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Tradiciones académicas en psicología social. Un recorrido histórico. De los Reyes, Berruti, Gillet, Gonnet La Psicología Social es interdisciplinar ya que dentro de ella se encuentra una diversidad de tendencias y líneas de avances teóricos. Dentro de la Psicología Social hay cuatro tradiciones, dos dominantes. Dentro de las dominantes la primera tiene raíces académicas en la psicología y la segunda en la sociología. Dentro de las otras dos tradiciones se encuentra la que Munné llamó la “otra” Psicología social de orientación marxista y la psicología social construccionista o postmoderna. El origen de la Psicología social se ubica en 1908 con la publicación simultánea de los dos primeros manuales de Psicología social. Esta publicación se debe a sociólogo E. Ross y al psicólogo Mc Dougall. El primero la definió como el estudio del “interjuego psíquico” entre el hombre y la sociedad, mientras que el segundo puso como su objeto de estudio la moralización del individuo, concebido en función de su determinación instintiva. Esta segunda perspectiva no tiene representantes en la actualidad. Estas dos definiciones representan las dos vertientes que se mantienen hasta ahora: psicología social psicológica y psicología social sociológica. Martín Baró identifica 3 periodos dentro de la historia de la Psicología Social: 1. El primero se extiende durante los últimos años del siglo 19 y en él prevalece una visión de la sociedad como realidad homogénea y responde a la pregunta sobre qué nos mantiene unidos al orden social establecido. Se estudian las relaciones entre la estructura social por un lado y la estructura de la personalidad por el otro, intentando encontrar la armonía entre individuo y sociedad. Algunos autores principales: Wundt, Durkheim, Freud y Marx. 2. El segundo abarca los inicios del siglo 20 y se extiende hasta los años 70. La visión prevaleciente es la de un orden social incuestionable. La pregunta a responder es qué nos integra al orden establecido. Algunos autores principales son: Watson, Skinner, Lewin, Mc Dugall. 3. El tercero se extiende desde la década del 70 hasta nuestros días, en el que la psicología social empieza a cuestionarse el orden social. La pregunta que plantea es qué nos libera del desorden establecido. La realidad se concibe entonces como una construcción social fruto de la acción humana y la psicología social asume un papel más comprometido desde el punto de vista político. Se destacan autores como: Berger y Luckman, Gergen y Moscovici. La psicología social psicológica Constituyó la línea dominante y más difundida. Se desarrolló en Estados Unidos, de corte experimental, centrada en el estudio de los procesos psicológicos individuales. En sus comienzos estuvo influida por el biologismo dominado por el evolucionismo darviniano y luego por la propuesta conductista. En Europa son antecedentes de la tradición psicológica los fundadores de la Gestalt (Koffka, Kohler) el creador de la reflexología (Pavlov) y el fundador del primer laboratorio de psicología (Wundt). El conductismo domina la escena de la psicología social académica hasta los años 60 haciendo pasar desapercibida la otra vertiente de la psicología social psicológica, representada por la Gestalt. El conductismo se centra en el estudio científico de la conducta. La otra vertiente importante en la psicología social psicológica es la aportada por Lewin (teoría del campo) y Asch y Heider (teoría de la atribución). Allport también tendría una influencia decisiva en la evolución de la psicología social. Utiliza los paradigmas E-R y E-O-R y sus métodos son experimentales. El paradigma positivista predomina en esta psicología social. Se basa en un modelo mecanicista del hombre y considera que la realidad es externa a los sujetos y está guiada por leyes naturales que son ahistóricas y descontextualizadas. Busca descubrir el funcionamiento de la realidad para predecirla y controlarlo. Adopta una postura dualista que sustenta la dicotomía sujeto-objeto. Predomina la utilización del método experimental, formulando hipótesis que deberán ser comprobadas empíricamente. La psicología social sociológica Una de sus principales teorías es el interaccionismo simbólico que nace en EEUU a partir de la crítica al conductismo y al evolucionismo. Sus principales autores son: Cooley, Mead, Kuhn. La otra vertiente nace en Francia con Moscovici. Esta psicología social se ha interesado por el estudio del impacto recíproco entre el individuo y la sociedad y la influencia de los otros como mediadora en las relaciones entre individuos o de individuos con objetos sociales. El paradigma utilizado es individuo-alter-objeto. Metodológicamente ha privilegiado la utilización de la observación y la encuesta en contextos naturales. Dentro de los antecedentes de esta teoría sociológica en Europa se encuentra Saint Simon que a partir de sus postulados se origina una bifurcación en el seno de la psicología dando lugar al surgimiento del positivismo desarrollado por Comte y del materialismo histórico desarrollado por Marx. Otros desarrollos teóricos que conformaron los antecedentes de la tradición sociológica son los de: Le Bon, Tarde, Durkheim; también Cooley que desarrolla la noción de interdependencia individuo- sociedad (antecedente del interaccionismo simbólico). Se reconoce como fundador del interaccionismo simbólico a Mead que se opone al conductismo clásico llamando a su corriente conductismo social. Mead resalta la importancia del contexto y de la interacción humana significativa en la conformación de la persona. Será Blumer quien más tarde da el nombre de Interaccionismo Simbólico a esta vertiente definiendo sus tres supuestos fundamentales: 1. Los hombres se relacionan consigo mismos y con los objetos de acuerdo a los significados que tales adquieren para ellos; 2. Los significados se producen en el proceso de interacción social; y 3. El uso y transformación de los significados tiene lugar en un proceso activo de interpretación. Banchs denomina a Allport, Lewin y Mead los “constructores de la psicología social” quienes al emigrar a EEUU en la segunda guerra favorecen el surgimiento y el desarrollo de la disciplina en dicho país. La “Otra” psicología social Se desarrolla tanto en Occidente como en la ex Unión Soviética. La denominación alude a un tercero en discordia. Entre los representantes de este enfoque en Francia se encuentran: Politzer, Seve, Wallon. Esta psicología social considera al individuo como esencialmente social y vincula ideología y praxis. En todos los casos utiliza el enfoque del materialismo histórico tratando de ir más allá de las apariencias hacia la esencia de los fenómenos que estudia. Se distinguen dos líneas de desarrollo dentro de esta psicología social: la psicología social Occidental y la soviética. En cuanto a las producciones Occidentales podemos mencionar que los intelectuales marxistas intentan resaltar la dimensión social de los fenómenos psíquicos, mientras que la otra tendencia occidental que se inspira en Marx, denominada freudomarxismo o psicología social crítica intenta una explicación psicoanalítica del marxismo. Respecto a la psicología social de origen soviético su historia responde en parte a los avatares de la revolución rusa. Entre sus precursores se encuentran: Pavlov, Vigotsky, Leontiev. La producción latinoamericana en psicología social Maritza Montero realiza una síntesis histórica de la producción latinoamericana distinguiendo 5 etapas: 1. Fase de una protopsicología social: constituyó un pensamiento sociopsicológico más que una psicología social propiamente dicha, de carácter difuso, en su mayor parte ideologizadoy justificatorio de regímenes autoritarios (segunda mitad del siglo XIX y primera del XX); 2. Fase de constitución y de afirmación sistemática de la subdisciplina con la creación de un nicho académico para la misma (década del 50 del siglo XX y principios de los 60); 3. Fase de consolidación como disciplina académica: se constata desarrollo dependiente y reproductivo de una psicología social extrajera de corte psicológico (mediados de los 60 hasta mediados de los 70 del siglo XX); 4. Fase de crisis de la Psicología social: los psicólogos sociales experimentan el malestar por la dependencia de sus producciones y la falta de respuesta a los problemas de sus países, comenzando a producirse los primeros libros de texto (1976 hasta principios de los 80); 5. Fase de desarrollo propio de la Psicología social latinoamericana, de producción autóctona en función de problemas derivados de la realidad y con utilización critica de teorías y métodos existentes así como con aportes teóricos y metodológicos surgidos en se quehacer psicosocial. La psicología social construccionista Las corrientes psicológica y sociológica mencionadas anteriormente conformarían, según Gergen, el campo de la modernidad en la psicología social, mientras que desde los 90 el construccionismo se convierte en la psicología social posmoderna. Surgido a mediados de los años 80 podría considerarse como la última de las versiones de la psicología social sociológica. Tiene sus raíces en los interaccionistas simbólicos y los representacionistas sociales en cuanto a la construcción social de la realidad; en el carácter histórico de los fenómenos de la conducta humana de los materialistas, en la lectura crítica de la sociedad de la escuela de Frankfurt y en los hermeneutas lingüistas. Son exponentes destacados del construccionismo Gergen e Ibáñez. A diferencia del paradigma crítico Ibáñez considera al paradigma posmoderno como paradigma de la complejidad, ya que no se trata de ir más a fondo sino más hacia la complejidad. Dentro de este paradigma, la realidad social es una construcción y los psicólogos sociales utilizan dispositivos discursivos para reconstruirla. La psicología social es una construcción discursiva. La realidad no es única sino múltiple, por lo tanto puede haber múltiples métodos. Niegan la neutralidad del investigador y le dan importancia al lenguaje y al análisis del discurso. La psicología social construccionista constituye un movimiento que aceptando la naturaleza social del conocimiento asume el consecuente rol político de toda producción científica. Algunos de los principios de construccionismo son: el reconocimiento de la naturaleza simbólica, histórica y dialéctica de la realidad social; el reconocimiento del carácter intencional de las acciones humanas y la autodeterminación de las mismas por el agente que las produce; la aceptación del carácter construido, constituyente, procesual, tanto de la realidad social como de los conocimientos que acerca de ella elaboramos; la aceptación de la naturaleza social de esos conocimientos implica asumir el papel político que implica el construir conocimiento científico. El rasgo más característico del posmodernismo, según Banchs, es su preocupación por el lenguaje considerándolo como herramienta exclusiva de análisis. En cuanto a la historia de la disciplina en nuestro país cabe destacar la inexistencia de trabajos en este tema y la necesidad de llevar a cabo investigaciones que permitan dar cuenta del estado de la investigación y las producciones académica. Tradiciones académicas en psicología social. Un recorrido histórico. De los Reyes, Berruti, Gillet, Gonnet La Psicología Social es interdisciplinar ya que dentro de ella se encuentra una diversidad de tendencias y líneas de avances teóricos. Dentro de la Psicología Social hay cuatro tradiciones, dos dominantes. Dentro de las dominantes la primera tiene raíces académicas en la psicología y la segunda en la sociología. Dentro de las otras dos tradiciones se encuentra la que Munné llamó la “otra” Psicología social de orientación marxista y la psicología social construccionista o postmoderna. El origen de la Psicología social se ubica en 1908 con la publicación simultánea de los dos primeros manuales de Psicología social. Esta publicación se debe a sociólogo E. Ross y al psicólogo Mc Dougall. El primero la definió como el estudio del “interjuego psíquico” entre el hombre y la sociedad, mientras que el segundo puso como su objeto de estudio la moralización del individuo, concebido en función de su determinación instintiva. Esta segunda perspectiva no tiene representantes en la actualidad. Estas dos definiciones representan las dos vertientes que se mantienen hasta ahora: psicología social psicológica y psicología social sociológica. Martín Baró identifica 3 periodos dentro de la historia de la Psicología Social: 4. El primero se extiende durante los últimos años del siglo 19 y en él prevalece una visión de la sociedad como realidad homogénea y responde a la pregunta sobre qué nos mantiene unidos al orden social establecido. Se estudian las relaciones entre la estructura social por un lado y la estructura de la personalidad por el otro, intentando encontrar la armonía entre individuo y sociedad. Algunos autores principales: Wundt, Durkheim, Freud y Marx. 5. El segundo abarca los inicios del siglo 20 y se extiende hasta los años 70. La visión prevaleciente es la de un orden social incuestionable. La pregunta a responder es qué nos integra al orden establecido. Algunos autores principales son: Watson, Skinner, Lewin, Mc Dugall. 6. El tercero se extiende desde la década del 70 hasta nuestros días, en el que la psicología social empieza a cuestionarse el orden social. La pregunta que plantea es qué nos libera del desorden establecido. La realidad se concibe entonces como una construcción social fruto de la acción humana y la psicología social asume un papel más comprometido desde el punto de vista político. Se destacan autores como: Berger y Luckman, Gergen y Moscovici. La psicología social psicológica Constituyó la línea dominante y más difundida. Se desarrolló en Estados Unidos, de corte experimental, centrada en el estudio de los procesos psicológicos individuales. En sus comienzos estuvo influida por el biologismo dominado por el evolucionismo darviniano y luego por la propuesta conductista. En Europa son antecedentes de la tradición psicológica los fundadores de la Gestalt (Koffka, Kohler) el creador de la reflexología (Pavlov) y el fundador del primer laboratorio de psicología (Wundt). El conductismo domina la escena de la psicología social académica hasta los años 60 haciendo pasar desapercibida la otra vertiente de la psicología social psicológica, representada por la Gestalt. El conductismo se centra en el estudio científico de la conducta. La otra vertiente importante en la psicología social psicológica es la aportada por Lewin (teoría del campo) y Asch y Heider (teoría de la atribución). Allport también tendría una influencia decisiva en la evolución de la psicología social. Utiliza los paradigmas E-R y E-O-R y sus métodos son experimentales. El paradigma positivista predomina en esta psicología social. Se basa en un modelo mecanicista del hombre y considera que la realidad es externa a los sujetos y está guiada por leyes naturales que son ahistóricas y descontextualizadas. Busca descubrir el funcionamiento de la realidad para predecirla y controlarlo. Adopta una postura dualista que sustenta la dicotomía sujeto-objeto. Predomina la utilización del método experimental, formulando hipótesis que deberán ser comprobadas empíricamente. La psicología social sociológica Una de sus principales teorías es el interaccionismo simbólicoque nace en EEUU a partir de la crítica al conductismo y al evolucionismo. Sus principales autores son: Cooley, Mead, Kuhn. La otra vertiente nace en Francia con Moscovici. Esta psicología social se ha interesado por el estudio del impacto recíproco entre el individuo y la sociedad y la influencia de los otros como mediadora en las relaciones entre individuos o de individuos con objetos sociales. El paradigma utilizado es individuo-alter-objeto. Metodológicamente ha privilegiado la utilización de la observación y la encuesta en contextos naturales. Dentro de los antecedentes de esta teoría sociológica en Europa se encuentra Saint Simon que a partir de sus postulados se origina una bifurcación en el seno de la psicología dando lugar al surgimiento del positivismo desarrollado por Comte y del materialismo histórico desarrollado por Marx. Otros desarrollos teóricos que conformaron los antecedentes de la tradición sociológica son los de: Le Bon, Tarde, Durkheim; también Cooley que desarrolla la noción de interdependencia individuo- sociedad (antecedente del interaccionismo simbólico). Se reconoce como fundador del interaccionismo simbólico a Mead que se opone al conductismo clásico llamando a su corriente conductismo social. Mead resalta la importancia del contexto y de la interacción humana significativa en la conformación de la persona. Será Blumer quien más tarde da el nombre de Interaccionismo Simbólico a esta vertiente definiendo sus tres supuestos fundamentales: 1. Los hombres se relacionan consigo mismos y con los objetos de acuerdo a los significados que tales adquieren para ellos; 2. Los significados se producen en el proceso de interacción social; y 3. El uso y transformación de los significados tiene lugar en un proceso activo de interpretación. Banchs denomina a Allport, Lewin y Mead los “constructores de la psicología social” quienes al emigrar a EEUU en la segunda guerra favorecen el surgimiento y el desarrollo de la disciplina en dicho país. La “Otra” psicología social Se desarrolla tanto en Occidente como en la ex Unión Soviética. La denominación alude a un tercero en discordia. Entre los representantes de este enfoque en Francia se encuentran: Politzer, Seve, Wallon. Esta psicología social considera al individuo como esencialmente social y vincula ideología y praxis. En todos los casos utiliza el enfoque del materialismo histórico tratando de ir más allá de las apariencias hacia la esencia de los fenómenos que estudia. Se distinguen dos líneas de desarrollo dentro de esta psicología social: la psicología social Occidental y la soviética. En cuanto a las producciones Occidentales podemos mencionar que los intelectuales marxistas intentan resaltar la dimensión social de los fenómenos psíquicos, mientras que la otra tendencia occidental que se inspira en Marx, denominada freudomarxismo o psicología social crítica intenta una explicación psicoanalítica del marxismo. Respecto a la psicología social de origen soviético su historia responde en parte a los avatares de la revolución rusa. Entre sus precursores se encuentran: Pavlov, Vigotsky, Leontiev. La producción latinoamericana en psicología social Maritza Montero realiza una síntesis histórica de la producción latinoamericana distinguiendo 5 etapas: 1. Fase de una protopsicología social: constituyó un pensamiento sociopsicológico más que una psicología social propiamente dicha, de carácter difuso, en su mayor parte ideologizado y justificatorio de regímenes autoritarios (segunda mitad del siglo XIX y primera del XX); 2. Fase de constitución y de afirmación sistemática de la subdisciplina con la creación de un nicho académico para la misma (década del 50 del siglo XX y principios de los 60); 3. Fase de consolidación como disciplina académica: se constata desarrollo dependiente y reproductivo de una psicología social extrajera de corte psicológico (mediados de los 60 hasta mediados de los 70 del siglo XX); 4. Fase de crisis de la Psicología social: los psicólogos sociales experimentan el malestar por la dependencia de sus producciones y la falta de respuesta a los problemas de sus países, comenzando a producirse los primeros libros de texto (1976 hasta principios de los 80); 5. Fase de desarrollo propio de la Psicología social latinoamericana, de producción autóctona en función de problemas derivados de la realidad y con utilización critica de teorías y métodos existentes así como con aportes teóricos y metodológicos surgidos en se quehacer psicosocial. La psicología social construccionista Las corrientes psicológica y sociológica mencionadas anteriormente conformarían, según Gergen, el campo de la modernidad en la psicología social, mientras que desde los 90 el construccionismo se convierte en la psicología social posmoderna. Surgido a mediados de los años 80 podría considerarse como la última de las versiones de la psicología social sociológica. Tiene sus raíces en los interaccionistas simbólicos y los representacionistas sociales en cuanto a la construcción social de la realidad; en el carácter histórico de los fenómenos de la conducta humana de los materialistas, en la lectura crítica de la sociedad de la escuela de Frankfurt y en los hermeneutas lingüistas. Son exponentes destacados del construccionismo Gergen e Ibáñez. A diferencia del paradigma crítico Ibáñez considera al paradigma posmoderno como paradigma de la complejidad, ya que no se trata de ir más a fondo sino más hacia la complejidad. Dentro de este paradigma, la realidad social es una construcción y los psicólogos sociales utilizan dispositivos discursivos para reconstruirla. La psicología social es una construcción discursiva. La realidad no es única sino múltiple, por lo tanto puede haber múltiples métodos. Niegan la neutralidad del investigador y le dan importancia al lenguaje y al análisis del discurso. La psicología social construccionista constituye un movimiento que aceptando la naturaleza social del conocimiento asume el consecuente rol político de toda producción científica. Algunos de los principios de construccionismo son: el reconocimiento de la naturaleza simbólica, histórica y dialéctica de la realidad social; el reconocimiento del carácter intencional de las acciones humanas y la autodeterminación de las mismas por el agente que las produce; la aceptación del carácter construido, constituyente, procesual, tanto de la realidad social como de los conocimientos que acerca de ella elaboramos; la aceptación de la naturaleza social de esos conocimientos implica asumir el papel político que implica el construir conocimiento científico. El rasgo más característico del posmodernismo, según Banchs, es su preocupación por el lenguaje considerándolo como herramienta exclusiva de análisis. En cuanto a la historia de la disciplina en nuestro país cabe destacar la inexistencia de trabajos en este tema y la necesidad de llevar a cabo investigaciones que permitan dar cuenta del estado de la investigación y las producciones académica.
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