Anatomía humana (1436)

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SENTIDO DE LA VISTA 413
lar .superior (cresta lagrimal anterior) y. por atrás, por la cresta del unguis (cresta 
lagrimal posterior). Mide de 12 a 15 milímetros de altura por 4 ó 5 de anchura y lleva 
una dirección ligeramente oblicua hacia abajo, hacia atrás y hacia dentro. Se distin- 
‘g \ w r ‘(:ñ‘‘éT‘Una_ extremidad' -suporio-r xr -fondo,- -una- ext-rem i-dad- ín feHor-,- y- n-n -cuerpo- mós- 
o menos cilindrico que puede ser dividido en cara anterior, cara posterior, cara exter­
na y cara interna.
El ex t re mo super ior o f o n d o es una especie de cúpula o fondo de saco, cóncavo ha­
cia abajo, que sobresale ligeramente hacia arriba del tendón directo del orbicular, llor- 
haísky describió con el nombre de múscu lo tensor de. Ja cú p u l a ¡at/rimal algunas fibras 
musculares que se desprenden del semiorbiculav superior y que van a. terminar preci­
samente en la parte superior del fondo de saco lagrimal; tendrán por objeto estas fi­
bras musculares tirar del fondo de saco y realizar una especie de aspiración de las lá­
grimas hacia su interior.
La ex t r e m id a d in f e r i o r se continúa directamente, sin límite preciso, con el extremo 
superior del conducto lacrimonasal.
La cara an ter ior del saeo lagrimal está en relación con el tendón directo del orbi­
cular de los párpados que la separa de la piel de la comisura interna. Existe a veces 
un pequeño espacio seroso entre el tendón del orbicular y el saco lagrimal, llamado 
bolsa pr c l ac r i ma l .
La cara posterior de l saco está en relación con el tendón reflejo del orbicular y 
con el músculo de Horner, más allá del cual se encuentra la parle interna del septum 
orbitale, y después la grasa de la órbita.
La cara in fe rna se halla en contado con el periostio del canal lagrimal y con una 
delgada pared ósea que separa el saco del grupo de celdillas etmoidales anteriores.
La cara ex te rn a se relaciona con el ángulo de separación de los dos tendones, di­
recto y reflejo del orbicular. En su tercio medio, un poco más cerca de la cara poste­
rior que de la cara anterior, se abre el orificio por el cual comunica con tos conductos 
lagrimales.
Conducto lacrimonasal. Es un conducto de paredes membranosas, como el saco la­
grimal mismo, que sale de la extremidad inferior del saco y se dirige hacia abajo, atrás 
y adelante, poro apartándose poeo de la vertical. Recorre el conducto nasal que se lia 
descrito en Osteología y se desliza después debajo de la mucosa del meato inferior, pa­
ra ir a abrirse en la cavidad de este meato por un orificio más o monos marcado. Mide 
de 14 a 17 milímetros de longitud por 3 milímetros de diámetro, se baila ligeramente 
aplanado en sentido transversal y so estrecha un poco a medida que desciende. (Fig. 394.)
Está en relación hacia fuera con la rama ascendente del maxilar superior, primero, 
y después, con la parte anterior de la base del seno maxilar, donde puede determinar 
un pequeño relieve. Hacia dentro se relaciona primero con el unguis y el cornete infe­
rior y, más abajo, con la mucosa de la pared externa del meato inferior.
Su ori f ic io supe r io r se comunica ampliamente con (“1 saco lagrimal. Su orif icio i n ­
f e r io r se abre en la parte anterior de la pared externa del meato inferior y adopta dis­
posiciones muy variables, que dependen de que su desembocadura se baga directamen­
te en la parte más alta del incalo, o bien, de que recorra un pequeño trayecto submu- 
coso. Se encuentra situado ordinariamente a una distancia de 3 centímetros,- hacia atrás 
del borde posterior do la pared externa del vestílmdo de la nariz (10 a 12 mm por de­
trás de la extremidad anterior del cornete inferior). (Fig. 395.)
E s tru c tu ra de las vías lagrimales. Las vías lagrimales están formadas por una 
membrana conjuntiva basal, rica en fibras elásticas en la parte que corresponde a los 
conductos lagrimales y densa en el saco y en el conducto nasal. Esta membrana so­
porta una mucosa, de tipo también conjuntivo, que en la parte inferior del conducto 
lacrimonasal toma poco a poeo los caracteres de la pituitaria, puesto que se ven apa­
recer en ella células cilindricas y pestañas vibrátiles. En el espesor de la mucosa se 
encuentran algunas glándulas mucosas parecidas a las de la pituitaria, las cuales son 
sobre todo abundantes en la parte inferior.