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1 Fisiología gastrointestinal y nutrición (177)

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Fisiología hepática
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el organismo utiliza como reserva de energía. Está 
formado por largas cadenas de glucosa dispuestas 
en uniones lineales α-1,4; del 8% al 10% de las mo-
léculas de glucosa están unidas mediante enlaces 
α-1,6 para formar cadenas ramificadas, lo que per-
mite su almacenamiento más compacto y eficiente 
y minimiza su impacto sobre la osmolaridad intrace-
lular. Los sustratos para la síntesis de glucógeno, la 
glucosa-6-fosfato (G6P) y la glucosa-1-fosfato (G1P) 
proceden de varias vías, entre ellas los ciclos meta-
bólicos de la fructosa y la galactosa, así como de la 
gluconeogénesis y la glucógenolisis (35).
La glucogenosis tipo 1 es el error innato más fre-
cuente del metabolismo del glucógeno. Existen dos 
formas: las glucogenosis tipo 1a y 1b. La glucoge-
nosis tipo 1a se debe a la deficiencia de la enzima 
glucosa-6-fosfatasa (G6P), lo que provoca una inca-
pacidad para la obtención de glucosa por gluconeo-
génesis y glucógenolisis. Esta incapacidad produce 
hipoglicemia a los 90 a 180 minutos de la última 
ingestión de glucosa, debiendo entonces el organis-
mo recurrir al metabolismo del lactato, de los ácidos 
grasos y a las vías glucolíticas como fuente de ener-
gía, lo que puede llevar a la acidosis láctica, la hiper-
trigliceridemia y la hipercolesterolemia. Esta enfer-
medad se puede manifestar desde el primer año de 
vida por hipoglicemia sintomática, hepatomegalia, 
nefromegalia, facie redondeada e hipotrofia muscu-
lar. Se puede desarrollar también insuficiencia renal, 
producto de la hiperuricemia que ocurre como con-
secuencia del aumento del metabolismo de las pu-
rinas; otros hallazgos son adenomas hepáticos con 
potencial maligno, anemia y riesgo de hemorragia 
a causa de trastornos de la función plaquetaria. Es 
frecuente que los pacientes presenten diarrea de 
tipo osmótico, debida a la malabsorción intestinal 
de glucosa, y osteoporosis por la acidemia crónica. 
El diagnóstico se realiza mediante la valoración de la 
G6P en el hígado y la demostración de los agregados 
de glucógeno en el citoplasma de los hepatocitos; 
en aquellos pacientes con hipoglicemias y acidosis 
láctica no tan graves se puede efectuar una prueba 
con glucagón en ayunas que consiste en determinar 
el incremento de los niveles de lactato superiores 
iónico promueve la producción de especies reactivas 
de oxígeno que dañan las membranas, en particular 
en las mitocondrias. A pesar de que la enfermedad 
de Wilson muestra un patrón de herencia recesiva, 
se diferencia de la hemocromatosis en que hay más 
de 300 mutaciones identificadas y la mayoría de los 
pacientes son heterocigotos con diferentes muta-
ciones en los dos alelos. La aparición de sus sinto-
mas ocurre habitualmente, entre los 12 a 23 años. 
Esta enfermedad es muy rara en pacientes mayores 
de 40 años y puede manifestarse como una hepatitis 
crónica, una falla hepática fulminante o una cirro-
sis. Otras alteraciones frecuentes son la anemia he-
molítica con test de Coombs negativo, la presencia 
de depresión y/o de síntomas neurológicos como 
espasticidad, ataxia y temblor. Ocasionalmente se 
observan los anillos de Kayser-Fleischer, que repre-
sentan el depósito de cobre en la periferia de la cor-
nea. La enfermedad de Wilson se debe sospechar 
siempre en los pacientes jóvenes con enfermedad 
hepática de etiología no aclarada y, especialmente, 
si se asocia con disminución de la ceruloplasmina y 
con aumentos de la excreción de cobre en la orina. 
El tratamiento puede ser con fármacos que inhiben 
la absorción de cobre, estimulantes de quelantes 
endógenos o que promueven la excreción de cobre 
por la bilis u orina (como la D-penicilamina). En los 
pacientes con hepatitis fulminante el tratamiento de 
elección es el trasplante hepático (32).
Enfermedades por depósito de glucógeno
(Glucogenosis)
Las glucogenosis son alteraciones del metabolismo 
del glucógeno; se han descrito más de 10 formas, 
pero sólo tres de ellas se asocian con enfermedad 
hepática: las glucogenosis de tipo I, III y IV. Los otros 
tipos pueden producir hepatomegalia o alteraciones 
microscópicas de la histología hepática, pero sin una 
enfermedad clínicamente significativa. El metabo-
lismo del glucógeno está presente en muchos teji-
dos, pero los que tienen mayor importancia clínica 
son el tejido hepático y el muscular. El glucógeno es 
un compuesto de almacenamiento de glucosa que

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