MEDIDAS PARA ENFRENTAMIENTO DE INCENDIOS

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MEDIDAS PARA ENFRENTAMIENTO DE INCENDIOS
BENEFICIO SECO LA MINITA
	Realizado por:
	Revisado por:
	Aprobado por:
	Fecha de elaboración:
	Fatima Dulce María
García Hernandez
	
	
	25/11/2023
INTRODUCCIÓN 
Un incendio es un fuego de grandes proporciones que puede presentarse en tu empresa de manera instantánea o gradual y expandirse sin control. Puede provocar daños materiales y reputaciones, interrupción de la producción, daños a la salud de tus colaboradores, pérdida de vidas humanas y afectación al medio ambiente. 
Tomar todas las medidas que sean necesarias para prevenir incendios dentro de las empresas es necesario para minimizar las pérdidas y lo más importante todavía, proteger la vida de las personas que se encuentren dentro de las instalaciones de la empresa.
¿Cómo puede afectar un incendio a la empresa?
Un incendio en tu empresa puede tener consecuencias devastadoras, desde daños físicos en las instalaciones y equipos hasta pérdidas económicas al detener tus operaciones por un tiempo indefinido, lo que significa dejar de recibir ingresos y asumir costos adicionales para reanudar actividades.
Además de los daños físicos y económicos, un incendio puede generar, en el peor de los casos, pérdida de vidas humanas y daños tanto físicos como emocionales a tus colaboradores por inhalación de humo o quemaduras.
También afectación al planeta por aumento de emisiones de CO₂ y si se expande, destrucción de la cubierta forestal, muertes y fuga de animales, pérdida de terreno fértil, entre otros daños. 
Tomar medidas preventivas a través de un Plan de Mitigación de Riesgos con seguros, es la mejor alternativa para minimizar el desarrollo de este tipo de eventos catastróficos en tu empresa.
¿Cuáles son las principales causas de incendios en las empresas?
Un incendio en el lugar de trabajo puede presentarse por múltiples factores, una de las mayores causas es la falta de información, capacitación y prevención. Entre los riesgos de incendios en las empresas más comunes figuran: 
Problemas eléctricos: Cables en mal estado y sobrecalentamiento por exceso de uso o tener muchas conexiones conectadas en un solo enchufe o sin ningún regulador de energía pueden generar un cortocircuito. 
Fricción: Cuando no se da un correcto mantenimiento de lubricación a las máquinas por desgaste, pueden generarse fricción y roces que provocan incendios.
Chispas mecánicas: Generadas por metales que se calientan por la fricción, cuando dos objetos son golpeados con material ferroso por un descuido o falta de cuidado de la maquinaria.
Cigarrillos y fósforos: Una de las causas de incendio más comunes. Al fumar dentro de la empresa algún roce con productos puede generar chispas. 
Líquidos inflamables: Al almacenarlos en sitios incorrectos, en los recipientes no indicados o bajo temperatura no adecuada pueden generar una explosión. 
Falta de orden y aseo: Una incorrecta limpieza en las áreas de trabajo puede producir la acumulación de desperdicios industriales y basura que pueden generar gases o contaminantes que pueden provocar un incendio. 
Llamas abiertas: Algunas de las máquinas industriales desprenden color, no realizar un mantenimiento adecuado o manejarlas incorrectamente puede generar un incendio. 
Corte y soldadura: En este caso mínimas partículas de chispas que se generan después de realizar procesos de soldadura pueden desencadenar un incendio de forma gradual, el fuego se inicia horas después de la actividad.
Superficies calientes: Cuando una máquina no tiene el mantenimiento o cuidado adecuado, puede generar altas temperaturas muy altas. Tubos y calderas producen explosiones e incendios.
¿Cómo clasificar y reducir los riesgos de incendio en tu empresa?
Una herramienta útil para clasificar el riesgo de incendio es la Matriz de Riesgo, la cual se ejecuta con base a dos criterios: la probabilidad de que ocurra un incendio y el impacto que tendría en la empresa en caso de que ocurriera.
Una vez que hayas clasificado el riesgo de incendio en tu empresa, debes desarrollar un Plan de Mitigación de Riesgos que incluya medidas preventivas específicas para cada área de riesgo identificada. 
Estas medidas pueden incluir la instalación de sistemas de detección de humo y fuego, la eliminación segura de materiales inflamables, la capacitación de los empleados en prevención de incendios y la implementación de sistemas de extinción de incendios, entre otras.
La transferencia de riesgos a través de seguros también es fundamental para garantizar la continuidad del negocio en caso de un incendio. Al adquirir un seguro contra incendios, la empresa puede transferir el riesgo de pérdidas económicas y daños materiales a una compañía de seguros. Debes estar evaluando con cierta periodicidad tus necesidades de seguro y mantener las políticas actualizadas para proteger tu negocio en caso de cualquier eventualidad.
 
Legislación de seguridad frente a los riesgos de incendio 
Al implementar la Matriz de Riesgos y el Plan de Mitigación de Riesgos, es importante contemplar también las normas legales que establece la legislación colombiana frente a los riesgos de incendio en las empresas, como: 
Decreto 1072 de 2015 (Reglamento de Seguridad en el Trabajo). Establece las obligaciones y responsabilidades de los empleadores en materia de prevención y gestión del riesgo de incendios y otros peligros en el lugar de trabajo.
Resolución 2400 de 1979 de Normas de Seguridad Industrial establece los requisitos técnicos y de seguridad que deben cumplir las instalaciones y equipos para prevenir y gestionar el riesgo de incendios.
Resolución 3590 de 2019 de Planes de Emergencia y Contingencia establece los requisitos y procedimientos para la elaboración de planes de emergencia y contingencia que incluyen medidas de prevención y actuación ante incendios.
Decreto 1505 de 2013 de Normas para la Gestión del Riesgo de Desastres establece las obligaciones y responsabilidades de las empresas en la identificación y gestión del riesgo de incendios y otros desastres, incluyendo la elaboración de planes de contingencia y la implementación de medidas preventivas.
Ley 1575 de 2012 establece las obligaciones de los propietarios, ocupantes y usuarios de las edificaciones en materia de prevención y control de incendios, y define las responsabilidades de las autoridades competentes en la prevención, atención y mitigación de emergencias por incendios.
La norma técnica para la prevención y control de incendios en edificaciones es la NTC 2050, la cual se crea por la Ley 155. Establece los requisitos mínimos que deben cumplir las construcciones en materia de seguridad contra incendios.
Peligros generales de incendio
Para que se inicie un incendio hacen falta tres elementos: una fuente de ignición (calor), una fuente de combustible (algo que arda) y oxígeno:
las fuentes de ignición incluyen calentadores, artículos de iluminación, llamas vivas, equipos eléctricos, material de fumadores (cigarrillos, cerillas, etc.) y cualquier cosa que pueda alcanzar grandes temperaturas o provocar chispas;
las fuentes de combustible incluyen madera, papel, plástico, caucho o espuma, materiales de envasado sueltos, residuos y muebles, y las fuentes de oxígeno incluyen el aire que nos rodea.
Qué debería hacer el empleador
El empleador (y/o el propietario u ocupante de un edificio) debería realizar evaluaciones de los riesgos y mantenerlas actualizadas. El enfoque que debe aplicarse en estas evaluaciones es el mismo que en las evaluaciones de los riesgos para la seguridad y salud, y pueden llevarse a cabo ya sea como parte de una evaluación general de los riesgos o como un ejercicio independiente.
A partir de las conclusiones de la evaluación, el empleador debe asegurarse de que se han puesto en marcha las medidas adecuadas y apropiadas de seguridad contra incendios para reducir al mínimo el riesgo de lesión o muerte en caso de incendio.
Para ayudar a impedir que se produzca un incendio en el lugarde trabajo, la evaluación de los riesgos debe determinar qué puede provocar un incendio, a saber, fuentes de ignición (calor o chispas) y sustancias que arden, así como qué personas pueden encontrarse en situación de riesgo.
Una vez identificados los riesgos, el empleador puede adoptar las medidas apropiadas para controlarlos. Debe tomar en consideración si puede evitarlos por completo o, de no ser posible, cómo reducirlos y gestionarlos. También debe tener en cuenta cómo proteger a las personas si se produce un incendio.
El empleador debería:
· realizar una evaluación del riesgo de incendio;
· mantener las fuentes de ignición y las sustancias inflamables alejadas;
· evitar los incendios accidentales, por ejemplo, asegurar que los calefactores no puedan volcarse.
· asegurar que las instalaciones se mantienen en buenas condiciones de limpieza en todo momento, por ejemplo, evitando que se acumulen desperdicios que puedan arder;
· examinar cómo detectar incendios y cómo alertar a las personas con rapidez en cuanto se inician, instalando detectores de humos y alarmas contra incendios;
· contar con el equipo correcto de extinción de incendios para poder apagar el fuego con rapidez.
· mantener las salidas de incendios y las vías de emergencia claramente señalizadas y despejadas en todo momento;
· asegurar que los trabajadores han recibido la formación apropiada sobre los procedimientos que deben seguir, inclusive en los simulacros de incendios, y
· revisar y actualizar regularmente la evaluación de los riesgos.
Sustancias peligrosas que provocan incendios y explosiones
Aquellos trabajos que incluyen tareas de almacenaje, utilización o creación de productos químicos o que generan vapores, polvos, etc. que pueden arder o explosionar con rapidez son trabajos peligrosos, Cada año, muchas personas sufren lesiones en el trabajo debido a sustancias inflamables que han ardido o explosionado por accidente.
Cuáles son los peligros
Además de los explosivos, que no están cubiertos en esta sección, muchas otras sustancias que se encuentran en el lugar de trabajo pueden provocar incendios o explosiones. Estos van de los más evidentes, como los productos químicos inflamables, el petróleo, los diluyentes de pintura de celulosa o los gases generados por la soldadura, a los menos evidentes, como el aceite para motor, la grasa, los materiales de embalaje, los serrines, la harina y el azúcar.
Es importante conocer los riesgos y controlarlos o suprimirlos para evitar que se produzcan accidentes.
Qué debería hacer el empleador
Para ayudar a evitar incendios o explosiones accidentales, el empleador debería empezar por identificar:
· las sustancias, materiales, procesos, etc. que tienen el potencial de provocar accidentes, por ejemplo, las sustancias que pueden arder o explosionar o que pueden hacer que ardan o explosionen;
· las personas que pueden encontrarse en situación de riesgo.
Una vez identificados los riesgos, el empleador debe considerar qué medidas es necesario adoptar para reducir o suprimir los riesgos de que las personas sufran daños. Entre ellas se incluyen las medidas para impedir que estos accidentes ocurran, así como las precauciones que pueden proteger a las personas si se produce un incendio o una explosión.
Puntos fundamentales que es preciso recordar
· pensar en los riesgos que conllevan los incendios y las explosiones de sustancias utilizadas o creadas en la empresa y en cómo se pueden suprimir o reducir los riesgos;
· utilizar las fichas de datos de seguridad de los proveedores para obtener información sobre qué sustancias pueden ser inflamables;
· considerar la posibilidad de reducir la cantidad de sustancias inflamables/explosivas que se almacenan en las instalaciones;
· mantener alejadas las fuentes de ignición (por ejemplo, las llamas vidas, las chispas) y las sustancias que arden (por ejemplo, vapor, polvos);
· desechar las sustancias inflamables/ explosivas de forma segura.
· revisar la evaluación de los riesgos con regularidad, y
· mantener el lugar de trabajo en buenas condiciones de orden y limpieza, evitando, por ejemplo, que se acumule basura, polvo o grasa, ya que pueden provocar un incendio o agravar un incendio ya existente.
En la evaluación de los riesgos de incendio, el empleador debe tomar en consideración la presencia de sustancias peligrosas que puedan provocar incendios o explosiones.