Descarga la aplicación para disfrutar aún más
Vista previa del material en texto
90 Cefaleas Orientación MIR Tema de importancia intermedia en el MIR, con una pregunta al año los últimos años, que dada su baja dificultad se convierte en un tema rentable. Hay que conocer las diferencias entre la cefalea tensional y la migraña, y saber cuáles son las cefaleas trigeminoautonómicas. Dado que se ha preguntado, es importante conocer el tratamiento y la profilaxis de la migraña. 14.1. Consideraciones generales La cefalea es el motivo de consulta neurológico más frecuente en urgencias y a nivel ambulatorio. Puede ser la única manifestación de una cefalea pri- maria o puede ser manifestación de una enfermedad subyacente, muchas de las cuales pueden poner en peligro la vida del paciente y requieren un diagnóstico y tratamiento específico y precoz. Los datos que pueden orien- tar a que se está ante una cefalea secundaria pueden dividirse en ante- cedentes del paciente, características de la cefalea o síntomas y signos encontrados, recogidos en la Tabla 14.1 (MIR 17-18, 148). Cefalea Antecedentes del paciente: • Neoplasia, inmunosupresión, riesgo de sangrado aumentado, tratamiento anticonceptivo, edad avanzada Características de la cefalea: • Inicio: súbito con máxima intensidad desde el inicio (cefalea en trueno) o coincidiendo con esfuerzo • Evolución: aumento progresivo de intensidad o frecuencia. Cambio de características sin causa. Despierta o predominio matutino • Desencadenantes: empeora o se desencadena con los cambios de postura, Valsalva o movimientos • Localización: unilateral, siempre en el mismo lado (excepto en algunas cefaleas primarias como cefalea en racimos, hemicránea paroxística o continua, neuralgia occipital, del trigémino) • Respuesta: no mejoría con tratamiento correcto Manifestaciones acompañantes: • Alteración psíquica progresiva, alteración de conducta o comportamiento • Alteración del nivel de consciencia • Crisis epilépticas • Síntomas o signos exploratorios neurológicos focales incluyendo papiledema • Fiebre sin foco • Vómitos no explicables por una cefalea primaria, ni por una enfermedad sistémica • Presencia de signos meníngeos Tabla 14.1. Criterios de gravedad de una cefalea Existen dos síndromes típicos que son con frecuencia la expresión de estas cefaleas (Tabla 14.2): • Síndrome meníngeo o de irritación meníngea, en el que el paciente suele tener cefalea intensa acompañada de rigidez nucal, empeora- miento con los movimientos, signos meníngeos presentes (Kernig y Brudzinski) y vómitos, en ocasiones no precedidos de náuseas (vómi- tos en escopetazo). Es típico de la hemorragia subaracnoidea y de la meningitis. • Síndromes de hipertensión/hipotensión intracraneal. Ambos se manifiestan con un componente dinámico, empeorando la cefalea según la postura. En el primero el exceso de presión intracraneal se manifestará con una mayor cefalea en decúbito; es típico de lesio- nes ocupantes de espacio o de trombosis de senos. El de hipopre- sión o hipotensión intracraneal al haber poco LCR cuando el paciente se incorpora suele presentar cefalea, en ocasiones acompañada de náuseas, vómitos y sensación de mareo; es típico tras la realización de una punción lumbar aunque puede ser espontáneo (MIR 15-16, 128-AN). Enfermedad Manifestaciones clínicas Diagnóstico Tratamiento Hemorragia subaracnoidea Inicio súbito, intensa, rigidez de nuca, focalidad TC basal, punción lumbar, angio- TC Tratamiento del aneurisma (coil/clip) Meningitis Fiebre, rigidez de nuca, vómitos, cutáneas Punción lumbar, PCR, cultivo Antibiótico lo antes posible Lesiones ocupantes de espacio Empeoramiento progresivo, máxima en decúbito, focalidad TC o RM con contraste Cirugía ± QT ± RT Arteritis de la temporal Anciano, polimialgia, claudicación mandibular, amaurosis, no pulso. VSG, PCR, biopsia, ecografía Corticoides Trombosis de senos venosos Embarazada, anticonceptivos, oncológico, focalidad, papiledema, vómitos TC/RM c+ en fase venosa Anticoagulación Disección arterial Cervicalgia, traumatismo, Horner, focalidad, amaurosis fugax Angio-TC/RM o arteriografía Anticoagulación- antiagregación Tabla 14.2. Algunas enfermedades graves que se suelen manifestar con cefalea 14.2. Cefalea tensional Es el tipo de cefalea más frecuente y predomina en la mujer. Se distinguen tres formas: episódica infrecuente, episódica frecuente y crónica (> 15 días al mes). Sus criterios diagnósticos buscan diferenciarla de la otra cefalea primaria más frecuente, la migraña, con la que puede confundirse. Como criterios diagnósticos, destacan episodios de cefalea que duren entre 30 minutos y 7 días, de cualidad opresiva (no pulsátil), intensidad leve o moderada, localización bilateral, no agravada por esfuerzos físicos y no asociada a náuseas ni vómitos. No debe existir una explicación mejor para la cefalea (TCE, crisis hipertensiva) (MIR 11-12, 80). 14 91 14. Cefaleas. NR El tratamiento de los episodios se realiza con antiinflamatorios no esteroi- deos, paracetamol, o analgésicos comunes. El tratamiento preventivo se realiza con antidepresivos tricíclicos e inhibidores selectivos de la recapta- ción de serotonina y noradrenalina. 14.3. Migraña La segunda cefalea más frecuente, generalmente comienza entre los 10-30 años y el 60-75% de los casos son mujeres. Existe una predisposición here- ditaria poligénica y gran influencia de factores ambientales. Fisiopatología La patogénesis de la migraña puede ser considerada en tres fases: • Génesis troncoencefálica con participación de los núcleos dorsal del rafe y locus coeruleus (serotoninérgicos): participan en la fase de pró- dromos con fatiga e irritabilidad, así como la cefalea. • Depresión cortical propagada: onda de despolarización neuronal y glial con cambios en el calibre vascular y flujo sanguíneo: una fase ini- cial de hiperemia cortical de pocos minutos seguida de otra de hipo- perfusión más prolongada, que justificaría la focalidad neurológica en la migraña con aura. • Activación de neuronas del núcleo caudal del trigémino a nivel bulbar y activación del sistema trigeminovascular con liberación de neuro- péptidos vasoactivos (CGRP, PACAP). Esta fase condiciona los sínto- mas autonómicos en el territorio trigeminal y la cefalea. Subtipos clínicos La Tabla 14.3 recoge las características y los criterios diagnósticos de esta enfermedad. Migraña sin aura Al menos 5 episodios, cumpliendo los siguientes criterios: • Duración del episodio de 4-72 horas (sin tratamiento o tratada sin éxito) • Al menos 2 de los siguientes datos: - Unilateral (30-40% son bilaterales) - Pulsátil (50% de los casos son no pulsátiles) - Intensidad moderada a grave (Llega a interferir o impedir las tareas cotidianas) - Agravada por el movimiento (caminar o subir escaleras) • Al menos un síntoma asociado: - Náuseas o vómitos - Fotofobia, sonofobia u osmofobia. (Más del 80%) • El dolor no se atribuye a otra enfermedad Migraña con aura A los criterios descritos anteriormente se añaden los siguientes: • 1 o más síntomas focales neurológicos transitorios positivos (luces o líneas) y negativos (pérdida de visión) (90% visuales) antes o durante la cefalea • Duración del aura de 5-60 minutos • La cefalea acompaña o sigue al aura dentro de los siguientes 60 minutos • El dolor no se atribuye a otra enfermedad Tabla 14.3. Criterios diagnósticos simplificados para la migraña con y sin aura • Migraña con aura o migraña clásica. Representa el 20% de la migraña. Es una cefalea recurrente, de predominio hemicraneal y cua- lidad pulsátil, que puede acompañarse de náuseas, vómitos, fotofobia y sonofobia, intensidad moderada-alta, duración entre 4 y 72 horas. Se precede de clínica de focalidad neurológica (aura), siendo las mani- festaciones visuales las más frecuentes, tanto positivas (escotomas centelleantes, espectro de fortificación, luces, líneas) como negati-vas (visión borrosa, defectos campimétricos) aunque también puede haber síntomas sensitivos, motores o del lenguaje. Preceden a la cefa- lea en 5-60 minutos, y habitualmente desaparecen minutos antes de comenzar la cefalea. • Migraña sin aura o migraña común. Representa el 75% de los casos de migraña. Consiste en cefaleas de análogas características a las descritas en la migraña con aura, pero sin clínica de focalidad neuro- lógica precediendo o acompañando a la cefalea. Ambos tipos de migraña pueden ocurrir en el mismo paciente. Las crisis se pueden desencadenar por diversos factores dietéticos (vino tinto), ambien- tales (cambios meteorológicos), psicológicos (estrés), hormonales (mens- truación), alteración de sueño y farmacológicos. Complicaciones • Migraña crónica. Cuando se padecen más de 15 episodios al mes, durante al menos 3 meses. Requiere tratamiento preventivo siempre, y hay que vigilar que no esté favorecida por el uso excesivo de medi- cación sintomática, que puede fomentar la cronificación. • Estado de mal migrañoso o estatus migrañoso. Más de 72 horas de duración, a pesar del tratamiento. • Infarto migrañoso. Cuando los síntomas del aura migrañosa persis- ten más allá de la duración de la cefalea, y se asocian a una lesión isquémica cerebral del mismo territorio vascular, demostrado por imagen. Son más frecuentes en mujeres mayores de 45 años, fuma- doras, en tratamiento con anticonceptivos. Tratamiento El tratamiento de la migraña debe incluir tres ejes: el manejo de las posibles comorbilidades, el tratamiento sintomático de los ataques de migraña y el tratamiento preventivo. El tratamiento sintomático (Tabla 14.4) debe ofrecerse a todo paciente, y puede incluir fármacos inespecíficos, como los anti-inflamatorios no este- roideos (AINEs), o fármacos específicos, como los triptanes (agonistas de los receptores de serotonina 5-HT1B y 5-HT1D), el lasmiditán (agonista de los receptores de serotonina 5-HT1F), los gepantes (antagonistas del péptido relacionado con la calcitonina) y antaño, los ergóticos. Igual de importante que saber lo que puede prescribirse, lo es saber que el paracetamol no suele prescribirse ya que es sólo eficaz en uno de cada 10 pacientes, empleándose únicamente en pacientes embarazadas, y no se emplean opiáceos en nin- guna cefalea, por el elevado riesgo de cronificación de la cefalea y desarrollo de una cefalea por uso excesivo de medicación sintomática, la cual puede ocurrir cuando se emplean paracetamol, AINEs u opiáceos más de 15 días al mes o el resto de tratamientos sintomáticos más de 10 días. Tipo de tratamiento Familia terapéutica Contraindicaciones Fármacos inespecíficos AINEs Patología digestiva Nefropatía grave Fármacos específicos Ergóticos En desuso Triptanes Cardiopatía, patología vascular grave Gepantes (rimegepante, ubrogepante) Hepatopatía grave Lasmiditan Vértigo Tabla 14.4. Tratamiento sintomático de la migraña 92 Manual CTO de Medicina y Cirugía, 12.ª edición La migraña no tiene cura en la actualidad, pero dada la gran discapacidad que conlleva, siendo la segunda causa de años de vida vividos con discapa- cidad por debajo de los 50 años, siempre debe evaluarse la pertinencia de iniciar un tratamiento preventivo. El objetivo de este es disminuir el número de días de cefalea y de migraña al mes, disminuir la intensidad de los epi- sodios de cefalea e incrementar la efectividad del tratamiento sintomático. Se puede considerar su uso a partir de 4 días de cefalea al mes, adaptando la indicación a cada paciente, estando bastante claro que cuantos más días de cefalea padezca el paciente, más indicado está el tratamiento preven- tivo, siendo casi obligatorio a partir de 10 días al mes. A la hora de iniciar un tratamiento preventivo (Tabla 14.5), es importante informar al paciente de que este no será permanente, sino que su duración oscilará entre 6 y 12 meses; tras el cual se suspenderá, ya que en muchos casos la mejoría se mantiene tras la suspensión del mismo. Existen tres grandes grupos de tratamientos preventivos: los tratamientos clásicos, los tratamientos locales y los nuevos tratamientos. Los tratamientos llamados “clásicos” son fármacos orales inicialmente desarrollados para otra enfer- medad y que generalmente en forma de serendipia, mostraron cierta uti- lidad en el tratamiento de la migraña, que luego quedó patente mediante los ensayos clínicos pertinentes y en la práctica habitual. Estos fármacos pertenecen a distintas familias terapéuticas: antiepilépticos (topiramato, ácido valproico), antidepresivos (amitriptilina, venlafaxina, mirtazapina), antihipertensivos (beta-bloqueantes, lisinopril, candesartan) y flunarizina. Dado que son fármacos no-específicos, todos pueden tener efectos adver- sos, que nunca serán permanentes, generalmente no son peligrosos, pero el paciente debe ser informado al respecto, debiendo suspenderse el trata- miento en caso de que estos aparezcan. Respecto de los tratamientos locales, el más establecido es la toxina botulínica tipo A, que se administra en 31 puntos craneales y cervica- les de acuerdo con un protocolo específico (llamado PREEMPT), con una duración de efecto de unos tres meses. En el caso de este tratamiento, carece de efectos adversos sistémicos, neurológicos o digestivos, siendo los posibles problemas locales y como su efecto terapéutico, limitados a los 3-4 meses que hace efecto. Por otra parte, el bloqueo de nervios occipitales mediante anestésicos locales, tiene utilidad tanto como tra- tamiento sintomático para pacientes resistentes a otros fármacos o con estatus migrañoso como cierto efecto preventivo, con duración del efecto de unas semanas. Es una excelente opción en el manejo de las pacientes embarazadas. Por último, el mayor conocimiento de la fisiopatogenia de la migraña ha provocado el desarrollo de fármacos dirigidos a la inhibición del Péptido Relacionado con el Gen de la Calcitonina (CGRP de sus siglas en inglés), un neuropéptido que causa vasodilatación de la circulación intracraneal. En el momento actual existen dos grandes grupos de fármacos, los anti- cuerpos monoclonales dirigidos contra el CGRP circulante (galcanezumab, fremanezumab o eptinezumab) o su receptor (erenumab); y otras molé- culas de menor tamaño que antagonizan el CGRP circulante, los gepantes, en concreto atogepante, cuya vida media es más prolongada que el resto e gepantes y permite su uso como tratamiento preventivo y no como tra- tamiento sintomático, como rimegepante y ubrogepante. Los anticuerpos se administran vía subcutánea, salvo el eptinezumab (intravenoso) y los gepantes son fármacos orales. La eficacia de los tratamientos preventivos es relativamente similar, siendo efectivos en un 40-60% de los pacientes en el caso de los tratamientos clásicos y los nuevos fármacos y en un 50-70% de los pacientes tratados con toxina botulínica. Dado su mayor coste, se reserva la toxina botulínica para aquellas personas que no han mejorado o no han tolerado al menos dos preventivos orales clásicos; y los nuevos tratamientos para aquellos que han fallado a tres preventivos, siendo uno de ellos toxina botulínica en el caso de la migraña crónica. Existe un grupo de tratamientos en desarrollo que se basa en el empleo de estimulación de distintas estructuras nerviosas, que pueden ser la corteza, el nervio vago, el ganglio esfenopalatino o nervios periféricos. Sus resulta- dos hasta la fecha no han sido muy consistentes, pero podrían ser de gran utilidad en pacientes o situaciones clínicas en las que el empleo de fárma- cos esté contraindicado. Tipo de tratamiento Fármaco Evitar en Efectos adversos Tratamientos clásicos Topiramato Nefrolitiasis Problemas de concentración, depresión Betabloqueantes Asma Cansancio, hipotensión Amitriptilina Personas mayores Somnolencia, confusión Antihipertensivos Cansancio,hipotensión Flunarizina Depresión, sobrepeso Tratamientos locales Toxina botulínica tipo A Anticoagulados Molestias locales, ptosis transitoria Bloqueo anestésico de nervios occipitales Pacientes con fracturas craneales Molestia local Nuevos tratamientos Anticuerpos monoclonales vs. CGRP (galcanezumab, fremanezumab, eptinezumab (intravenoso) o vs. El receptor de CGRP (erenumab) Estreñimiento (erenumab), hipertensión Gepantes (atogepante) Hepatopatía Estreñimiento, náuseas Tabla 14.5. Diferentes opciones en el tratamiento preventivo de la migraña 14.4. Cefaleas trigeminoautonómicas Son un grupo de cefaleas que tienen como característica principal que durante los episodios de cefalea los pacientes presentan síntomas tri- geminoautonómicos ipsilaterales al dolor, tales como hiperemia ocular, lagrimeo, rinorrea, sensación de ocupación nasal, edema palpebral, ptosis, miosis, sudoración, rubefacción, taponamiento de oídos. Además, a diferencia de otras cefaleas primarias, durante los episodios los pacientes suelen presentar intranquilidad motora. En función de la duración de los episodios y el número de episodios diarios (que se relacionan de manera inversa, a menor duración mayor número de episodios) se clasifi- can como se muestra en la Tabla 14.6. 93 14. Cefaleas. NR Duración episodio Número episodios Nombre cefalea Peculiaridad Segundos 3-200/día SUNCT/SUNA No miosis. Tratamiento con lamotrigina 2-30 minutos 5-30/día Hemicránea paroxística RESPUESTA A INDOMETACINA 15 minutos- 180 minutos 1-8/día Cefalea en racimos Sumatriptán subcutáneo, oxígeno Verapamilo y topiramato Varias horas 1 Hemicránea continua Menos síntomas, RESPUESTA A INDOMETACINA Tabla 14.6. Clasificación de las cefaleas trigeminoautonómicas Cefalea en racimos o cluster, histamínica o de Horton El término “en racimos” hace referencia a que los pacientes suelen tener periodos de tiempo variable en los que durante varios días presentan epi- sodios diarios, quedando luego asintomáticos hasta el siguiente acúmulo o cluster. Predomina en varones (2:1) (MIR 18-19, 156) y debuta a cual- quier edad, aunque preferentemente entre los 20-50 años. Se distingue una forma episódica y otra crónica (cuando hay ausencia de fases de remisión durante 1 año o más, o con remisiones que duran menos de 1 mes). Se caracteriza por presentar episodios de cefalea unilateral, localizada pre- ferentemente a nivel periocular, de gran intensidad, y cuya duración puede variar entre 15-180 minutos, desde una vez cada 2 días, hasta 8 veces al día. Aparece característicamente por la noche, aproximadamente 1 hora después de conciliar el sueño, y puede recurrir durante el día, a menudo a la misma hora. Los ataques se acompañan de uno o varios signos vegetativos ipsilaterales al lado doloroso: lagrimeo, rinorrea, congestión ocular y obstruc- ción nasal ipsilateral al dolor, sudoración frontal y facial, edema palpebral ipsilateral, miosis-ptosis ipsilateral, e inquietud motora y desasosiego. En el 25% de los casos se acompaña de un síndrome de Horner que ocasional- mente puede persistir. No se acompaña de aura, náuseas ni historia familiar. • Tratamiento preventivo. Evitando factores desencadenantes, si éstos existen, como el alcohol y otros vasodilatadores. • Tratamiento sintomático. La terapia de elección es el sumatriptán subcutáneo, por su rapidez y eficacia. La segunda medida más efec- tiva es la inhalación de oxígeno a flujo elevado. • Tratamiento profiláctico. Se considera el verapamilo como el fár- maco de elección. Si no hay respuesta, se puede intentar con cursos breves de corticoides, topiramato, ergotamina en dosis única noc- turna, o litio. Otras cefaleas trigeminoautonómicas • Short Lasting Unilateral Neuralgiform Headache attacks with Conjunctival Injection and Tearing (SUNCT). Duración muy breve, muchos episodios al día. El tratamiento de elección es lamotrigina. • Hemicránea paroxística. Predomina en la mujer, de inicio en la edad adulta. Duración más breve que la cefalea en racimos (2-30 minutos) y una frecuencia mayor (5-30 episodios al día). La buena respuesta a indometacina es un criterio diagnóstico (MIR 16-17, 154; MIR 13-14, 146). • Hemicránea continua. Cefalea hemicraneal estricta en la que suele haber en el momento actual o durante su evolución síntomas trigemi- noautonómicos ipsilaterales. La excelente respuesta a indometacina constituye el tratamiento y es criterio diagnóstico. La Tabla 14.7 resume las principales cefaleas vistas en este capítulo. Preguntas MIR ➔ MIR 18-19, 156 ➔ MIR 17-18, 148 ➔ MIR 16-17, 154 ➔ MIR 15-16, 128-AN ➔ MIR 14-15, 68 ➔ MIR 13-14, 146 ➔ MIR 12-13, 233 ➔ MIR 11-12, 80 Parámetro Cefalea tensional Migraña Cefalea en racimos Duración 30 minutos-7 días 4 horas-72 horas 15-180 minutos Localización Bifrontal Hemicraneal Periocular unilateral Cualidad Opresiva Pulsátil Punzante Agrava No con esfuerzo Esfuerzo, movimiento Tacto Asocia Fotofobia o fonofobia, no ambos Náuseas/vómitos Sonofobia/fotofobia/osmofobia Rinorrea, lagrimeo, ojo rojo, edema palpebral, congestión nasal Actividad física No la impide Busca reposo Intranquilidad motora Intensidad Leve-moderada Moderada-grave Grave Otros Estrés Aura Épocas. Horario. Alcohol. Varón Tratamiento ataque AINE/ paracetamol AINE o triptanes Oxígeno a alto flujo, sumatriptán subcutáneo Tratamiento preventivo ADT, ISRS Topiramato, β-bloqueantes, ADT, neuromoduladores, magnesio, toxina botulínica Verapamilo, topiramato, litio, esteroides Tabla 14.7. Características de las principales cefaleas 94 Manual CTO de Medicina y Cirugía, 12.ª edición ✔ Ante un paciente con cefalea es importante recordar los datos de alar- ma que puedan sugerir estar ante un caso de cefalea secundaria. En su ausencia hay que conocer las cefaleas primarias más frecuentes y las diferencias entre ellas. ✔ El tratamiento de los ataques migrañosos leves-moderados son los AINE. En el caso de ataques moderados-graves, se usan los triptanes. ✔ Para la prevención de los ataques de migraña se usan β-bloqueantes, neuromoduladores, antidepresivos tricíclicos, calcioantagonistas, anti- hipertensivos, toxina botulínica y antagonistas de la serotonina. Recuér- dese que la metisergida (antagonista de la serotonina) puede provocar fibrosis pleural, pericárdica o retroperitoneal. ✔ La cefalea en cluster se presenta en hombres de 20-50 años. Ocasiona episodios de cefalea unilateral periocular, típicamente nocturna. Puede implicar lagrimeo, rinorrea, inquietud o síndrome de Horner, entre otros. El alcohol es un posible desencadenante. ✔ El tratamiento de elección de la cefalea en cluster es sumatriptán sub- cutáneo. La segunda opción es oxígeno a alto flujo. Como profilaxis se usa verapamilo, topiramato y litio. ✔ La clave para diferenciar las cefaleas trigeminoautonómicas es la dura- ción de los episodios y la respuesta a tratamiento. Las dos cefaleas que se llaman hemicránea (paroxística y continua) responden de manera espectacular a la indometacina. Conceptos Clave Mujer de 34 años, diagnosticada de migraña sin aura, que consulta por episodios de sus cefaleas habituales, en número de 4-5 al mes. ¿Cuál de estos tratamientos NO estaría indicado? 1) Tomar triptanes durante todos los ataques. 2) Utilizar dosis bajas diarias de ergotamina. 3) Administrar como profilaxis propranolol. 4) Tratar todos los ataques agudos con naproxeno. RC: 2 Un paciente de 54 años refiere, desde hace 10 días, una o dos crisis de dolor de ojo derecho, con lagrimeo, gran nerviosismo, que le des- pierta por la noche y le obliga a salir de la cama, durándole unas 2 horas. ¿Cuál de las siguientes medidas entiende que es más eficaz para calmar el dolor? 1) Sumatriptán oral. 2) Sumatriptán subcutáneo. 3) Ibuprofeno oral. 4) Tramadol oral. RC: 2 La hermana de María lleva unos meses con cefalea, como sabe que está ustedpreparándose el MIR le consulta, refiriéndole unos 10 epi- sodios de dolor al día, que suelen durar 20 minutos, en los que “arde” la zona del ojo derecho y la región temporal y, a la vez, ese ojo se pone muy rojo, lloroso y le moquea la nariz. ¿Con qué fármaco confirmaría el diagnóstico y mejoraría a la paciente? 1) Oxígeno intranasal. 2) Sumatriptán subcutáneo. 3) Indometacina. 4) Lamotrigina. RC: 3 Casos Clínicos Recursos de la asignatura
Compartir