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Tratado de Otorrinolaringologia y Patologia Cervicofacial-132

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Capítulo 10. Tratamiento de las otitis medias crónicas supurativas
que supuran de modo permanente o discontinuo 
«activos».
El sentido general de todas ellas es realizar una 
exéresis mediante fresado e instrumental adecuado 
de los tejidos óseos que participan en la infección 
otítica crónica y también tejidos blandos como el 
colesteatoma y el tejido de granulación. La mucosa 
inflamada sin granuloma ni colesteatoma no debe eli-
minarse, pues ello dificulta la restauración de la 
capa mucosa. Estas técnicas quirúrgicas tienen 
como fin alcanzar la curación de la infección. No tie-
nen fines funcionales, y el cirujano no dejará preva-
lecer criterios funcionales sobre los curativos de la 
infección.
Hay dos grupos de técnicas quirúrgicas en fun-
ción de la conservación o no de la pared posterior del 
CAE: son las técnicas abiertas y las cerradas.
Técnicas abiertas
Son aquellas que no conservan la pared posterior del 
CAE. Tienen más indicaciones en los OMCS con 
abundante tejido de granulación o con pólipo o co-
lesteatoma, casos en los que es necesario controlar la 
cavidad intervenida, en el período postoperatorio, 
que durará lustros, aunque los controles se vayan 
distanciando. En efecto, el colesteatoma, como se 
dijo, es una enfermedad recidivante, y salvo en los 
colesteatomas que se han tratado cuando tenían muy 
pequeño tamaño, la tendencia a lo largo del tiempo 
es la de recidivar. La técnica que se practique debe 
permitir controlar y limpiar el epitelio cutáneo (que 
recubrirá la cavidad mastoidea) desde el exterior, a 
través de un otoscopio ancho y un microscopio de 
uso clínico. En definitiva, la intervención realizada 
debe modificar adecuadamente la anatomía del oído 
medio para dificultar la recidiva y mantener limpia la 
cavidad resultante de la operación. 
Si la comunicación de la cavidad con el exterior es 
amplia, resulta posible incluso dejar remanentes de 
colesteatoma, por ejemplo sobre una fístula del CSC 
horizontal, que serán controlados en el postoperato-
rio por otoscopia y microscopio clínico. 
Técnicas sin conservación de la pared posterior del 
CAE («abiertas», canal wall down): radical mastoidea, 
radical ampliada y radical modificada
Como acabamos de indicar, estas técnicas tienen 
una gran ventaja: permitir un control de la cavidad 
radicalizada en el seguimiento clínico de rutina 
postoperatoria. Ello permitirá el aspirado y la extrac-
ción de productos descamativos de la piel sana que 
recubrirá dicha cavidad tras la intervención. En casos 
de OMC colesteatomatosa con complicaciones, son 
las técnicas de elección indiscutible. Muchos ciruja-
nos otorrinolaringólogos también las indican cuando 
se ha realizado previamente una técnica con conser-
vación de conducto y se produce una recidiva de co-
lesteatoma; también en aquellos pacientes que tienen 
una cofosis o sólo restos auditivos previos a la inter-
vención. Se puede realizar una reconstrucción timpa-
noplástica de tipo III o IV.
Figura 10-1. Incisión retroauricular.
La línea de puntos muestra la trayectoria de la incisión 
retroauricular. Fue la primera que se diseñó para el abordaje 
de la mastoides, y sigue siendo la más utilizada por la 
mayoría de los cirujanos. Se realiza sobre la región 
mastoidea a medio centímetro, aproximadamente, del surco 
retroauricular. Una vez realizada la incisión, la oreja se 
despega hacia delante, y las partes blandas que recubren 
la mastoides, hacia atrás (v. fig. 10-2).
El sitio para iniciar el fresado utilizando esta incisión es la 
región cribosa retroespinal (detrás de la espina de Henle). 
Su uso más frecuente es en las intervenciones de fresado 
de la mastoides, y también cuando coparticipa el ático 
(otras indicaciones en el texto). 
En la figura 10-2 se muestra con línea gris de puntos la 
incisión retroauricular detrás de la oreja y mediante una 
flecha cómo se aborda por debajo de los tejidos blandos la 
pared posterior del conducto y el tipo de colgajo que hay que 
hacer con piel del meato en el caso de una miringoplastia 
por vía retroauricular.