-19 ___ Karolina Isabel Contreras Zavala, LME 7358. Clínica de Pediatría 8°E. Universidad lamar. Hospital civil Juan I. Menchaca, L6. Doctora: Teresa de Jesus Chavez Velarde. 06/05/2022. INFLUENZA Definición: La influenza (gripe) es una enfermedad respiratoria contagiosa causada por los virus de la influenza que infectan la nariz, la garganta y los pulmones. Algunas personas como las personas mayores, niños pequeños y las personas con ciertas afecciones, tienen mayor riesgo de presentar complicaciones graves por la influenza. Existen dos tipos de virus de influenza: A y B. Los virus de influenza A y B que generalmente se transmiten entre las personas (virus de influenza humana) causan epidemias de influenza estacional todos los años. Signos y síntomas: Los signos y síntomas de la influenza suelen aparecer de manera repentina. Las personas enfermas a causa de la influenza a menudo tienen algunos de estos síntomas o todos: ➔ Fiebre* o sentirse afiebrado/con escalofríos ➔ Tos ➔ Dolor de garganta ➔ Mucosidad nasal o nariz tapada ➔ Dolores musculares y corporales ➔ Dolores de cabeza ➔ Fatiga (cansancio) ➔ Algunas personas pueden tener vómitos y diarrea, aunque esto es más común en los niños que en los adultos. Fisiopatología: El virus de la gripe se une y penetra en las células del epitelio de las vías respiratorias altas y bajas mediante la hemaglutinina. Una vez en su interior se multiplica, lo que induce edema y necrosis del epitelio traqueal, bronquial y bronquiolar. No hay viremia y los síntomas generales son secundarios a la actividad de las citoquinas liberadas durante la reacción inflamatoria. La replicación extrapulmonar del virus de la gripe aviar subtipo H5N1 es una excepción. El ciclo de replicación dura 6-12 horas. En comparación con virus típicos de la gripe estacional, el virus A/H1N1pdm09 tiene mayor afinidad por las células epiteliales del tracto inferior de las vías respiratorias, tiene capacidad de penetrar más profundamente en el sistema respiratorio e infectar los alvéolos pulmonares. Diagnóstico: 1. Prueba rápida para detección de antígeno en: Pacientes con cuadro clínico sugestivo de infección (de preferencia en los primeros 5 días de la enfermedad). En casos de brote epidémico (como prueba de escrutinio de acuerdo a los lineamientos institucionales en la materia). https://portal.guiasalud.es/especialidad/pediatria-y-sus-areas-especificas/ https://portal.guiasalud.es/especialidad/pediatria-y-sus-areas-especificas/ 2 2. PCR : Puede detectar partes del genoma del virus de la influenza A estacional, sin embargo puede no identificar la nueva cepa de la especie influenza A (H1N1) . 3. RT-PCR en tiempo real y cultivo: Se consideran pruebas con alta sensibilidad y especificidad para identificación del nuevo virus de influenza A (H1N1). Tratamiento: Tratamiento sintomático: 1. Reposo en cama, ingesta abundante de líquidos (especialmente para personas de alto riesgo de complicaciones por la gripe). 2. Fármacos antipiréticos y analgésicos: paracetamol, AINE (p. ej. ibuprofeno); no prescribir AAS en niños y adolescentes hasta los 18 años de edad por riesgo de síndrome de Reye. 3. En caso necesario: fármacos antitusígenos, fármacos descongestionantes que producen vasoconstricción en la mucosa nasal, soluciones con NaCl isotónicas o hipertónicas para lavado nasal. 4. Fármacos usados comúnmente, como la vitamina C y el rutósido son ineficaces. 5. Todo enfermo con insuficiencia respiratoria catastrófica debe trasladarse a un centro que disponga de oxigenación por membrana extracorpórea (ECMO). Tratamiento causal: 1. Fármacos antivíricos activos solo frente a los virus de la gripe. ➔ Inhibidores de la neuraminidasa (activos frente a los virus de la gripe A y B): oseltamivir y zanamivir. ➔ Inhibidores M2 (activos solo frente a los virus de la gripe A), amantadina y rimantadina: no recomendados debido a la resistencia común de los virus de gripe A (H3N2, H1N1pdm09) que han circulado en las últimas temporadas gripales. Dosificación, esquemas de tratamiento y reacciones adversas: ➔ Oseltamivir VO 75 mg 2 × d (dosis para las personas de >40 kg o >12 años); el tratamiento dura 5 días. Si no hay respuesta al tratamiento estándar→ prolongar el tratamiento. ➔ En insuficiencia renal con aclaramiento de creatinina de 10-30 ml/min se debe reducir la dosis terapéutica a 75 mg 1 × d y la dosis de profilaxis hasta 75 mg cada 48. ➔ Zanamivir (inhalado): se recomiendan 2 inhalaciones (2 × 5 mg) 2 × d durante 5 días. No administrar el zanamivir por nebulización (contiene lactosa, que puede dificultar el funcionamiento del nebulizador). 3 COVID-19 Definición: El virus recibió el nombre de SARS-CoV-2 por su homología genética con el coronavirus del síndrome respiratorio agudo severo (SARS-CoV) responsable por una epidemia de gran escala en Asia en 2003. La enfermedad se llamó tras la sigla inglesa COVID-19 (CoronaVirus Disease identificado el año 2019). Signos y síntomas: El período de incubación del SARS-CoV-2 parece ser casi el mismo para los niños que para los adultos, de 2 a 14 días con un promedio de 6 días. 1. Fiebre 2. Fatiga 3. Dolor de cabeza 4. Mialgia 5. Tos 6. Congestión nasal o rinorrea 7. Nueva pérdida del gusto o del olfato 8. Dolor de garganta 9. Falta de aire o dificultad para respirar 10. Dolor abdominal 11. Diarrea 12. Náuseas o vómitos 13. Falta de apetito o mala alimentación. Los niños infectados con SARS-CoV-2 pueden tener muchos de estos síntomas inespecíficos, solo algunos (como solo síntomas de las vías respiratorias superiores o sólo síntomas gastrointestinales) o pueden ser asintomáticos. Los síntomas más comunes en los niños son tos y/o fiebre.11-15 Una revisión sistemática reciente estimó que el 16 % de los niños con infección por SARS-CoV-2 son asintomáticos,16 pero la evidencia sugiere que hasta la mitad de las infecciones pediátricas pueden ser asintomático. Los signos y síntomas de COVID-19 en niños son similares a los de otras infecciones y procesos no infecciosos, como influenza, faringitis estreptocócica y rinitis alérgica. La falta de especificidad de los signos o síntomas y la proporción significativa de infecciones asintomáticas hacen que la detección basada en síntomas para la identificación del SARS-CoV-2 en niños sea particularmente desafiante. Fisiopatología: El COVID-19 es una infección viral producida por el SARS-CoV-2, que afecta principalmente las vías respiratorias bajas, en los casos severos podría producir una respuesta inflamatoria sistémica masiva y fenómenos trombóticos en diferentes órganos. El SARS-CoV-2 contiene alrededor de 30 000 bases de RNA. Utiliza la proteína de espiga (S) densamente glucosilada para entrar a las células huésped y se une a con gran afinidad al receptor de la enzima convertidora de angiotensina 2 (ACE2), dicha enzima está expresada en las células alveolares tipo II. El RNA del virus ingresa a las células del tracto respiratorio superior e inferior, y es traducido a proteínas virales. 4 El COVID-19 resulta de dos procesos fisiopatológicos interrelacionados: a) Efecto citopático directo resultante de la infección viral, que predomina en las primeras etapas de la enfermedad; b) Respuesta inflamatoria no regulada del huésped, que predomina en las últimas etapas. La superposición de estos dos procesos fisiopatológicos se traduce fenotípicamente en una evolución en 3 etapas de la enfermedad: a) Estadio I (fase temprana): es el resultado de la replicación viral que condiciona el efecto citopático directo y la activación de la respuesta inmune innata, y se caracteriza por la estabilidad clínica con síntomas leves (p. ej., tos, fiebre, astenia, dolor de cabeza, mialgia) asociados con linfopenia y elevación de d-dímeros y LDH; b) Estadio II (fase pulmonar): resulta de la activación de la respuesta inmune adaptativa que resulta en una reducción de la viremia, pero inicia una cascada inflamatoria capaz de causar daño tisular, y se caracteriza por un empeoramiento de la afección respiratoria(con disnea) que puede condicionar la insuficiencia respiratoria aguda asociada con empeoramiento de linfopenia y elevación moderada de PCR y transaminasas; c) Estadio III (fase hiperinflamatoria): caracterizado por insuficiencia multiorgánica fulminante con empeoramiento frecuente del compromiso pulmonar, resultado de una respuesta inmune no regulada que condiciona un síndrome de tormenta de citoquinas. Este síndrome, que recuerda a la linfohistiocitosis hemofagocítica secundaria, es potencialmente identificado por HScore. CID: Coagulación intravascular diseminada; LDH: Lactato deshidrogenasa; PCR: Proteína C reactiva; AST: Aspartato aminotransferasa; ALT: Alanino aminotransferasa; BNP: Péptido natriurético cerebral. 5 Diagnóstico: PCR: Reacción en cadena de la polimerasa (PCR). Para identificar el SARS-CoV-2 se dispone de la prueba de PCR que se realiza en un laboratorio de Microbiología y que se considera el estándar de referencia para el diagnóstico molecular. Frotis de secreciones faríngeas: La PCR también tiene limitaciones por lo que la calidad de la muestra obtenida mediante un frotis de las secreciones nasales o faríngeas es fundamental. Prueba de anticuerpos: Estas pruebas no sirven para diagnosticar la COVID-19. Son pruebas de anticuerpos que detectan si la persona ha tenido una infección en el pasado, aunque no haya tenido síntomas. Serología para SARS-CoV-2: Las pruebas serológicas que detectan anticuerpos contra SARS-CoV-2 también pueden ayudar tanto al diagnóstico de la enfermedad como para medir la respuesta a la vacunación. Sin embargo, la detección de anticuerpos no siempre traduce la existencia de inmunidad protectora, ya que no todos los anticuerpos producidos en respuesta a una infección son neutralizantes. Los anticuerpos IgM son detectables en los primeros cinco días de la infección, mientras que los anticuerpos tipo IgG se observan aproximadamente a los 14 días de la infección y pueden aparecer incluso hasta los 21 días. Estas pruebas no están recomendadas por sí solas para el diagnóstico de infección por SARS-CoV-2. Prueba antigénica: La prueba antigénica rápida para SARS-CoV-2 detecta antígenos virales y debe realizarse únicamente durante los primeros siete días a partir del inicio de los síntomas, no está indicada en personas asintomáticas. Las radiografías como las tomografías de tórax no deben utilizarse como método diagnóstico de COVID-19. En casos moderados y graves debe considerarse la realización de tomografía de tórax. Los hallazgos varían de acuerdo con la etapa de la enfermedad, enfermedades subyacentes y tratamiento recibido, los más frecuentes son: lesiones subpleurales > 3 en número, en parches, nodulares, de aspecto en panal de abeja, con densidad variable con patrón en vidrio despulido, consolidación y engrosamiento pleural. Otros signos mucho menos frecuentes son: broncograma aéreo, derrame pleural y crecimiento de ganglios linfáticos mediastinales. 6 Tratamiento: Remdesivir: en estudios in vitro, el remdesivir ejerce una potente actividad antiviral contra SARS-CoV-2. Las dosis recomendadas para pacientes hospitalizados pediátricos con peso < 40 kg son de 5 mg/kg inicial y de 2.5 mg/kg a partir del día dos, con duración de cinco hasta 10 días en pacientes que reciben ventilación mecánica. PIMS-TS con manifestaciones inespecíficas 1. Individualizar, decidir vigilancia o inicio de tratamiento de acuerdo con criterios de gravedad. 2. Primera línea: inmunoglobulina humana 2 g/kg (en una sola dosis o dividida). 3. Segunda línea: segunda dosis de inmunoglobulina humana. 4. Metilprednisolona 10 mg/kg/día. Para niños con inestabilidad hemodinámica y afección renal, se sugiere heparina no fraccionada en infusión IV como profilaxis. En caso de enfermedad tromboembólica podría iniciarse tratamiento con ajuste de la dosis según los niveles de anti-Xa. Si el paciente requiere manejo en la Unidad de Cuidados Intensivos, se indicará cefotaxima a 150 mg/ kg/día cada ocho horas IV más vancomicina 60 mg/kg/ IV cada ocho horas. El tratamiento está dirigido a los microorganismos que causan con mayor frecuencia neumonía en pacientes pediátricos: Streptococcus pneumoniae, Staphylococcus aureus y Haemophilus influenzae tipo b en niños no vacunados. Bibliografía: Ramos GMI, Carreto BLE, Salcedo CM. Métodos diagnósticos. Rev Latin Infect Pediatr. 2020; 33 (s1): s33-s41. Disponible en: https://dx.doi. org/10.35366/96669 Mercado RJY, Taborda MJ, Ochoa GE, Carreto BLE, Maldonado TB, García CER et al. Tratamiento para COVID-19. Rev Latin Infect Pediatr. 2020; 33 (s1): s42-s51. Disponible en: https://dx.doi.org/10.35366/96670 Alves Cunha, Ana Luisa, Quispe Cornejo, Armin A, Ávila Hilari, Adrián, Valdivia Cayoja, Adolfo, Chino Mendoza, Juan Manuel, & Vera Carrasco, Oscar. (2020). Breve historia y fisiopatología del covid-19. Cuadernos Hospital de Clínicas, 61(1), 130-143. Recuperado en 02 de mayo de 2022, de http://www.scielo.org.bo/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1652-67762020000100011&lng=es&tlng=es. Empendium. (2010). Gripe (influenza). https://empendium.com/manualmibe/compendio/chapter/B34.II.18.1.1.#:~:text=Patogenia%3A%20el%20virus%20de%20la,epitelio%20traqueal%2C%20bronquial %20y%20bronquiolar. Gripe en Pediatría. (2015, mayo). Pediatría Integral. https://www.pediatriaintegral.es/publicacion-2015-12/gripe-enpediatria/#:%7E:text=La%20variabilidad%20de%20s%C3%ADntomas%20en,del%20alimento%2C%2 0v%C3%B3mitos%20y%20diarrea. https://app.schoology.com/course/5746609772/materials/link/view/5746728761 https://app.schoology.com/course/5746609772/materials/link/view/5746728831
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