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236 GUADALUPE TABERNERO más sensible (84%) que la radiografía simple de abdomen (54%) para detectar cálculos, aunque ésta es superior para el diagnóstico de los loca- lizados a nivel ureteral. Tiene una sensibilidad del 70.2 % y una especificidad del 75.4% para el diagnóstico de hidronefrosis por lo que, según algunos autores, le confiere un valor ¨modesto¨ como prueba diagnóstica [35]. Urografía intravenosa Esta prueba es útil cuando los cálculos son pequeños, (menores de 2 mm) o radiotranspa- rentes (ácido úrico, cistina). Confirma la litiasis sospechada por la radiografía (no diagnosticada si el cálculo es radiotransparente) y además nos permite ver, la funcionalidad renal, la morfología y la dinámica del tracto urinario superior [34]. Tomografía axial computarizada (TAC) Esta prueba nos sirve para confirmar las imá- genes de litiasis y nos ayuda a realizar el diagnós- tico diferencial con otras situaciones que alteran el tracto urinario superior, no litiásicas. Tiene mayor precisión que la urografía intravenosa y la ecografía [32, 36]. No hay que olvidar, que tanto la Urografía como el TAC son pruebas diagnósticas que re- quieren contraste (sustancia nefrotóxica), y que, en situaciones de litiasis, es posible que exista in- suficiencia renal de cualquier tipo, aunque gene- ralmente obstructiva, por lo que son pruebas que deben solicitarse con cautela, y si es necesario, evitarlas, o realizar el TAC sin contraste [32, 36]. También existen otras pruebas diagnósticas para la litiasis renal, que permiten la visión direc- ta de la vía urinaria, como la uretrocistoscopia, ureterorrenoscopia, o cistoscopia, pero son pro- cedimientos más invasivos. Puede usarse la uro resonancia magnética nuclear, pero las principa- les pruebas, son la radiografía, ecografía y TAC abdominal [32, 36]. 6. TRATAMIENTO Hay que tener presente, que cuando un enfer- mo padece un cólico nefrítico, debemos aliviar lo más rápido posible su clínica. El paciente referirá un dolor intenso agudo, y brusco que por lo ge- neral responde bien al tratamiento que adminis- tremos por vía parenteral [9]. El tratamiento del cólico nefrítico comprende [9]: • Ingesta abundante de líquidos • Tratamiento del dolor con analgésicos poten- tes (pirazolonas o morfínicos), por vía paren- teral. Suele combinarse con espasmolíticos. Si existe distensión abdominal o íleo, los espas- molíticos pueden estar contraindicados. • Disminución del edema local. Los antiin- flamatorios no esteroideos, (diclofenaco, o ibuprofeno, vía oral) durante un periodo corto de tiempo, y siempre que no existan al- teraciones de la función renal, suelen ser de elección, y muy eficaces. Si no pueden usarse los antiinflamatorios, puede tratarse con cor- ticoides a bajas dosis (0.5-1 mg/kg de peso), vía intramuscular o intravenosa, sólo una o dos dosis. • Si el cálculo es pequeño, debe favorecerse la eliminación urinaria del mismo, con ingesta hídrica, sueroterapia, y/o diuréticos. Pueden pasar hasta 4 semanas para que se produzca la expulsión del cálculo. Por otro lado, se ha de- mostrado que los alfa bloqueantes facilitan la expulsión de los cálculos, siendo tamsulosina (0.4 mg) el más utilizado en la práctica diaria. • En determinadas ocasiones, es necesario rea- lizar tratamiento intervencionista, para el tra- tamiento del cólico nefrítico. Por ejemplo, en las siguientes situaciones: o Cálculos de gran tamaño (> 4mm de diá- metro) o Pacientes monorrenos o Hematuria o Dolor intratable o Infección urinaria o Insuficiencia renal El tratamiento en este caso se podrá realizar con nefrolitotomía percutánea, ureteroscopia o litotricia extracorpórea por ondas de choque (LEOC). El uso de una técnica u otra dependerá del tamaño (por lo general se usa la LEOC con cálculos de tamaño inferior a 2cm) y la localiza- ción del cálculo. Habitualmente la nefrolitotomía percutánea y la LEOC, suelen ser suficientes para la eliminación del cálculo, aunque si el paciente presenta anuria o insuficiencia renal, o situación de sepsis, puede llegar a ser necesaria la deriva- ción percutánea por nefrostomía en primer lugar, antes de ninguna otra medida terapéutica [37]. NEFROLOGÍA CAPÍTULO 15. LITIASIS RENAL. ASPECTOS MÉDICO-METABÓLICOS 6. TRATAMIENTO
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