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1 Cambio climático y salud humana El cambio climático es uno de los desafíos más apremiantes que enfrenta la humanidad en la actualidad. Se refiere a la alteración a largo plazo de los patrones climáticos en la Tierra, y es impulsado en gran medida por las actividades humanas, como la quema de combustibles fósiles, la deforestación y la agricultura intensiva. El cambio climático tiene una serie de impactos directos e indirectos en la salud humana. Los impactos directos del cambio climático en la salud incluyen: Aumento de las temperaturas: Las olas de calor más frecuentes e intensas pueden causar estrés térmico, agotamiento por calor y golpes de calor, lo que puede resultar en lesiones y muertes. Cambios en la calidad del aire: El aumento de las temperaturas puede aumentar la concentración de contaminantes atmosféricos, como el ozono, que pueden empeorar las condiciones respiratorias y cardiovasculares. 2 Cambios en las enfermedades infecciosas: El cambio climático puede alterar la distribución de vectores, como los mosquitos que transmiten enfermedades como el dengue y la malaria, lo que aumenta la propagación de estas enfermedades. Escasez de agua y sequías: La falta de acceso al agua potable y la sequía pueden afectar la nutrición, la higiene y la salud en general. Los impactos indirectos del cambio climático en la salud están relacionados con los efectos en los ecosistemas, la disponibilidad de alimentos y el aumento de la inseguridad alimentaria. También pueden desencadenar desplazamientos humanos debido a eventos climáticos extremos y la pérdida de recursos naturales. La lucha contra el cambio climático es esencial para proteger la salud humana. Las medidas de mitigación, como la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, pueden contribuir a prevenir muchos de estos impactos en la salud. Además, se deben implementar 3 estrategias de adaptación que aborden los desafíos ya presentes, como la gestión de desastres naturales y la protección de la salud en condiciones climáticas extremas.
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