Lote V-36

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Definición y funciones de la boca en el sistema digestivo.
La boca, también conocida como cavidad oral, es una parte fundamental del sistema
digestivo humano, donde comienza el proceso de digestión. Esta estructura anatómica no
solo es el punto de entrada de alimentos y líquidos al cuerpo, sino que también desempeña
un papel crucial en la masticación, la deglución y la fonación. En este ensayo, exploraremos
la definición y las funciones principales de la boca en el sistema digestivo.
Definición de la boca:
La boca es una cavidad situada en la parte superior del sistema digestivo, compuesta por
varias estructuras anatómicas, incluidos los labios, las encías, los dientes, la lengua, el
paladar, las glándulas salivales y la mucosa oral. Actúa como la entrada al sistema digestivo
y es el sitio donde comienza el proceso de digestión mecánica y química de los alimentos.
Funciones de la boca en el sistema digestivo:
1. Masticación: La principal función de la boca es la masticación, que consiste en
triturar los alimentos en trozos más pequeños mediante la acción de los dientes y los
músculos masticatorios. Esta etapa prepara los alimentos para la deglución y aumenta su
superficie de contacto con las enzimas digestivas.
2. Deglución: La boca juega un papel crucial en el proceso de deglución, que es el acto
de pasar los alimentos desde la boca hacia el esófago. Durante la deglución, los músculos
de la lengua y la faringe coordinan el movimiento para impulsar el bolo alimenticio hacia la
parte posterior de la garganta y luego hacia el esófago.
3. Producción de saliva: Las glándulas salivales en la boca secretan saliva, un líquido
que contiene enzimas digestivas, como la amilasa salival, que comienza el proceso de
descomposición de los carbohidratos en la boca. La saliva también lubrica los alimentos,
facilitando la masticación y la deglución, y ayuda a mantener la salud oral al neutralizar los
ácidos y proteger los dientes de las caries.
4. Fonación: Además de su función en la digestión, la boca también desempeña un
papel importante en la producción de sonidos para el habla. Los movimientos coordinados
de la lengua, los labios y otros órganos articulatorios permiten la formación de diferentes
sonidos que se utilizan en el lenguaje humano.