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farmayuda.tk FARMACOLOGÍA DEL APARATO DIGESTIVO TEMA 19: FARMACOLOGÍA DE LA SECRECIÓN GÁSTRICA. ANTIULCEROSOS La úlcera gastroduodenal, la enfermedad por reflujo gastroesofágico y el síndrome de Zollinger-Ellison son tres patologías motivadas por la acidez gástrica, por lo tanto, el tratamiento se dirige a reducir la secreción de ácido. Los fármacos que logran este objetivo son fundamentalmente los inhibidores de la bomba de protones (IBP) y los antihistamínicos H2. 1. Inhibidores de la secreción de ácido 1.1. Inhibidores de la bomba de protones Los inhibidores de la bomba de protones (IBP) son fármacos antisecretores que actúan sobre la bomba de protones de la célula parietal, bloqueando la enzima H+/K+ ATPasa. Los IBP se utilizan en el manejo de las enfermedades relacionadas con el ácido gástrico, incluyendo la úlcera duodenal, úlcera gástrica, enfermedad por reflujo gastroesofágico, esofagitis erosiva, la infección por Helicobacter pylori y los síndromes hipersecretores como el síndrome de Zollinger-Ellison. También son utilizados como gastroprotectores en los pacientes tratados con AINES. Los principales IBPs son: Omeprazol, Lansoprazol, Pantoprazol, Rabeprazol, Esomeprazol, Revaprazan y Soraprazan (estos dos últimos, de inhibición reversible). Son los fármacos de elección en el tratamiento de las úlceras relacionadas con H. pylori ya que inhiben el crecimiento de la bacteria. En general provocan pocas reacciones adversas (buena tolerancia), las más habituales son náuseas, diarreas y cefalea. Raramente se asocian con alteraciones de la función hepática, citopenias, reacciones de hipersensibilidad y deficiencia de vitamina B12. Los IBPs inhiben el CYP2C19 y por tanto disminuyen el metabolismo (aumenta el 87 farmayuda.tk efecto) del citalopram, imipramina, algunas benzodiacepinas y de anticoagulantes. El efecto de los IBP aumenta al administrarlo a la dosis adecuada y tomándolo antes de las comidas. Se recomienda que se tomen antes del desayuno. En comparación con los antagonistas H2, tienen mayor efecto en la supresión de la secreción gástrica de ácido y en la estimulación de la curación de la úlcera gastroduodenal. 1.2. Antagonistas de los receptores de histamina H2 Los antagonistas H2 actúan bloqueando el receptor de histamina de la célula parietal. Los más utilizados son: la Cimetidina, Ranitidina, Famotidina (más potente), Nizatidina, Roxatidina. Presentan diferencias de potencia, duración y rapidez de acción, pero en general se pueden utilizar indistintamente. En general son fármacos bien tolerados y raramente presentan efectos secundarios. En raras ocasiones la cimetidina ha dado lugar a citopenias, ginecomastia, alteraciones de la función hepática (inhibe el CYP). A nivel cardiaco producen bradicardia sinusal y prolongan el tramo QT, mientras que a nivel del SNC causan confusión, somnolencia y mareos. La cimetidina atraviesa la placenta y se elimina por la leche materna por lo que debe evitarse su uso en embarazo y lactancia. 1.3. Antagonistas de los receptores M1 Los antagonistas muscarínicos no se utilizan en la actualidad dada la mayor eficacia y seguridad de los IBP y de los anti H2. El más conocido es la Pirenzepina. 1.4. Antagonistas de la CCK B El receptor B de colecistoquinina (CCK B) puede antagonizarse produciendo un antagonismo a nivel de secreción de gastrina. Estos fármacos están en período de estudio y de momento su utilidad terapéutica no es importante. 2. Neutralizantes de la secreción ácida: antiácidos Además de administrar fármacos para reducir la secreción de ácido clorhídrico en la mucosa gástrica, otra estrategia para disminuir los síntomas provocados por la úlcera gastroduodenal y el reflujo gastroesofágico es el uso de antiácidos. Los antiácidos actúan neutralizando el ácido secretado a la luz gástrica. Por elevación rápida del pH intragástrico, disminuyen la actividad de la pepsina. Dado que la secreción de ácido es continua por parte del estómago y debido al vaciado gástrico, sus efectos son de corta duración pero pueden alargarse hasta 3 horas si se administran junto a las comidas. Al elevar el pH pueden alterar la absorción de otros 88 farmayuda.tk fármacos. También alteran la reabsorción tubular por modificación del pH urinario. Entre los más usuales están los compuestos de magnesio como el Hidróxido de magnesio, Óxido de magnesio y Trisilicato de magnesio que presentan una rápida acción y una neutralización del ácido baja a moderada. Entre sus efectos adversos destacan los procesos diarreicos y la acumulación de MgCl2 (produce diarrea) que en casos de insuficiencia renal puede producir depresión del SNC y arritmias. Los compuestos de aluminio (Hidróxido de aluminio y Carbonato de aluminio) presentan una moderada acción antiácida. Entre sus efectos adversos figuran su potente acción astringente, la hipofosfaturia, hipofosfatemia y osteoporosis y, en pacientes con insuficiencia renal, la retención de aluminio en el cerebro que puede causar neurotoxicidad. El AlCl3 produce estreñimiento. Las combinaciones de magnesio y aluminio, como el magaldrato o el almagato, dan lugar a una neutralización rápida y sostenida sin alterar la motilidad. Estas combinaciones no son absorbibles, siendo el magaldrato citoprotector de la mucosa gástrica. Se unen a fármacos en el aparato gastrointestinal disminuyendo la absorción de fenitoína y tetraciclinas. Los antiácidos de acción general como el Bicarbonato sódico o el Carbonato cálcico aumentan el pH gástrico (disminuyen la absorción de los ácidos débiles como el ketoconazol mientras que aumentan la absorción de bases débiles como la penicilina) y producen cambios en el pH urinario (que afectan a la reabsorción tubular: disminuye la reabsorción de ácidos débiles como salicilatos y aumenta el de bases débiles). El CaCl2 que genera el carbonato cálcico como consecuencia de su acción, produce hipercalcemia y estreñimiento. La acción de los antiácidos requiere de su presencia constante en el estómago, de ahí que el efecto de una sola dosis sea pasajero y dependiente de la velocidad del vaciado gástrico. 3. Protectores de la mucosa Estos fármacos crean una capa protectora alrededor de la mucosa, evitando su agresión por el contenido ácido. En este grupo encontramos fármacos como el Sucralfato que es una sal básica de aluminio y sacarosa que en medio ácido forma polímeros en forma de pasta que se 89
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