evaluacion del sistema educativo venezolano

Vista previa del material en texto

EVALUACIÓN DENTRO DEL SISTEMA EDUCATIVO VENEZOLANO
	Considerando como punto de partida el contenido del Capítulo III titulado Sistema Educativo, el artículo 24 de la Ley Orgánica de Educación (2009), define al mismo como “Un conjunto orgánico y estructurado, conformado por subsistemas, niveles y modalidades, de acuerdo con las etapas del desarrollo humano…” (p. 23), el cual, como estructura general que rige el sistema educativo venezolano dicta las políticas y directrices que orientan el proceso educativo en la República Bolivariana de Venezuela, para lo cual, como estructura orgánica, posee una organización en sub-sistemas y modalidades.
	En tal sentido, un aspecto altamente significativo dentro del contexto educativo lo constituye el proceso de evaluación de los procesos de aprendizaje en el marco del currículo correspondiente a cada sub-sistema y modalidad, el cual, en el marco del Sistema Educativo Bolivariano (SEB), “Se define como un proceso sistemático, sistémico participativo y reflexivo que permite emitir una valoración sobre el desarrollo de las potencialidades del y la estudiante, para una toma de decisiones que garantice el logro de los objetivos establecidos en el Currículo Nacional Bolivariano” (p. 67). 
	El contenido del Currículo Nacional Bolivariano (CNB) expresa los principios en los cuales se fundamenta: Reciprocidad: Atiende la interacción de los actores corresponsables en el proceso educativo; Continuidad: Asume la evaluación como un proceso sistémico, sistemático, continuo y permanente; Constructivista: Reconoce que el y la estudiante construyen nuevos conocimientos basados en sus experiencias previas, en convivencia con la comunidad y potenciando la investigación del contexto natural; Participativa: Propicia la intervención de los y las estudiantes, docentes; así como de la familia en el proceso educativo.
La tendencia de la evaluación de los aprendizajes afianzada en sus principios permite inferir que a partir del proceso de evaluación, es factible que el mismo permita fortalecer profundamente los aprendizajes; registrar y analizar información significativa en el proceso de construcción de los conocimientos, para así establecer alcances y logros de los y las estudiantes; del mismo modo, analizar, reflexionar y describir la participación de los principales actores para potenciar el proceso educativo. El carácter de la evaluación de los aprendizajes se apoya en la planificación de la misma a fin de determinar qué se evaluará, cómo se evaluará, cuándo se va a evaluar y con qué instrumentos se evaluará. 
El texto del Currículo asienta sus bases en el artículo 44 de la Ley Orgánica de Educación, el cual destaca que la evaluación como parte del proceso educativo es “democrática, participativa, continua, integral, cooperativa, sistemática, cuali-cuantitativa, diagnóstica, flexible, formativa y acumulativa…” (p. 35). Dichas características conforma los lineamientos ampliados en el contenido curricular, que además hace énfasis en el principio de continuidad entre los sub-sistemas, de allí que plantea las modalidades de evaluación cuantitativa y cualitativa, principalmente en esta última orientada a la descripción de los logros, avances y alcances de los educandos en el desarrollo de los procesos en cada una de las áreas de aprendizaje.
En un primer orden, el sub-sistema de educación básica, integrado por los niveles de educación inicial, educación primaria y educación media, educación especial, educación Intercultural y educación de jóvenes adultos y adultas, como sostiene el Ministerio del Poder Popular para la Educación (2007), posee referentes legales como es el caso del Proyecto Educativo Nacional (1999), Plan de Desarrollo Económico y Social de la Nación (2007-2013), además de los expuesto en los principios, propósitos, pilares y ejes integradores del Currículo Nacional Bolivariano, así como lo dispuesto en la Ley Orgánica para la Protección del Niño, Niña y Adolescente (1998).
Según expone el texto ministerial, la evaluación en el Sistema Educativo Bolivariano se fundamenta en las teorías Sociocultural de Vygotsky (1979), Ecológica de Lortie (1973) y el Construccionismo Social de Patman (1996), así como las orientaciones educativas propias del currículo. Vygotsky sostiene que el aprendizaje humano es un proceso de esencia interactiva de naturaleza social a través del cual el estudiante accede a la vida intelectual de quienes le rodean con énfasis en lo externo (socio-cultural) de donde adquiere aprendizajes como materia prima y eje del desarrollo humano.
Por su parte, el aporte de Lortie se centra en la interacción estudiante-grupo-medio ambiente como proceso interactivo continuo el cual considera el contexto de los espacios de aprendizaje como componente del proceso en permanente interdependencia. Este enfoque privilegia a la evaluación cualitativa y formativa considerando que las técnicas para evaluar se deben se deben centrar, primordialmente en los procesos de enseñanza y de aprendizaje más que en los resultados. 
El enfoque de Lortie incluye técnicas evaluativas como la observación sistemática, los cuestionarios abiertos, las escalas y registros de observaciones de donde se extraen datos en relación a las motivaciones y apreciaciones personales del educando ante eventos y situaciones que permitan al docente descubrir y entender la realidad. Otro aspecto inherente a este tipo de corriente del pensamiento en educación, sostiene que para evaluar el aprendizaje en el educando, debe imperar la caracterización del contexto en que se desarrolla el proceso de socialización al considerar que la interacción entre los estudiantes y su ambiente propicia el aprendizaje significativo.
Respecto a la postura de Patman, el Constructivismo Social afirma que sólo hay presencia de aprendizaje cuando el sujeto reflexiona sobre sus propias tareas a través de las cuales participa como un “constructor” de su propio aprendizaje, producto del proceso integrativo de mente, cuerpo y mundo externo. Es decir, una forma de aprender a pensar y reflexionar en grupo en relación al proceso mismo de aprendizaje, el cual desde esta visión humanista, la evaluación de los procesos de aprendizaje se concibe como un proceso permanente interactivo, cooperativo y reflexivo que permite comprender, analizar e interpretar el desarrollo alcanzado por el estudiante y sus potencialidades, al igual que las experiencias de aprendizaje con la intervención de los componentes sociales corresponsables del proceso educativo.
El conjunto de referentes teóricos que sustentan a la evaluación en el proceso educativo característico del Sistema Educativo Bolivariano, permiten establecer en función de lo expuesto por el Currículo Nacional Bolivariano, que el mismo pretende un tipo de evaluación integral de los aprendizajes, el cual plantea se desarrollará de la siguiente manera de acuerdo a cada sub-sistema:
· Educación Inicial Bolivariana y Educación Primaria Bolivariana. El tipo de evaluación sugerido es tipo cualitativa, mediante la promoción de procesos descriptivos de los avances y logros, destacando las potencialidades desarrolladas por los niños y niñas. 
· Educación Secundaria Bolivariana y Educación de Jóvenes, Adultos. En dicho nivel la evaluación de de orden cuantitativo, apoyándose en criterios, métodos y técnicas de la evaluación cualitativa, resaltando las potencialidades desarrolladas por las y los estudiantes mediante un proceso descriptivo. 
· Educación Especial. Esta modalidad del Sistema Educativo evalúa el proceso de aprendizaje resaltando las potencialidades desarrolladas por los educandos, a través de un proceso descriptivo donde se explican los avances y necesidades a cubrir de acuerdo a características personales.
Es oportuno referir que el Currículo Nacional Bolivariano rige para atender a la población con necesidades educativas especiales, al igual que el establecido en los diferentes Niveles y otras Modalidades del Sistema Educativo venezolano, con las adaptaciones requeridas, en funciónde las características y necesidades educativas especiales de los educandos de la modalidad. La Evaluación de los Aprendizajes en Educación Especial se debe las Unidades Educativas Especiales de la Modalidad, se debe administrar, conforme a lo previsto en La Ley Orgánica de Educación, que permita reconocer los progresos obtenidos por la población de educandos. 
· Educación Intercultural. Este tipo de educación es una forma de entender y vivir la educación, un enfoque que tiene un carácter inclusivo, donde la diversidad es un ingrediente indispensable y positivo para una educación integral y de calidad, considerándose la diversidad un valor que nos enriquece. Este tipo de evaluación debe responder a la caracterización de cada subsistema del Sistema Educativo Bolivariano, respetando el contexto sociocultural de los educandos. 
En relación a las Misiones Educativas como programas sociales, tales como Robinson, Ribas y Sucre, las mismas se articulan con el Sistema Educativo Bolivariano, de acuerdo a las necesidades particulares de cada subsistema y modalidad, las cuales desde una perspectiva educativa se enmarcan en cada uno de los mismos como estrategia para la inclusión de sectores poblacionales en el sistema educativo. A tal efecto, se describe brevemente la finalidad de cada misión y su tendencia evaluativa de acuerdo al nivel que atiende.
Misión Robinson. Esta misión puede enmarcarse en el subsistema de educación básica, tuvo como objetivo central alfabetizar a jóvenes y adultos, sustentada en los principios generales del sistema Educativo Bolivariano, concentrado su acción en procesos de comprensión lectora mediante el empleo de técnicas audio-visuales particulares (televisor, VHS y videos clases) para la enseñanza de la lectura y la escritura. En lo concerniente al proceso evaluativo, el mismo se orientó en evaluar cualitativamente el producto de sesiones de desarrollo de expresión oral y habilidades psicomotoras, así como del proceso de la lectura y la escritura mediante su registro diario y sistemático registrados en cuadernos o cartillas de estudio. Del mismo modo, se aplicó la técnica de la observación.
Misión Ribas. La Misión Ribas como programa educativo oficial tiene como finalidad de incluir a todas aquellas personas que no han podido culminar sus estudios de bachillerato o secundaria, destinada a quienes tengan instrucción de educación básica. La Evaluación Educativa en el Plan Extraordinario Misión José Félix Ribas, es concebida como un proceso profundamente humano, como proceso y de procesos, de carácter integral, que reconoce los distintos ritmos y desarrollos de cada persona, única y cambiante, en congruencia con el enfoque filosófico de país expresado en nuestra la Carta Magna. 
El sistema de evaluación se sustenta en las experiencias vividas, con un enfoque profundamente humano y basado en las dimensiones del ser, hacer, conocer y convivir, teniendo un carácter integral. Este sistema de evaluación diagnóstica y formativa favorece al proceso y se articula con el método de la Misión, desarrollándose mediante formas de evaluación muy apropiadas para la educación de adulto como la auto evaluación, la co-evaluación y la hetero-evaluación. 
Como estrategia se utiliza la resolución de problemas, la elaboración de proyectos de pequeñas investigaciones, la sistematización de los contenidos a partir de la evaluación sistemática de los ejercicios de los folletos, insertándose las asambleas de evaluación comunitaria como expresión de las asambleas de ciudadanos y ciudadanas, evaluándose integralmente el proceso de formación, de aprendizajes de vida y de asignaturas de los estudiantes, logrando un nivel de participación en la búsqueda de la solución a los problemas individuales y colectivos, detectando los avances de los estudiantes en lo individual y lo colectivo favoreciendo de esta forma a la búsqueda de estrategias educativas que garanticen la atención individual y grupal.
	Misión Sucre. La Evaluación del Rendimiento Académico Estudiantil de las Instituciones de Educación Superior adscritas a la Misión Sucre, tiene por objeto establecer las bases que regulan el proceso de evaluación del aprendizaje, concebido como la valoración integral del estudiante, según las competencias, objetivos y actitudes, desarrolladas por éstos, durante el proceso de enseñanza-aprendizaje implementado por los Programas de Formación de Grado. 
	Para ello, la evaluación se concibe como la valoración integral del estudiante de acuerdo a las competencias, objetivos, valores y actitudes contemplados en los Programas de Formación de Grado, las cuales han de cumplirse a través de los procesos de enseñanza aprendizaje bajo criterios, competencias, objetivos, valores, y actitudes, consustanciados con los perfiles profesionales de los distintos Programas de Formación de Grado, cuya finalidad evaluativa es el mejoramiento continuo e integral del proceso formativo del estudiante a través de la valoración de las competencias, objetivos, valores y actitudes alcanzados en el transcurso de un período académico determinado.
	
8