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500 D I V E R S I D A D M I C R O B I A N A hasta convertirse en una hifa. En el extremo de la hifa se forma una yema. Esta yema crece, forma un flagelo, se separa de la célula madre y se aleja nadando. Más tarde, la célula hija pierde su flagelo y tras un período de maduración forma a su vez una hifa e inicia la gemación. En el extremo de la hifa de la célula madre se pueden formar varias yemas, lo que origina grupos de células conectados por hifas. En algunos casos, la yema se forma directamente desde la célula madre sin formación pre- via de hifa, mientras que en otros casos una célula individual forma una hifa en cada extremo (Figura 14.56). Los procesos de replicación del nucleoide se producen antes de la formación de la yema, y cuando esta ya se ha formado, una copia del cromo- soma recorre la hifa hasta llegar a la yema. A continuación se forma un septo que separa la yema, todavía en crecimiento, de la hifa y la célula madre (Figura 14.55). Fisiológicamente, Hyphomicrobium es una bacteria meti- lótrofa (Sección 14.17), y está presente en hábitats de agua dulce, marinos y terrestres. Sus fuentes de carbono preferidas son compuestos C 1 como el metanol (CH 3 OH), la metilamina (CH 3 NH 2 ), el formaldehído (CH 2 O) y el formiato (HCOO−). Un proceso de enriquecimiento bastante específico para Hypho- microbium es utilizar metanol como donador de electrones y nitrato (NO 3 −) como aceptor, en un medio diluido incubado en condiciones anóxicas. Hyphomicrobium es la única bacte- ria desnitrificante de crecimiento rápido conocida que utiliza metanol como donador de electrones, de modo que este pro- cedimiento sirve para seleccionar este organismo de una gran variedad de ambientes. Bacterias con prostecas y pedunculadas Diversas bacterias pueden producir extrusiones citoplasmáti- cas como pedúnculos (Figura 14.57), hifas y apéndices (Tabla 14.4). Las protuberancias de este tipo, que tienen un diámetro menor que la célula madura y contienen citoplasma y pared celular, reciben el nombre colectivo de prostecas (Figura 14.58). Las prostecas permiten a los organismos adherirse a materia parti- culada, material vegetal o a otros organismos en hábitats acuáti- cos. Además, se pueden utilizar para aumentar la relación entre la superficie y el volumen celular. Recordemos que una mayor relación superficie/volumen en las células procariotas refuerza, en general, su capacidad de captar nutrientes y expulsar resi- duos ( Sección 2.6). La inusual morfología de las bacterias con apéndices (Figura 14.58) lleva esta proporción al extremo y puede ser una adaptación evolutiva a la vida en aguas oligotrófi- cas (pobres en nutrientes), que es donde se encuentran con más frecuencia estos organismos. Las prostecas también pueden actuar reduciendo el hundi- miento de las células. Al ser estos organismos acuáticos, y dado que su metabolismo es típicamente aerobio, las prostecas pue- den evitar que las células se hundan hacia zonas anóxicas en las que no podrían respirar. Caulobacter Dos bacterias pedunculadas habituales son Caulobacter (Figura 14.57) y Gallionella (Figura 14.36). La primera es un quimioorganótrofo que produce un pedúnculo con citoplasma en su interior, es decir, una prosteca, y la segunda es una bac- teria quimiolitótrofa oxidadora de hierro cuyo pedúnculo está compuesto por hidróxido férrico (Fe(OH) 3 ) (Sección 14.15). Las internas, como los complejos membranosos, no se reparten en el proceso de división celular, y deben formarse de novo. No obs- tante, esto supone una ventaja, ya que en estas células se pueden formar estructuras internas más complejas que en las células que se dividen por fisión binaria, porque estas últimas tienen que repartir dichas estructuras entre las dos células hijas. No es una casualidad que muchas bacterias formadoras de yemas, sobre todo las especies fotótrofas y quimiolitótrofas, contengan extensos sistemas membranosos internos. Bacterias formadoras de yemas: Hyphomicrobium Hay dos bacterias formadoras de yemas muy bien estudiadas que pertenecen a las Alphaproteobacteria y están estrecha- mente relacionadas: Hyphomicrobium, que es quimioorganó- trofa, y Rhodomicrobium, fotótrofa. Estos organismos producen yemas en los extremos de largas y finas hifas. La hifa es una extensión celular directa con pared celular, membrana citoplas- mática y ribosomas, y puede tener DNA. En la Figura 14.55 se muestra el ciclo vital de Hyphomicrobium. La célula madre, a menudo unida por su base a un sustrato sólido, forma una delgada protuberancia que se va alargando Figura 14.55 Etapas del ciclo biológico de Hyphomicrobium. Hyphomicrobium tiene un solo cromosoma circular. DNA Célula madre Hifa La hifa crece; el DNA se replica Una copia del cromosoma va a la yema Yema Cromosoma Septo Flagelo El DNA de la célula progenitora se vuelve a replicar Formación del septo transversal La hifa se alarga más Las células se separan La célula nadadora madura y se aleja https://booksmedicos.org booksmedicos.org Botón1:
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