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Concepto de logica

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Concepto de Lógica
La ciencia que se basa en las leyes, modalidades y formas del conocimiento científico se conoce bajo el nombre de lógica. Se trata de una ciencia de carácter formal que carece de contenido ya que hace foco en el estudio de las alternativas válidas de inferencia. Es decir, propone estudiar los métodos y los principios adecuados para identificar al razonamiento correcto frente al que no lo es.
a) La etimología permite saber que el término ‘lógica’ tiene su origen en el vocablo latín logĭca, que a su vez deriva del griego logikós (de logos, “razón” o “estudio”). El filósofo griego Aristóteles, cuentan los expertos en cuestiones históricas, fue pionero al emplear la noción para nombrar el chequeo de los argumentos como indicadores de la verdad dentro de la ciencia, y al presentar al silogismo como argumento válido.
b) La lógica se define como la ciencia del razonamiento, o como el estudio de los métodos y principios usados para distinguir el razonamiento correcto del incorrecto. Por su parte, la lógica simbólica es el estudio de la lógica mediante la matemática, es decir, que incorpora la exactitud y rigor matemáticos.
 
Un razonamiento es cualquier grupo de oraciones declarativas, tal que una de ellas (conclusión) se afirma que se deriva de otras, llamadas premisas, las cuales se consideran evidencia de la verdad de la primera. Para efectos del curso, estudiaremos dos tipos de razonamiento:
1. Inductivo: comúnmente, por analogía; afirma probabilidad o cierta evidencia de la verdad de la conclusión.
2. Deductivo: sus premisas ofrecen una evidencia contundente de la verdad de la conclusión. Su correctitud viene dada por la validez o invalidez del razonamiento.
No obstante, no podemos pasar por alto que a lo largo de la historia existen otras muchas figuras que han contribuido con sus ideas y planteamientos a desarrollar esta ciencia. Así, por ejemplo, durante la Edad Media hay que subrayar el papel que llevó a cabo Averroes, el filósofo cordobés que, entre otras cosas, manifestó que era fundamental estudiar la lógica de los maestros antiguos para, a partir de ahí, proceder a “filosofar” de la manera correcta.
Ya en los siglos XVIII y XIX uno de los personajes que más abordó el tema de la lógica fue Immanuel Kant. Este está considerado como uno de los pensadores más importantes e influyentes de la historia y destaca por el hecho de que en esta materia que nos ocupa estableció un nuevo concepto: la lógica trascendental.
Un término aquel con el que dicho filósofo de origen prusiano intentaba definir al proceso por el cual el ser humano debe llevar a cabo una investigación de lo que vendrían a ser los conceptos puros de categorías de tipo trascendental o también de lo que es el exacto entendimiento.
Hegel, Augustus De Morgan, John Venn o Gottlob Frege son otros de los autores que han destacado en el campo de la lógica y especialmente este último que causó una auténtica revolución con sus teorías. De ahí que sea considerado, junto al mencionado Aristóteles, como el lógico más importante de toda la historia. Y es que estableció los conceptos de prueba, lógica de predicados o lenguaje formal.
Aristóteles está considerado como el padre de la lógica formal. En cambio, la lógica informal refiere al examen metódico de los argumentos probables a partir de la oratoria, la retórica y la filosofía, entre otras ciencias. Tiene como objetivo el reconocimiento de paradojas y falacias, así como ser un recurso eficaz para construir los discursos de forma correcta.
Funciones del lenguaje
Las funciones del lenguaje se refiere al uso de la lengua que hace un hablante. Son los diferentes objetivos, propósitos y servicios que se le dan al lenguaje al comunicarse, dándose una función del lenguaje por cada factor que tiene éste, en donde la función que prevalece.
Función referencial, representativa o informativa
Es la función del lenguaje relacionada con los factores de la comunicación referente y contexto, es decir, cualquier cosa exterior al propio acto comunicativo. Es la función más evidente y primordial a primera vista, pues se encuentra en todo acto comunicativo. Se da cuando el mensaje que se transmite puede ser verificable y reconocemos la relación que se establece entre el mensaje y los referentes externos del mismo. Los recursos lingüísticos principales de esta función son los deícticos. Utiliza un lenguaje de significado denotativo (el significado primario de las palabras). Prevalecen los sustantivos y verbos, la entonación enunciativa o aseverativa y el modo verbal indicativo, que es el modo de lo real; es la más común en textos informativos, científicos y periodísticos (en el género denominado noticia).
Se ha denominado de diversas maneras; Bühler la llamaba "simbólica", pero también representativa; otras denominaciones son denotativa, cognoscitiva o referencial. Brinda conocimientos, conceptos e información objetiva.
Los textos que la contienen se caracterizan por ser objetivos, Mono sémicos y unívocos. Esta función la encontramos en los llamados textos científicos, cuyo propósito es ofrecer conocimientos. Se caracterizan por aludir a lo extralingüístico, es decir, a nuestro entorno o lo que nos rodea y se emplea cuando pretendemos transmitir una información sin hacer valoraciones sobre ella ni pretender reacciones en nuestro interlocutor. De esta función emana el archigénero literario narrativo o épico.
Función emotiva o expresiva
Suele identificarse con el factor de la comunicación emisor. Con frecuencia lleva su verbo en primera persona, aunque no siempre (por ejemplo: "¡Qué bonito es el Mediterráneo!") y su significado suele revelar o desahogar un sentimiento físico ("¡Ay!") o psíquico ("¡Maldita sea la economía de este país!") del emisor del mensaje. Esta función le permite exteriorizar sus sentimientos y estados de ánimo, así como sus deseos o el grado de interés o de apasionamiento con que aborda cualquier comunicación y siempre se centra en el emisor:
Niña, te quiero tanto,
niña, tanto te quiero,
que si me sacan los ojos
te miro por los agujeros.
Es bueno aclarar que la expresividad no se da aparte de lo representativo, sino que es una función del lenguaje que permite una proyección del sujeto de la enunciación pero con base en una representatividad. Así, en expresiones corrientes como "esa mujer me fascina" o "¡qué mañana tan hermosa!", predomina, sin duda, la función expresiva, pero con un soporte de representación simbólica dado por la alusión a unos referentes.
Para concluir, observemos que la función expresiva o emotiva se manifiesta gracias a los significados afectivos o connotativos que se establecen sobre la base de los significados denotativos: cuando hablamos, expresamos nuestro estado de ánimo, nuestras actitudes o nuestra pertenencia a un grupo social, damos información sobre nosotros mismos, exteriorizamos síntomas, aunque no tengamos siempre plena conciencia de ello. El emisor se comunica para transmitir la información centrada objetivamente en la realidad exterior referente a las ideas que tiene sobre ella. Permite comunicar a otros estados de ánimo, las emociones. De ella emana el archigénero literario lírico o poético.
EL JUICIO
El juicio (del latín Judicare) es una discusión judicial y actual entre partes, y sometido al conocimiento de un tribunal de justicia.
Esto presupone la existencia de una controversia o conflicto de interés, es decir, la sustentación de derechos e intereses contradictorios o contrapuestos a lo defendido por la parte contraria, y que la perjudican.
El término juicio, que proviene del latín iudicĭum, tiene diversos usos. Se trata, por ejemplo, de la facultad del alma que permite distinguir entre el bien y el mal o entre lo verdadero y lo falso. El juicio es, por otra parte, una opinión, un dictamen o un parecer. El juicio está formado por un sujeto (el concepto de objeto del juicio), un predicado (el concepto que se aplica al sujeto) y la cópula (lo que establece si lo pensado es propio o no del objeto del juicio). “El ser humano es malo”es un ejemplo de juicio, donde “ser humano” es el sujeto, “malo” es el predicado y “es” la cópula.
El juicio oral es el periodo decisivo del proceso penal en que, después de concluido el sumario, se practican directamente las pruebas y alegaciones ante el tribunal sentenciador, son juicios concentrados, de inmediación judicial con actuación pública de todas las partes e intervención directa y constante de juez, que se llevan en forma oral. Reciben este nombre en contraposición a los juicios escritos, y están regidos por una serie de principios propios. Amiguismos
La lógica aristotélica. Los juicios
La relación de dos conceptos da lugar a la formulación de un juicio. Si se da entre ambos una relación de conveniencia decimos que el juicio es afirmativo, y en caso contrario, negativo. El sujeto del juicio es el concepto del que se afirma o niega algo; el predicado es el concepto que se afirma o niega del sujeto. Aristóteles distingue en los juicios la materia y la forma. La materia o contenido del juicio son los conceptos que se relacionan; la forma es la relación que se establece entre ellos a través del verbo ser. Aristóteles representa el sujeto del juicio con un signo (S) y el predicado con otro (P) para intentar separar la materia de la forma: así, la forma del juicio "Juan es alto" se representaría como "S es P", y la forma del juicio "Juan no es alto" como "S no es P".
Los juicios se clasifican en varios grupos, atendiendo a la cantidad (según la extensión del sujeto: universales, particulares, singulares), la cualidad (según la cualidad de la cópula: afirmativos y negativos), la relación (según la relación entre el sujeto y el predicado: categóricos, hipotéticos y disyuntivos) y la modalidad (según el modo en que expresan la relación entre el sujeto y el predicado: apodícticos, asertóricos y problemáticos). De ahí se sigue una clasificación ordenada de todas las formas de juicio; en el caso de los juicios categóricos, por ejemplo, se daría la siguiente clasificación, combinando la cantidad (universal y particular) y la cualidad (afirmativo y negativo):
	Clases de juicios y letras que los representan
	Clase de juicio
	Representación
	Universal afirmativo
	Se suele representar con la letra A
	Universal negativo
	Se suele representar con la letra E
	Particular afirmativo
	Se suele representar con la letra I
	Particular negativo
	Se suele representar con la letra O
La asignación de estas letras para representar las formas del juicio categórico es posterior a Aristóteles y procede de las palabras latinas "AfIrmo" y "nEgO", y es la que se ha utilizado tradicionalmente entre nosotros para referirnos a la clasificación aristotélica de los juicios. También Aristóteles estudia las formas de oposición entre los juicios, (es decir, la diversidad entre los juicios que tienen el mismo sujeto y predicado), deduciendo una serie de reglas sobre la verdad de los mismos que se han de cumplir independientemente de los conceptos que elijamos para formar los juicios.
En función de tales reglas se pueden establecer relaciones de oposición entre los distintos tipos de juicios, según sean contrarios, contradictorios, subcontrarios o subalternos, determinando su valor de verdad en función del tipo de oposición con otro juicio conocido. Se pueden representar con el cuadro siguiente:
Al igual que ocurría con los conceptos, que son actos mentales que se expresan mediante términos lingüísticos, los juicios son actos mentales que se expresan mediante proposiciones, es decir, mediante un conjunto de palabras u oración gramatical. El mismo juicio se puede expresar con distintas proposiciones (por ejemplo, usando distintos idiomas), y a veces la misma proposición puede referirse a juicios distintos, ("ésta es mi casa" dicha por dos personas distintas).
1) Por su cantidad: el número de individuos que el juicio abarca.
Universales: Se afirma o niego de todo el conjunto de individuos comprendidos en el universo del juicio.
Todo hombre es mortal.                Ninguna gallina vuela.
Particulares: Se afirma o se niega sólo de una parte del conjunto, o de algunos miembros:
Algún alumno es responsable.     Algunos maestros no son simpáticos.
 
2) Por su cualidad:
Afirmativos: afirman la relación de dos conceptos, algo x es y, todo x es y.
Negativos: niegan la relación de dos conceptos: ningún x es y algún x no es y
 
3) Por su modalidad: corresponde a los niveles de certeza: posibilidad, realidad y necesidad.
Juicios Problemáticos: Expresan sólo una categoría de posibilidad, indican que algo puede suceder, ocurrir o conocerse.
Es posible que llueva en la tarde.
El cáncer puede ser originado por un virus.
Es probable que designen un nuevo secretario de hacienda.
Tal vez consiga libertad condicional.
 
Juicios Asertóricos: Enuncian un saber real, pero subjetivo, es decir lo que cada ser humano puede opinar y/o sentir sobre algo y que, por tanto, es sujeto de discusión y de un juicio contrario con igual validez.
Cien años de soledad es el mejor libro que he leído.
Las pinturas de Picasso no me gustan.
La pena de muerte es un castigo justo.
La tortura es mala.
 
Juicios Apodícticos: Expresan el máximo grado de verdad, certeza y necesidad del conocimiento. Nos indican algo que debe ser por necesidad (leyes de las matemáticas, de la física y demás ciencias)
La materia no se crea ni se destruye, sólo se transforma.
Teorema de Pitágoras.
A mayor profundidad en el mar, mayor presión.
 
4) Por su relación: (entre sujeto y predicado)
Juicios Categóricos: Expresa una verdad sin condiciones, enuncia una verdad del conocimiento y puede ser universal o particular, afirmativa o negativa
Ningún hombre vuela.
Algunos humanos son inmunes al VIH.
Juicios Hipotéticos: expresa una condición de posibilidad de un fenómeno cualquiera. Afirma relaciones de causa y efecto.
Si llueve, la siembra será buena.
Si baja la temperatura, hará frío.
Si estudias, podrás resolver los ejercicios.
Juicios Disyuntivos: Fija una doble o múltiple posibilidad como solución a su planteamiento.
La lectura se lee en su idioma original o en traducciones.
Los mamíferos pueden ser terrestres o acuáticos.
OPOSICION DE LOS JUICIOS CATEGORICOS
Se llama cuadrado o cuadro de oposición1 al esquema mediante el que se estudian las relaciones formales entre los diversos tipos de juicios aristotélicos, A, E, I, O, considerando cada juicio con términos idénticos. En su día fue considerado por el mismo Aristóteles.2
A = UNIVERSAL AFIRMATIVO. Término Sujeto tomado en su extensión universal; término Predicado particular; cualidad afirmativa. Todo S es P.
E = UNIVERSAL NEGATIVO. Término Sujeto tomado en su extensión universal; término Predicado universal; cualidad negativa. Ningún S es P.3
I = PARTICULAR AFIRMATIVO. Término Sujeto tomado en su extensión particular; término Predicado en su extensión particular; cualidad afirmativa. Algún S es P.
O = PARTICULAR NEGATIVO. Término Sujeto tomado en su extensión particular; término Predicado en su extensión universal; cualidad negativa. Algún S no es P.4
Cuadro de oposición.
Se llaman juicios opuestos a los que teniendo los mismos términos difieren en cantidad, en cualidad o en ambas. Se representan en cada uno de los vértices del cuadrado de oposición, estableciéndose las siguientes relaciones:
A y E son contrarios porque difieren en cualidad siendo universales.
I y O son subcontrarios, porque siendo particulares difieren en la cualidad.
A con respecto a O, e I con respecto a E son contradictorios, porque difieren en cantidad y cualidad.
A con respecto a I, y E con respecto a O son subalternos porque difieren en la cantidad.
Las relaciones con respecto al valor de verdad en relación de unos y otros se muestran en los siguientes cuadros:
	OPOSICIÓN
	JUICIOS RELACIONADOS
	RELACIÓN VERITATIVA
	Contrarios
	A - E
	No pueden ser ambos verdaderos
Pero pueden ser los dos falsos
	Subcontrarios
	I - O
	Pueden ser ambos verdaderos
Pero no pueden ser los dos falsos
	Subalternos
	A - I
E - O
	Si el universal (A, E) es verdadero, entonces el particular(I, O) es verdadero
Pero si el particular (I, O) es verdadero, entonces el universal (A, E) es indeterminado
Si el particular (I, O) es falso, entonces el universal (A, E) es falso
Pero si el universal (A, E) es falso, entonces el particular (I, O) es indeterminado
	Contradictorios
	A - O
E - I
	Si uno es verdadero el otro es falso y viceversa
Ni ambos verdaderos, ni ambos falsos.
LOGICA DEDUCTIVA
En lógica, un razonamiento deductivo es un argumento donde la conclusión se infiere necesariamente de las premisas.1 En su definición formal, una deducción es unasecuencia finita de fórmulas, de las cuales la última es designada como la conclusión (la conclusión de la deducción), y todas las fórmulas en la secuencia son, o bien axiomas, o bien premisas, o bien inferencias directas a partir de fórmulas previas en la secuencia por medio de reglas de inferencia.1 2
Un ejemplo de razonamiento deductivo es el siguiente: “Todos los perros tienen cuatro patas / Bobby es un perro / Bobby tiene cuatro patas”. Como se puede apreciar, la conclusión (“Bobby tiene cuatro patas”) deriva directamente de la premisa original, que es universal (“Todos los perros tienen cuatro patas”).
Es importante tener en cuenta que el razonamiento deductivo puede ser válido en su forma, pero derivar en una conclusión falsa al partir de una premisa que no es verdadera: “Las mujeres son siempre rubias / Oprah Winfrey es mujer / Oprah Winfrey es rubia”. En este caso, la deducción es lógica, pero la premisa original es falsa, lo que lleva a una conclusión también falsa.
Suele decirse que el razonamiento deductivo se inicia con una premisa mayor y se complementa con una premisa menor para arribar a la conclusión:
Premisa mayor: “Todos los seres humanos, en algún momento, morirán”.
Premisa menor: “Bruno es un ser humano”.
Conclusión: “Bruno, en algún momento, morirá”.
Como se puede apreciar en todos los ejemplos, el razonamiento deductivo no siempre nos lleva a una conclusión verdadera; del mismo modo, no siempre nos ofrece información detallada o precisa, a pesar de partir de lo general para llegar a lo particular.
SILOGISMO CATEGORICO
Un silogismo categórico o silogismo clásico es un silogismo compuesto por exactamente tres proposiciones categóricas (dos premisasy una conclusión).1 Una proposición es categórica cuando tiene una de las siguientes cuatro formas:1
· Universal afirmativa (proposiciones-A): Todo S es P
· Universal negativa (proposiciones-E): Ningún S es P
· Particular afirmativa (proposiciones-I): Algunos S son P
· Particular negativa (proposiciones-O): Algunos S no son P
Por ejemplo, el siguiente argumento es un silogismo categórico:
	1. Todos los gatos son animales.
2. Algunos gatos son negros.
3. Por lo tanto, algunos animales son negros.
	1. Todo M es S
2. Algunos M son P
3. Por lo tanto, algunos S son P
LOGICA INDUCTIVA
El propósito del razonamiento inductivo o lógica inductiva es el estudio de las pruebas de enbarado a las menores de edad que permiten medir la probabilidad de los argumentos, así como de las reglas para construir argumentos inductivos fuertes. A diferencia del razonamiento deductivo, en el razonamiento inductivo no existe acuerdo sobre cuándo considerar un argumento como válido. De este modo, se hace uso de la noción de "fuerza inductiva", que hace referencia al grado de probabilidad de que una conclusión sea verdadera cuando sus premisas son verdaderas. Así, un argumento inductivo es fuerte cuando es altamente improbable que su conclusión sea falsa si las premisas son verdaderas1
Tradicionalmente se consideraba (y en muchos casos todavía se considera) que el razonamiento inductivo es una modalidad del razonamiento que consiste en obtenerconclusiones generales a partir de premisas que contienen datos particulares o individuales. Por ejemplo, a partir de la observación repetida de objetos o eventos de la misma índole se establece una conclusión general para todos los objetos o eventos de dicha naturaleza.2 3 4
Sin embargo, esa definición, en el presente y en lógica, ya no está en uso: “Como ya mencionamos, a veces se expresa la diferencia entre deducción e inducción diciendo que la segunda, contrariamente a la primera, “va de lo particular a lo general”. Si con ello se quiere decir que en un argumento inductivo válido las premisas son siempre todas afirmaciones particulares y la conclusión es una afirmación general (esto es, cuantificacional).5 6 Lo anterior, es dado porque es posible tanto enunciar proposiciones inductivas en forma "deductiva"7 como de manera que no corresponden formalmente a lo que clásicamente se consideraba razonamiento inductivo.8
CLASES DE LA INDUCCION EN EL RAZONAMIENTO INDUCTIVO
Inducción de acuerdo con Hume: orígenes y problemas
Posteriormente David Hume introduce una distinción entre “ámbitos” del conocimiento que, incluso en el presente, muchos consideran fundamental: “Las existencias reales, las cuestiones de hecho, así como las relaciones de ideas, son, epistemologicamente hablando irreductibles. Se necesitan métodos distintos para dar razón de unas y otras. Ladeducción es válida para las segundas, solo la inducción lo es para las primeras. La distinción entre estos dos ámbitos de conocimiento la formula Hume diciendo, en primer lugar, en el Treatise: ‘El entendimiento se ejerce en dos formas diferentes, cuando juzga desde la demostración o desde la probabilidad; cuando considera las relaciones abstractas de nuestras ideas o aquellas relaciones de objetos de las que solo la experiencia nos da información”.16
Inducción de Herschel: búsqueda de causas
John Herschel22 busca resolver el problema de la inducción argumentando que para cada nuevo hecho científico, incluyendo hipótesis, hay dos aspectos distintos: eldescubrimiento y su verificación. Herschel notó que el método para formular una hipótesis no tiene nada que ver con su mayor o menor aceptación: una propuesta derivada de observaciones cuidadosas, sistemáticas, puede tener el mismo valor que una intuición momentánea o incluso accidental, si sus predicciones se cumplen en la realidad. El proceso científico tiene dos momentos diferentes: una es el contexto del descubrimiento, y la otra el contexto de la validación o justificación. (Esta sugerencia fue posteriormente modificada y formalizada por Hans Reichenbach23 ).
Los cánones de Mill
John Stuart Mill24
Los primeros cuatro cánones, apuntan a concluir qué circunstancia hallada en los casos es causa del fenómeno estudiado. En el último, las causas se buscan en otros fenómenos.
I. Método de la concordancia.
Sirve para identificar las condiciones necesarias. Se rige por el siguiente principio, a saber: “Cualquier propiedad que se encuentre ausente cuando el efecto esté presente no puede ser una condición necesaria”. Esto es lo mismo que decir: “Cualquier posible causa necesaria para que ocurra un efecto que se encuentre ausente cuando el efecto está presente, no puede ser una condición necesaria del efecto”.
Por ejemplo: supongamos que estudiamos la combustión (o lo que es lo mismo, la propiedad condicionada "combustión") y deseamos dilucidar cuáles son las posibles causas (o lo que es lo mismo, las posibles propiedades condicionantes) de la misma. Para que se produzca la combustión son causas necesarias: el combustible, el oxígeno y la chispa. Supongamos ahora que en una situación dada observamos el fenómeno de la combustión. Supongamos ahora que sospechamos algo absurdo: que el agua es una posible causa necesaria para la combustión. Ahora, en una situación dada, observamos que la posible propiedad condicionante “agua” está ausente cuando el efecto de la combustión está presente. De este modo concluimos que el agua no puede ser condición necesaria para la combustión, ya que observamos que el agua se encuentra ausente cuando el efecto, la combustión, está presente. Si esta observación se produce una y otra vez, tenemos motivos fundados para concluir que, mientras que la experiencia de otras observaciones no demuestre lo contrario, el agua no puedeser condición necesaria para la combustión.
II. Método de la diferencia. Si una circunstancia entre varias iguales es la que distingue al resto de los casos, y el fenómeno se da diferente en ese caso, entonces dicha circunstancia es la causa del fenómeno.
III. Método de la concordancia y diferencia. Es el método de la concordancia, que se verifica con el método de la diferencia. Este método puede parecer más seguro. Sin embargo, tampoco es infalible.
IV. Método de los residuos. Consiste en eliminar determinadas circunstancias, e ir observando si el fenómeno persiste.
V. Método de las variaciones concomitantes. Consiste en observar las variaciones del fenómeno, y descubrir qué otro fenómeno varía de manera concomitante. Si se encuentra, ése puede ser la causa del fenómeno estudiado.
EL RAZONAMIENTO
En sentido amplio, se entiende por razonamiento a la facultad que permite resolver problemas, extraer conclusiones y aprender de manera consciente de los hechos, estableciendo conexiones causales y lógicas necesarias entre ellos. En sentido más restringido se puede hablar de diferentes tipos de razonamiento: 
En un sentido restringido, se llama razonamiento lógico al proceso mental de realizar una inferencia de una conclusión a partir de un conjunto de premisas. La conclusión puede no ser una consecuencia lógica de las premisas y aun así dar lugar a un razonamiento, ya que un mal razonamiento aún es un razonamiento en sentido amplio, no en el sentido de la lógica. Los razonamientos pueden ser válidos (correctos) o no válidos (incorrectos) dando por todo.
En general, se considera válido un razonamiento cuando sus premisas ofrecen soporte suficiente a su conclusión. Puede discutirse el significado de "soporte suficiente", aunque cuando se trata de un razonamiento no deductivo no podemos hablar de validez sino de "fortaleza" o "debilidad" del razonamiento dependiendo de la solidez de las premisas, la conclusión podrá ser más o menos probable pero jamás necesaria, solo es aplicable el término "válido" a razonamientos del tipo deductivo. En el caso del razonamiento deductivo, el razonamiento es válido cuando la verdad de las premisas implica necesariamente la verdad de la conclusión.
Los razonamientos no válidos que, sin embargo, parecen serlo, se denominan falacias.
El razonamiento nos permite ampliar nuestros conocimientos sin tener que apelar a la experiencia. También sirve para justificar o aportar razones en favor de lo que conocemos o creemos conocer. En algunos casos, como en las matemáticas, el razonamiento nos permite demostrar lo que sabemos.
El término razonamiento es el punto de separación entre el instinto y el pensamiento, el instinto es la reacción de cualquier ser vivo. Por otro lado el razonar nos hace analizar,y desarrollar un criterio propio, el razonar es a su vez la separación entre un ser vivo y el hombre.
Razonamiento inductivo
El razonamiento inductivo es también conocido como la lógica “de abajo hacia arriba”. Es un tipo de razonamiento que se centra en la creación de declaraciones generalizadas a partir de ejemplos o sucesos específicos.
Cuando se efectúa este tipo de razonamientos, se trabaja a partir de ejemplos concretos que pueden resultar o no verdaderos; entonces luego se transfieren a conceptos generalizados.
Razonamiento deductivo
El razonamiento deductivo se diferencia del inductivo, porque  utiliza conceptos generalizados para tratar de llegar a otros más específicos. Por esta razón también se le conoce como el enfoque “de arriba hacia abajo”.
El investigador que emplea este método, comienza con una idea generalizada y se va haciendo camino hasta llegar a un ejemplo específico. En este caso, se infieren conclusiones a partir de una teoría existente.
FALACIAS
En lógica, una falacia (del latín: fallacia, ‘engaño’) es un argumento que parece válido, pero no lo es.1 2 Algunas falacias se cometen intencionalmente para persuadir o manipular a los demás, mientras que otras se cometen sin intención debido a descuidos o ignorancia. En ocasiones las falacias pueden ser muy sutiles y persuasivas, por lo que se debe poner mucha atención para detectarlas.3
El que un argumento sea falaz no implica que sus premisas o su conclusión sean falsas ni que sean verdaderas. Un argumento puede tener premisas y conclusión verdaderas y aun así ser falaz. Lo que hace falaz a un argumento es la invalidez del argumento en sí. De hecho, inferir que una proposición es falsa porque el argumento que la contiene por conclusión es falaz es en sí una falacia conocida como argumento ad logicam.4
Clases de falacias
Existe una vasta variedad de falacias que podrían ser clasificadas según diferentes puntos de vista, a continuación tomaremos las consideradas más importantes y estudiadas en general para su descripción.
1. Formales: son aquellas donde el error es prácticamente imperceptible, por lo que a pesar de no ser un razonamiento correcto o válido; su conclusión es igualmente considerada correcta dado que existe una similitud importante con el razonamiento correcto.
Dentro de este grupo podemos a su vez encontrar:
· Negación de antecedentes: según esta, si se niegan o dan por inválidos los antecedentes de la misma manera debe negarse la conclusión que de ellos provenga. Otra característica es que la falacia es lógica, y tiene similitudes con al argumento. Entonces si existe A también existe B, por lo que si no hay A tampoco hay B.
· Afirmación del consecuente: está basada en la simetría, por lo que plantea que porque una idea es verdadera, su idea contraria u opuesta también lo es. De esta forma podríamos decir que se interpreta como: si X da existencia a Y; entonces Y da existencia a X. Es decir, que es un error en la conclusión que se arrastra de un razonamiento equivoco.
2. Informales: en este caso, el condicional es que los datos o la información que pueden darnos las premisas sobre las que se basa la conclusión, no son suficientes para justificar en forma correcta dicha conclusión. Dicho en forma más clara, es cuando se recurre a elementos que no son pertinentes, para lograr convencer al otro de que la conclusión es correcta o valida.
En este caso podemos identificar los siguientes derivados de este tipo:
· Ad hominem: se trata de aquella situación en la que, para defender una determinada postura o conclusión, se ataca a quien argumenta en contra de la misma. Normalmente se apela a la desacreditación de este individuo, atribuyéndole características directamente al sujeto que harían sus contra argumentaciones menos válidas.
· Ad baculum: en este caso se trata del uso de herramientas como la amenaza, el miedo, o la fuerza para imponer o establecer una posición determinada. En general se encuentra vinculado a situaciones donde existe una dependencia jerárquica entre seres humanos.
· Ad verecundiam: es cuando se justifica una conclusión apelando a lo dicho por alguien con autoridad en el tema; en lugar de dar las razones correspondientes. El problema radica en que por más que sea una autoridad, no constituye una garantía de veracidad en la conclusión.
· Ad populum: se trata de la expresión de razones no relacionadas con la conclusión para demostrar que esta existe, y por lo tanto de no decir las razones que están verdaderamente vinculadas. Para que esta pueda ser utilizada es necesario tener la certeza de que el auditorio va a aceptar las razones expresadas como verdaderas y vinculadas; aunque verdaderamente no lo estén. Su intención esta en general vinculada a generar ciertas emociones en los oyentes.
· Ad ignorantiam: es el caso en el que intenta demostrarse que un razonamiento es válido o verdadero por el sólo hecho de que no se puede demostrar que es falso. Un ejemplo seria decir que el oxigeno no existe porque no puedo verlo.
A.     FALACIAS FORMALES
Las falacias formales son razonamientos no válidos pero que a menudo se aceptan por su semejanza con formas válidas de razonamiento o inferencia. Se da un error que pasa inadvertido.
B. FALACIAS INFORMALES
Las falacias no formales sonrazonamientos en los cuales lo que aportan las premisas no es adecuado para justificar la conclusión a la que se quiere llegar. Se quiere convencer no aportando buenas razones sino apelando a elementos no pertinentes o, incluso, irracionales. Cuando las premisas son informaciones acertadas, lo son, en todo caso, por una conclusión diferente a la que se pretende.
METAFISICA
La metafísica (del latín metaphysica, y este del griego μετὰ φυσική, «más allá de la física»)1 es una rama de la filosofía que estudia la naturaleza, estructura, componentes y principios fundamentales de la realidad.2 3 4
La metafísica aborda problemas centrales de la filosofía, como lo son los fundamentos de la estructura de la realidad, el sentido y la finalidad última de todo ser. La metafísica tiene dos temas principales: el primero es la ontología, que en palabras de Aristóteles viene a ser la ciencia que estudia el ser en cuanto tal. El segundo es el de la teleología, que es el estudio de los fines como causa última de la realidad. Existe, sin embargo, un debate que sigue aún hoy sobre la definición del objeto de estudio de la metafísica, sobre si sus enunciados tienen propiedades cognitivas.
La metafísica estudia los aspectos de la realidad que son inaccesibles a la investigación científica. Según Immanuel Kant, una afirmación es metafísica cuando afirma algo sustancial o relevante sobre un asunto («cuando emite un juicio sintético sobre un asunto») que por principio escapa a toda posibilidad de ser experimentado sensiblemente por el ser humano. Algunos filósofos han sostenido que el ser humano tiene una predisposición natural hacia la metafísica. Kant la calificó de «necesidad inevitable». Arthur Schopenhauer incluso definió al ser humano como «animal metafísico».
ESTIMOLOGIA
La palabra «metafísica» deriva del griego μετὰ φυσική, que significa «más allá de la naturaleza o más allá de la física», proviene del título puesto por Andrónico de Rodas (Siglo I a. C.) a una colección de escritos de Aristóteles. Esto no implica que la metafísica haya nacido con Aristóteles, sino que es de hecho más antigua, dado que hay casos de pensamiento metafísico en los filósofos presocráticos. Platón estudió en diversos diálogos lo que es el ser, con lo que preparó el terreno a Aristóteles de Estagira, que elaboró lo que él llamaba una «filosofía primera», cuyo principal objetivo era el estudio del ser en cuanto tal, de sus atributos y sus causas.
El término «metafísica» proviene de una obra de Aristóteles compuesta por catorce volúmenes (rollos de papiro), independientes entre sí, que se ocupan de diversos temas generales de la filosofía. Estos libros son de carácter esotérico, es decir, Aristóteles nunca los concibió para la publicación. Por el contrario, son un conjunto de apuntes o notas personales sobre temas que pudo haber tratado en clases o en otros libros sistemáticos.
EL ENTE Y EL SER
Ser es el atributo filosófico griego que se le adjudica a una entidad capaz de definirse a sí misma frente a un medio capaz.
Ser es el más general de los términos. Con la palabra «Ser» se intenta abarcar el ámbito de lo real en sentido ontológico general, esto es, la realidad por antonomasia, en su sentido más amplio: «realidad radical». El Ser es, por tanto, un trascendental, aquello que trasciende y rebasa todos los entes sin ser él mismo un ente, es decir, sin que ningún ente, por muy amplio que sea y se presente, lo agote. Dicho de otro modo: el Ser desborda y supera dialécticamente el mundo de las formas, el mundus asdpectabilis, trasladándose en otro contexto, «más allá del horizonte de las focas», más allá de toda la "morfología cósmica".1
Sin embargo, la pregunta por el Ser no corresponde solamente a occidente, y los filósofos antiguos de China desarrollaron independientemente posiciones acerca del ser. YaLaozi hace en el siglo VI a.C. la distinción entre ser y no-ser. Luego, las escuelas neo-taoístas (Wang Bi, Guo Xiang, etc.) harán prevalecer el no-ser sobre el Ser.
El latín ens, ente es un concepto filosófico que remite a lo que es, existe o puede existir. Un ente participa del ser y tiene que propiedades que, como ente, le son propias. El concepto trasciende lo material, ya que un ente puede ser una mesa, un televisor, un lago o la raíz cuadrada de dieciséis.
Para una mejor comprensión de este vocablo resulta muy útil valerse de algunas comparaciones. Así como estudiante es el que estudia, amante es el que ama y pudiente es el que puede, ente es el que es. El ente posee ser, aunque no agote todo los rasgos del mismo. Podría decirse que es una concreción particular del ser, con características determinadas. El ente es un ser de modo concreto.
El ser y la nada (en francés, L´être et le néant) es la primera obra filosófica de Jean-Paul Sartre (1905-1980), filósofo y principal exponente delexistencialismo francés. Fue publicada en 1944.
En ella, Sartre idealiza a las personas como seres capaces de crear sus propias leyes al rebelarse contra todo tipo de estatutos, aceptando laresponsabilidad, la ética y toda moral personal sin el apoyo de la sociedad, la ética o cualquier norma tradicional. Su teoría existencial declara la libertad de todas las personas para escoger sus propios conceptos de comportamiento y libre pensamiento hacia una perfecta libertad de elección de crear los significados de las cosas y de la realidad en general. En la relación entre el ser su pasado y su futuro, Sartre evoca los conceptos de tiempo como una proyección mental del ser, siendo estos los causantes de la inacción del mismo al quedar varado entre lo que fue y lo que podría ser.
ESENCIA_SUBTANCIA
Los conceptos de esencia y de sustancia nacieron con Aristóteles, pero hoy ya pertenecen a la filosofía universal, puesto que autores de todos las épocas los han usado y seguirán usándolos.
Sin sujetarnos a ningún autor, podemos decir que sustancia es aquello que existe por sí mismo, sin necesidad de otro, y tiene un fin en sí mismo. Está fuera de lo mutable, de los accidentes que le dan a un sujeto o cosa unas dimensiones y una figura concreta; es por tanto, inmaterial e inmutable. Esencia es aquello que es el ser antes de existir fácticamente, o sea, de estar situado dentro del espacio-tiempo.
Estos conceptos nos sitúan ya de lleno dentro del terreno metafísico. No obstante, vamos a hacer dos lecturas de este gráfico (obra del autor de este flog), una, física, con arreglo a la Gran Explosión y otra, ya metafísica, con respecto a la causa primera, de naturaleza metafísica que puso todo en movimiento para el cumplimiento de un plan global y de unos planes particulares.
El Big- Bang fue el comienzo de todo; todo esta contenido, por tanto, en la ya nombrada cabeza de alfiler que le dio origen. A ese punto previo lo he llamado C, “el que todo lo contiene”, dentro del cual (recordemos la teoría matemática de los conjuntos) se encuentra B, “le que baja”, el que sale de C, tomando de él sus sustancia y comienza su camino hacia la culminación del plan contenido en C; así, de la ola inmensa de energía que salió de C, comenzaron a formarse las galaxias y, después, las estrellas y demás cuerpos celestes; y, posteriormente, de todo lo que conlleva la evolución de los planetas, así se constituyeron los reinos de la naturaleza en la tierra y comenzó la vida, con todas sus especies y formas vivientes...
La sustancia, en cuanto soporte de unas cualidades predeterminadas, está como a mitad de camino entre sus origen y su destino, el plano evolutivo donde esas cualidades habrán de desarrollarse; la esencia está más cerca de este plano evolutivo, es como el desarrollo logrado de aquellas cualidades predeterminadas de las que hablábamos en la sustancia, y gobierna la evolución para el logro de las mismas.
Metafísicamente, la causa primera, conocida como Dios en todas las culturas que han existido sobre la faz de la tierra, ocupa el lugar de C. En la creación, todo lo creado sale de él y es participe de su voluntad de llegar a una metaque no es otra que alcanzar la perfección a la que llegará a través de todo un largo proceso evolutivo; a la sustancia, una vez separada del Creador y eficaz para cumplir con ese fin, se la suele llamar alma; y la esencia es el ser encarnante, que vive la vida como una posibilidad de ir ampliando continuamente su conciencia de quién es...
Así pueden entenderse algunos textos bíblicos un tanto misteriosos, como cuando Cristo les dijo a sus discípulos “sed perfectos como vuestro padre celestial es perfecto”; o como cuando dijo “Yo y mi padre somos uno”: la esencia debe igualarse a la sustancia, esa la meta de todo cuanto ha descendido desde C.
MATERIA FORMA
Para Aristóteles sólo el individuo es sustancia; que no se puede definir por su elemento material ni por lo perecedero de la materia, porque la sustancia es la esencia o forma de una cosa.
La sustancia es principalmente la forma, que es inmaterial, y la única sustancia verdadera y única es la sustancia pura.
Las formas puras, independientes de la materia son Dios, las inteligencias de las esferas y el entendimiento agente en el hombre.
La forma pura es el elemento inteligible mientras la materia es impenetrable por el pensamiento.
Existe un sustrato en el cambio que subyace, sin características propias definidas y que está en potencia, en todo lo que se modifica, por acción de una causa eficiente.
La materia siempre existe en conjunción con la forma que la caracteriza, no puede existir por si sola, es un elemento de todos los cuerpos.
El cambio es el desarrollo de un cuerpo que ya existía anteriormente, capaz de transformarse en otra cosa.
Existen tres factores en el cambio: la materia, la forma y la privación o exigencia.
Las personas son idénticas en cuanto a la forma o sea en cuanto a su naturaleza humana, pero distintas porque la materia informada es diferente.
La materia es lo que individualiza y la forma es el universal. La pluralidad depende de la materia, que es el principio de individuación e ininteligible en si misma.
Por lo tanto, el individuo no es objeto de la ciencia porque no es enteramente cognoscible.
Si bien al individuo no se lo puede definir, se los puede aprehender por percepción o intuición.
Los objetos naturales están en potencia con respecto a la plena realización de su forma, pero el acto es primero que la potencia, el acto es el fin, aquello para lo cual existe o se adquiere la potencia.
Lo que es eterno es primero y es actual en el más amplio sentido. Dios es actual como eterna fuente del movimiento, del pasar de la potencia al acto, Dios debe ser total Actualidad, Primer Motor Móvil.
Las cosas eternas, dice Aristóteles, tienen que ser necesariamente buenas, sin defectos o perversión, por ende, no puede existir un principio malo separado, puesto que lo que no tiene materia es pura forma.
La causa última de la actualización de la potencia es que la bondad llegue a realizarse.
La distinción de la potencia y el acto lleva a la teoría de la jerarquía de los seres a medida que son transformados; pero las formas puras no evolucionan fuera de la materia. Las especies son inmutables aunque los objetos sensibles desaparezcan.
El cambio exige además de una causa material una causa eficiente o sea un agente externo que la modifique o un movimiento natural hacia su propio lugar en el universo.
La causa formal de una cosa es normalmente su causa final porque el individuo de una especie se esfuerza en encarnar con la mayor perfección posible la correspondiente forma específica.
Aristóteles nos dice que la naturaleza no hace nada superfluo. El Primer Motor Inmóvil no es un Dios creador, dado que el mundo existe eternamente. Dios forma el mundo pero no lo ha creado. Lo forma por ser él la fuente suprema del movimiento, actuando como soberana causa final, como objeto de deseos.
El Primer Motor debe causar el cambio sin cambiar, absolutamente inmaterial, o sea Acto Puro.
La manera como mueve es inspirando amor y deseo (lo deseable es lo mismo que lo inteligible en lo inmaterial).
El Primer Motor, siendo inmaterial, no puede realizar ninguna acción material o sea, que su actividad tiene que ser espiritual y por ende intelectual.
En consecuencia, la actividad de Dios es pensar. Dios es Pensamiento del pensamiento.
ACTO y POTENCIA
Doctrina metafísica de Aristóteles, según la cual todas las cosas materiales se componen de dos maneras del ser, que son el acto (enérgeia) y la potencia (dýnamis). El acto, o entelequia (entelékheia), es la actualidad de una cosa o de un ente (on) y significa realización y perfección, mientras que la potencia es pura posibilidad de ser algo. En las cosas materiales, la materia (hýle) es la potencia y la forma (eidos), el acto o entelequia, y el compuesto de materia y forma es también un compuesto de potencia y acto. Con la concepción de la sustancia material como un compuesto de materia y forma, o de potencia y acto, explica Aristóteles no sólo la composición interna de las cosas materiales, sino también el problema del devenir o del cambio (metabolê o kýnesis).
Lo que cambia pasa de la potencia de ser algo al acto de serlo, de tal manera que la potencia no debe entenderse como si fuera la nada o el no-ser, sino una sustancia precedente que, respecto de la posterior es su potencia. La materia crisoelefantina con la que el escultor Fidias construye la Atenea del Partenón es la potencia, oro y marfil, que se actualiza en Atenea estatua, la cual a su vez es la perfección que lleva al acto, a existir de otra manera, a la materia primitiva que, por ser capaz de ser esculpida, se hallaba sólo en potencia de ser estatua o alguna otra cosa. La estatua no surge de la nada, sino de un sustrato anterior, que respecto de aquélla es su materia, pero que, independiente de ella, es la sustancia material del oro y el marfil. El cambio, que es la actualización de una potencia, siempre ocurre sobre un sustrato preexistente, el sujeto del cambio, que es «aquello de donde y aquello de lo cual» proviene una cosa.
LA CASUALIDAD
La casualidad hace referencia a la combinación de circunstancias que resulta imposible de anticipar y evitar. Aquello que ocurre por casualidad es imprevisto y, por lo tanto, no puede sortearse.
Por ejemplo: “Me tropecé y, de casualidad, encontré un fajo de billetes en el suelo” (en este caso, la persona se topa con el dinero por azar ya que no estaba buscándolo), “La colisión provocó que se desprendieran varios ladrillos de la pared, los cuales casualmente cayeron sobre mi coche” (la frase está vinculada a lo poco oportuno de haber aparcado el automóvil en el punto exacto en el cual caerían los ladrillos, suceso que el protagonista no podía prever).
Muchas personas sostienen que, en un sentido estricto, la casualidad no existe. En el primer ejemplo mencionado, podría decirse que el sujeto encontró los billetes ya que tropezó en el lugar donde éstos se encontraban y antes que otra persona pudiera advertir la presencia del dinero en el suelo. No existió voluntad ni intención por parte del individuo, pero sí se produjo una coincidencia temporal y espacial que explica racionalmente el hallazgo.
El segundo ejemplo también puede explicarse a partir de una secuencia aparentemente aleatoria de hechos: dado que nadie podía prever el accidente, el conductor aparcó su coche sin pensar en que el muro pudiera desmoronarse; más tarde, un choque en esa misma zona provocó un derrumbe que dañó el vehículo. Considerar este hecho una casualidad hace hincapié en la supuestamala fortuna de la persona.
Para la matemática, la casualidad está vinculada a la aleatoriedad (un proceso cuyo resultado no es previsible ya que interviene el azar). Esto quiere decir que el resultado de un suceso aleatorio no puede saberse antes de que el mismo se produzca. Es posible, en cambio, hablar de probabilidades a partir de las estadísticas.
El límite de la casualidad
Si bien es posible dividir la población humana en infinitos grupos, tomando en cuenta los parámetrosmás diversos, la peculiar evolución de la vida en sociedad que hemos atravesado como especie en las últimas décadas deja en evidencia la existencia de dos bandos bien definidos: quienes se hacen cargo de sus acciones, y aquellos que atribuyen sus éxitos y fracasos a la casualidad.
LA ESENCIA
La esencia es aquello invariable y permanente que constituye la naturaleza de las cosas. El término proviene del latín essentia, que a su vez deriva de un concepto griego. Se trata de una noción que hace referencia a lo característico y más importante de una cosa.
La esencia es lo que hace que un ser o un objeto sea lo que es. Para la metafísica, la esencia es la realidad persistente en un ser más allá de las modificaciones que surgen por lo accidental; esto quiere decir, en otras palabras, que independientemente de los cambios superficiales que atraviese una persona o cosa, su esencia (que representa los rasgos que los hacen únicos) se mantendrá intacta.
A menudo se habla del efecto del dinero y la fama en las personas, de cómo el poder las cambia, las aleja de sus orígenes y las convierte en seres fríos y desprendidos de su sensibilidad. Esto representa un fenómeno que ocurre a ciertos individuos, y de ninguna manera se puede decir que sea inevitable para aquéllos que consiguen cumplir sus sueños de ser conocidos internacionalmente. En cualquier caso, continuando con la idea planteada en el párrafo anterior, la esencia se conservaría impoluta.
Se conoce como esencialismo al conjunto de doctrinas que se dedican al estudio de la esencia. El esencialismo filosófico sostiene que la esencia precede a la existencia, algo que niega la libertad del sujeto.
El escritor y aviador francés Antoine de Saint-Exupéry escribió, en “El Principito”, la famosa frase que señala que “lo esencial es invisible a los ojos”. Con estas palabras hace referencia a que aquello que verdaderamente constituye a un ser no es su aspecto físico o su apariencia, sino que la esencia está dada por los sentimientos.
En las últimas décadas, los seres humanos hemos dado más y más importancia a la apariencia física y a las posesiones materiales, descuidando nuestras raíces culturales y naturales. Estamos divididos en lindos y feos, en altos y bajos, en delgados y obesos, y cada vez menos personas se esfuerzan por mirar más allá de estas etiquetas superficiales. Los medios de comunicación nos venden constantemente historias supuestamente románticas que comienzan cuando uno de los dos integrantes de la futura pareja es deslumbrado por la belleza física del otro, y se confunde el encantamiento con el amor, la superficie con el contenido.
Lo mismo está ocurriendo con el arte, en todas sus vertientes: es cada vez más difícil dar con una obra auténtica, concebida como producto de la inspiración y de un amor genuino por crear. 
Corrientes Eticas
La filosofía como cosmovisión
Las cosmovisiones son el conjunto de saber evaluar y reconocer que conforman la imagen o figura general del mundo que tiene una persona, época o cultura, a partir del cual interpreta su propia naturaleza y la de todo lo existente en el mundo. Una cosmovisión define nociones comunes que se aplican a todos los campos de la vida, desde la política, la economía o la ciencia hasta la religión, la moral o la filosofía
Socrates fundador dela ética
La virtud
Es un bien absoluto, anteriormente el concepto de la "virtud" fue comprendido, entre los griegos, de una manera muy amplia: significaba el vigor, la bravura, la habilidad de hacer los ejercicios. Por esa razón, fácilmente se demostraba, como lo hacían los sofistas, que la virtud era relativa, pues era distinta para cada ser humano.
En vez de eso, Sócrates llamó "virtud" aquello que era común para toda la raza humana y en todas las circunstancias, por ejemplo, la justicia, la valentía o el autocontrol. De esta manera no sólo se opuso al relativismo de los sofistas, sino que extrajo de todas las virtudes aquellas que hoy llamaríamos "virtudes morales". Por esa razón a Sócrates se le considera como el fundador de la ética.
La maldad
Radica en la ignorancia mientras que la virtud es el origen de la felicidad.
La primera parte de esta afirmación es conocida bajo el nombre de "intelectualismo ético" y significa que el saber es suficiente para ser virtuoso. "Es lo mismo saber lo que es justo y ser justo" decía Sócrates. Toda la maldad tiene su raíz en la ignorancia: nadie se comporta mal premeditadamente. Las consecuencias de esa premisa son las siguientes: primero, que la virtud se la puede enseñar, no es innata; de nosotros depende el hecho de poseerla, y segundo, que la virtud es una sola: siendo que todas las virtudes consisten en el conocimiento, todas las virtudes son la misma cosa.
Por otro lado, la virtud, para Sócrates, tenía un denominador fuertemente práctico. Sólo lo bueno era útil; feliz era aquel que poseía el bien máximo: la virtud. Su conclusión fue la siguiente: la gente busca la felicidad, pero la verdadera felicidad nos ofrece sólo el bien; el verdadero bien es la virtud; ésta es única y consiste en el saber. Adquiriendo conocimientos adquirimos el bien, y con él, la felicidad.
 MÉTODOS DE SÓCRATES
Sócrates no predicaba la virtud directamente, sino más bien, invitaba a reflexionar sobre ella. No ofrecía las recetas acabadas sino convidaba a la búsqueda. Por eso, son de suma importancia los dos métodos, o para ser más correcto, los dos momentos del mismo método, que Sócrates empleaba en la mencionada búsqueda de la verdad y de la virtud, las mismas las llamaba: ironía y mayéutica, respectivamente.
Ironía
Para  Sócrates, ésta fue la mejor manera de purificar la mente humana y consistía en tomar en serio la falsa opinión del contrincante (de ahí la "ironía") para después, con las preguntas sutiles se le obligaba a pronunciar una tesis contraria a la inicial cayendo en contradicciones. El propósito fue el de desenmascarar las apariencias del conocimiento humano. Sócrates se creía autorizado a emprender esta obra porque, mientras que otros profesaban poseer muchos conocimientos verdaderos, él mantenía la conciencia de su "no - saber": "Sólo sé que no sé nada", decía.
Mayéutica
La figura de la madre que da luz a un hijo, le sirvió a Sócrates a elaborar el procedimiento humano para llegar a la verdad: cada hombre lleva en sí la verdad, como la mujer embarazada al feto, es menester solamente ayudar a cada persona a "dar luz" a la verdad. El educador toma el rol de la "partera" y no de un "enseñador".
El procedimiento era el siguiente: comenzaba con los asuntos simples, cotidianos, fáciles de entender para todos; éstos le servían de premisas, las cuales, vía analogía, trasladaba al nivel más alto, el de los asuntos morales. La analogía todavía no ofrecía unas respuestas acabadas: para definir cualquier virtud había que analizar sus características comunes, de ahí la fase inductiva de su método. De esas características comunes, Sócrates construía la definición de las virtudes, o en otras palabras, llegaba a elaborar los conceptos de las cosas, que hoy día se considera como el mayor logro de la filosofía de Sócrates. Aunque el concepto es lo más abstracto que podemos imaginar, el fin socrático era práctico, ya que consideraba que el que poseía el concepto se beneficiaba también del conocimiento; el que tenía el conocimiento obtenía la virtud, o sea la fuente de la felicidad.
Ética aristotélica
Dos éticas fueron escritas por Aristóteles:
Ética a Eudemo que pone en evidencia algunas influencias platónicas y Ética a Nicómaco que es la versión definitiva de la ética aristotélica puesto que pertenece al tercer período.
La ética de Aristóteles, es, en primer lugar, una ética de la felicidad... pero también es una ética de la virtud ya que ésta es el medio por excelencia para alcanzar la felicidad.
Ética Kantiana:
La actitud de Kant frente a la problemática metafísica es por cierto, algo ambigua en tanto afirma por un lado que no conocemos ni podemos conocer el absoluto (puesto que el conocimiento humano se limita ala experiencia) pero, al mismo tiempo, considera al hombre un ente dotado de razón, facultad de lo incondicionado, de manera tal que la metafísica es considerada una necesidad natural en el hombre. El hombre no puede ser indiferente a la problemática metafísica, tal es la razón por la cual siempre tomamos alguna posición al respecto.
Kant busca resolver esta aparente contradicción, pero no en el plano gnoseológico sino en el mo ral, en el campo de la razón práctica (es decir, la razón en tanto determina la acción del hombre).
Si bien no podemos alcanzar el absoluto, sí tenemos cierto acceso a algo que se le acerca. Este contacto de aproximación se da en la conciencia moral, o la conciencia del bien y del mal, lo justo y lo injusto, lo que debemos hacer y lo que no debemos hacer. La conciencia moral, es para Kant, la presencia de lo absoluto o al menos, parte del absoluto en el hombre.
La conciencia moral manda de modo absoluto, ordena de modo incondicionado, nos dice: "me conviene ser amable con él porque así evitaré problemas", este sería un criterio de conveniencia. La conciencia moral dirá: "debo ser amable con el porque es mi deber tratar bien a la gente" y no importa si ello me cuesta la vida, la fortuna, o lo que fuere, el mandato de la conciencia no está condicionado por las circunstancias. Puede suceder que uno no cumpla con su deber, pero eso no le quita autoridad al mandato absoluto. El deber no supone conveniencias, satisfacciones o estrategias, es un fin en sí mismo.
ETICA VALORATIVA
Ética valorativa. La última y más moderna de las concepciones éticas examinadas en esta división cuadripartita implica una inversión radical de las afirmaciones de la ética formal: "el valor moral no se funda en la idea del deber, sino a la inversa: todo deber encuentra su fundamento en un valor. Sólo debe ser aquello que es valioso, y todo lo que es valioso debe ser. La noción de valor es, por ende, el concepto ético central" 4. La ética valorativa admite, sin embargo, dos dimensiones radicalmente opuestas. Para una de ellas, el valor tiene una existencia meramente inmanente a los sujetos que los formulan. Para otra, los valores no son sino "materias y estructuras que determinan una especial cualidad en las personas, relaciones y objetos en que se hallan" (Scheler). En este sentido, puede afirmarse que el objetivismo axiológico coincide con el pensamiento kantiano en cuanto al rechazo de las éticas fundadas en bases subjetivistas y empíricas. 
Los valores constituyen objetos ideales independientes de las estimaciones, apreciaciones y valoraciones de los individuos y de los grupos sociales. Aunque no conociéramos ni estimáramos un valor, éste sería igualmente valioso. Por esta causa, la filosofía de los valores objetivista separa cuidadosamente el tema del conocimiento de los valores, que es un problema eminentemente gnoseológico del tema del ser de los valores, en el que necesariamente nos movemos en un nivel ontológico. El hecho de que sepamos que los valores existen en virtud de nuestra conciencia estimativa no implica necesariamente que sean una simple creación humana. Los valores son susceptibles de ser conocidos, pero su ser no se agota en ser objeto de nuestras valoraciones. 
Frente a las afirmaciones de la ética empírica, la axiología afirma el carácter apriorístico del conocimiento ético. "El concepto de valor no se adquiere partiendo de la experiencia, sino al revés: ésta sólo puede ser juzgada desde puntos de vista valorativos. Los hechos nos muestran lo que realmente ocurre; nunca lo que debiera suceder" 5. En contra de la ética de bienes, la filosofía de los valores niega que la noción de valor pueda deducirse de la consideración del bien o de las cosas buenas. Existe en el hombre un criterio estimativo anterior a la discriminación de acciones buenas y acciones malas. Por otra parte, tampoco puede consistir el deber del hombre en la imitación de un modelo o la prosecución de un fin trascendente y último. Los actos sólo son susceptibles de calificación moral a la luz del ideal de perfección existente en el hombre. Con todo, el conocimiento de los valores reviste unas características especiales. En él, como subraya Hartmann, más que apoderarnos del objeto, somos "presa" de él. No estamos ane un proceso discursivo, reflexivo, racional, sino emocional, intuitivo. 
Por último, frente a la ética formal, la ética valorativa niega el formalismo rigorista del pensamiento kantiano, aunque admite el carácter apriorístico del conocimiento de los valores. M. Scheler dedicó a esta cuestión un puesto preferente en su obra Ética formal y ética material de los valores. En ella critica la equiparación que Kant establece entre los conceptos de formal y de a priori. El objetivo fundamental de Scheler y Hartmann es que existe la posibilidad de un conocimiento axiológico que sea, simultáneamente, material y apriorístico.
Ética empírica
Immanuel Kant define y critica la ética empírica.
Se llama moral o ética empírica dentro de la filosofíakantiana a una ética basada o formulada a partir de la experiencia. Se opone a la ética formal.
La distinción entre la moral y formalismo ético fue establecida por Kant, en sus obras de filosofía práctica, sobre todo en La Fundamentación de la metafísica de las costumbres. La preocupación más honda del filósofo de Königsberg consistió en crear una doctrina libre de elementos derivados del mundo de los hechos, es decir, un sistema exclusivamente racional y a priori.
Entre la moral empírica y la ética formal existe una aguda oposición, en lo que atañe el método que debe emplearse para llegar al conocimiento de las reglas rectoras de la conducta moralmente buena. El subjetivismo es una de las variantes de la ética empírica. Si las ideas morales varían de individuo a individuo o de sociedad a sociedad, lo bueno y/o malo carecerán de existencia objetiva, ya que dependen de los juicios estimados de los hombres. Así aparecen, por una parte, al subjetivismo ético social, llamado antropologismo o subjetivismo ético específico.
 
ÉTICA DE BIENES Y FINES
Ética de bienes. La ética de bienes surge del intento de superar el relativismo anteriormente apuntado y el escepticismo en cuanto a la posibilidad de llegar a conocer científicamente la normativa moral. Su punto clave es, pues, la afirmación de la existencia real, objetiva del bien supremo, el cual, desde un punto de vista práctico, constituye el fin último de la existencia humana. El punto de partida es la afirmación de que "todo agente obra por un fin". El hombre concretamente se propone fines, escoge medios, los pone en práctica y consigue realizarlos. El bien propio de cada actividad está, pues, constituido por la persecución del fin que s epropone alcanzar. El bien supremo humano será, así, la prosecución y logro del finespecífico y característico del hombre.
 Aristóteles propone, existe un „Bien Supremo‟ en pos del cual se hallan orientados
los actos del hombre. El bien de cada actividad lo constituye el fin que ella busca.Contrario a la ética de bienes se encuentra la ética de los valores, la cual plantea,Los valores no pueden ser confundidos ni con cosas ni con bienes, entendidoséstos como propiedades de las cosas. Las cosas son buenas en la medida queellas realizan y cumplen en alguna medida un determinado valor o cualidad
valiosa. Los valores no son “valiosos” porque los deseemos o estimemos como
tales, sino todo lo contrario: los estimamos y deseamos su realización ycumplimiento en las cosas porque son de uso valioso. Poseen, pues, objetividad.Podemos decir que toda actividad humana tiene un fin, y considera que los bienesson precisamente aquello a lo que se tiende en cada arte, oficio o actividad.Desde mi punto de vista esta ética de bienes se aplica a los entes capitalistas yaque estos buscan un bien supremo (dinero, poder), el cual intentan alcanzar sobretodas las cosas sin respetar unos valores, dignidad y moral, aplicando aquellafrase tan particul
ar „el fin justifica los medios.
 LA ETICA FORMALLaética Formal, ética kantiana o la ética del deber mejor dicho, es unpensamiento que hasta el día de hoy nos rige a todos nosotros. Y para Kant, lapregunta central de la ética es ¿qué debo hacer? Con esto demuestra que lamoral, está estrechamente relacionada con el deber, con la pregunta por lo quedebe ser hecho y lo que por supuesto, debe ser evitado. Para poder comprender esto debemos comprender los rasgos generales de la ética kantiana, que se basamás que nada en seis principios fundamentales. Tales son: universalidad,racionalidad, del deber, formal, autonomía e intención.
 
Ética Formal
La Ética Formal, es la que se conoce como Ética Kantiana, en homenaje a su propulsor, el filósofo alemán Immanuel Kant.
En lo que respecta a la historia de la ética y a la teoría del conocimiento, en el siglo XVIII, se producirá un cisma con la aparición en escena del filósofo alemán Emmanuel Kant, por un lado, por su crítica a la razón pura y por otra parte porque su proposición de una ética formal vino a contrastar ciertamente a las éticas materiales vigentes.
Su propuesta ética promueve la libertad y la dignidad de todos los hombres por sobre todas las cosas. Kant sostenía que lo objetivamente bueno es una buena voluntad, el resto de las cosas que solemos considerar como valiosas, como ser la inteligencia, el valor, la riqueza, entre otros, no lo son e incluso hasta pueden volverse peligrosas para el hombre cuando lo que prima es una voluntad torcida.
De acuerdo a Kant, el hombre posee tanto razón como instinto, mientras tanto, la razón no solo tiene una función teórica sino también práctica cuyo objetivo es buscar el bien moral. Ahora bien, según Kant la razón difícilmente puede hacer feliz a alguien, porque el sabio, a partir de su intelecto, rápidamente descubrirá la muerte, la enfermedad, la pobreza, entre otras situaciones desagradables, en tanto, los actos buenos que proceden de la razón práctica no llevan a la felicidad, aunque, sí es posible que el hombre más sencillo encuentre la felicidad sin necesidad de la razón y con su mero instinto. Por tanto, Kant argumenta que si el fin del hombre fuese justamente la felicidad la naturaleza no nos hubiese dotado de una razón práctica que elabore juicios que no nos lleven a la felicidad, entonces, es un hecho que el hombre fue dotado de esa razón por un fin mucho más alto que la felicidad.
a noción de idealismo posee dos grandes acepciones. Por un lado, se emplea para describir la posibilidad de la inteligencia para idealizar. Por otra parte, el idealismo se presenta como un sistema de carácter filosófico que concibe las ideas como el principio del ser y del conocer.
El idealismo de perfil filosófico, por lo tanto, sostiene que la realidad que se halla fuera de la propia mente no es comprensible en sí misma, ya que el objeto del conocimiento del hombre siempre es construido a partir de la acción cognoscitiva.
Puede decirse entonces que el idealismo se opone al materialismo, una doctrina que asegura que la única realidad es la materia. Los idealistas subjetivos creen que la entidad en sí es incognoscible, pero la reflexión brinda la posibilidad de acercarse al conocimiento. Para los idealistas objetivos, en cambio, el único objeto que puede conocerse es aquel que existe en el pensamiento del individuo.
Es posible distinguir, de acuerdo al idealismo, entre el fenómeno (el objeto que puede conocerse de acuerdo a la percepción de los sentidos) y el noúmeno (es decir, los objetos en sí mismos, con sus propias características naturales). La realidad está conformada por el contenido de la conciencia del hombre: o sea, por lo que percibimos y no por lo que realmente es.
El realismo literario es una corriente estética que supuso una ruptura con el romanticismo, tanto en los aspectos ideológicos como en los formales, en la segunda mitad del siglo XIX. Se extendió también a las artes plásticas en Latinoamérica.
Origen del término[editar]
Aparece aplicado a la literatura hacia 1825 para referirse a la imitación por parte de los románticos de la naturaleza y al detalle descriptivo de algunos de sus novelistas. Más tarde, su significado se precisó para aplicarse a ciertos pintores como Gustave Courbet que, frente a los temas grandilocuentes y las escenografías aparatosas del Romanticismo, llevaban a sus lienzos sencillas escenas de la vida cotidiana; enseguida se aplicó el vocablo a las obras literarias animadas de un propósito análogo de recoger fieles testimonios de la sociedad de la época.
Hacia 1827 en Francia una serie de escritores y críticos presentan ya al realismo como una nueva estética alejada u opuesta a la romántica. En 1856 aparece una revista titulada precisamente Realismo, que en uno de sus números dice:
El realismo pretende la reproducción exacta, completa, sincera, del ambiente social y de la época en que vivimos... Esta reproducción debe ser lo más sencilla posible para que todos la comprendan.{{cr1 }}
El Realismo surgió en la Francia de la primera mitad del XIX. Se inició con autores como Balzac y Stendhal, y se desarrolló con Flaubert. En España, el inicio realista coincidió con acontecimientos históricos capitales. Surgió hacia 1870, después de ―La Gloriosa‖, y tuvo su apogeo en la década de 1880. Finalmente decayó en la década de 1900
Para otros usos de este término, véase Idealismo (desambiguación).
«Idealista» redirige aquí. Para la página web española del sector inmobiliario, véase idealista.com.
El idealismo es la familia de teorías filosóficas que afirman la primacía de las ideas o incluso su existencia independiente. Un sinónimo es el inmaterialismo. El materialismo rechaza el idealismo. El idealismo es precisamente antagónico al realismo pues hay filosofías idealistas (idealismo objetivo) que postulan una existencia de objetos abstractos independientes del observador.
El idealismo supone que los objetos no pueden tener existencia sin que haya una mente que esté consciente de ellos. Para poder conocer las cosas, se debe tomar en cuenta la conciencia, las ideas, el sujeto y el pensamiento. Platón, Berkeley y Kant son algunos de sus representantes.
Variantes y características[editar]
Idealismo objetivo[editar]
El idealismo objetivo dice que las ideas existen por sí mismas y que sólo podemos aprenderlas o descubrirlas mediante la experiencia. Para el idealista objetivo los demás son ideas sin cuerpo material. Algunos representantes del idealismo objetivo son Platón, Leibniz, Hegel, Bernard Bolzano, Dilthey
Idealismo subjetivo[editar]
El idealismo subjetivo sostiene que las ideas sólo existen en la mente del sujeto: que no existe un mundo externo autónomo. Para el idealista subjetivo los demás son ideas que sólo existen en su propia mente. Representantes del idealismo subjetivo son: Descartes, Berkeley, Kant, Fichte, Mach, Cassirer y Collingwood.
La principal característica del idealismo subjetivo es que todo gira alrededor del sujeto cognoscente (ser pensante que realiza el acto del conocimiento). Y existen, a su vez, dos variantes. La versión radical sostiene que el sujeto construye el mundo: no existen cosas por sí mismas sino que sólo existen cosas para nosotros (constructivismo ontológico). Según esta concepción, la naturaleza no tiene existencia independiente. En cambio, la versión moderada «afirma que las cosas son del color del cristal con que se miran».
La ciencia y la tecnología no interfieren en el idealismo, pues ambas dependen sobre todo de la percepción del mundo exterior para modificarlo conforme al conocimiento. Donde la percepción en sí, no es ninguna temática contraria al idealismo.
El simple aserto de que las ideas son importantes no lo califica de idealista. Casi todos los materialistas y realistas admiten la existencia e importancia de las ideas, solamente niegan su autoexistencia.
“La reacción individualista al idealismo alemán”
Una aportación del idealismo alemán aplicable a nuestros días es:
“La clase de filosofía que se elige depende de la clase de hombre que se es”

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