Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
© E LS E V IE R . Fo to co p ia r si n au to riz ac ió n es u n d el ito . 289 Introducción a la circulación El sistema circulatorio transporta y distribuye sus-tancias esenciales a los tejidos y elimina los pro-ductos metabólicos intermedios. Este sistema también participa en los mecanismos homeostáticos, como la regulación de la temperatura corporal, el man- tenimiento del equilibrio de líquidos y el ajuste del aporte de oxígeno y nutrientes en distintas situacio- nes fisiológicas. El aparato cardiovascular que realiza estas funciones está constituido por una bomba (el co- razón), una serie de tubos para la distribución y reco- gida (vasos sanguíneos) y una extensa red de vasos delgados (capilares) que permiten un rápido intercam- bio entre los tejidos y los canales vasculares. Los va- sos sanguíneos de todo el cuerpo están llenos de un líquido heterogéneo (la sangre), que resulta funda- mental para los procesos de transporte que realizan el corazón y los vasos sanguíneos. Este capítulo es una introducción general a la función del corazón y los grandes vasos, que se analizarán de forma más deta- llada en capítulos posteriores. EL CORAZÓN El corazón está constituido por dos bombas en serie: una de ellas propulsa la sangre a través de los pulmo- nes para intercambiar el O2 y el CO2 (circulación pul- monar), y la otra propulsa la sangre por todos los de- más tejidos del cuerpo (circulación sistémica). El flujo de sangre a través del corazón es unidireccional (de un solo sentido). El flujo unidireccional a través del cora- zón se consigue mediante la disposición adecuada de válvulas de cierre. Aunque el gasto cardíaco es intermi- tente, se produce un flujo continuo hacia los tejidos (periferia) gracias a la distensión de la aorta y sus ra- mas durante la contracción ventricular (sístole) y la re- tracción elástica de las paredes de las arterias con pro- pulsión anterógrada de la sangre durante la relajación ventricular (diástole). EL CIRCUITO CARDIOVASCULAR En una circulación intacta normal, el volumen total de sangre es constante, y un aumento del volumen de sangre en una zona debe ir acompañado de una re- ducción del volumen en otra. Sin embargo, la distri- bución de la sangre que circula hacia las distintas regiones del cuerpo depende del gasto generado en el ventrículo izquierdo y de la situación de contrac- ción de los vasos de resistencia (arteriolas) de estas regiones. El sistema circulatorio está constituido por conductos dispuestos en serie y en paralelo (fig. 15- 1). Esta disposición, que se analizará en detalle en posteriores capítulos, tiene importantes implicacio- nes para la resistencia, el flujo y la presión en los va- sos sanguíneos. La sangre que entra al ventrículo derecho desde la au- rícula derecha es bombeada a través del sistema arterial pulmonar con una presión media que es equivalente a la séptima parte de la existente en las arterias sistémicas. La sangre atraviesa luego los capilares pulmonares, don- de libera el CO2 que contiene y capta el O2. La sangre rica en O2 regresa por las venas pulmonares a la aurícula iz- quierda, desde donde es bombeada hacia la periferia después de atravesar el ventrículo izquierdo, lo que completa el ciclo. VASOS SANGUÍNEOS La sangre se desplaza con rapidez a través de la aorta y sus ramas arteriales. Estas ramas se van reduciendo de calibre, y las paredes se van adelgazando conforme se aproximan a la periferia. También se producen cambios histológicos. La aorta es una estructura principalmente elástica, pero las arterias periféricas son cada vez más musculares hasta que predomina la capa muscular, como sucede en las arteriolas (fig. 15-2). En las arterias de mayor calibre, la resistencia por rozamiento es relativamente pequeña y las presiones sólo son ligeramente inferiores a las presentes en la aorta. Por otro lado, las arterias de pequeño calibre ofrecen una resistencia moderada al flujo. Esta resis- tencia llega a un nivel máximo en las arteriolas, que suelen denominarse «llaves de paso» del sistema vas- cular. Por tanto, la caída de presión es máxima en el segmento terminal de las arterias más pequeñas y las arteriolas (fig. 15-3). El ajuste en el grado de contrac- ción del músculo circular de estos pequeños vasos permite regular el flujo de sangre por los tejidos y ayu- da a controlar la presión arterial. Además de la reducción de la presión a lo largo de las arteriolas, se produce un cambio de un flujo pulsá- til a otro estacionario (v. fig. 15-3). El flujo de sangre arterial pulsátil, que se debe a la propulsión intermi- tente de sangre desde el corazón, queda amortiguado a nivel de los capilares por la combinación de dos fac- tores: la distensibilidad de las grandes arterias y la re- sistencia por rozamiento de las arterias pequeñas y las arteriolas. En cada arteriola se originan muchos capilares. La superficie transversal total del lecho capilar es muy grande, aunque la de cada capilar es inferior a la de cada arteriola. En consecuencia, la velocidad de flujo de la sangre se enlentece en los capilares (v. fig. 15-3), de una forma análoga a la reducción de la velocidad de flujo en las partes más anchas de un río. Las condicio- nes existentes en los capilares resultan ideales para el 15-287-291kpen.indd 289 24/2/09 09:59:26 http://booksmedicos.org 290 Berne y Levy. Fisiología Venas Arterias Arterias de cabeza y cuello Arteriolas Vénulas Arterias del brazo Venas pulmonares Arterias braquiales Aurícula derecha Aurícula izquierda Ventrículo izquierdo Aorta Arterias coronarias Arteria esplénica Arterias del tronco Arteria hepática Vena porta Capilares peritubulares Arterias renales Arteriolas aferentesGlomérulos Arteriolas eferentes Arterias pélvicas Arterias de las piernas Vena hepática Ventrículo derecho Venas cavas Arteria pulmonar Capilares ● Figura 15-1. Representación esquemática de la disposi- ción en paralelo y en serie de los vasos que forman el sistema circulatorio. Los lechos capilares se representan como líneas del- gadas que conectan las arterias (a la derecha) con las venas (a la izquierda). Los engrosamientos en forma de semiluna proximales a los lechos capilares representan las arteriolas (vasos de resisten- cia). (Reproducido de Green HD. En Glasser I [ed.]: Medical phy- sics, vol. 1, Chicago, Year Book, 1944.) Diámetro Aorta 25 mm Arteria 4 mm Vena 5 mm Vena cava 30 mm Arteriola 30 µm 6 µm Arteriola terminal 10 µm 2 µm Capilar 8 µm 0,5 µm Vénula 20 µm 1 µmEspesor de la pared 2 mm 1 mm 0,5 mm 1,5 mm 10 mm 20 µmMicrovasos Endotelio Tejido elástico Músculo liso Tejido fibroso ● Figura 15-2. Diáme- tro interno, espesor de la pared y cantidades relativas de los principales compo- nentes de la pared vascular en los diversos vasos que forman el sistema circulato- rio. Las superficies transver- sales de los vasos no están dibujadas a escala por la tre- menda variabilidad desde la aorta o las venas cavas a los capilares. (Reproducido de Burton AC. physiol Rev 34: 619, 1945.) intercambio de sustancias capaces de difundir entre la sangre y el tejido, porque los capilares son tubos cor- tos con una pared que sólo tiene una célula de espesor y en la que la velocidad de flujo es lenta. Cuando la sangre vuelve al corazón desde los capi- lares, atraviesa las vénulas y luego las venas de un calibre cada vez más grande. La presión dentro de es- tos vasos se va reduciendo de forma progresiva hasta llegar a la aurícula derecha (v. fig. 15-3). Cerca del co- razón, el número de venas disminuye, se producen cambios en el espesor y la composición de la pared (v. fig. 15-2), se reduce la superficie transversal total de los canales venosos y aumenta la velocidad de flu- jo (v. fig. 15-3). Obsérvese que las imágenes de la ve- locidad de flujo de la sangre y la superficie transver- sal en cada nivel de la vasculatura son especulares (v. fig. 15-3). Los datos de un perro de 20kg (tabla 15-1) indican que entre la aorta y los capilares el número de vasos aumenta aproximadamente unas 3.000 millones de veces, mientras que la superficie transversal total lo hace unas 500 veces. El volumen de sangre en el le- cho vascular sistémico es máximo en las venas y vé- nulas (67%). Sólo el 5% del volumen total de sangre se localiza en los capilares y el 11% en la aorta, arte- rias y arteriolas. Por el contrario, el volumen de san- gre en el lecho vascular pulmonar se distribuye de forma prácticamente igual entre las arterias, los capi- lares y las venas. La superficie transversal de las ve- nas cavas es mayor que la de la aorta. Por tanto, la velocidad de flujo es más lenta en estos vasos que en la aorta (v. fig. 15-3). AplicAción clínicA En un paciente con hipertiroidismo (enfermedad de Graves) el metabolismo basal está aumentado y, a menu- do, se asocia con vasodilatación arteriolar. Esta reducción de la resistencia arteriolar disminuye el efecto amortigua- dor sobre la presión arterial pulsátil y se manifiesta como un flujo pulsátil en los capilares, que se puede observar en el lecho ungueal de los enfermos con este trastorno. 15-287-291kpen.indd 290 24/2/09 09:59:30 http://booksmedicos.org Capítulo 15 Introducción a la circulación 291 © E LS E V IE R . Fo to co p ia r si n au to riz ac ió n es u n d el ito . AO AG AP ART CAP VEN VP VG VC Superficie transversal Presión Velocidad ● Figura 15-3. presión fásica, velocidad de flujo y superficie transversal de la circulación sistémica. Las características importan- tes son la relación inversa entre la velocidad y la superficie transver- sal, la mayor caída de la presión en las arterias pequeñas y arterio- las, y la máxima superficie transversal con mínima velocidad de flujo en los capilares. AO: aorta; ART: arteriolas; CAp: capilares; AG: arterias de gran calibre; VG: venas de gran calibre; Ap: arterias pequeñas; Vp: venas pequeñas; VC: venas cavas; VEN: vénulas. ● Tabla 15-1. Dimensiones vasculares en un perro de 20 kg Vasos Número Superficie transversal total (cm2) Volumen total de sangre (%) Sistémicos Aorta 1 2,8 Arterias de 40 a 110.000 40 11 Arteriolas 2,8 × 106 55 Capilares 2,7 × 109 1.357 5 Vénulas 1 × 107 785 Venas de 110 a 660.000 631 67 Venas cavas 2 3,1 Pulmonares Arterias y arteriolas 1-1,5 × 10 6 137 3 Capilares 2,7 × 109 1.357 4 Vénulas y venas 2 × 106-4 210 5 Corazón Aurículas 2 5 Ventrículos 2 Datos de Milnor WR. Hemodynamics. Baltimore, Williams and Wilkins, 1982. ■ CONCEpTOS fUNDAmENTALES 1. El sistema circulatorio está constituido por una bom- ba (el corazón), una serie de tubos colectores y distri- buidores (vasos sanguíneos) y una extensa red de va- sos pequeños (capilares) que permiten un intercambio rápido de sustancias entre los tejidos y la sangre. 2. La presión pulsátil se va amortiguando de forma pro- gresiva gracias a la elasticidad de las paredes arteria- les y la resistencia por fricción de las arterias peque- ñas y las arteriolas, de forma que el flujo por el lecho capilar se considera no pulsátil. La máxima resisten- cia al flujo de sangre y la máxima caída de la presión dentro del sistema arterial se produce en las arterias pequeñas y arteriolas. 3. La velocidad de flujo de la sangre es inversamente proporcional a la superficie transversal en cualquier punto del sistema vascular. 15-287-291kpen.indd 291 24/2/09 09:59:31 http://booksmedicos.org Botón1:
Compartir