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125 NEFROPATÍA DE LAS DISPROTEINEMIAS. AMILOIDOSIS RENAL Grupo 2. Pacientes no subsidiarios a autoTPH: existen esquemas terapéuticos con combinaciones de melfalan, prednisona, talido- mida o bortezomib. En pacientes mayores se apli- ca sobre todo, la lenalidomida en combinación con dexametasona [7]. *MM quiescente: el tratamiento puede estar indicado en casos de alto riesgo que se podrían beneficiar de un tratamiento precoz con lenalido- mida y dexametasona [7]. 2.4. Pronóstico La afectación renal implica peor pronóstico y es la segunda causa de muerte después de las infecciones sistémicas, por lo que es importante realizar una intervención agresiva para evitar el fallo renal irreversible. Hasta un 5% de los pa- cientes que precisan tratamiento renal sustitutivo pueden recuperar parte de su función renal y así no precisar diálisis [6]. La supervivencia media de un paciente con mieloma múltiple y fallo renal es de 20-25 meses. En pacientes con buena respuesta al tratamiento hematológico y sin afectación extrarrenal, se pue- de plantear un trasplante renal. La supervivencia de estos pacientes es del 65% a los 5 años, aunque hasta un 10% de los pacientes pueden presentar una recidiva de la enfermedad con afectación del riñón trasplantado [6]. La supervivencia media del MM es de aproxi- madamente 6-7 años, dependiente de la carga tu- moral y el subtipo molecular. El autoTPH puede mejorar la supervivencia en hasta 12 meses [7]. 3. AMILOIDOSIS Se trata de un conjunto de enfermedades cuyo punto común es el depósito extracelular en órga- nos y tejidos de proteínas fibrilares que forman amiloide. La amiloidosis puede ser una enfermedad sistémica, con afectación de múltiples órganos, o localizada si afecta a un único tejido. Se han descrito más de 31 proteínas precursoras [10] y existen diferentes subgrupos [11]: 1) Amiloidosis primaria o AL: Provocada por el depósitos de cadenas ligeras. 2) Amiloidosis secundaria o AA: Con depó- sitos de amiloide sérico A (ASA), en contexto de enfermedades inflamatorias o infecciosas cróni- cas, o la fiebre mediterránea familiar. 3) Amiloidosis senil: Amiloide formado por proteínas de Transtirretina no mutada. 4) Amiloidosis ATTR: Forma hereditaria con depósitos por mutaciones de transtirretina. 5) Otros: Debidos a depósitos de Fibrinó- geno (AFib), apolipoproteína A2 (AApoA2) o de β2-microglobulina (A β2M; asociada a la diálisis). Según el registro de la SEN, un 6% de los síndromes nefróticos del adulto son causados por amiloidosis (un 19% si son mayores de 65 años), con 28% por AA, 64% AL y 0,02% genético [1]. Amiloidosis Primaria o AL Es la forma más frecuente y se caracteriza por el depósito de cadenas ligeras, más frecuente por cadenas ligeras λ que por cadenas κ (relación 3:1) [12] 15% de los casos están asociados al mieloma múltiple (MM) y en un 70% a gammapatía mo- noclonal de significado incierto. A contrario solo un 15% de los pacientes con MM desarrollan una amiloidosis AL. La AL suele afectar a una edad mediana de 65 años y 2/3 de los afectados son varones [1, 12]. Los síntomas más frecuentes son inespecíficos como la astenia o pérdida de peso. Las demás de- penden de la afectación de órganos, que pueden ser [1, 12]: – Manifestaciones renales (70-80%): Es una manifestación muy precoz y la clínica depen- de de la cantidad y la localización del depósito amiloide. Lo más habitual es el daño glomerular, del cual resulta un síndrome nefrótico sin hema- turia y diferentes grados de insuficiencia renal, de progresión lenta. En caso de afectación tubular, se pueden evidenciar solo una proteinuria discre- ta o disfunción tubular. – Manifestaciones cardíacas (50-60%): Es muy característico en la AL y más frecuente que en la AA. Hasta un 20% de los pacientes sufren de insuficiencia cardíaca al diagnóstico, debido a una cardiopatía restrictiva con disfunción diastó- lica. Otras manifestaciones pueden ser arritmias como la fibrilación auricular (60%) y sincopes. En el estudio ecocardiográfico se muestran hi- pertrofia ventricular y del septo, y alteraciones de motilidad parecidos a un infarto anteroseptal, pero en ausencia de enfermedad coronaria. En los ECG aparece un bajo voltaje. NEFROLOGÍA CAPÍTULO 08. NEFROPATÍA DE LAS DISPROTEINEMIAS. AMILOIDOSIS RENAL 3. AMILOIDOSIS
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